Ya teniendo el Ama a sus pies a culo de muela ya con instintos lésbicos dejándose chupar el coño y a la vez mamando polla de sus clientes, el Ama tenía sus ingresos más que seguros, a las hijas de sus clientas como esclavas domésticas y a sus madres obligadas a estar pagándole para tener sexo con culo de muela, y todo para evitar que se diera a conocer su tendencia sexual, el Ama tenía ya un imperio y a las madres de sus perras domésticas tomadas por el cuello.

Las hijas de sus nuevas clientas empezaban su nueva vida como esclavas domésticas y se les hacía muy pesado, ya que al ser niñas de plástico no estaban acostumbradas a ese tipo de trabajo, sin embargo no tenían opción de escoger su nuevo destino, de pronto escucharon una voz conocida que les decían “A trabajar perras y mejoren ese desempeño, al ama no le agrada la mediocridad”, las perras levantaron ligeramente la mirada y era cerebro de pájaro; ellas no comprendían como su ex amiga había cambiado tanto; de ser dominante a ser ahora una simple marioneta manejada por alguien más y con tal facilidad.

Una vez más se escuchó “A trabajar dije”, y pongan más desempeño para realizar las diferentes tareas y no se apendejen simulando estar trabajando, las perras se separaron y después de 12 horas de arduo trabajo no veían el fin de sus tareas. Por fin al cumplirse 16 horas de trabajos domésticos se le ordenó ir a sus jaulas a descansar pero debían estar alertas por si se les requería. Las perras en pose de adoración a una diosa besaron los pies agradeciendo que su día había terminado, se fueron a sus jaulas y cayeron muertas de cansancio.

Las horas de sueño les pareció a las perras un suspiro cuando a las 6 am sonó de nuevo su alarma que les indicaba servir a su Ama otra vez y de buena gana, ahí comprendieron cuál era su nueva vida y se dieron cuenta que sus días de vida frívola y de ser chicas de plástico se habían evaporado para siempre, y que a partir de ese momento su vida sería de esclavas.

Se dieron prisa para estar listas para que a las 6:30 se preparase el desayuno de su Ama y la despertaran a las 7 am besándole los pies como el día anterior y después retomar la misma rutina de servicio que habían sufrido hacía apenas unas horas atrás. La cocinera se dirigió de inmediato a preparar el desayuno de su nueva dueña mientras que la otra le iba a lamer los pies para despertarla como ella solo se merece. Pasados unos minutos llegó el desayuno del Ama y mientras ella degustaba sus alimentos, una de ellas se dirigió a preparar el baño mientras la otra la abanicaba, el Ama dijo a su perra “Quiero que hagas venir a las perras que tienen como madres” les tengo tareas que deberán cumplir a la brevedad, la perra respondió “si su Majestad, apenas termine mis labores de abanicarla las llamaré para que se presenten de inmediato”.

Apenas terminó el desayuno, la perra se llevó los platos de su Ama para lavarlos y apurarse a llamar a sus perras madres. La pera llamó a sus casas y les dejo en claro que el Ama deseaba verlas y que debían presentarse a la brevedad. Las perras madres obedecieron y a los 20 minutos ya estaban ahí todas. Pocos minutos después de su arribo, vieron cómo se desenrollaba una alfombra roja, ellas comprendieron enseguida que se acercaba su Majestad y todas adoptaron pose de adoración, manteniendo silencio en espera de recibir las órdenes de su Ama.

Vamos a ver mis perras, a partir de hoy no solo serán mi manera más cómoda de ganar yo dinero al estar pagándole a culo de muela para que les chupe sus apestosos coños, sino que desde hoy se encargaran de conseguirme chicas con talento, ¿si entienden verdad perras?, ellas respondieron al unísonamente “ si Ama, entendemos".

El Ama les aclaró que no le importaba que tuvieran que hacer, pero que cada una para ese mismo día quería a sus pies a cinco chicas nuevas por cada una de ellas, las perras madres solo dijeron, no se preocupe majestad, aquí se las traeremos a las 6 de la tarde cuando usted llega de sus ocupaciones, dicho esto se agacharon a besar los pies de su Ama para así retirarse sin dar la espalda y cumplir sus órdenes.

Habiendo dado las ordenes a sus nuevas perras, el Ama se dirigió a su compañía y que precisamente su chofer era culo de muela. Las nuevas perras se dedicaron a sus labores domésticos procurando que estuvieran terminados al regreso de su Ama por la tarde, y así poder besarle los pies para darle la bienvenida para después traerle como las perritas que son las pantuflas en el hocico. Ya de regreso, su Majestad hizo llamar a cerebro de pájaro para que se encargase de empotrar a la pared a las nuevas reclutas una vez habiéndolas aleccionado de cuáles serían sus nuevas vidas. Una vez que cerebro de pájaro recibió sus órdenes, se retiró para alistar la mazmorra para la llegada de las reclutas nuevas.

En el siguiente capítulo sabremos qué pasa con las nuevas reclutadoras.

Continuará…