Conocí a Juan en un sitio de Internet especializado en cuestiones sobre sexo. Mi esposo y yo siempre habíamos pensado en que me cogieran otros, personas desconocidas, a quien nunca habíamos visto; que me ataran a la cama con esposas y con la cara vendada. La verdad es que me encantaría que me cogieran por el culo. Entonces como Juan descubrió esta debilidad que yo tenía, ser cogida por desconocidos, tomó mucho interés y decidió planificar un encuentro en una fiesta, en donde yo iba a ser el centro de atención. Dicha fiesta tendría lugar en la planta baja de un hotel, en el salón de fiestas, y serían invitados un grupo de jóvenes.
Llevo mucho tiempo de casada y tengo un hijo al cual he criado con buenas costumbres, así que imagínense lo mucho que lo he pensado para decidirme y un grupo de jóvenes me usen como lo deseen. Pensé que preferirían a una muchacha joven como ellos, pero Juan me aseguró que a estos tipos les encantaría estar con una bella y guapa mujer como yo.
Cuando llegó la noche para nuestra cita, ya yo estaba demasiado excitada. Casi no podía evitar que me temblaran los dedos y las manos cuando me estaba afeitando la cuca y pintando las uñas. Yo quería ser la única estrella para esos muchachos, que no se fijaran en nadie mas.
Mi esposo me llevó en el carro y me dejó frente al hotel; entré y me dirigí al la barra justo como lo habíamos planeado. Luego Juan apareció y me trajo algunos tragos para que me relajara. La cuca estaba comenzando a gotearme cuando vi alrededor y visualicé a los individuos que pronto me cogerían. Subí a una de las habitaciones del piso de arriba. Era una suite grande con enorme cama matrimonial y un sofá de piel de cuero. Había poca iluminación y noté un juego de esposas sobre el mueble junto con una venda. Lo único que no vi en ese momento fue la cámara o equipo de filmación. Bueno, Juan lo tenía todo preparado, sin duda. Esto era algo extra, lo de la filmación, para la jolgorio de esa noche, que Juan y mi esposo también habían calculado.
Mi esposo siempre quiso mostrarme, revelarme al mundo poniéndome en videos en la red de Internet y al parecer esto iba a ser posible esta noche. Sentí cierto miedo que me recorrió el cuerpo en en momento en que vi el equipo, las cámaras, etc., pero la voz tranquilizadora de Juan me aseguró que mi identidad no se daría a conocer porque iba a tener la cara tapada con una venda. Este miedo se debe a que soy un mujer de negocios de una gran empresa y me perjudicaría mucho si se llegaba a saber que yo era la mujer deseada por unos muchachos que me habían cogido, y no sería bueno para mi carrera.
Tomé otro sorbo del trago –para que se me quitaran los nervios- y Juan me ayudó a quitarme la ropa. Ya estaba completamente desnuda cuando me colocó la venda. Estaba bajo su completo control, podía hacer conmigo lo que quisiera, y me condujo hasta el sofá. Me dijo que me arrodillara sobre el mueble en posición invertida, mirando hacia atrás y con las tetas puestas sobre el espaldar. Luego me colocaron las esposas, algo que me impediría levantarme. Yo no podía hacer nada, y eso me gustaba porque ahora si podría ser la perfecta puta esa noche.
Oí cuando tocaron a la puerta y el ruido de varias personas que entraban. A los pocos minutos varias manos comenzaron a acariciar mi piel, a tocarla, y a separarme las nalgas para abrirme el culo. Sentí el aliento caliente de alguien que estaba pegado a mi culo justo antes de que una lengua se enterrara dentro de mi cuca. Comencé a retorcerme y mis gemidos fueron rápidamente apagados por un huevo duro que se me metió en la boca. Sentí la larga vara que se metía y salía de mi mojada cuca. Mis pezones los estaban apretando en forma áspera, lo cual hizo que mi cuca se me mojara mas todavía. Me moría porque me lo metieran!! Luego sentí un dedo grande que me lubricaba el culo con un aceite. Luego me metieron un dildo lentamente.
Me encanta que me metan cosas por el culo y este enorme juguete me llenaba y llegaba hasta lo mas profundo. Las cosas comenzaron a suceder muy rápidamente: me monté sobre uno de los tipos y agarré su largo miembro parado para colocarlo sobre mi raja mientras le mamaba el huevo a los otros que se me acercaban. Me sacaron el dildo del culo y alguien me lo metió dentro de la boca y me dijo que lo limpiara. Actué obedientemente. Oí que alguien hizo un comentario de que mi culo ya estaba bien abierto y ensanchado, listo para que me lo usaran. Sentí dos manos sobre mis hombros y el aliento de alguien respirando sobre mi cuello cuando uno de los tipos me penetró por detrás. Ahora tenía un huevo dentro de la cuca, otro dentro del culo, y otro en la boca. Estaba perdida con tanta lujuria. El sudor y olor de unos hombres excitados sobre mi era demasiado. Me sentí como que flotaba cuando uno de mis primeros orgasmos me comenzó a llegare.
Mi clítoris era restregado con fuerza contra el hueso pélvico de uno de los tipos que me montaba, a un ritmo perfecto de metidas y sacadas. Los jugos ya salían, chorreaban fuera de la cuca y yo gemía cada vez que me empujaban la verga. Uno de los tipos a quien le mamaba el huevo comenzó a dispararme leche. Me lo sacó de la boca y disparó toda su carga sobre mi cara. Hubiera querido ver aquello pero la venda boqueaba mi visión. Sentí un chorro bajando por mi barbilla, y supongo que la cámara captó esto para que mi esposo lo viera y disfrutara después. Me encanta actuar frente a la cámara con estos desconocidos. Sin saber quienes eran, o como eran me excitaba muchísimo. Quería que usaran todos mi huecos como depósito para echar todas sus leches. No quería que terminara tanta pasión, ímpetu y ardor. Los tipos aparentemente comenzaron a rotar sus huevos pasándolos de mi culo a la boca para que probara sus sabores ¡a culo!! No me importó, esto es lo que hace una buena puta: mamar huevo sin importarle en donde lo han estado metiendo. Todo lo que deseaba era tragarme su leche. Los tipos aceleraron el paso y el ritmo, y pude sentir que el cuerpo del que me tenía por detrás se puso tenso en el momento de dispararme su carga de semen dentro del culo.
Justo después de eso el tipo que me lo tenía metido dentro de la cuca vació también su carga. La morbosa sensación del semen saliéndome por todos los huecos me puso al borde de un tremendo orgasmo sin que nadie me lo tuviera adentro. Nunca me habían echado semen dentro del culo y ahora estaba vaciándole todo lo que le quedaba al tipo debajo de mi. Mis piernas estaban débiles y me bajé del tipo que concluía su acabada. Todavía me tenían la venda puesta.
Hace unos momentos yo era una puta deseosa de leche pero ahora que estaba sin la máscara y de repente me sentí tímida y avergonzada, cuando vi las luces de las cámaras justo delante de mi, sobre mi cara. De repente me di cuenta que las cámaras todavía estaban rodando y los tipos todos en fila esperando seguir con el espectáculo y terminarme de echar todo el semen sobre mi fisonomía. No pude hacer nada, sino continuar con mi papel de puta y les dije que me echaran el semen en la boca para tragármelo. Se pusieron a actuar frente a la cámara uno por uno y vaciaron un pegajoso rocío de leche sobre mi cara. Ahora los tipos que habían guardado todo el semen para mi, me echaban constantemente un chorro cada uno dentro de la boca y en la cara. Perdí la cuenta de cuantas echadas me cayeron. Intenté lamérmelo cuando las gotas y chorros me caían en los labios, pero era demasiado para mi.
Por fin los tipos se cansaron y cuando miré alrededor del cuarto, vi que la televisión había sido instalada para monitorear. Se podía ver mi cara en la pantalla, y casi no me reconocía yo misma: Parecía una pobre puta violada por unos tipos. Poco a poco me di cuenta que la televisión estaba conectada en vivo a un sitio de Internet y toda mi sesión estaba siendo transmitida por la red.
Todavía estaba al aire, en vivo y en directo, y sin la venda todo el mundo me reconocería, sabrían que la mujer era yo. Juan apagó las cámaras y me quitó las esposas. Estaba mareada, no sabía si estaba enojada o excitada por la transmisión en vivo hasta que vi a mi esposito entrar a la habitación con una gran sonrisa en su cara. Me dijo que lucí increíble, todo se filmó perfecto y le dijo lo mismo a todos los jóvenes. Les di las gracias y me fui a asear. Todos mis huecos, la cuca, el culo, la boca, los sentía lastimados, como magullados, pero se sentía maravilloso. Tanto que ya estaba pensando en otro momento para hacer lo mismo.
FIN
Traducido por Marcos Urbina
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CUENTO ORIGINALE IN INGLÉS:
Internet Cum Slut
I met Jim on an adult internet site that specialized in more kinky kinds of sexual activity. My husband and I always had an interest in me getting fucked by a stranger and we both are in to using handcuffs and blindfolds and I really loved getting fucked in the ass. So with all those interests known to Jim, he arranged for me to be the center of attention at a hotel room party for a group of young men. I have been married for years and have a grown son of my own so you can imagine my hesitancy at being used by a bunch of young guys. I thought they would want a young woman. But Jim assured me that these guys would love being with a beautiful, hot MILF like me.
When the appointed evening came I was very excited. I could hardly keep my fingers from trembling as I closely shaved my pussy hair and polished my nails. I wanted to be a star performer for these young studs.
My husband dropped me off at the hotel and I went into the bar as we had arranged. Jim bought me a few drinks to loosen me up. My pussy was beginning to drip as I looked around the bar trying to visualize if any of these men here
would soon be fucking me.
We went up to a room. It was a large suite with a leather couch and huge bed. The lighting was low and I noticed a set of handcuffs on the couch, along with a blindfold. The only thing I didn't see right away was the camera equipment. This
was an added feature to the evening's activities that Jim and my husband had decided on. My husband always wanted to show me off to the world on the internet and apparently this was going to happen tonight. I felt a mild panic flow over
my body when I saw the equipment, but Jim's soothing voice reassured me that my identity would not be known because of the blindfold. After all, I am a high level corporate business woman and if it were known that I was a willing slut in a gang bang it would not do my career any good.
I sipped another drink as Jim helped me out of my clothes. I was completely naked as he slipped the blindfold on me. I was in his complete control as he led me to the couch. I was told to get on my knees and face backwards on the couch with my chest draped over the back of the couch. I was then handcuffed to something that would not let me up. I was completely helpless and I loved it. I
could be a perfect whore this way. I heard a knock on the door and the sounds of several people enter the room. It was not long before several pairs of hands began caressing my skin and pulling my ass cheeks apart. I felt someone's hot breath against my ass just before a tongue buried itself in my pussy. I began to squirm but my groans were quickly muzzled by a stiff dick shoved in my mouth. I could feel the large vein on it as it stroked in and out of my wet mouth. My
nipples were being roughly squeezed which caused my pussy to get even wetter. I was dying for it to be filled. I felt a large finger lube my ass up with oil. Then a butt plug was slowly inserted in it. I love ass play and this huge toy
filled me up.
Things quickly escalated. I straddled one guy and eased his large erection into my slit while continuing to suck the ones that were offered to me. The butt plug was removed and someone shoved it in my mouth and told me to clean it off. I did
so obediently.
Someone made the comment that my ass was stretched out now and ready to be used. I felt two hands on my shoulders and hot breath on my neck as one of the guys entered my ass from behind. I now had a dick in my pussy, ass, and mouth. I was in lust heaven. The sweat and aroma from a roomful of horny men and me was almost too much. I felt light headed as I began to feel the first of many orgasms build within me. My clit was roughly rubbing against the pelvic bone of
the guy I was riding and the tempo was perfect. The juices were flowing from me and I was grunting with every thrust. One of the men I was sucking began to squirt his cum. He pulled out of my mouth and shot his load all over my face. I
wished I could have seen it, but the blindfold blocked my view. I could feel a string of it dripping off of my chin. I hoped the camera caught all the action so my husband would enjoy it. I loved performing for the camera and the
strangers in the room. Not knowing who they were, or what they looked like was a huge turn on to me. I wanted them to use all my holes as a cum dump. I didn't want this passion to end.
The guys apparently started a rotation from my ass to my mouth, based on the taste of their dicks. I didn't care. This is what a good slut does, suck dick no
matter where it has been. All I wanted was to be fed their cum. The guys speeded up the tempo and I could feel the body behind me tense up as he shot a load in my ass. Right after that the guy in my pussy blew his load too. The nasty
sensation of having cum dripping out all of my holes pushed me over the edge with a massive orgasm of my own. I never had a gushing O until now and I drenched the guy underneath me. My legs were weak and I climbed off of the guy I
had just cum on.
I was still handcuffed as someone pulled off my blindfold. A few moments ago I was a wanton cum slut but now that I was unmasked, I suddenly felt very timid and shy. And I saw the lights and cameras set up right in front of my face. I
suddenly realized that the cameras were still rolling and the guys were all lined up to finish the show by shooting their loads on my face. I could do nothing but continue the role of slut so I told them to feed me their cum.
They played for the camera as one by one each dumped a sticky spray of jism on my face. I now had a steady stream of cum being shot into my mouth and face from the guys who had been saving up their cum for me. I lost count of how many
blasts I took to the face. I tried to lick it off as it dripped past my lips, but there was too much. I never have seen a bukkake movie before, but apparently this was what it is like.
Finally, all the guys were exhausted. As I looked around the room I could see the TV had been hooked up as a monitor. I could see my face on the screen, and I almost didn't recognize me. I looked like a crackwhore who had been gang raped.
I slowly realized that the TV was a live feed to an internet site and my entire session had been broadcast. And I was still on the air, without my mask. Everyone viewing would know who I was.
Jim turned the cameras off and uncuffed me. I was dizzy. I didn't know if I was angry or elated about the broadcast until I saw my hubby enter the room with a huge smile on his face. He told me I was incredible. And all the guys said the
same thing. I thanked them and went to clean up. All my holes were sore and it felt wonderful. I was already thinking about doing this again.
END