Acostado y desnudo el amante en la misma cama de la recamara de Yessenia muy picante, muy caliente, muy deleitada, muy deseada, muy hambrienta, muy dominadora, muy aprovechadora, muy aventurera, muy adultera, muy traviesa, muy golosa y muy lujuriosa portando el ajuar del uniforme nuevo de trabajo se quita Yessenia el saco para estar más comoda y más confortable se desabrocha la camisa al quitarse el brasier al tocarse como agarrarse inclusive, pasarse las yemas de los mismos dedos sobre sus pezones que estan firmes y duros en su punto al mirarlo fijamente al amante; le dice estas preparado para mi porque empezare a revolcarme y a tener el pleno sexo contigo no te dara tregua, chance ni respiro alguno teniendo la suerte de que se encuentra trabajando toda la tarde y toda la noche hasta el mediodía del día siguiente mi querido esposo que es hoy día tu mejor amigo tenemos todo el tiempo disponible para vivirlo a manos llenas.

Se sube la falda para arrodillarse al chuparle, al comerselo y al mamarselo con todas las ganas que le ha tirado desde hace rato que estaban en la misma chiva adicional lo deslumbraba con las mismas miradas proliferadas al caminar cruzando la calle diagonal hasta entrando a la misma casa de Yessenia que se pasaba manoseandole y tocandole como agarrandole con tremenda coqueteria hasta malvadamente los gluteos de su amante que la trae de verdad muy loca hasta enamorada perdidamente por todo el ser que es actualmente el amante mismo.

Disfrutante largamente de las tremendas y merecidas pero efervecentes ganas de comerselo en su pipi queda muy motivada hasta muy entretenida y también muy divertida al darle de probar las exquisiteces de sus pezones que se los lame con toda la fuerza presionada contra la cara de su amante que también la entrelaza con las dos manos justamente en la zona provista muy engrosados y muy gigantescos de los jugosos y fructiferos gluteos que están arrecho y sabrosos en toda la misma magnitud corporal de los contornos femeninos con todo el uniforme puesto por la diosa, diva, devota pero ardiente Yessenia.

Se libera de las medias y del panti al tener la falda arriba en la misma cintura sentada co nel mete dentro de su clitoris que se masturba bravamente con toda las fuerzas nacientes por las constantes hurgadas por el dedo índice derecho que se lo perfilaba su amante al estar endemoniada sin parar largamente por instancia de cuatro horas de tirarselo. Se deja mamar los senos por el amante que esta muy sudoroso, muy hambriento, muy feliz y muy emocionado de amar a un mangar tan delicioso que es la propia Yessenia en toda las esencias de tal naturalidad por su estatura pequeña que es un animal en celo y feroz que no comparte para nada su presa alimenticia que es su querido amante.