Bajándose sin tener la mayor precaución, cuidado, apurada especialmente pidiendo una parada ilegal en que tampoco se fija en los carros que vienen disparados y circulando en la avenida llevándose groserías también insultadas igualmente susto la guapa asistente administrativa de la sala de profesores que la sujeta fuertemente de su brazo derecho por un policía que por casualidades anda en su ronda de patrullaje acompáñeme a la estación policial; con un rostro desolador como de lamento además de mucha vergüenza que al caérsele la carota de la pena por la infracción hasta el accidente que por poco causa por su prisa y por su descuido al no fijarse tanto al bajarse del bus de ruta y cruzando la avenida que podían atropellarla al dejarla incapacitada o hasta muerta tirada en el pavimento. Entrando a la sala de interrogatorio el mismo policía ordena a los subalternos que nos lo moleste ni lo interrumpa ni siquiera le toquen que tengo muchas cosas que penalizar a esta señorita imprudente y arrestada por la lesión ilegal e infringida cometida hace rato en la avenida donde está realizando su ronda diaria al presenciar el grave error cometido por esta fichita de señorita derramando lagrimas secas y fluidas escuchando las afirmaciones al tenerla con el corazón en la mano sobre todo el alma intranquila haber como puede resolverse este problemón en que se metió nada menos la mismísima asistente administrativa de la sala de profesores que definitivamente se paro hoy con el pie izquierdo.
Golpeando con el puño cerrado cinco veces fuertemente y secante la superficie de la mesa al ponerse más llorona de lo que estaba hace rato la asistente administrativa de la sala de profesores, hablándole fuertísimo el mismo policía cantándole todas las infracciones cometidas hasta poniéndose la mano en el corazón la desconsolada asistente, que hablando cortante como faltándole la respiración al estar nerviosa y agitada como la está tratando hasta rebajándola a la mínima expresión y aplastándola rotundamente parecido a un sapo, pidiendo reiteradas veces muchas disculpas soy rotundamente culpable y por la distracción que cargaba e incluso andaba hace rato yo no soy así habitualmente tengo mucho cuidado que puedo hacer para solucionar este delito y problema hoy mismo, calmándose y tranquilizándose totalmente la intensidad que está el mismo policía al sentarse al ponerle las manos encima de las manos de la asistente de la sala de profesores veo que está dispuesta a lo que sea y a todo para salir bien librada de esto para que no perjudique ni manché y nadie se entere del escándalo ni del bochorno en que anda enlodada como enredada ahora, echándole una mira dota de arriba hacia abajo a la asistente con una mano en la boca el mismo policía le manifiesta que sexy, deleitosa, fascinante, colosal, provocativa, atrayente, coqueta, picara sobre todo la deseo hacerle el interrogatorio a mi manera subiéndose la falda del atuendo de ejecutiva universitaria cargando botas negras de punta al desabrocharse la blusa roja con todo y saco acariciándose como manoseándose en vivo a todo color, a pedir de boca a manos llenas toda la entrepierna desde la rodilla subiendo hasta alcanzar la ingle quedándose específicamente en el hilo dental diminuto, pequeño, cachetero finalmente a su talla mostrándole el clítoris rojito que se carga al agacharse sin decirle nada le abre de par en par las piernas metiéndose en el medio al abrirle adelante del hilo dental al meterle a profundidad la cara para lamerle como besarle la vagina en que la pone a jadear y gemir con las dos manos de la asistente agarrados y levantándose como apretándose hasta jalándose las tetas con todas las delicias y excitaciones envolventes por el policía quién la arresto al conducirla a la estación policial para penalizarla e interrogarla hasta joderla rotundamente por la imprudencia cometida. Doblándola parada y extendida con los antebrazos apoyados sobriamente en la mesa al cogérsela duramente con sus dos manos puestas firmemente en los glúteos deslizándose suavecito por los muslos y quedándose con suma propiedad erótica en la plena cintura frotándole las mismas yemas de los cinco dedos de cada manos, agachada hay mismo comiéndose el palote de la pinga del pene del policía quien la interroga férreamente al masturbarlo ruda y furiosa como indignadamente por lo que está pasando la misma asistente de profesores terminando acostados encima de la mesa mamándole ricamente los senos a la asistente que vistiéndose los dos rompiéndole la ficha penal frente a sus ojos sonriendo y saltando de la emoción aplaudiendo por la liberación de su leve falta grave y lesiva por lo que paso hace rato en la avenida al bajarse imprudencialmente del bus al cruzar arriesgando su vida a punto de causar un accidente en ella que la pudo dejar lisiada o muerta hay mismo a la guapa asistente administrativa de la sala de profesores que se despide al besarlo y salir feliz de la estación policial con rumbo a la universidad ya que alcanza justamente el tiempo para llegar antes de las 12 mediodía a trabajar…