~~Bueno, la historia comienza así. Tenia yo 16 años, estaba cursando tercer año de secundaria, aun era virgen y era muy tímido. Un día, en las vacaciones antes de entrar a clases, estaba jugando fútbol en una canchita que construyeron unos tíos en el barrio, ya llevábamos bastante rato jugando y yo estaba exhausto, así que subí a la casa de uno de mis tíos(tío abuelo), para tomar algo de agua. Este tío tenia 2 hijas, una tenia mi misma edad(16) y la otra era mayor por 2 años(18), eran, por así decirlo, mis mejores amigas, pasábamos mucho tiempo junto. Bueno, el asunto fue que cuando llegue a la cocina de la casa, vi que alguien estaba en el baño, no le di mucha importancia, ya que mi visita había sido sin malicia, hasta que escuche que era mi prima Mary(la menor, 16) la que se estaba duchando, y como siempre bromeamos, le grite que si se estaba masturbando, a lo que ella me respondió con un quejido, en broma. Me fui para el su cuarto, entonces, ahí encontré lo que cambiaria la mi forma de verlas para siempre. Había un par de braguitas blancas, deliciosamente colocadas una junto a la otra, tome una y la examine detalladamente, y empecé a imaginarme a Mary dentro de ellas, en cuestión de segundos mi pene se disparo y apareció descaradamente marcado en mi short, cosa que no me importaba, porque estaba solo, a lo que me dio la idea de irme para el baño, a ver si había algún hoyo en la puerta donde yo pudiera verla. Lo peor de todo fue que no encontré nada, y cuando ya me estaba dando por vencido, vi una abertura entre la pared y la puerta, adonde se encuentra la perilla de abrirla, entonces me asome, a lo que asombrado, escuche el grifo del baño cerrarse y la puerta corrediza abrirse, no lo podía creer, estaba tan excitado que no me importaba quien me pillara, así que saque mi pene y lo sujete con fuerza, esperando que Mary apareciera, entonces, mis deseos se concedieron, entre el vapor del agua caliente, pude ver una pierna asomarse una pierna, rellenita, color canela, seguida por un trasero, que parecía de plástico, era perfecto, y para ese entonces mi mano parecía un pistón, bombeando mi pene, era indescriptible lo que sentía en ese momento, mientras aparecía su espalda, curvilínea como ninguna, cubierta por un cabello negro, brillante, toda esa escena era adornada por el vapor que había, y cuando creía que no podía haber nada mejor, ella se volteo, dejando ver uso pechos divinos, deliciosos, con un pezón grande y hermoso, su aureola era pequeña, lo que hacia verse mejor aun, y en sus entrepiernas, muy poquito vello, que apenas cubrían unos labios carnosos. Ella empezó a secarse con el paño mientras yo me masturbaba con más velocidad, sus manos recorrían su trasero, acariciaban sus pechos y pasaban por su escaso vello. En ese momento yo acabe, embarrando toda la puerta, que chorreaba con mi leche, yo estaba extasiado, sin pensar en nada, pero reaccione y volví a mirar por la abertura, ya ella se había puesto su braguita y se estaba terminado de poner el sostén, era cuestión de segundos para que ella saliera, entonces corrí a su cuarto y tome unas toallas húmedas y limpie el suelo, y la puerta, pero la puerta se movió, a lo que ella reacciono llamándome Fran!!!!, estas ahí aun,?, , a lo que yo le respondí nerviosamente que si.
 Que bueno, porque quiero que vallas conmigo y con Mila(mi otra prima) al centro, a comernos algo.
 Bueno le respondí me parece bien, y agarrando las toallas, salí corriendo para la cocina.
 Esa noche me masturbe como cinco veces hasta quedar dormido, imaginándome el cuerpo de Mary.
 Durante los 15 días que quedaban de vacaciones esa era mi rutina, siempre dejaba el partido de fútbol hasta la mitad y me iba para donde mis primas, a ver a Mary bañándose y echarme una pajita a su nombre en la puerta del baño.
 Ya adentrado el año, estábamos en la cafetería del colegio los tres, Mary, Mila y yo. Mary usaba el uniforme del colegio, el cual es blusa celeste y enagua azul, en cambio Mila llevaba una camiseta blanca con la enagua del uniforme, lo que hacia que se le resaltaran sus grandes pechos y sus erguidos pezones, los cuales parecía que ella lucia con orgullo. Siempre después del almuerzo nos sentábamos debajo de la sombra de un árbol, y yo me acostaba en las piernas de Mila, y Mary en las mías, y pasábamos mucho rato ahí, yo aprovechaba para rozar los pechos de Mila con mi cara y de restregarle mi pene erecto a Mary, lo cual parecía no importarle, o por lo menos no pensaba maliciosamente, que era lo que yo pensaba.
 Un dia, tres compañeros y yo pusimos pegamento en la silla del profesor, lo cual hizo que la profesora de matemática se sentara y luego saliera disparada, lo que significaba, tarde libre, yo inmediatamente fui por mis primas, pero las dos se habian escapado de clases, lo que me molesto, ya que no me habían invitado.
 Me fui directo a la casa de ellas, salude a mi tía abuela que iba saliendo hacia un rosario o algo así, entre y vi que no había nadie, pase a la cocina, luego a los cuartos, el de Mary estaba abierto, así que entre a curiosear, abrí sus gavetas, a ver si encontraba bragas, y me lleve la sorpresa de ver un consolador, tenia unos 20 centímetros de largo y era muy grueso, al principio me impresione, pero luego pensé que era lógico, en eso escuche una voz y cerré la gaveta, no sabia que hacer, y no sabia porque estaba nervioso, ya que yo pasaba ahí casi todo el tiempo. Me metí debajo de la cama y vi la puerta del cuarto de Mila abrirse, vi unos pies desnudos y la voz de Mila diciendo
 Adonde lo dejaste Mary???
 En la gaveta de las blusas!!, pero apúrate
 A ver. si, aquí esta.
 Mi corazón latía cada vez más rápido, y mi pene parecía que tenia vida propia, vi a Mila que se fue para su cuarto y apenas cerro la puerta, me fui disparado hacia la puerta, esta si tenia un agujero bastante grande como para ver pero pequeño como para que me vieran, y ahí fue donde vi lo mas delicioso que había visto en mi vida, estaba Mi prima Mila, con su hermoso trasero parado, arrodillada con su cabeza sumergida en la entrepierna de Mary, haciéndola gozar mucho, por lo menos eso parecía, mientras con sus manos libres se introducía el consolador en su hermosa vagina, la cual chorreaba de fluidos, y ya había comenzado a masturbarme, y no me podía creer lo que estaba viendo, su boca subía y bajaba por los carnosos labios de Mary, la que se mordía los labios, y pellizcaba sus pezones suavemente, Mila sacaba y metía cada vez mas el consolador de su huequito, y Mary parecía que iba a explotar, sus gemidos se hacían cada vez mas descarados, mientras que Mila soltaba el consolador y agarraba una de los hermosos pechos de Mary, sus pieles contrastaban, el color caramelo de Mary con el Blanco marfil del Mila, ambas empapadas de sudor, Mila se levanto, aun con el consolador adentro y se coloco con sus genitales a la altura de la cara de Mary, no dejando de pasar su lengua por su vagina, no lo podía creer, mis queridas primas estaban haciendo el mas perfecto de los 69 que había visto en mi vida y lo mejor era que sus gemidos eran cada vez más fuertes, lo que me excitaba todavía más, y en ese instante, Mila soltó un grito de placer que nunca he vuelto a escuchar, su vagina emanaba tantos líquidos que creía que se iba a inundar el cuarto, ella se tiro para atrás y callo en la cama, rendida, entonces Mary se levanto, y mientras pasaba su lengua por el clítoris de su hermana, saco el consolador y se lo metió completo a la boca, la escena era paradisíaca, Mila tendida en la cama, mojada en sudor y en sus fluidos, con cara de satisfacción, y por otro lado Mary, chupando el consolador como si fuera lo más delicioso que hubiera en el mundo, mientras se masturbaba con la mano libre, lo hizo por lo menos por 5 minutos más hasta que, se estremeció, soltando un grito mudo, soltó el consolador y callo encima de su hermana. Yo sabia que en cuanto se recuperaran se iban a meter al baño, así que, guarde mi pene, que no había probado placer aun, y corrí hacia mi casa, tome la cámara de video y me fui de nuevo a la casa de mis primas, para mi sorpresa que ya estaban fresquitas bañadas, viendo tele. Cuando me vieron con la cámara me preguntaron ¿Para que traes eso?, a lo que yo les respondí(en tono de broma), pensé que podíamos hacer una película pornográfica(esta vez lo decía en serio), a lo que ellas rieron como era usual. Yo me fui inmediatamente al cuarto de Mila y me encerré, me quite la ropa y me tendí en su cama, que todavía tenia los olores de mis primitas, lo cual me acordaba lo que acababa de presenciar, así que no dure mucho en acabar.
 Los días siguientes soñé tanto con eso que amanecía con una erección tan grande que tenia que masturbarme antes de irme para el colegio.
 Los días pasaron y llegaron las vacaciones de medio periodo, y yo me imaginaba los gustos que me iba a pegar observando a mis primas en el baño, y así fue, hasta que un día paso lo inesperado. .
 Hice lo que usualmente hacia, medio partido de fútbol y me iba para donde mis primitas, pero esta vez llegue y Mary estaba viendo tele, lo que me decepciono, pero ella me dijo
 Fran, vas a quedarte un rato.
 Si, le respondí yo.
 Que dicha, porque Mila esta con el novio en la casa de el y estoy sola, asi me haces compañía.
 Ok, podemos ver alguna película.
 Bueno, pero primero tengo que bañarme, no quiero estar añeja todo el dia.
 Bueno, te espero (yo me relamía de placer, ya para entonces se me notaba el bulto)
 Ya vengo, espérame.
 Apenas sonó la puerta del baño, revise las puertas, trasera y delantera de la casa, me fui para el pasillo, pero esta vez, me quite el short y los boxers, para poder masturbarme mejor, así, que me prepare y vi a mi primita terminando de quitarse la ropa y metiendose al baño, esta vez duro poco bañándose, apenas 5 minutos, lo que era extraño pero yo no lo notaba, estaba ido de placer, esperando ver la figura de mi hermosa primita saliendo del baño, y en el momento que ella salió del baño, empecé mi tarea, agarre mi pene y empecé a mecerlo de arriba abajo, pero en ese momento sentí una mano agarrandome el pene, cai sentado del sobresalto, me puse rojo rojo de la vergüenza, nunca me había sentido así, pensé que era mi tía abuela que había llegado, me volví, esperando que una excusa saliera de mi boca, pero la sorpresa fue que la que me había tomado del pene era Mila, y estaba totalmente desnuda, frente a mi, sin decir nada, me dio una sonrisa y se agacho, agarrando mi pene y sumergiéndoselo en su boca, yo todavía estaba sorprendido de lo que estaba pasando, pero estaba incomodo, así que le dije, Mila, vamos al cuarto, ya Mary va a salir, no había terminado yo de decir eso, cuando sentí dos brazos, fríos y un poco húmedos cruzando mi espalda y agarrando mi abdomen. Mary me dijo, Demasiado tarde Fran, ya salí. No lo podía creer, Mila estaba literalmente comiéndose mi pene mientras Mary me acariciaba todo, mientras me quitaba la camisa.
 Mila se levanto abruptamente y me jalo hacia el cuarto de Mary, el cual estaba oscuro casi negro, solo iluminado por varias candelas estratégicamente colocadas, lo cual yo no habia notado por la urgencia de ver a Mary. Abrí mi boca para decir algo, pero Mila se abalanzo sobre mi y me beso, parecía que me quería comer, yo estaba disfrutando tanto de ese momento, Mary me dio un empujón desde mi espalda, lo que hizo que Mila y yo cayéramos a su cama yo sobre ella, en ese momento sentí su vaginita, que estaba muy húmeda. Mila, suavemente me dio vuelta y paso suavemente su dedo por mis labios, como diciéndome que no dijera ni una palabra. Yo le hice caso, Mary cerro la puerta y quedamos a media luz, Mary agarro una pequeña botellita y vació un poco de su contenido en sus manos, y seguidamente empezó a untársela a Mila en su cuerpo, lo que ella parecía disfrutar, yo estaba ido, ni siquiera me movía, viendo aquel espectáculo, viendo como Mary pasaba ese aceite por el cuerpo de Mila, suavemente, lo cual hacia que Mila soltara leves quejidos, cuando Mary ya había vaciado totalmente el aceite en Mila, su piel estaba brillante, suave, y preciosa, su color blanco como el marfil, siendo acariciada por las manos caramelo de su hermana, yo no aguantaba, iba a explotar. Entonces Mary, lentamente empujaba a Mila hacia mi, y yo sentía su cuerpo caliente, deslizándose sobre mi, embarrándome de aceite, se sentía bien, era lo mejor que me había pasado en la vida. El tiempo pasaba, y los tres nos acariciábamos, sin decir una sola palabra, ya el aceite que una vez estuvo cubriendo solo en cuerpo de Mila, nos cubría a los tres, lo que hacia las caricias más excitantes cada vez, entonces me decidí, poco a poco me fui deslizando por el abdomen de Mary, baje por sus piernas hasta llegar a los pies de Mila, los cuales escale delicadamente con mi lengua, haciendo que ella se estremeciera con cada centímetro que yo recorría, llegando hasta su vaginita, la cual estaba hinchada de lo excitada que ella estaba, estaba tan bien rasuradita que parecía que nunca hubiera tenido vellos, empecé a acariciarla con mis labios, mientras Mary se subió a mi espalda, poniendo su vagina en contacto con mi piel, yo sentía sus fluidos bajar por mi espalda, mientras ella se movía de adelante hacia atrás. Yo le estaba dando mucho placer a Mila, ya que sus gemidos no lo ocultaban, su vagina sabia a gloria, yo estaba loco, y a su vez Mary gemía, ya que se estaba masturbando contra mi espalda, creo que le di a Mila unos dos orgasmos, y Mary tuvo uno, ya que sentí todos sus fluidos calientes viajar por mi espalda, entonces decidi darme vuelta, dándole vuelta también a Mila, así que Mary aprovecho y bajo un poco y se metió mi pene en la boca y empezó a darme una mamada deliciosa, mejor que la que me había estado dando Mila, mientras que yo tenia la entrepierna de Mila en mi cara, y estaba comiéndola como si se fuera a terminar. Por un instante deje de sentir la boca de Mary en mi pene, pero no me importo, estaba ido entre los fluidos de Mila, pero entonces, sentí como algo muy húmedo y que parecía de fuego iba envolviendo mi pene, era la sensación más deliciosa que había sentido en toda mi vida, Mary se había sentado sobre mi pene, la tenia totalmente penetrada, y ella empezó a moverse, y mientras ella me cabalgaba, yo me comía la vaginita de Mila, ellas dos se besaban con tanta pasión que eso hizo que me excitara más. Mila se echo para atrás, pero aun con mi pene adentro, mientras que Mila se agachaba para alcanzar el clítoris de Mary, era una escena inimaginable para mi en ese entonces, yo estaba penetrando cada vez más rápido a Mary, mientras que Mila, lamia el clítoris de Mary, yo lamía el clítoris de Mila y Mila, introducía sus deditos en el huequito de Mila, pero en ese momento ya yo no podia más, asi que, sin palabras aparte a Mary, lo que hizo que Mila se parara tambien y se colocara junto a Mary, ellas se miraron fijamente en los ojos, se besaron muy apasionadamente y luego, lentamente bajaron hasta mi pene, Mary se encargo de chuparme los testículos, mientras Mila me daba un placer tan grande con su boca en mi pene, me recorría todo con su lengua, me la pasaba por el glande, de arriba hacia abajo, como si fuera un caramelo.
 Cuando ya no pude más, solté un grito y un chorro de semen fue directo a la boca de Mila, lo que hizo que Mary me agarrara el pene, y sin pensarlo dos veces, se lo metiera todo a la boca y empezara a masturbarme rápidamente con la mano, lo que hizo que yo sintiera lo mas rico que he sentido.
 Luego, ellas se besaron, se acostaron una a cada lado mío, me abrazaron y nos dormimos. Yo me desperté, estaba solo, ya todo el desastre estaba limpio, ellas estaban esperando a que me despertara, entonces me dijeron:
 Que te pareció Fran???
 Eh? Mm, demasiado bueno
 Que dicha que te gusto, pero tenemos algo que decirte.
 Si, esto no fue por casualidad, te hemos visto desde la primera vez que viste a Mary por la abertura del baño dijo Mila
 Si, Mila me lo contó todo, y al principio me disguste mucho, pero luego, entre las dos ideamos este plan.
 Al final, quedamos en que íbamos a hacerlo cada vez que pudiéramos, en cada lugar que pudiéramos, nos prometimos hacerlo en el baño de mujeres del colegio, pero eso, es otra historia. . . . . . . . . .