La primera vez que la ví fue en una misa de 9 días de fallecido un señor vecino del barrio. Toda la gente que estaba en la iglesia era conocida, ella llegó con la familia de una chica novia de Augusto, chico mayor que nosotros el de 20 años al igual que la novia y nuestro grupo de amigos entre los 14 y 16, yo tenía 15 años, el día de la misa fué a media semana, y el sábado al mediodía estando en la tienda tomando refrescos después de una chamusca de futbol, llegó ella con la pareja de novios a comprar unas coca colas. A media semana llegué nuevamente a la tienda a comprar y estaba nuevamente ella allí, buscando unas aspirinas para su tía, que era la madre de la novia de Augusto, como no habían me preguntó donde podría comprar, por lo que me ofrecí acompañarla a una farmacia cercana, ahí supe que estaba de vacaciones en la casa de su tía, y regresaría a su casa en las visperas de navidad, ya que vivía en el interior de la república, estábamos a finales de noviembre. A partir de ese día cuando nos juntábamos en la tienda ya nos saludabanos como amigos. El grupo de amigos comentaba que la chica estaba muy bonita, y la verdad era guapa, su mombre Victoria pero su familia le llamaba Vicky, temía 14 años, ni alta ni baja, de cabello negro liso, blanca, ojos marrones y de nariz chatía, boca chiquita de labios carnosos, senos chicos, pero de culo hermoso, piernas delgadas, y de una sonrisa dulce y a la vez inocentemente sensual y provocativa. Me dí a la tarea de rondar en bicicleta por la casa de su familia, pero sin resultados de verla, y era ocacionalmente en la tienda cuando llegaba con su prima. Pasaron los días y empezaron las tradicionales posadas, como chicos curiosos y adenás para poder ver chicas, las acompañabamos y al llegar a la casa que las recibía aprovechabamos para flirtear a las jovencitas, en una de esas la ví, platicamos con Augusto y me dijo que esperas para acompañarnos la chica está loca por vos, habla hasta por los codos que le gustas mucho, y además desde que vino, el jodido soy yo, pues no puedo estar solo con Jenny,(su novia), esa noche la besé y a partir de ese día nos veíamos a diario, en un bonito romance. Un 18 de diciembre eran como las séis de la tarde estaba ya un poco oscuro, y Augusto me dijo que iríamos a al parquecito, que aunque este lo cerraban a las cinco, el había conseguido una llave del candado del portón de la parte de atrás, en la arboleda donde el frecuentaba ir a coger con Jenny, pero desde la llegada de Vicky no habían podido, `por lo que me recomendó que la entretuviera lejos de ellos para que no se diera cuenta de lo que hacían, al entrar ellos se fueron hasta el fondo del parque y yo llevé a Vicky a uno de los extremos, ni nosotros podíamos verlos ni ellos a nosotros. Nos acomodamos en una de las bancas y empezamos a besarnos, para ella yo era su primer novio, ya teníamos una semana de estar juntos y en tres días partiria a su pueblo, sentía sus pechitos duros en mi pecho, los besos iban subiendo, le besé las mejillas y le mordisquié sus orejas y empeze a acariciar su cuello con mis labios húmedos, ella se pegaba más y me decía que sentía una sensación hermosa, empezé a tocar sus senos y ella al principio rechazó mi mano, seguí besandola e intente nuevamente, esta vez desabrochando sus botones, quedó con la blusa totalmente abierta y sobre el sostén mordisqueaba sus pezones, para luego desabrochar y metí un pezón a mi boca y empeze a lamer y a chupar, se pegaba más a mi, le gustaba y gemía del gusto, le besé y chupé los dos pechos, ella quizo hacerlo conmigo y me chupaba las tetillas, la pija la tenía al máximo, como estábamos sentados, la puse de pie y sintió mi bulto que le rosaba, se pegó más a mí y yo se lo restregaba, ella estaba temblando de la excitación, metí mi mano bajo se faldita, y acariciaba sus muslos, empezé a tocar sobre su calzón su rajita y sentí la humedad de sus bragas, le dije que se lo quitara, para poder acariciar su vulva de mejor manera, se lo quitó y le guardé en una de mis bolsas del pantalón, y empezé a tocar sus bellos finos y suaves, pasé mi dedó por su raja, ella se corrió hacía atrás, y yo la volví a atraer hacia mí, de nuevo pasé el dedo y ella pegandose a mi me dijo que con cuidado que no fuera a lastimarla, le restregaba suavemente y en círculos su clítoris ella gemía de placer, su humedad ya era bastante, me saqué la verga y le puse la punta en la panocha así parados como estábamos, yo incómodo por tener que agacharme, cuando ella sintió lo caliente de mi verga en su vagina, me dijo que no, que por favor no fuera a entrar que era virgen, sólo frotaba el glande en su clitorís, y a lo largo de su raja, ella me pedía que más rápido, estaba por venirse, la senté en la banca y abriendo al máximo sus piernas, metí mi cabeza y empezé a mamarle su chocha y su clítoris, en esa posición el clítoris quedaba saltado y era grande, empezó a temblar y moverse en círculos, arqueó su espalda, y en un asi, que delicia, que rico, ah, oh, mi amor, que me hiciste, siento todo nublado, oh. y se quedó inmovil con sus piernas temblorosas, la besé con pasión, la levanté de nuevo y poniendola de espaldas puso sus manos en el respaldo de la banca, la incliné hacia adelante hasta que su cabeza quedó en el mismo respaldo y así abierta de piernas, empezé nuevamente a frotar mi verga en todo su canal desde el culo hasta el clítoris, con facilidaad la pija se deslizaba en su raja, sentía que gotas de sus liquidos corrían en sus muslos su clítoris lo sentía como hinchadito, volví a acariciarlo y mi glande lo machucaba, empezó de nuevo a moverse en circulos, mi glande lo guié a su entradita, entraba y salía ella gozaba de sentirlo en su entrada yo estaba como loco, empujé duro y sentí cuando la penetré, su himen se rompió y mi verga como cuchillo caliente en mantequilla se abrió paso de un solo envión en su vagina estrecha, mis huevos chocaron con sus nalgas, y ella gritó, al fondo escuchamos una voz, era Jenny que preguntaba que pasaba, ella sollozando respondió, me asustótó una lagartija, un silencio la verga seguía enterrada en su vagina y lentamente entraba y salía, ella rígida y llorando de dolor me pedía que por favor saliera, pero no hacía nada por zafarse, su interior estaba apretado y caliente, aflojó su cuerpo y entraba y salía a lo sumo dos o tres pulgadas, me corrí fuera de su vagina llenandole de leche las nalgas y muslos, con un pañuelo sequé su vagina y mi pene, al llegar a casa aún llevaba su bragas en la bolsa del pantalón, y mi pañuelo manchado de sangre. Ni Jenny ni Augusto supieron lo ocurrido, la noche antes de partir Vicky, la llevé a casa, no había nadie, yo no quise salir con mi madre, ella regresaría al día siguiente y yo tenía ya planes de cogerla nuevamente, cuando le comentamos a Jenny que no iríamos al parque no dijo nada, al contrario lo tomó muy bién pensando que podría darse la grande a solas con Augusto, ya en casa y desnudos los dos, pude apreciar realmente lo bella que era Vicky, cuando ella vió mi verga al máximo, no daba crédito que esos 22 cms. le habían llegado al alma como ella misma dijo. y agregó: con Razón sentí que me partía en dos, es gruesa e inmensa, la enseñé a mamar y también le rompí su culito, pero sólo le metí la mitad, tragó semen y supo lo que era tener la chocha llena de leche, me atreví a acabar dentro de su cuca porque me dijo que de repente haciendo el amor le venía su período porque ya le tocaba. Durante dos vacaciones que llegó, volvimos a coger pero en esas vacaciones lo hacíamos de dos a tres veces diarias, para entonces era ya un señor culazo.