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Eran las 8.30 de la noche y yo había viajado 4 horas desde mi pueblo hacia la capital, me había venido casi todo el camino durmiendo, pero había llegado un poco tarde por el tráfico. En la cola había un hombre adulto, mayor de unos 60 años, muy aparente y educado; llegamos casi exactos a la ventanilla y por educación le cedí el paso para que pudiera comprar su pasaje. Solo quedaban dos asientos y eran los últimos de la fila y al lado del baño, ambos estábamos viajando a destinos similares. Esperamos unos 10 minutos antes de abordar el bus y luego subimos. Estaba algo fastidiado por que no me gusta viajar al final para nada.
Él tenia el asiento de la ventana y yo el del pasillo. , en buena hora, me agrada viajar así. Al cabo de unas horas como a eso de las 11.00 pm, noté que el Sr. Se había quedado dormido y medio que roncaba. Yo no podía dormir, no tenia sueño alguno y como la ruta era en subida había muchas curvas; en una de esas noto que la cabeza del Sr. Se apoya en mi hombro y su mano derecha se queda apoyada en mi muslo. Pero el Sr. Estaba muy dormido y cansado. Así estuvo unos 5 minutos hasta que el carro entro en otra curva y todo volvió a su normalidad… al cabo de un rato vuelve a suceder lo mismo, pero esta ves su mano había caído entre mi muslo y mi miembro viril… su pulgar tocaba la cabeza de mi glande. Me sentí un poco incomodo pero bueno no pasaba nada, no quería despertarlo. Total era un señor adulto. Pero con el movimiento del ómnibus, su mano rosaba mi muslo y su dedo gordo me frotaba muy ligeramente, casi ni se sentía, era el movimiento minúsculo que produce la vibración del viaje, pero ese ligero y suave movimiento despertó en mi una ligera y agradable erección. Yo me quede quieto por un instante y no podía contener mi ligera erección. Como jugando desee juntar ligeramente mi muslo izquierdo y hice un movimiento exacto, levante mi muslo y lo junté al tiempo que su mano se deslizaba exactamente sobre todo mi miembro y eso me hizo sentir muy satisfecho, pero a la ves empece a sentir que mi corazon se aceleraba y un temblor incontrolable recorría mis piernas y muslos. Ahora su mano entera estaba sobre mi. Era la primera ves que experimentaba algo así. Puse mi cobertor para que me cubriera y lo tape algo al Sr. Como su mano estaba muy quieta, hacia movimientos de copula, levantaba mis caderas con ligereza y apretaba mis muslos cada ves mas evidentes. Eso me hacia sentir un deseo intenso, y su mano seguía exactamente allí, decorando todo mi pequeño miembro. Al juntar mi muslo derecho, rose la yema de mi dedo pulgar. en la uña de su dedo pulgar. eso fue exuberante, no podía entender como ese tenue rose podía hacerme sentir placer, así estuve rosando muy suavemente por unos minutos, luego poco a poco rose la piel de sus dedos, uno a uno fui explorando, subía y bajaba, y en esos momentos note que el Sr. era receptivo a mis caricias dulces y permitía que mi mano se amoldara a las sensaciones que mis dedos podían evocar, su mano ya no se posaba, pero juguetea con mis dedos, le encantaba que la rosara, subí así hasta su muñeca y puse toda mi palma sobre el dorso de la suya, y con la punta de mis dedos, presionaba su mano para sentir el rose de su palma, presionaba sus dedos para sentir el rose de sus yemas, el solo se dejaba llevar, apretaba su mano para sentir su presión, la cogía de la muñeca y bajaba su mano hasta mis testículos y la hacia frotarme, así estuvimos casi por 10 minutos, hasta que verdaderamente desee sentir mas. Abrí mi correa, baje mi cierre y puse su mano dentro, y use su mano a mi antojo, el dejó que yo hiciera de su mano toda mía.
Literalmente me toque, me masturbe , hice lo que quise con su mano derecha y el solo cerro los ojos en todo momento. Era como si solo quisiera que eso fuera un sueño erótico.
Casi a las 11:30 pm. El carro se estacionó en un restaurante para cenar….y el de seguridad pidió que todos bajáramos. Así que bajamos. El me preguntó si deseaba cenar algo. Te invito me dijo, pero yo no deseaba así que le dije que cenara el, que se tomara algo. yo deseaba ir al baño a orinar. Entre en el baño de hombres y me puse al fondo, cuando me di cuenta el sr. estaba a mi lado; también tengo ganas de orinar, no se por que sera, bromeo y se rió. Quería orinar pero no podía, el solo me miraba, y miraba mi pene, nos quedamos solos y yo empece a masturbarme en su cara, estaba muy excitado, despacio me lo jalaba y el empezó a seguirme el ritmo, me miró como se me fue erectando, se lo mostré todo, bien paradito, el parece que se éxito mucho y quiso tocarme, pero yo no se lo permití. Lo deje con sus ganas. Yo termine de orinar y el también, y cuando el se sacude para limpiarse, le veo que su pene estaba bien flácido, pero era grande, mas grande que el mío, muy superior.
Esperamos un rato mas y subimos nuevamente al bus, eran ya casi las 12pm, nos faltaba a mi como 2 horas y a el como 4 horas para llegar a nuestro destino.
Me pregunto como me llamaba y a que me dedicaba y le dije que nada, que mejor no nos coscamos, que así es mejor.
Casi a las 12,30, me da un poco de sueño y me quedé algo dormido, y cuando me doy cuenta el me estaba manoseando sin mi consentimiento, lo mire y le digo al oído, así no es. Y el me responde y me dice, gracias por todo esto, hace mucho tiempo que no sentía placer alguno, ni con mi esposa, ni con nadie y me siguió tocando tal como le había mostrado, como si fuera un alumno aplicado y nada , no tardo en armarse. Yo estaba muy caliente y excitado, puse mi mano en su muslo izquierdo y lo fui frotando, mientras el me frotaba muy suave, yo recorría su muslo hasta la rodilla, el quiso abrir mi cierre y yo lo limité, yo verdaderamente deseaba que me tocara carne a carne, piel a piel. Me atreví a tocarlo y el de inmediato retiro mi mano, lo mire, espere un rato y deje que me bajara el cierre,cuando estuvo dentro de mi pantalón frotando mi calzoncillo, quiso tocarme dentro, lo deje, pero esta ves lo toque fuerte y firme, el me apretaba y yo también, pero su pene siempre estaba muy flácido, pero se sentía grande y saludable. pero no se erectava. Sin embargo el cogerlo y apretarlo y recorrerlo todo a mi antojo me llevo al clímax y cuando estaba a punto de estaba a punto de eyacular. Le dije, para para, por favor si sigues así voy a eyacular muy pronto. Me soltó por un momento y para mi sorpresa vi como se agachaba y se metía debajo del cobertor. Un hombre adulto haciendo piruetas, haciendo cosas que no debe… y me dió una felación. Una deliciosa mamadita, chupadita, mordidita, lamidita, sentí todos sus sabores y yo solo apretaba su cabeza para que no se retirara, y cuando me vine el no permitió que yo me retirara. Se lo lo tomo todito. Las 7 veces que me hizo expulsar mi semen y lo lavo total con sus labios, su lengua, sus chupadas, fue muy rico, muy rico…
Se volvió a sentar, y me dijo eso era mio y no lo iba a desperdiciar. Se bajo el cierre, saco su pene, cogió mi mano y me la llevó hacia el. Estaba hermosamente erecto, era un pene de unos 17 a 19 cm. Era grueso y fuerte y estaba paradisimo. Lo he frotado, con victoria y regocijo, lo he acariciado buscando mantener ese trono, hasta que logré que secretara un poco del liquido seminal, su jugo, su preludio…. Y ustedes saben que se hace con eso…maravillas.
Frote su glande con ese liquido con la palma de mi mano, a la altura de su frenillo, y logre que sintiera ese placer profundo que te presiona y quema hasta las articulaciones, que te hace contornear y presionar los dedos de tus pies, que te hace apretarte todo. El hombre se entrujaba, se retorcía y se quemaba de placer. Me apretaba fuerte mi muslo. Hasta que no pudo contenerse mas. Y decoro la escena con una gran eyaculación. Lo limpie con papel higiénico y lo deje.
Nunca hasta ahora había agarrado el pene de un hombre. Si que me agradaba la idea, pero no pensé que fuera tan así.
Pronto llegue a mi destino. Me dio su teléfono y su nombre y me dijo gracias otra ves, pensé que ya nunca podría volver a sentir una erección. Ya casi ni me llamaba la atención el sexo. Pensé que eso para mi había muerto.
Muchas gracias de hombre a hombre.
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