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Categoría: Maduras

Las gimenez (2)

Para los que no hayan leído LAS GIMENEZ ( 1 ) , les sugiero leerlo para entender como llegamos hasta aquí y para todos los demás, muchas gracias por sus email y aquí va la segunda parte.



 



Camila me dijo: " No te preocupes, esto lo arreglo yo, vos acomodáte rápido la ropa" y salió de la habitación.



La voz que habíamos escuchado por la ventana, era la de mi suegra Cecilia ( Jiménez, obviamente ) de la cual, hasta ahora no les hablé. Cecilia era una mujer muy atractiva, morocha también, que a fuerza de mucho ejercicio, mantenía su cuerpo a los 51 años en condiciones que mas de una de 30 la envidiaría. Si bien no era una mujer exuberante, su aspecto fino y elegante, generaba las miradas de muchos hombres, incluidos varios amigos mios que nunca desaprovechaban la oportunidad de ser atentos y amables con ella, siempre con la ilusión de tener la oportunidad de cogérsela en algún momento.



Diez minutos después yo seguía en el dormitorio, sin saber como actuar, cuando volvió Camila y desde la puerta, me preguntó:



Serías capaz de cogerte a tu suegra ¿? "



" Que ¿?? Si, pero…no entiendo nada…



" Ok, entonces esta arreglado" y desapareció nuevamente.



Cogerme a mi suegra ¿? Pensaba yo..de que habla esta mina ¿? Que estará armando ¿? Y luego de escasos 5 minutos, entró mi suegra en el cuarto.



Asi que el señorito le gusta andar cogiendo con señoras maduras ¿?



Mmmm..bueno…ehhh..no se que fue lo que te dijo Camila..



Me dijo que tenes una muy buena pija y que sabes usarla.



Pero…



Pero que ¿? Tiene que venir mi hermana de Boston, para que yo me entere que vos sos bueno cogiendo ¿? Ehh ¿? ( mientras se sentaba al borde de la cama y me apoyaba la mano sobre mi pene ) continuó diciendo: " Por que nunca me propusiste nada ¿?



Pero, CECI, sos mi suegra…como te iba a propon…



Y eso que ¿? Soy una mujer…y me encanta la pija dura de un pendejo joven. Siempre noté como tus amigos me miran con ganas y sin embargo, parece que a vos, nunca te llamé la atención.



Si, me gustas mucho, pero nunca pensé que…



No pienses, bebé, conmigo no pienses…actuá directamente que no te voy rechazar. Aparte si para mi hija sos bueno, y sé que lo sos, para mi también debes ser bueno…claro que yo tengo un poquito mas de experiencia que mi nena, asi que..tendrás que demostrarme que tan bueno sos. Este no es el lugar, ni el momento, pero busca una excusa para a mi hija mañana y cenamos juntos. Mañana te llamo al celular y arreglamos. Y salió del cuarto, dejándome totalmente sorprendido.



Al día siguiente, me llamó y me propuso encontrarnos en restaurant alejado, pequeño pero muy acogedor, que yo no conocía, pero a juzgar por los comentarios y atenciones que recibía de parte del maitre y los mozos ( que la llamaban por su nombre), ella si conocía bastante bien. Me atreví a preguntar y me dijo:



Todos tenemos algún secreto importante. Este restaurant es mi secreto. Este es el lugar donde me siento segura y donde nadie me molesta, porque soy la dueña.



Pero CECI..en tantos años, como nunca supe que tuvieras un negocio y….



Te dije que todos tenemos algún secreto… aquí abajo esta el restaurant y arriba esta mi departamento, del cual nadie sabe, excepto claro, algunos muchachos jóvenes y no tan jóvenes con quien he querido disfrutar de un rato de sexo.



Pero …y Sergio ¿? ( mi suegro ) Nunca sospechó de nada ¿?



Nene, tu suegro hace años que no me pone un dedo encima. Fui enteramente fiel durante mucho tiempo, pero desde que no pasa nada…abandoné esa costumbre. Y como aún me siento una mujer deseable, algo tenía que buscar para bajar mi calentura y aquí esta…mi secretito ¡!!



Esa noche Cecilia, estaba con un conjunto de pollera y saco color beige, con una blusa blanca que permitía ver claramente el conjunto de lencería blanco con puntillas que llevaba debajo. Yo no podía creer lo que estaba sucediendo, porque a pesar de haber contemplado en varias oportunidades el cuerpo de mi suegra, jamás se me hubiera ocurrido que ella tenía armada toda esa estrategia para gozar del sexo.



Terminada la cena con champagne, subimos a su departamento y me dijo que me sentara en un sillón enorme de cuerpo. Una vez alli, puso música suave y se sacó el saco y levantándose la pollera hasta la cintura, se sentó de frente sobre mi. Me abrazó y me besó suavemente al principio y apasionadamente después, mientras no dejaba de refregar su cola y su sexo sobre mi bulto que para ese momento ya estaba bastante duro. Le ayudé a quitarse la blusa y el corpiño, mientras seguía besándola. Al ver sus tetas al descubierto, mi pene se endureció mas y mucho más aún, cuando las atrapé entre mis manos y comencé a besárselas. Tenía unas tetas suaves y muy bien conservadas, coronadas con unos pezones rosados, que invitaban a ser chupados y eso fue lo que hice, casi con desesperación. Para esto, mi pene estaba que rogaba por salir y meterse directamente en esa concha que lo estaba apoyando. Me besó en la boca nuevamente y desde alli, empezó a bajar por mi cuerpo, abriéndome la camisa y besando mis pechos y mi abdomen. Mientras seguía bajando, me abrió los pantalones y los corría hacia los pies. Besó y pasó su lengua por mi vello púbico mientras mi verga tiesa le golpeaba en la mandíbula, hasta que por fin, liberó al prisionero de su celda calzoncillo y mi pene se mostró erguido, orgulloso y dispuesto a complacer a mi suegrita, que no tardó en admirarlo y decirme que, cuando menos de aspecto, parecía robusto y esperaba que lo fuera en acción también.



Quedáte tranquila, que no te va a defraudar ¡! Le dije.



Arrodillada entre mis piernas, fue pasando su lengua desde la cabeza hasta la base y la imagen de mi pija parada tapando parte del rostro y pasando la frente de nada menos que mi suegra, me exitaba aún mas. Luego pasó su lengua al revés, desde la base hacia arriba, un par de veces, hasta que se metió lentamente mi pene es su boca madura, haciéndome sentir ese calor excitante que solo una boca experta puede dar. De hecho, debo confesar que comparé quien chupaba mejor la pija, si ella, su hermana Camila o su hija ( mi esposa ). Apoyé mis manos sobre su cabeza y empujaba hacia abajo, tratando de que mi verga entrara absolutamente toda en esa boca que me estaba haciendo delirar de placer. Nuevamente, la imagen de su nariz, incrustada entre mi vello púbico, me hacia calentar mas y mas.



Me pidió que me sentara en el piso con la cabeza sobre el sillón y una vez así, se arrodilló sobre el sillón, con las piernas abiertas alrededor de mi cabeza, para que pudiera chuparle la concha. Lo hice con suavidad primero, lamiendo sus labios vaginales y su clítoris, pero la situación me tenía demasiado caliente, así que no tardé mucho en atraparla con mis brazos alrededor de sus piernas, para hacerla sentar sobre mi cara, mientras le incrustaba mi lengua lo mas hondo que podía es su canal vaginal. Dicen ( algunas mujeres que he conocido ) que soy muy bueno en esta practica, con lo cual, me he esforzado por demostrarle en esa chupada todo lo que mi lengua sabe hacer dentro un coño…recorrí sus paredes internas, presioné la pared que separa su vagina de su ano y otras probadas cosas que sé que generan gran exitación… y confirmaba por los gemidos, cada vez mas fuertes, que emitía mi suegra, lo que me decía que el orgasmo estaba cada vez mas cerca. Un ahhhhhhhh ¡!!! de mi suegra, muy extenso y los jugos que inmediatamente inundaron mi boca, me indicaron que había acabado, con lo cual, ya podíamos cambiar de posición, para que probara mi pene en otro agujero que no fuera su boca. Volví al sillón, y la coloqué encima mio, tal como ella se había puesto mientras yo tenía aún ropa. Dirigí mi miembro a su vagina y tomándola de la cintura, comencé a bajarla. No hizo falta bajar de a poco, porque entre su exitación y mi saliva, su concha estaba suficientemente lubricada. Exclamó nuevamente un ahhhhhh…esta vez mas placentero aún , cuando toda mi verga estuvo dentro suyo. Fue ella, quien dirigió los movimientos, ya que estaba encima mio. Primero subia y bajaba por mi pene, luego me cabalgó, como potro indomable, saltando sobre mi, clavándose mi estaca en cada caída y finalmente se incorporó, quedando con todo su peso con mi pene adentro, moviéndose en círculos. Mientras tanto yo, la agarraba de sus nalgas acompañando los movimientos y no dejaba de chupar sus tetas.



Mojando mis dedos en los jugos que producían nuestros sexos, deslicé suavemente mi mano derecha hacia su ano y comencé a presionar sobre su culo, viendo que tanta resistencia oponía. Tan pronto sintió el dedo invasor sobre la zona, comenzó a pujar y contraer el ano, buscando dilatarse ella misma, lo cual me daba una clara idea de la experiencia que tenía mi suegrita.



Una de esas veces que pujó, aproveché para insertarle la punta de mi dedo en su anito que en cuanto contrajo nuevamente, se devoró literalmente todo mi dedo. Ella seguía pujando y contrayendo, mientras cada vez decía mas fuerte: " Cogéme así…cogéme así…que me volvés loca…" Viendo que con sus movimientos, en ese culo entraría lo que me propusiera, comencé a insertar otro dedo y con ambos, jugar en ese orificio hasta lograr la dilatación suficiente como para meter mi pene. En el momento en que el tercer dedo entró, fue cuando le vino su segundo orgasmo, llenando la sala de alaridos y gritos de pasión desenfrenada. – " SACAME LOS DEDOS Y METEME TU PIJA EN EL ORTO AHORA…YA, LA QUIERO SENTIR DESTROZANDOME EL CULO…REVOLVIENDOME LAS TRIPAS YA…POR FAVOOOORRRR ¡!!! " Sostuve mi estaca erecta, mientras ella se levantaba para cambiar de pene de agujero. Con sus manos, sostuvo sus nalgas abiertas, para una vez insertada, dejarse caer sobre mi pija que se clavó en lo mas profundo de sus intestinos. Me cabalgó en ese posición con mas frenesí y desesperación que antes, pero esta vez refregaba su clítoris sobre mi pubis, mientras mi verga entraba y salía de su culo. En esa posición estuvimos cogiendo por unos minutos hasta que escuché la frase que hizo que ya no pudiera contener mi eyaculación: " SIIII...QUIERO SENTIR TODA TU LECHE LLENDOME LOS INTESTINOS…" y no aguanté mas…



Tomándola fuerte de su cintura me clavé tan hondo como pude, descargando todo el contenido de mis huevos en su culo…



Fueron 5, 6 o mas estallidos que produjeron también su tercer orgasmo, mientras cumplía con su pedido de llenarle los intestinos….



Después de calmarse, me besó profundamente en la boca y se retiró de encima mio, para sentarse a mi lado y decirme…



Esto es una cogida ¡!!! No sabes lo bien que me hiciste sentir…sos un potro… no sabes como envidio a mi hija ¡!!!



Envidia ¿? Que ¿? Ahora que conozco tu secreto, me vas a dejar de coger ¿?



Ni en pedo ¡!!! Me contestó



Ahhh ¡!! Me había asustado ¡!! Y ahora decíme …que fue lo que te dijo Camila ayer ¿?



Que no fuera pelotuda y en lugar de hacer quilombo, aprovechara que teníamos un buen cogedor en la familia, en beneficio de todas….



Todas ¿? Quienes ¿?



LAS GIMENEZ…



Jajaja…eso quiere decir que podríamos arreglar un trío con ella ¿?



Camila ¿?.. esta esperándonos en el dormitorio….o creías que se lo iba a perder ¿???



 



Continuará……..



Comentarios, sugerencias o lo que venga


Datos del Relato
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1 comentarios. Página 1 de 1
Jose
invitado-Jose 04-05-2017 06:03:52

Muy excitante-

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