Hola me llamo Ángeles, soy de Bs As tengo 42 años, dos hijastros , un esposo, su nombre es Carlos, es 5 años mayor que yo, mido 1,65, peso 56 kg, mis pechos tienen 92 con unos retoques de cirugía, pero se ven muy lindos, bien levantados, mi cola y caderas miden 96 pero ha pasado por mucho gym y junto a mis piernas dan una armónica visión de mi cuerpo que con mi abdomen plano, ya les conté como poco a poco me fui convirtiendo en la puta de mi marido, sus hijos, ahora también era esclava sumisa, eso me gusta y excitaba mucho. Esa noche mi Amo Alex, quien es el hijo de mi marido, vino a mi habitación, y delante de mi marido dijo;

—Hola putita, levantate-

—Alex por favor esta tu padre-

—Quien es tu amo, papa o yo-

—Vos, pero...-

—Pero nada, levantate y quitate toda la ropa que traes puesta y te pones en cuatro patas al lado de la cama-

Yo mire a Carlos y el solo me miro y dijo:

—Amor vos aceptaste este juego, si lo deseas podes seguir con él y sino ya podes dejarlo-

—Es que me gusta, pero nunca estuvimos antes en una situación así-

—Te gusta?-

—Siii mucho-

Entonces, seguí el juego y no te preocupes por mí, porque esto también me caliento mucho-

—Ok, pero prometeme que cuando ya no quieras que juguemos me lo vas a decir-

—Prometido...y ya no hagas esperar más a tu Amo, que se va a enojar y a lo mejor te castiga-

Yo con la anuencia de mi marido me sentí más libre, me puse de pie al lado de mi cama y comencé a quitarme la ropa, quede totalmente desnuda, pero antes de ponerme en cuatro patas como quería mi Amo, le agradecí a mi marido con un gran beso y el aprovecho para tocar mis duros pechos. Ya en el suelo y en posición de perrito, mi Amo Alex me coloco una correa en el cuello y me llevo en cuatro patas al jardín del patio trasero, allí estaban esperando Martin y Alejandro, quienes al verme aplaudían, agradeciendo mi llegada, era verano y hacia bastante calor, Alex me ordeno que me recostarme en el pasto mientras ellos jugaban una partida de póker, para saber quién me cogería esa noche, pues yo era el trofeo y eso me encantaba. Ellos beberían y reían mucho, yo me quede dormida un momento y despertaron mojándome con chorros de agua helada que salía de una manguera, eso hizo que mi piel se erizase y mi pezones apuntaran al cielo entonces Martin dijo:

—Putita gane la partida, esta noche te vas a casa conmigo-

—Nooo a tu casa, no...-

Alex tomo unos broches del tendedero de ropas, se me acerco puso esas pinzas en mis pezones, el dolor era intenso, pero el placer mucho más aun y tirando con su mano la soga que estaba en mi cuello me acerco hacia él y me dijo

—Quien es tu Amo?-

—Vos-

—Y que tenés que hacer?-

—Lo que mi Amo me pida-

—Bien ahora te vas a subir al auto de Martin, vas a pasar la noche con él y vas a hacer lo que te ordene, está bien?-

—Sí, amo, pero vos le decís a Carlos que me fui?-

—Tranquila él sabe que sos putita y el bien cornudo, sos la mejor mujer que tuvo mi padre -

—Ok gracias amo, pero me permitiría ir a vestirme?-

El miro a Martin, mientras me acariciaba la espalda, cual si fuera su perrita y dijo

—Martin, la llevas desnuda o le pones algo? -

—La llevaría así en bolas, pero quiero pasar a tomar unas cervezas más, ordenale que se ponga un vestido o algo así que sea fácil de sacar, pero sin nada abajo...-

—Ok.

—Como me calienta tu mamita!!!-

—Ya escuchaste putita ponete algo liviano-

Entonces fui, me puse un vestido corto, muy juvenil y salimos a tomar unas copas le pedí a Martin que no fuéramos adonde frecuentan los amigos de mis hijos ya que no quería que me vieran como la puta que soy, el muchacho estuvo de acuerdo, al llegar un lugar bastante alejado de casa, Martin bajo del auto y corrió a abrir la puerta mía, un acto de caballero que me hizo sentir que estaría toda la noche en buenas manos, hacía mucho tiempo que alguien no tenía esos detalles conmigo, entonces le di las gracias con un gran beso y el respondió de la misma manera, al entrar al boliche solo habían 5 o 6 personas, lo que podía ser aburrido, pero había una mesa de pool y Martin me pidió que jugáramos mientras bebíamos unas cervezas, nos estábamos divirtiendo bastante y seguramente quienes me veían desde atrás también ya que en cada intento por darle con el taco de pool a alguna bola, mi vestido se levantaba y dejaba ver mi desnudes, con el correr de las horas tan solo habíamos quedado otra pareja, los dos chicos que atendían la barra y nosotros, la pareja nos pidió jugar una partida y Martin acepto, pero el muchacho le pidió que yo fuera su pareja y su novia acompañaría a Martin en el juego, aceptamos, por lo que en cada tiro que me tocaba el tipo se ponía detrás mío y disimuladamente metía su mano en mi culito llegando a tocar hasta mis labios vaginales, Martin también manoseaba a la novia de este, pero se notaba que eran una pareja liberal por lo que la estábamos pasando muy bien, en lo mejor que nos la estábamos pasando con la excusa del juego de pool, se nos acercó uno de los Barman y dijo que tenían que cerrar, todos le pedimos que no, al unísono, pero yo abre puesto mi mejor cara de puta por el hombre me miro y dijo :

—Ok, una más pero es la última-

—Gracias, te lo vamos a agradecer-

—Te tomo la palabra-

Dijo el, yo ya con los roces y toques de Julián que es como se llamaba mi pareja de juego estaba ya muy caliente, en un momento me tocaba hacer un tiro y para meter una bola en uno de los agujeros de la esquina y estaba muy difícil, Julián me dijo

—dejame a mí porque no vas a poder-

—Te apuesto cualquier cosa que a que si puedo-

—Ok. Si no entra me mostras una tetita-

—Dale pero si entra te doy un beso delante de tu novia-

—Noo mejor se lo das a ella porque es un poquito celosa-

—Ok-

El desafío no me asusto, es más tenía ganas de saber lo que se sentía besar a una mujer, el momento de juego había tomado otro sentido, como correspondía acerté mi tiro y me encamine a buscar mi premio, Valeria que es como se llamaba la chica, estaba tan nerviosa como yo, en principio solo fue un rose de labios, pero ella rodeo mi cabeza con sus brazos y me dio un largo y hermoso beso que yo seguí acompañando con mi lengua, después todo comenzó a pasar muy rápidamente, Valeria puso una de sus manos en mi pecho y la otra mano fue directo a mi desnudo culito, yo hice lo mismo solo que ella llevaba un jean puesto, los muchachos solo se dedicaban a mirarnos y nosotras no podíamos dejar de tocarnos y besarnos, en un momento Martin se me acerco y abrazándonos a las dos nos besó, Julián entonces hizo lo mismo, Valeria me ayudo a sentarme sobre la mesa de pool, mi vestido se abrió, entonces se fue directo a saborear mis partes íntimas, la verdad es que se sentía fantástico, la chica sabia como hacer gozar a otra mujer con su maravillosa lengua, yo estaba semi desnuda tirada en el paño de la mesa cuando se nos acercó uno de los chicos de la barra y dijo:

—Chicos el bar está cerrado, si quieren seguir van a tener, que hacerlo en otro lado o van a tener que pagar con algo -

Y mientras decía esto miraba directamente a mi conchita depilada que brillaba por los besos que estaba recibiendo de parte de Valeria, Martin dijo

—Por mí no hay problema, si quieren pueden sumarse, mi novia es muy gauchita (expresión esta, de que alguien es muy servicial y puede hacer cualquier cosa por el otro)-

—Con Vale, tampoco ponemos objeción, no amor?

—Por mi hace lo que vos quieras- dijo Valeria en clara evidencia que esta entregada al sexo

—Bien, sigan que ahora venimos-

El muchacho se fue y nosotros seguimos ya mas desinhibidos, Martin me quito el vestido y me ofreció a Julián diciéndole-

—Amigo es toda tuya cogela que le gusta-

Este saco tremendo pene y entendí el porqué de los celos de Valeria, esa era una hermosa y venuda verga que al verla me lleno de jugos mi vagina, mientras yo mamaba esa tranca, Martin se dedicaba a sacarle la ropa a Valeria, en un momento llegaron los chicos del bar y uno de ellos se metió en todo su lindo pene en mi vagina, era yo toda una puta participando de una orgia y me encantaba, me tenían tirada de espaldas desnuda sobre la mesa de pool, Valeria se acercó su boca a la verga de su novio y juntas nos turnábamos para mamársela, así nos fuimos besando cada vez más intensamente, nuestras lenguas se enredaban con los restos de semen que salían del pene de su novio, las dos estábamos desnudas, ella comenzó a tocar mis pechos que se sacudían por el vaivén por manera en que el desconocido me estaba cogiendo, Valeria dejo de besar la vergota, fue bajando con sus labios bien mojado y comenzó a mojar con su hábil lengua mis pechos, luego siguió con mi abdomen, era fantástico, Martin se salió de su vagina y la dejo libre, ella llego con su boca a la entrada de mi conchita dejándome la suya para que yo hiciera lo mismo, el muchacho que me penetraba saco su verga de mi rajita y se la ofreció, ella se la mamaba con locura y yo me quite la bella verga de Julián de mi boca y comencé entonces a saborear los labios vaginales de Vale, ella se retorcía de placer, la verdad era que los muchacho se fueron alejando y se dedicaron a observar nuestro encuentro lésbico, que a estas alturas de las circunstancias era hermoso, yo sentía en mi interior cosas que nunca había sentido, ella con su lengua le dedico un ratito a mi agujerito anal, y fue metiendo lentamente primero un dedo y luego otro más, yo comencé a gemir como loca y dije:

—Por favor denme verga-

—Martin se me acerco y dijo:

—Querés verga putita-

—Siii por favor-

—Te vamos a coger todos un poquito-

—Siii lo que quieran-

—Bueno invita a los muchachos para que te cojan-

—Siiii -

—Dale deciles-

—Chicos métanme sus vergas, por favor-

Dos de ellos me bajaron , me pidieron que ponga mis manos y mis pechos sobre la mesa, y fueron entrando uno a uno en mi vagina y lo hacían en turnos cortitos, entraba uno me daba un par de bombazos y salía para dejarle el lugar a otro mientras que yo me entretenía chupando la argollita de Vale que seguía tirada en la mesa con todo su sexo a mi disposición, sentí en un momento que untaban algo en mi agujero anal, era manteca que habían traído de la cocina del bar, entonces supe que se venía algo lindo ya que me gusta que me rompan el orto, pero cuando escuche esa vos que dijo:

—Vale, amor me dejas que le haga la cola a esta puta?-

—Si amor, rompele bien el culito se lo merece por puta, pero despacito, tratala bien que me está haciendo gozar como nunca-

Yo sabía que esa tremenda verga en mi interior iba a sentirse muy lindo, pero primero debía penetrar mi agujerito, la tranca lentamente se fue abriendo paso, cuando sentí que la cabezota del pene había pasado le grite.

—Ya tengo esa verga hermosa dentro mío, soy toda tuya Julián cogeme...-

—Sos mía?

—Si soy tú puta...-

—Gritalo--

—SOY TU PUTA JULIÁN-

—Así me gusta... Hoy te llevo conmigo-

—Lo que pidas, Julián, lo que vos me pidas...-

El tipo bombeaba como loco adentro mío y pronto sentí los chorros de semen que inundaban mi interior, luego fue el turno de uno de los muchachos del bar que lleno mi vagina con su leche, Martin y el otro chico largaron lo suyo sobre las tetas y boca de Valeria. Al terminar la locura, Julián le ordeno a Valeria que se fuera con Martin, ya que él me llevaba a su casa, así me podía coger un poco más, así lo hicimos, al salir del bar Julián me dijo que le gustaría que me quedara a vivir en su casa y la verdad es que esa verga era para pensarlo...deseaba ser muy bien acogida por ese macho...