Haciendo mi practica del ejercicio práctico supervisado, previo a graduarme de econmista, estaba en un pueblo del depto, de Jalapa, San Pedro Pinula. Todos los viernes por la tarde llevaba a mi compañera de práctica a Jalapa, y los domingos por la noche iba a traerla, es decir los fines de semana los pasaba sólo en la casa que rentábamos, y por lo general a máquina pasaba el resumen de actividdes de la semana. Los sábadps temprano me iba al mercado a comprar fruta, y siempre que pasaba por el parque veía a dos chicas patinando, eran muy guapas y agraables y siempre me saludaban con una sonrisa y un hola. En la casa que vivía había un porton de dos hojas, casi siempre mantenía una hoja abierta donde salía perfectamente mi auto, y lo mantenía abierto, porque era invierno y a veces al salir o al llegar estaba lloviendo. Un día domingo, me acababa de duchar, estaba en pantaloneta y pantuflas, no tenía ropa interior y estaba sin camisa, y oí que silvaron, eran las dos chicas que andaban en bicicleta, les hice una señal para que entraran y llevaban una cesta de mimbre con manzanas y melocotones, y me dicen: como siempre lo hemos visto comprar fruta, ayer fuimos al terreno de un tío y le cortamos esta fruta. Martita era de 15 años, morena clara, de facciones hermosas, ojos negros, brillantes, de pestañas grandes, de un cuerpo muy bonito, y una sonrisa preciosa, casi todo el tiempo esta sonriendo y mostrando uns dientes blancos muy bonitos, pechos medianos, cintura delgada y hermosas nalgas, piernas torneadas, su estatura es bajita. Andrea de 13 años, alta, rubia de ojos color miel, pechos grandes, y buen trasero. Andrea me dice esta casa es de un hermano de mi mamá, y su esposa no está?, yo le aclaro que no es mi esposa ni nada que nos relaciones, simplemente somos compañeros de práctica y nada más. Como yo estaba con el dorso desnudo, me dice martita, que tengo un cuerpo bonito y bién formado, que le dan ganas de acariciarlo, y yo le digo que lo haga, me besa el pecho y me pasa la lengua por las tetillas, inmediatamente el pene se me para, y como no tengo ropa interior, Andrea se pone roja y dice, mirá como se le puso la cosa, Martita mete su mano por la pantaloneta y me lo agarra, y con una cara de sorpresa le dice a Andrea, sacandomelo, mirá que bárbaro es enorme, yo he tenido dos novios pero los de ellos son pequeñitos. Yo le pregunto si ya se los había visto y me dijo que con los dos había cogido, y que quería probar conmigo. nos fuimos al cuarto, y Andrea se quedó en el corredor, empezo a chuparlo, y nos pusimos en un 69, tenía la cuca completamente depilada, su labios ricos, y su clitoris chiquito, pero vibraba al contacto de mi lengua, la puse boca arriba, y lentamente su fué tragando las ocho pulgadas de pija, la sentí venirse, cuando yo estaba a punto de venirme se la puse en la boca y me corrí. Por la ventana Andrea había visto todo, Martita la fué a traer, la desnudamos y empezé a chuparle su cosita, ella gemía de placer, yo estaba loco haciendo gozar a esa chiquilla de trece años, lamía esa pucha virgen, sus tetas grandes, hasta que se vino en un orgasmo formidable ,era su primer orgasmo, yo tenía el pene erecto, y lo metí en la vagina de martita, ella volvió a correrse, y fue cuando puse en perrito a Andrea, le frotaba el pene por todo lo largo de su canalito. le metía la mitad de la cabeza, pero al llegar al himen ella se quitaba, lentamente la empezé a penetrar por el culo, la metí mas de la mitad y empezé a bomberala hasta llenarla de semen. A partir de entonces todos los sábados y domingos llegaban a la casa y allí cogíamos a las dos les daba por el ano, pero Andrea como era virgen, la leche se la daba en la boca, para evitar preñar a Martita. Ellas estudiaban en Jalapa, y los viernes cuando iba a dejar a Rebeca, las esperaba y se venían conmigo y los domingos, yo me las llevaba a Jalapa.

Uno de esos viernes, cuando veníamos me dijo Martita que ese fín de semana no iba a llegar porque ese día le había bajado su menstruación, Andrea me dijo que si Martita no iba tampoco ella. Al día siguiente como a las ocho de la mañana, me estaba duchando y oí pasos en mi cuarto, cuando me acerqué era Andrea, y se estaba desnudando, aquel cuerpo hermoso, virginal, aquel par de tetas grandes, duras, y su pezoncitos rosaditos, al salir del baño aún mojado, me tomó el pene y empezó a chuparmelo, y me dice. hoy vine porque como vamos a estar sólos, quiero que me la meta, pero no le vaya a decir nada Marta, porque no me gustaría que supiera que yo no soy virgen. En un 69 la hice terminar dos veces, luego tomó un poco de lubricante, me embadurnó la pija y se sentó sobre mi, se colocó en la entrada el pene y empezó a empujar, sentí lo duro de su himen, presionó más fuerte y sentí el crujidito de su himen al romperse, no paró siguió lentamente ensartando el rollo de carne, hasta que sentí sus nalgas en mis testículo, se lo había tragado todo, se inclinó sobre mí para besarme la boca, sentí lo salado de su lagrimas que ya habían corrido hasta su boca, y lentamente, se la sacaba y se la metía, era verdaderamente delicioso sentir mi pene resbalar en su concha estrecha y humeda, llegó el momento que su pusa estaba dilatada y ya con facilidad entraba y salía, apreto sus muslos a los míos gimió fuerte y se vino, inmediatamente me vine inundando su panacha de semen caliente y espeso. saqué mi pene lleno de líquidos vaginales, semen y sangre, y así se lo metió en la boca, y chupo por unos minutos, hasta hacerme correr nuevamente. Después de ese día no llegaron juntas, Martita llegaba por la mañana y Andrea por las tardes, según martita andrea no llegaba porque, tenía miedo de que en un mmento de calentura perdiera su virginidad.