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LAS COMPAÑERAS DE TRABAJO SON VERDADERAS PUTAS

"Mi nombre es José, tengo 41 años, pero no los aparento, no soy nada especial, bajito, más bien ancho, y me atraen mucho más las mujeres mayores que yo que las jovencitas"

 

Trabajo en un departamento de radiología de una pequeña clínica, rodeado de mujeres, ya que soy el único hombre que trabaja en la empresa. La clínica la compone todo un edificio, donde los pisos superiores son viviendas para algunos de los empleados que vienen para prácticas.

Era una tarde de sábado, donde solo estábamos de guardia 3 de nosotros, dos chicas que vivían juntas en el tercer piso. Isabel de 22 años, canija, con unos pechos pequeños, rubia de melena larga, pero con un culo impresionante, y más bajita que yo y Elena de 24 años, más alta, de pelo negro y muy rizado, más grande y con unas tetas mucho más grande. 😂

Todo eso me lo tenía que imaginar ya que casi siempre las veía vestida con el pijama verde y nada sexy de la clínica.

Esa mañana no había nada de trabajo por lo que nos pasamos la mañana charlando los tres, a la hora de comer me invitaron a comer con ellas en su piso, así no tenía que desplazarme hasta mi casa, ya que yo era el único que vivía en una vivienda propia.

Isabel subió antes y al momento nos llamó para que subiéramos. Una verdadera sorpresa, Isabel no llevaba el pijama, se había puesto un pantalón de gimnasia y una pequeña camiseta que marcaban sus pequeños pezones debajo, su culo estaba partido por su pequeño tanguita, tenía unas nalgas grandes, pero preciosas, no era ancha de cadera, lo que no tenía de tetas lo tenía de culo, y ese movimiento de nalgas al andar, podía levantar un pito antes de decir amén.😊

Elena se perdió en una de las habitaciones y volvió al rato, lo mismo, unos calzones anchos y casi transparente de hacer footing, y una camiseta apretada a su cuerpo que ahora si dejaban ver en todo su esplendor por lo menos una talla 120 de pecho, sin sujetador y con unos pezones duros y bien altos, la verdad es que en jovencitas los pezones quedaban mucho más arriba de lo que estaba acostumbrado a ver en mujeres mayores.

Yo no sabía dónde mirar

Sentado en un sofá, aunque no podía quitar ojo a Elena, que estaba mucho más provocativa que Isabel, los pequeños calzones dejaban ver parte de su pubis cuando, ella se movía ya que no llevaba bragas, y la redecilla que llevan dentro la llevaba metida entre los labios. 😜

Ante toda esta visión y el descaro y las risas de ellas, mi polla no tardó en ponerse en posición de guardia, ósea que me empalme sin quererlo, y claro está el pijama no dejaba duda alguna, Isabel se sentó a mi lado y sin decir nada colocó su mano sobre mi polla, y con una risita me dijo que antes de comer se iban a comer el postre.

Y dicho y hecho, desabrochó el cordón que sujeta el pantalón, metió su mano buscó mi polla la sacó y se agachó después de recogerse el pelo con la mano, mi polla desapareció en su boca, una boca estrecha, pero chupaba con maestría.😒

Elena parada delante de mí, sonreía y se tocaba con sus dedos por las ingles, terminó por apartarse los calzones y dejarme ver un pequeño triangulo de pubis bien rasurado, de vello negro y rizado, que resaltaba en su piel tan blanca, toco en la cabeza a Isabel y sin soltarse los calzones colocó sus rodillas a cada lado de mi cuerpo y con la ayuda de Isabel que sujetaba mi polla se sentó encima de mí, con algún que otro trabajo, y hasta que no hubo subido y bajado varias veces no empezó a moverse con más rapidez.

Su coño estaba estrecho y caliente y no tardó en lubricarse, Isabel de mientras se quitaba los pantalones, sin quitarse los botines que llevaba, yo no me atrevía a moverme y las dejaba hacer a ellas, cuando Isa se quitó los pantalones se colocó detrás de Elena y le subió la camiseta, las tetas de Elena quedaron ante mi vista, mucho más grande ahora que quedaban sueltas, unas aureolas pequeñas y unos pezones chiquititos. 😘

Isabel desde la parte de atrás de ella, las tocaba y pellizcaba, mientras Elena no dejaba de botar encima de mí, no gemía, solo una pequeña risita de vez en cuando y un pequeño Mmm…, cuando llegaba más adentro con mi polla, Isabel se subió encima del sofá de pie, y se colocó entre Elena y yo, mirándome.

Apartándose la tanga con la mano se acercó a mí, los bellos de Isa, eran rubios, largos y sin rizos, ella se pasó los dedos entre ellos y se acercó a mí, hasta dejar mi cara enterrada entre sus piernas, unos labios pequeños, y un clítoris pequeñito pero muy duro, todo en esta chica era pequeñito. 😃

Una pasada ya estaba bien mojada, y en cuanto mi lengua, mis labios y mis dientes empezaron a morder su clítoris empezó a jadear de una forma mucho más estruendosa que Elena que seguía a su ritmo, la risita de Elena se hizo mucho más fuerte dándome cuenta que acababa de correrse, diciéndole a su compañera que le tocaba.

Era el turno de su compañera

Elena se levantó e Isabel con una sonrisa en la cara, ocupó el lugar, mi polla estaba mojada del coño de Elena por lo que no le costó mucho metérsela hasta los huevos, Isabel mucho más estrecha, era una pasada, siendo más joven se notaba que estaba mucho más puesta en todo este arte.

No botaba, se movía haciendo pequeños círculos y refregaba todo su coño haciendo fuerza sobre mí. No tardó en empezar a convulsionarse y ella notó que yo también estaba a punto, se acercó a mí, sin parar de moverse y me dijo que no me corriera todavía, que dejara que ella terminara primero, así lo hice aguante lo suficiente para que ella acabara y luego de eso se levantó se colocó de rodillas delante mía dejándole sitio a Elena y volvió a meterse mi polla en la boca. 😁

Sabía cómo chupar la muy zorra y en varias mamadas, sentí como mis huevos se ponían duros, cuando sintió que me corría se apartó y le dijo a Elena, “te toca”, Elena se precipitó sobre mi polla con el tiempo justo de metérsela en la boca y recibir toda mi leche dentro de su boca mientras Isabel me pajeaba, cuando Elena se apartó, Isa volvió a chupar como queriendo sacar las últimas gotas que me quedaran dentro.

Cuando mi polla bajo un poco su dureza, Isa se apartó y me preguntó si ya no podría seguir con otro con un poco de pena, le contesté que la corrida había sido buena, Elena rió, aún estaba chupándose los restos de mi semen que le quedaban por los labios y barbilla a lo que Isa se acercó y empezó a meter su lengua dentro de su boca y a sobar las tetas de Elena. 😆

Tiró de ella hasta sentarla al filo del sofá a mi lado y se colocó de rodillas entre sus piernas, sin más hundió su cara en su coño y empezó a chupar con deleite, Elena se retorcía de placer, yo empecé a chupar sus tetas a la vez que Isa me empezó a pasar la mano por la polla, de vez en cuando soltaba el coño de Elena y me chupaba los huevos, me pasaba la lengua desde la entrada de mi culo hasta los huevos y eso funcionó, y vaya que si funcionó.

Estaba listo para el segundo tiempo

Al momento mi polla había cogido una dureza que hasta empezó a dolerme cuando ella me apretaba con su mano, Isabel sabía lo que hacía, se apartó y guió a Elena hasta colocarla a cuatro sobre el sofá de espalda a mí, cogió mi polla y me guio hasta el coño de Elena que se dejó penetrar, cogí las nalgas de Elena y las abría mientras clavaba mi polla cada vez con más fuerza. 😂

Pasaba de sus nalgas a sus tetas que colgaban delante, Isa se colocó detrás de mí se agachó y empezó a jugar con mi culo, pasaba su lengua por la entrada, hasta que de pronto sentí como uno de sus dedos se introducía por mi agujero, eso me puso a cien.

Follaba con fuerza a Elena que se retorcía de placer y llego a correrse en segundos, Isa se apartó y se colocó al lado de Elena en la misma posición y con sus manos se abrió las nalgas dejándome ver el agujero estriado de su ano, un agujerito estrecho y mucho más oscuro que toda su piel, aunque estaba bien morena, esa fue una invitación que no pude rechazar. 😎

Me coloqué detrás de ella y sin pensarlo apunté mi polla a la entrada de su culo, y apretando en la puerta el agujero cedió y mi capullo desapareció dentro de su culo, una pasada, estaba estrecha, caliente y sentía su esfínter apretar mi capullo.

Saqué y metí varias veces hasta ver como su agujero se quedaba abierto y palpitando y volví a meter sin sacar y apreté hasta tenerla hasta los huevos, Isa gemía, era una pasada ver como mi polla desaparecía en su culo, sus nalgas apretaban mi polla, y podía sentirla cuando se apretaban a mi piel.✔✔🙄

Empujó a Elena hasta que consiguió que se tendiera en el sofá y arqueo su cuerpo y dejó más aún si cabe su culo en pompa mientras empezó a chupar el coño de Elena sacando gemido y espasmos de su cuerpo.

En varios minutos sentí como ella misma empezaba a gemir con fuerza y culeaba, era señal que se estaba corriendo, la embestí con más fuerza hasta vaciarme por completo dentro de su culo, ella no dejó de moverse hasta que cayó rendida sobre el sofá y yo sobre ella.😆

Quedamos un rato así, los tres, luego nos fuimos duchando, comimos algo y volvimos al trabajo, desde entonces las guardias de los fines de semanas son nuestras.

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