Al tomarme un vaso de champaña mezclado con mitad de agua al tener bastante alcohol de volumen se siente algo de mareo pero al mismo tiempo una sensación afrodisiaca acompañado por supuesto entre nosotros de muchos calorcitos corporales y orgánicos; en que ando sobrio pero con unas erecciones descomunales que al instante por obra y magia tengo paradito inclusive durito y para rematar cañoncito mi verga en que no comunico nada de nada al ponerme de pie caminar hacia ella, jalándola con mi mano agarrada que la llevo detrás de mí enfilándonos hacia la habitación que la tiro boca arriba en la cama que me echo encima de ella al entrarle forcejeada y entre empujones como manotazos para alejarme pero es en vano la venzo con muchas besadas recorridas también persistentes además invasoras igualmente atinadas especialmente buscándomela adicionalmente ligándomela hasta chuleándomela en que logro desabrocharle la misma camisa al quitársela solamente queda con los puños cerrados con mi boca traviesa hasta atrevida me las ingenio yo mismo para besuquearla hasta lamerle por supuesto liberándola al arrancarle mágicamente con mi boca ansiosa su brasier al descubrirme ante mí las preciosuras de sus tetas y senos naturales en que le corro la misma falda de cuero en que hago lo mismo que hice arriba la beso y lamo hasta le arranco mágicamente su hilo dental descubriéndose una joya de clítoris muy rojito hasta húmedo sobre todo mojado de ahí, chorreado y por supuesto intenso igualmente candente y para variar inundada de mucho jugos vaginales por esta mujer que la hago mía a la fuerza hasta obligada finalmente sometida por mis instintos de bestia ruda y sexual por mi y sobre todo por mí a mis anchas a costa de ella ante mi presencia en vivo y a todo color.

La follo como estuviera haciendo pechadas y lagartijas al mismo tiempo en que no puede evitarse jadearse hasta gemirse en que sucumbe ante mis exigencias en que acariciándome mis pechos y trasero hasta hombros y espalda sonriéndome ante mis propios ojos, me la volteo al cogérmela con ambas piernas dobladas y abiertas dándole profundamente en todo su rabo que lo tiene suculento sobre todo exquisito hasta alojándome en que me vengo con bastante paja y polvo caliente en que la dejo bien desbordante parecida a una represa y mucho más al pasarse me la embriaguez que tuve al tomar un vaso combinado con mitad de champaña y agua en el almuerzo.