Ahí estaba yo, de rodillas frente a él, me encantan tus relatos dijo, y sé que los que te leen amaran ver la foto de portada que tendrás...

Desnúdate, lentamente me quité todo, ponte en cuatro enséñame esas deliciosas nalgas, y abre la boca quiero que todos vean lo delicioso que lubricas un buen habano, mámame el puro para que después lo fume mientras me mamas la verga...

Deseaba provocarlo, quería que ese trozo se pusiera en guardia para atacarme hasta la garganta.

Mamé su puro y si avisar me empezó a dar cachetas con la verga... ¡eso! Así putita que bien lo haces, tomó su celular del escritorio y tomó la foto.

Quiero que la pongas de portada y pongas lo que eres, una putita y también lo que te encanta, la verga... Quitó su habano y metió su verga, sus huevos se estrellaron en mi barba y mi nariz podía oler su monte de macho...

Sentía ahogarme pero poco le importaba no me dejaba sacarme su pito de la boca...

Con una mano me atraía de la nuca hacia él y con la otra alternaba los azotes en ambas nalgas mi ano se contraía y el me cogía por la boca: mámamela verga puta, así estas bien rica, eres una nenita buen golfa y eso me gusta, su verga entraba una y otra u otra vez, de pronto sentí como su cuerpo se endureció,  me la metió con todas sus fuerzas y su glande quedo en mi garganta, su pene se hizo gordo y disparó tres lefas directo a mi garganta... Sentí como su leche me alimentaba era la mamila más deliciosa! Sentir a ese macho alimentarme con su tibia leche era el paraíso, tan pronto terminó saco la verga de mi boca la limpio en mi cara y dijo...

Vístete puta y mientras lo haces voltéate de espaldas que esas nalgas me encantan...

Así lo hice subí mi pantalón me puse la camisa y cuando terminé, sonrió y me dijo ahora vete, te mando la foto por whatss y quiero verla en tu perfil, quiero que les cuentes a tus machos y disfrutes de lo que seguramente te van a escribir... Se acercó a mí me dio una nalgada de despedida y yo salí de la oficina más caliente que cuando entré.