Relate sobre una experiencia anterior con mi ex novia. Como sabrán, me gustaba mucho abusar de ella. Muchas veces he escuchado de mujeres que me dicen que soy un tal de cual, pero la verdad, si, puede que lo sea, pero yo no le apunto una pistola o algo parecido en la cabeza para hacer lo que hago con ella, si algo se hace es con el consentimiento de alguien, somos responsables de las cosas que pasan, y a mi me gusta que pasen así, y estoy seguro de que a ella le gusto mucho todo aquello.
Una de aquellas veces recuerdo que vino de visita por mi casa, andábamos en todo aquello de novios, salíamos a comer, besos, abrazos y eso, todo normal y muy lindo, no lo voy a negar, ella sabia como quería el sexo, en el fondo, me decía, me gusta sentirme puta, me gusta que me lo hagas así. Así de salvaje, así de humillante, así de utilizada me gusta sentirme.
Fue así como uno de esos días me dijo “mi amor, el otro día que vimos esa peli, te acuerdas?, mientras me lo hacías en cuatro patas y veía la peli había en una escena una mujer con un collar de perro, y la hacían pasear por el patio como una perrita...” “yo quiero eso, te juro, me gustaría, aparte de todas las cosas humillantes que me puedes decir la que más me gusta es perra, porque es como que animal, como tu cualquier cosa”... yo sorprendido, apenas salido de la ducha y escuchando eso de mi niñita, linda ella con su carita de ángel y su cuerpecito pequeño pidiéndome que la trate como perra??.. no pude contenerme, me vestí y le dije que en ese momento salíamos a comprarle uno.
Así nos fuimos, jeje, pero lo que yo no sabia era que ella quería un collar de esos de los sex shop, de esos de putas, de esos finos destinados al sexo. Cuando me lo dijo yo le respondí “no no.. que va, si vamos a hacer algo, hagámoslo bien, que collar de puta fina, si lo que quiero es hacerte sentir como perra, pues que sea el collar de perra el que uses, me gustaría verte bien perra, y tratarte como tal, no como putita, sino como perra, perra puta!!”. Ella entre morbo y humillación me miro, me dijo que estaba bien. Así mientras paseábamos y veíamos cosas en los locales justo apareció uno de mascotas. Verle la cara era impresionante en ese momento, se puso tan nerviosa, se daba la vuelta con vergüenza y yo para humillarla mas la obligue a que sea ella quien se acerque y pregunte por los collares para animales. Lo hizo, se acerco y los miro todos, pregunto por algunos y le gusto uno en especial, de perrita. Yo me opuse, los mire bien y escogí uno grosero, una cadena, le dije que ese debía ser, con ese podía domarla. Era uno que la haría sentir como tal, que tirandolo la sofocaba, así me lo plantie, y así lo compramos.
Nos volvimos a casa y no dijo una palabra de regreso. Al llegar quería hacerse la desentendida, pero cuando vi sus intenciones de alargar el asunto en la cocina la tumbe al suelo de los hombros, la puse de rodillas frente a mi y me saque la verga delante suyo. La obligue a meterselo en la boca y lo mamo un rato, luego la puse en cuatro patas con la verga afuera al verla con jeans ajustados que demostraban su lindo culo grande me monte sobre ella como burra. Yo tan pesado para ella, la tome del cabello tirandolo y le dije que me llevara al cuarto. Al llegar ella se detuvo, me pregunto que quería hacerle, le respondí que vaya hasta la tele y ponga esa película que le gustaba, donde una chica era bañada en semen y orinada luego, que lo haga yo montándome sobre ella, le di una palmada en sus nalgas cual caballo y así lo hizo.
Antes de desmontarla le sacudí la cabeza con su pelo y me baje de la perra, le ordene que se desnudara y se quedara quieta, inmóvil, así lo hizo. Se desvistió lentamente y quedo como perrita, saque el collar de la bolsa y se lo coloque en el cuello, tirando de la cadena fuertemente. Me desvestí yo también y la volví a montar, tirando de la cadena ella entendió que debía avanzar y llevo sobre ella a cuatro patas por la habitación. Luego me coloque detrás de ella y empecé a lamerla por detrás, todo, desde su vagina hasta su ano, despacio, ella se retorcía, le gustaba mucho sentir mi lengua en su culo. Luego le di nalgadas, fuertes, tirando de la cadena, como yegua salvaje, domándola, ahorcándola. Se escuchaban los gemidos de la peli de fondo con una hembra culeada meada y bañada en blanco semen. Me pidió que la penetrara duramente, que la tratara como perra, así lo hice. Toda bañada en liquido ella gemía, y yo penetraba de lo lindo por detrás, tirando de la cadena y agarrandole las tetas por detrás, fui tirando tan fuerte como mis embestidas que ella termino pegada a estando yo por detrás, con la espalda arqueada y la cola en punta hacia mi verga. Obligándola a volver a cuatro patas se lo puse en su culo, mientras le bañaba el ojete con saliva, despacito se lo metí, hasta lograr estar bien dentro de ella, soltaba pequeños suspiros de placer, me decía que era lo que mas le gustaba, su ano, penetrado, me decía que a sus amigas les dolía, pero que a ella le gustaba mucho, pues era ser poseída tan bien y sentirse tan arrecha para hacerlo. Luego levantándome sin sacárselo de atrás le impuse andar hacia delante, tirando de la cadena y culeando por detrás de ella, mientras ella caminaba hacia la pared, al llegar puse su cara contra esta y tomándola del cabello la penetre duramente, mordía sus labios, ya casi gritaba con sus manos apoyadas en la pared para no golpearse contra ella.
Luego al ya no poder mas decidí parar, pues aun no quería correrme, quería maltratarla un poco mas, ella me dijo “hazme todo, todo lo que se te ocurra y quieras, este collar me excita, me pone horny, quiero que me humilles, por favor!!”. Casi corriéndome la recosté sobre la cama, colocándola boca arriba y yo detrás de su cabeza le dije que subiera sus piernas y las coloque a los lados de su cabeza, con sus rodillas pegadas a sus oreja, así quedo su culo expuesto, luego me coloque sobre su cara y la parte posterior de sus piernas y me senté sobre estas, dejándole mi culo sobre su boca, tome el control de la tele, algo largo, un poco grueso y lo metí dentro de un preservativo. Le ordene lamerme el culo mientras yo introducía mis dedos en el suyo, escupiéndole el culo para lubricarlo, una vez hecho le metí el control remoto de la tele en el culo, hasta la mitad, luego cada vez mas, ella se estremecía y soltaba gemidos fuertes, al escucharlos yo la aplastaba mas con mi ano en su cara, ella lamía desquiciada, se movía corriéndose en un orgasmo que hizo que me introduzca su lengua en mi culo, yo se lo metí mas al sentir su orgasmo y espere a que terminase. Luego me hice hacia atrás y vi su rostro excitado, mirándome perdidamente, me dijo “escúpeme, por favor, escúpeme en mi cara, humillame, quiero que me pegues, que me trates mal. Yo la mire, tome su hilo que usaba y se lo metí en la boca, luego empecé mi tarea de escupirla, le dije que la iba a dejar la cara repleta de saliva, luego la cachetie, algunas veces, la tome de un brazo y la puse en cuatro patitas, tirando de la cadena y su cabello la monte cuidando de que no se saliera el control remoto de su ano le ordene que me llevara al baño, que quería mearla.
Así me llevo, la senté en el suelo tratando de que al hacerlo se le metiera mas el consolador improvisado en su culo, tire su cabeza hacia atrás quedando al filo del retrete echada hacia atrás y me pare sobre ella, tuve que esperar a que se me bajara un poco la verga para poder mearla, pasado unos minutos lo hice, la orinaba de lo lindo. Ella aun con su calzón en la boca mirándome fijamente mientras la orinaba, también escupiéndola y gritándole zorra, no eres una puta, eres perra, las putas hasta por dinero, tu perra por que te gusta serlo. Al terminar con su hilo en empapado se lo saque de la boca, le dije que la mantuviera abierta y le escupí unas tres veces mas dentro de esta, como si fuera el retrete, tome el hilo y lo exprimí en su boca, cayeron unas gotitas y un chorrito de meado en su boquita, le ordene que se lo tragara, que pruebe mis líquidos.
Luego le saque el control de su culo, tan metido que fue difícil sacárselo, lo tome e hice que lo lamiera bien, que limpie el preservativo que lo recubría. Cuando hubo terminado su tarea fui hasta la cocina y traje tres cervezas, me coloque sobre ella y estando allí parado sobre ella le puse una mano en mi verga, le ordene masturbarme mientras yo bebía y vertía cerveza en su boca, fue tanto su manera de quererme sacar la leche de mis bolas que me corrí en su cara, pelo, la escupí para complementar y se lo metió a la boca, luego recogió con sus dedos el semen de su cara y lo puso en su boquita, le dije que no se lo tragara, y esperamos unos momentos mas, me dieron ganas de mearla y lo volví a hacer, en su boca, con semen y saliva, se lo trago todo.
Se levanto y nos metimos en la ducha, lavándonos y quedando como nuevos, esa noche la perra durmió con su collar puesto a mi lado.