- >> Qué guapo se ve ahí, tendido en mi cama, tan tranquilo, tan él... es un rebelde dormido, un animal en reposo, con su respiración tibia que resuena en toda la habitación.. me gusta observar su pecho, como se infla cada vez que inhala... mmmm.... ¿cómo puede parecer dominante incluso estando dormido?

Esta persona que tengo durmiendo en mi cama domina mis sentidos como nadie más lo hace, cruzando el límite, llevandome al extremo, todavia mis ojos duelen por la cantidad de lágrimas que tuve que derramar por él, sin duda, esto es un gran desafío, creo que estamos en un nivel muy elevado y yo debo de ajustarme tambien <<.

Eran los pensamientos de Ken mientras veía a Daisuke dormido echandose una siesta muy tranquilo despues de la vorágine de emociones que vivieron días atrás.

A pesar de las lagrimas y de no hacer callar sus emociones costandole casi la vida, todo por ahora parecía ir tranquilo, habían pasado varios días y Daisuke y Takeru no se volvieron a ver, quería demostarle a Ken que a pesar de todo, le amaba

- Aunque las cosas ya no vuelvan a ser igual para nosotros.

- Te repito que tú buscaste esto

- No es mi culpa Ken, me enamoré, no puedo mandar al corazón

- Nosotros éramos dos

- Hablas tan frío... me produces miedo

-No puedo expresarme de otra manera, me duele en lo mas profundo, pero sabes que? ya no me importa nada

- ¿Que?

- Yo te amo Daisuke, te amo como un maldito estúpido, porque lo que he vivido contigo no deseo vivirlo con nadie más, como por ejemplo tus besos en mi boca, recuerdas esos besos en los que me comías la lengua? la chupabas como si tu vida dependiera de la cantidad de saliva que me robabas, dejabas de chuparla , me mirabas con deseo, nos mirabamos, se cumplía esos momentos de complicidad entre nosotros, momentos intimos, de esos que solo pueden contarse en el espacio entre dos cuerpos

- No puedo olvidarlos porque estan profundamente grabados en mi cerebro y en mi cuerpo

- Creo que estamos en un nivel muy alto de nuestra relación y debo estar a la misma altura que tú

- No digas eso

- Lo siento en mi alma, y sabes porque lo digo? porque igual que para llegar a tocar mi alma hay que derribar muchas barreras y tu las derribaste todas, yo debo superar los recuerdos que Takeru ha dejado en tu cuerpo y en tus memorias

- No se trata de superar a nadie Ken, no lo pienses así

- Yo lo siento así, esto es así, y ahora quiero ser egoista, quiero ir tres pasos por delante de tu amante, yo soy el primero entiendes? el primero

Aunque hablaba de forma fría y sin casi ningún tipo de expresión en sus palabras, era su manera de decir que amaba a la persona que tenía delante aunque lo que ocurrió hace unos dias le provocara tener otro tipo de sentimientos

Por la cabeza de Ken pasó la idea de matar a Daisuke, fue muy humillante para él ver como su sospecha fue realidad, dos veces con la misma persona, besandose apasionadamente cuando minutos atrás le dijo que no tenía nada con él.

Eso era, queria darle un escarmiento, mantenerlo en la muerte durante unos minutos, colapsarle la mente, hacerle que el alma se le vaya del cuerpo, hacerle perder el control de su cuerpo, hacerle sentir la muerte de cerca, susurrarle al oído para que en la muerte se lleve un orgasmo, pero todo con amor, porque así era él y presentía que el momento que estaba viviendo era el correcto para llevar a cabo su plan.

Se levantó de la cama para ir a su mesa de estudio, en ella habia una vela que le servía para encontrar la concentracion en sus momentos de estudio y al lado de esta un mechero, los cogió en un impulso, volvió a la cama y los dejó allí para volver a acercarse a Daisuke

Era necesario despertarlo por eso empezó con el plan, empezó a acariciar sus pies, leves caricias, cortas, apenas notorias, y siguió adelante, llegando a los muslos, la cadera y al ombligo, una de las zonas mas sensibles de Daisuke para las cosquillas, ahí consiguió que este ultimo reacionara un poco pero sin abrir los ojos.

Ken continuó con las caricias, tocó y rozó pezones, hombros, garganta y ahí se quedó

- Qué facil seria para mi ahogarte con mis propias manos Daisuke.. retorcerte el cuello, ver como te falta el aire, me tienes descontrolado, pero no quiero hacerlo porque eres el culpable de que ahora me quiera más a mi mismo que antes, hasta el punto de masturbarme sin ningun tipo de reparo, quisiera matarte acabar con tu vida, pero quiero disfrutar de tu cuerpo que es MI cuerpo.. pero me encanta dominarte, apretar...

Hubo un momento en que lo iba a hacer, sus manos estaban preparadas para atacar, pero no lo hizo, fué hasta mas arriba, hasta llegar a los labios de Daisuke, en primer lugar los besó con amor y luego llegó una caricia con la yema de uno de sus dedos, ante ese tacto ahí si Daisuke despertó

-Hola, ¿qué haces? -. Dijo Daisuke despues de un largo sueño reparador

-Acariciar tu boca ¿te gusta?

-Me encanta ya lo sabes, nada como despertar y tenerte tocando mi cuerpo, sigue por favor, describe como te sientes mientras lo haces

Ken con amor, empezó a describir las sensaciones que le venían mientras tocaba

- Toco tu boca,con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola con mis dedos, como si la conociera por primera vez, la sonrisa que emanas ahora mismo no se puede comparar con nada y me basta cerrar los ojos para imaginarla en completa oscuridad, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

-Es hermoso lo que dijiste -. Sonrió una vez mas acariciandole el brazo, Ken siguió con su monólogo

- Me miras, no dejamos de mirarnos, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se entrecierran, se acercan entre sí, s las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando con nuestras respiraciones, entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella -. Dicho esto llegó el beso que Ken había descrito tan dulcemente y con un atisbo de premonicion casi en las últimas frases

- Gracias por estas hermosas palabras

-Las siento desde el corazón

Todo se quedó en silencio entre ellos, una tranquilidad inmensa era la antesala de lo que venia en pocos minutos, Ken se estaba preparando para el ataque

-Daisuke -. Dijo de pronto

- Dime

-¿Te gusta el dolor? -. Con esa pregunta Daisuke se puso serio y a la vez un poco incómodo

-Ya sabes que me asusta si no lo controlo..

-El dolor es parte de tu vida, no tienes porqué huir de él, yo puedo enfrentarte a él

-Ken..

- Quiero hacerte ver el dolor como tu me lo hiciste a mi -. Se notaba resentimiento en sus palabras, parecia que no había olvidado lo sucedido y no era para menos, Daisuke no sabía que decir, estaba muy confuso de pronto con aquellas palabras y aquellas intenciones tan .... oscuras

-¿Tienes miedo? vamos, no vas a sentir nada, abrete al dolor, al sufrimiento, el amor es dolor

-No entiendo

-Conviertete en un esclavo del dolor, como lo has hecho con Takeru

- Me gustaria que dejaras de hablar de él, parece como que ese nombre te trastornara...

-Disfrutabas con el dolor que el te daba.

-Pero no habia amor

-Yo te ofrezco amor, proteccion, confianza, dejate hacer por lo que mi mente sádica quiere

-Ken... En que te has convertido? me das miedo, quiero irme -. Daisuke queria abandonar aquella habitación de pronto sentía que aquella persona delante de el no era el mismo Ken amable y bondadoso que conoció, este último le agarró del brazo y le dijo

-¿De que tienes que tener miedo? de que no soy la persona que conociste hace años?

-Sí

-No lo tengas, yo soy así, me estoy deshinibiendo, soy yo mismo, me encanta hacer el amor con un poco de dolor en mis víctimas, te lo he dicho siempre, me encanta dominar -. Se alejó un poco de él, se quitó el pantalon quedandose desnudo se la agarró y le dijo con la vela y el mechero al lado de él

-Mira en lo que me has convertido,a ser adicto a mímismo, a masturbarme todas las noches o a buscar intervalos por las tardes cuando no te veo para refugiarme y tocarme en silencio. ¡Yo no era así Daisuke! y lo sabes -. Decía mientras se la acariciaba el mismo cada vez mas y mas deprisa, Daisuke estaba sin palabras, no esperaba esto para nada

-Ya lo siento -. Dijo empezando a fallarle la respiracion y a jadear eróticamente

-¿Que sientes? -. Preguntó demasiado inquieto, estaba viviendo una transformacion parece

- siento como las primeras gotas caen de forma incontrolada entre mis piernas, quiero.. quiero saciarme de mi Daisuke... lo quiero aaaahh -. Estaba tan salvajemente excitado que se puso el puño en la boca con la mano que le quedaba libre

-¿Porqué Daisuke? dime porque eres así?.. aHH... Ahhhh... ahhhhhh

-¿Así que? Ken... me estás asustando..

-Porque eres tan de esa manera? no ves que mi cuerpo se excita cuando te ve..?? Ahhhh ahhh.. Ahhhh

- Por favor Ken esto me parece muy siniestro, estás demasiado alterado, no se que te pasa pero controlate no puedo hacer nada por ti

-ahhh Ahhh... no intentes detenerme, quiero llegar a mi climax para que todo empiece, perder el control, es lo que quiero, te excita esto? vamos dime que te excita ver el cuerpo que amas entrando en el orgasmo, estoy casi llegando, lo siento... ahhh...... -. Dejó de morderse el puño y ahora agarró las sabanas rozandola contra su polla empezando a chorrear un poco mas de la cuenta, todo mientras se ponía de rodillas y su expresión era demasiado sensual y erótica, sus ojos centelleaban, el mismo estaba teniendo su propio orgasmo

-Me excita esta situación, siento mi cuerpo tenso, te veo entre tinieblas, la vista me falla.. ahhhh ahhh......ahhhhh... ahhhhh... ahhhhhhhhh -. Gemía a proposito para conseguir una reaccion en Daisuke de que no dejara de observarle, incluso hasta sus propios gemidos lo excitaban, continuó con pequeños espasmos y arqueos de espalda

-El solo roce de la sábana me enciende la piel, mis pezones se endurecen y siento mis jugos manchar la cama, me toco.. estoy abierto Daisuke e inflamado, mira como entierro mis dedos hasta que ya no quepan -. Se puso en cuatro y se metió los cinco dedos dentro de su ano y rascó en el lugar, provocando mas gemidos y sentir una extrema excitacion en Daisuke

- Me retuerzo como culebra; me encantaria tener un espejo mientras mis dedos desaparecen dentro de mí. ¡Me encanta mi olor! amo mi olor, deseo mi olor, huelo a hombre caliente!!

Para Daisuke, Ken habia perdido la cabeza aunque no sabia que este numero era el principio de lo que se avecinaba

-Siento calor Daisuke, el calor me abrasa, me quema, me corro estoy a punto, lo haré mancharé la cama... !!!!!!MMMM!!!!!!!!! -. Apretó los ojos para retener el orgasmo, no eyaculó como se esperaba, lo retuvo, se quedó con el orgasmo dentro, el climax estaba en su cuerpo y no hizo nada por sacarlo, en lugar de eso aprovechando la confusion de Daisuke, con el orgasmo en la boca y todo su cuerpo tenso con calambres que le daban casi combulsiones, dejó de agarrarsela, agarró la vela y la encendió con el mechero aún con sus manos temblando y el poco semen que caia en las manos de una manera sensual

- ¿Qué haces con eso?

-Esto.. esto es para ti

Se abalanzó a por Daisuke, poniendole un brazo en el cuello para obstaculizarle cualquier movimiento y la vela encima de su cuerpo

-¿Qué haces? ¿!!!que haces??!! ¿que estás haciendo?-. Dijo intentando liberarse sin exito, mientras su mente intentaba comprender que pasaba, vio como Ken sudando mas que otras veces y el temblor de sus manos pasando la vela por todo el cuerpo tenso de Daisuke, el calor de la llama le hacia ponerse mas nervioso

-Recuerdas una vez que te introduje una vela por tu hermoso culo? eso puede volver a pasar

- Por favor Ken.. no.. no..

-Chhssssss........ -. Dijo tapandole la boca con sus dedos, Daisuke estaba asustado viendo como aquella vela encendida pasó rozando por su ano

-Pídeme que te quite las arrugas del alma con el vapor de tu deseo y el calor de tus anhelos -. Volvió a decir Ken, haber retenido su propio orgasmo le hizo estar más desesperado que antes, tenía la vela en la mano, estaba encendida, lista para ser usada, las primeras gotas de ceca caían y caían justo en el pecho de Daisuke, la primera reaccion de este con la cera caliente fué arquear la espalda y respirar de forma exagerada, su estómago con la cera se contraía más que otras veces

-Dímelo, pidemelo -. El tono de voz de Ken era de dominacion, de control seguro de lo que hacía, Daisuke despues de aguantar la cera caliente por su estómago y un poco por las caderas que acababa de echarselo Ken le dijo resistiendo el calor con sabor a infierno

-Sí.. hazlo -. Jadeaba de forma bruta, su boca estaba seca pero ya se encargó Ken de llenarla de saliva con su propia boca en forma de un beso casto.

-Buen viaje, buena muerte, no olvides que esta es mi forma de amar de forma especial. te amo

Y de un golpe casi mortal lo metió dentro del ano con la vela aún encencida, ni siquiera se atrevió a apagarla, la primera reacción de Daisuke fue la expresión de miedo y la segunda de terror, nunca imaginó a Ken hacer eso con una vela encencida, empezó a respirar por la boca de forma asmática, el fuego de la vela le estaba quemando las entrañas por dentro

- Mierda .....mierda....... mierda..... mierda......!!!!! -. Se retorció de un lado a otro, su cuerpo empezó a doler

- No fuerces las piernas quiero ver como entra poco a poco hasta meterla dentro de tí-. En aquel momento la tranquilidad de Ken y la tempestad que vivia Daisuke era la cosa más hermosa que podía existir

- Moriré.....voy a morir....

- Silencio, por favor-. aquella vela al primer contacto con las paredes mojadas de Daisuke como era natural se fue apagando aunque el dolor ya estaba echo, Daisuke lloraba

- Arde.... por favor...por favor-. Casi sin voz por aquella violacion bruta contra su cuerpo pedía piedad con sus ojos abultados de fluidos salivales

- Bellas lagrimas-. Dijo limpiandosela con sus manos y acto seguido agarró de nuevo el mechero y lo encendió llevandolo a la cara de Daisuke

-Dejame ver tu miedo a la luz de este mechero -. Su voz casi apenas se distinguía por las lagrimas y la voz llorosa de Daisuke, lloraba como un niño pequeño, su comportamiento era igual al de un infante, aún la mano de Ken seguía en su cuello aprisionandole

- Voy a hacerte colpalsar..abandona la tierra por unos momentos, conviertete en polvo-. Acercó rozando la llama por las cuencas de los ojos de Daisuke este aterrado veía la vela quemarle la piel casi y ya temblaba de forma exagerada

- Me gustan tus ojos, ya te lo he dicho siempre, y quiero que tengas ojos para mi, me encanta besarlos

con sus labios y sus dedos besó los parpados y luego, dejando el mechero apagado en la cama, con sus dedos abrió abiertamente uno de los ojos de Daisuke y besó la córnea como una tierna caricia

- Es hora de una pequeña locura, ¿me dejas?

Sus dedos se posaeon en los ojos, poniendo tambien todo su peso en Daisuke, solo se veía la cara de este y su respiración era cada vez más irregular

- Siento tu dolor, tu dolor es mi placer, quiero dejarte mi recuerdo de mi anhelo de arrancarte la carne con mi amor, estoy loco de deseo Daisuke, no puedo evitarlo

Con ambos dedos provocó la mayor energia de latidos de corazon en Daisuke, iba a sufrir un infarto, Ken sataba a punto de arrancarle el ojo derecho

- No verás sangre, solo sentirás liberación de un ojo, apretó para sacarselo, estaba dispuesto, debajo de él Daisuke estaba viviendo una experiencia cercana a la muerte, aterrorizado, asustado, con el cuerpo rígido y la piel helada, iba a morir, lo veía pero todo terminó en un segundo

Las manos de Ken fueron bajando despacio hasta abrazar su cintura y se arrucuró en el pecho de su novio asustado y sudado, incluso se habia meado un poco manchando el torso de Ken fruto del terror

La mente a pesar de todo le obligaba a ser un poco cruel con aquella persona con el terror en sus ojos, sus dedos viajaron hasta la boca de Daisuke, fué mas adentro de la boca, pasó por su lengua y viajó hasta la campanilla, con tan solo tocarla mas sintiendo lo asustado que estaba Daisuke, adivinó que su vómito no tardaría en llegar

Tan solo la agarró fuerte y de repente Daisuke sintió otra fuerte agonía no podía respirar y se olvidó de tragar, el cerebro se quedó muerto unos segundos, tosió y todo el vómito del estómago le salió por la boca con pequeñas combulsiones y el vómito convertido en espumarajo de todos los colores

Para Ken esto no era hacer sufrir, era hacer algo muy erótico y sensual con aquel cuerpo.

- Tranquilo, hoy no es el día de tu muerte, soy un sádico enamorado pero es solo la mitad de mi ritual de amor

Daisuke no se había recuperado de la experiencia de la vela cuando vió otra vez aquel objeto encendido en las manos de Ken

- No...No.... No lo hagas por favor... -. hablaba entre temblores

- Dejame ser libre, tambien tengo derecho a expresar mi amor -. Echó la cera super caliente de la vela por todo el cuerpo entumecido de Daisuke, al final el cuerpo de Daisuke era todo un color rojo provocado por la vela

A cada derrame, Daisuke se encorvaba, era demasiado para él sentir el calor abrasandole las costillas y toda su sensibilidad

- Lo siento -. inhalaba todo el aire mediante lloros incontrolables mientras que con su mano temblorosa llegaba a agarrar el rostro de Ken para acariciarle, el mismo Ken recibió la caricia con un beso en la mano diciendo

- Solo soy yo expresando mi amor.

Y una vez más, la vela encendida y caliente fue a parar al ano magullado de Daisuke

Si su respiración era irregular en la primera penetración con la vela encendida quemando toda la carne en su interior, en esta ocasión al estar la carne interna inflamada y bastante más sensible que antes, con tan solo meterla en el agujero Daisuke agonizaba de dolor, veia como la muerte se lo llevaba aquella noche, su respiración era igual a una mujer con contracciones sumado con exageradas gotas de sudor que tenian manchada la cama, alzaba sus caderas a la misma vez que Ken penetraba la vela dentro

-- Fffffhhh..!!! ffh!!! .... !!Ffffh!!! !! bbbffffffffff!!! fhhh fffffffff!!!!!!!!!!!!! !!fffFffffFffhhh!!!!!! -. Si no arqueaba su espalda porque no se le era permitido al poner Ken todo su peso en él pegando su cara contra la cara sudada y en tensión maxima de Daisuke, sus manos intentaban dos cosas, agarrar las sábanas de la cama o buscar apoyo en Ken

Su cuerpo era agua, estaba chorreando y su corazón esforzandose por no pararse aquella noche, los muslos, la espalda, todo él se convirtió en sudor, su aliento chocaba contra la frente de Ken tambien sudada por el aire caliente recibido

- !Por favor.....por favor....... por favor por favor......! -. Decía desesperado queriendo protegerse teniendo como apoyo el cuerpo de Ken, iba a agarrarse a su cuello pero Ken ignoró la ayuda

- No, todo está en la mente, sobrevivirás a esta noche, te lo aseguro... confias en mi? -. Decía penetrando sin piedad, olía a humo y eso mantenía asustado a Daisuke, este lloraba sin consuelo y su voz casi apenas no sonaba

- Escucha mi voz.. escucha Daisuke, todo está bien, ¿Confías en mi?-. Habló de forma serena

- Salvame por favor, salvame-. su cabeza vivía en una nebulosa oscura, le hizo imaginar que el fuego le estaba matando por dentro y no respondía a nada, solo quería salvarse de las llamas del infierno

- No tengo porque salvarte, si confías en mi no vas a temer nada aunque te lleve al extremo, a la locura, aunque tu cuerpo quede impedido, aunque tus entrañas queden inservibles -.

Acto seguido penetró más adentro sacandola y metiendola muy lentamente, al meterla penetraba más adentro, queriendo llegar al estómago, y lo consiguió, cerca del estómago aparecia un bulto pequeño rectanculo amenazando con traspasar la carne

-¿Quieres matarme?

- Tan solo quiero que experimentes lo que viví hace días, me transtornaste, pero yo tambien deseo transtornarte más, se que volverás a él , por eso esta noche deseo llenarte de todos mis vicios perversos, piensa en mi cuando la palabra miedo te domine

-No lo haré no...no -. para salir de la situación y no empeorar más la tortura dijo aquello en un mal momento, Ken apretó más adentro penetrando sacandola y metiendola cinco veces seguidas, aquella vrla le rstaba quitando la vida y el solo provocaba más arqueos de espaldas a Daisuke y que este abriese la boca jadeando sin ningun control.

-No mientas, sabes que lo harás, y me duele saber que este cuerpo será usado por alguien más.. quiero más de mi amor hacia tí

Ahora pasó a lo extremo, se acabó el ser prudente, ahora todo iria mas deprisa y con dolor, penetró unas 20 veces seguidas muy dentro con su mano

-!!NOOOO NOONO!!!! piedad Ken nooo por favor.. nooo!!!!!! -. Gritaba, se sacudía y lloraba como un niño, su mente quedó rota y ya no respondía a nada, de todas formas Ken queria eso, es lo que queria, matar a Daisuke del dolor, enviarlo a la casi muerte, así que siguió con su plan, penetrandole duro

Con esas fuertes respiraciones, pegó su rostro al de Daisuke lleno de un miedo atroz y le dijo

-Te estoy llenando de todos mis mas oscuros deseos por ti, todo esto por tí -. Y Ahora mientras seguia la follada fuerte con la vela le beso en el cuello con mordidas fuertes hasta dejarle la piel roja, el cuerpo de Ken era un poema de lunares rojos y magullados, aquella situación excitaba Ken y ahora penetraba sin control, violando aquel agujero cada vez mas violado e hinchado

Muy serenamente aunque se estaba mezclando del miedo y la desesperacion de los sentimientos de Daisuke le dijo cogiendo con su mano libre las manos de Daisuke y dejandolas en la cama

-Seduciendote la mente,sin tus manos. Sin tu boca. Sin abrazos, recorriendo tu piel mas profundo, sentir tu carne, gozar tu miedo, estremeciente hasta el ultimo minuto, disfrutarte... y provocarte sensanciones que mas pensarias que pasarían, follarte los sentimientos, los pensamientos, sacarte entre los jadeos y gemidos los mas oscuros pensamientos lascivos,esto es hacer el amor a mi manera-. Le susurró sensualmente, el calor de amor en el oído mas el dolor fisico que sufría hicieron a Daisuke entrar en una especie de coma profundo, de pronto sus ojos se quedaron en blanco, todo su cuerpo se quedó rígido y respiraba con dificultad, Ken le observaba y de pronto sintió como algo le chorreaba la mano con un olor no muy familiar para él, miró hacia abajo y descubrió algo que le hizo soltar un gemido sensual.

Su mano estaba entera cubierta de sangre al igual que la cama, la vela era un palo totalmente rojo, habia conseguido penetrar tan duro que su cuerpo reaccionó con una hemorragia, pero Ken no se alarmó, al contrario, le gustaba el olor de aquella sangre con olor a fluidos

-Esto... esto lo he provocado yo, estos son las consecuencias de mis sádicos pensamientos.. no me arrepiento Daisuke, ¿puedes oirme? ¿me escuchas?

Eso le ponía todavía mas cachondo, se llenó las manos completamente rojas y acto seguido deseó hacer lo que pensó hace unas horas, estrangularle hasta la asfixia, todo valia en ese momento, y lo hizo

Sus manos rojas hicieron un camino por el torso temblando dejando hilos de sangre hasta llegar a su cuello

-Disfruta de tu viaje exprés a la muerte, sentiras una energia que te envuelve, te amo, mi amor

Sus manos hicieron todo el trabajo, fueron derechas a la yugular de Daisuke, su color carne pasó a ser cada vez más un rojo morado oscuro, tenia intenciones de quitar las manos de Ken pero no podia,el cuerpo no le respondía, solo sabia que tal vez era la ultima vez que veia a Ken antes de morir segun él

No fué así, antes de cerrar los ojos y quedar inconsciente y violado en la cama, vio la luna asomandose por la ventana, ya era de noche y antes de sumirse en el mundo de la oscuridad, pegó un ultimo suspiro y terminó rendido en la cama, inconsciente, sin vida por unas horas

Ken había cumplido su proposito, Daisuke se habia llevado su merecido a un precio muy alto.

-No me arrepiento de nada de lo que ha pasado en mi cama, en esta noche, el olor de la sangre en cada luna llena me hará recordar este momento para siempre.

Acarició aquel cuerpo que no respiraba pero tenia los ojos abiertos, los cerró y se acurrucó junto a ese corazón que ahora latía debilmente. acarició aquel cuerpo y seguidamente lo abrazó diciendo

-Sé que volverás a él, estás enamorado, no puedo cambiar eso, pero dentro de ti llevas la marca de mi hechizo, de mi profunda devoción por ti,recuerda esta noche de luna llena como la mejor de nuestras noches, tú y yo, siempre siendo uno, a pesar de que mas cuerpos quieran tocarte, eres mio, somos de nosotros, nunca lo olvides.

No ocurrió más aquella noche, a la mañana siguiente, antes de que se pusiera el Sol, Ken despertó para estar lejos de Daisuke, se fué a la cocina para lavar los platos que quedaban en el fregadero que su madre no habia limpiado, una hora mas tarde, Daisuke despertó un poco atortudido y con fuertes dolores en el culo, al visualizar aquellas manchas de sangre en las sábanas recordó todo lo de anoche, con una mirada rapida miró por toda la habitacion pero no vió a Ken, sentía que necesitaba hablar con él y como supuso que estaria en la cocina, con muchos dolores se puso su ropa y fué a donde estaba él quien estaba de espalda fregando tranquilamente

Sin decirle nada, Ken le oye llegar y le dice

-No tardes en irte, debo limpiar las sábanas -. Su voz sonaba lo mas fría del mundo

-Me gustaria que hablasemos

-Hablaremos cuando yo lo necesite, en este momento no deseo ningun tipo de contacto contigo

Con esas duras palabras Daisuke se da cuenta de que algo muy fuerte ha cambiado entre ellos y se marcha, deseando decir muchisimas cosas pero por respeto a Ken se marcha sin decir nada y cierra la puerta.

Ken al escuchar a Daisuke irse le envuelve el sentimiento de culpa, sintió ganas de llorar pero no deseaba hacerlo

- No deberia sentirme como me siento, ayer Daisuke sufrió dolor fisico pero yo he sufrido bastante dolor emocional por su culpa, no deberia sentirme como me siento, no debo

Aguantando la tension de no llorar fue a su cuarto y vuelve a mirar las sábanas manchadas, antes de ponerse a limpiarlas para que sus padres no sospechen dice muy seguro de si mismo

- Solo tengo una explicacion razonable para sentirme de esta manera y haber organizado aqui casi una matanza, estar enamorado de una persona por la que si pudiera dar mi vida lo haría.

Y dicho esto, las sábanas fueron lavadas sin ningun rastro de sangre en ellas.