Yo tenia 14 años pasaba las tardes en compañía de mi perra llamada loba y su ya adulto cachorro llamado blanco,dormía la siesta y mi perra siempre se acostaba a mi lado,yo la tenia que retar porque siempre metía su hocico entre mis piernas,una tarde de calor,repitió lo acostumbrado yo estaba caliente y la deje continuar,yo tenia puesto solo un pantalon deportivo. Ella metió su hocico por debajo del pantalon y comenzó a olfatear con insistencia,poniéndome la pija muy dura,me pare y cerré puertas y ventanas y regrese a la cama me puse en la misma posición anterior y me saque el pantalon,loba comenzó a olfatear nuevamente y a pasarme su rugosa lengua por mis huevos y el tronco pele mi pija.

Me comenzó a lengüetear la cabeza de la pija, la sensación al principio me molesto pero a medida que pasaban los minutos comencé a sentir placer y a excitarme a cada segundo,fui al comedor y unte mi pija con dulce de leche y regrese a la cama,loba con mayor desesperación continuo lamiéndome. Estiré mi mano y comencé a jugar con su concha luego sin pensar demasiado comencé a besarle la conchita de perra rato después comenzó a patalear,y un liquido espeso y muy agrio salio de su concha,yo mientras ella me seguía lengüeteando me empece a pajear,no tarde demasiado en eyacular sobre su cara de perra.