Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Relato
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Relato
Categoría: Incestos

La mision

Pensaran que soy una inmoral por lo que voy a contarles, pero en el momento en el sucedio no lo vi de esa manera.
Mi hijo Armando es un joven apuesto, supongo que lo mismo dicen todas las madres, pero Armandito si es bastante apuesto. Pese a su edad no le he conocido una sola novia o siquiera alguien que le interese. Esta a punto de cumplir 20, es cayado, algo reservado para su edad, pero en familia se comporta alegre y sin ninguna novedad.
He de admitir que despues de mi divorcio las cosas cambiaron un poco. Yo no he salido con nadie en bastante tiempo y me he dedicado en cuerpo y alma a la educacion de Armandito y a mi trabajo.
He tendio algunos pretendientes, porque a decir de la gente que me rodea sigo conservandome de muy buen ver. De hecho a veces me cansa un poco la impertinencia de algunos hombres.
La preocupacion por Armando me llevo a intentar inducirlo a salir con chicas, incluso en una ocasion le sugeri que fuera a visitar a sus amigos, que le pagaba el cine y la comida pero que fuera con chicas. El no accedio, dijo estar bien y concentrado en las cosas que le interesaban, cosa que me puso los pelos de punta.
En algunas ocasiones le presente a las hijas de msi amigas, e incluso me puse de acuerdo con ellas para dejarlos solos, pero fracase.
En un intento desesperado opte por usarme a mi misma para comprobar que a Armandito le gustaban las mujeres.
Comence a aparentar cierta distraccion, como el dejar la puerta de mi recamara abierta o el olvidar la toalla en la ducha y pedirsela, pero para mi sorpresa lo hacia con la mayor naturalidad.
En una ocasion espere a que llegara de la escuela, y cuando lo escuche me desnude, quedando solo en ropa interior. El me llamo y le conteste desde la recamara, subio a saludarme y al entrar intempestivamente se quedo impresionado al verme con una tanga negra y un brasiere del mismo color, puesta en cuatro patas y buscando un zapato debajo de la cama. En pocas palabras, le di el espectaculo tan deseado por otros. Se disculpo, y salio de la habitacion, cerrando tras de si la puerta.
Mi espanto estaba llegando al limite. Decidi llegar al fondo de la situacion. Ese dia lo espere tranquilamente vestida con una falda olgada que me llegaba a la mitad de las piernas, lo que hacia que al menor movimiento brusco esta se elevara por los aires dejando al descubierto toda mi intimidad. Use tacones altos, negros y puntiagudos. Medias gruesas que llegaban hasta un poco abajo de la tanga y una blusa blanca que se usa sin sosten. Me maquille y peine. Me puse el perfume mas sensual de los que tenia y aguarde pacientemente.
Cuando Armando llego, se sorprendio al verme asi. Me dijo que me encontraba increiblemente bella. Ese fue un buen punto, me alegre que se fijara en esos detalles. Elogio mi perfume y sobre todo mis piernas.
Le dije que hacia mucho tiempo que no salia, que necesitaba bailar y tomar un trago, pero que no tenia a nadie para hacerlo. Como a el no le permitian entrar a ciertos lugares le propuse que nos quedaramos en casa y disfrutaramos un poco de la noche. Mi plan era intentar seducirlo sin llegar a nada, de manera sugerida, exitarlo hasta convencerme que mi hijo no era gay.
Le servi un trago, el cual acepto con muy poco agrado. Puse musica ligera y lo invite a bailar. Puse sus manos en mi cintura y coloque las mias detras de su cuello. La musica invitaba a la seduccion, pero el se conservo intacto. Al compas de la melodia me acerque lo mas que pude. Procure que mis senos tocaran su piel, que su pecho me aprisionara y que sus manos no tuvieran mas opcion que abarcar mi cintura y lo que se pudiera. Al cabo de un rato comence a aparentar estar algo mareada. De esta manera el podria pensar que mi comportamiento era causa de las copas. El seguia de buen humor, pero con el respeto y la calma que lo caracterizaba.
En la siguiente pieza, opte por girar sobre mi, quedando de espaldas a el. Unte todo mi cuerpo en su cuerpo. Mis nalgas recorrieron al compas de la cancion cada centimetro de su sexo. Las empuje hacia atras intentando exitarlo, y aunque no se retiro, no senti ningun tipo de reaccion.
Esto estaba llegando muy lejos, pero algo tenia que hacer para darme cuenta de que todo estaba en mi mente. No es que tenga nada en contra de los gays pero me preocupaba en gran medida que sucediera en mi hijo.
Le dije que jugaramos a algo. Propuse un juego de cartas, pero con un castigo. Nos sentamos en el suelo de la sala. Frente a frente, nuestros ojos se encontraron. Discretamente deje que la falda subiera un poco para mostrarle el tipo de medias que me habia puesto.
En realidad no sabia hasta que punto llegar, lo importante era estar atenta a sus reacciones.
Los primeros castigo fueron bobos. Eso para evitar que todo fuera tan directo, no queria que se diera cuenta de mis intenciones. Luego le dije que apostaramos algo mas intenso, para que esto tuviera emocion. El que perdiera se quitaria dos prendas de vestir. A el le parecio ridiculo porque argumento que yo lo habia visto desnudo desde bebe, pero yo lo contrareste al hacele ver que ya era todo un hombre, que hacia tiempo que procuraba mantener vigente su intimidad y que ya no lo conocia como dios lo trajo al mundo. Acepto.
El primero el perder fue el. Se despojo de los zapatos y calcetines. En la segunda ronda volvio a perder, quedando sin cinturon y sin camisa. Puede observar que estaba delgado, pero su musculatura comenzaba a desarrollarse. Le dije "en un tiempo mas las mujeres no te dejaran en paz, te estas poniendo muy bien..." y tome un trago de mi bebida. El sonrio y continuo el juego. La siguiente en perder fui yo. Me levante de mi lugar. Lo mire directamente a los ojos y comence a desabotonar la blusa. Gire sobre mi eje y le di la espalda. Baje la Blusa y mis senos quedaron al aire. Con el rabillo del ojo pude ver que sus ojos se clavaron en mi. Gire. Su mirada se perdio entre mis senos. No dijo nada, solo se dedico a admirarlos. Acto seguido meti mis manos debajo de la falda. Deslice suavemente la tela de la tanga y la saque completamente. Armando estaba boquiabierto. Le dije "en el siguiente juego se decide quien gana, o tu me desnudas o yo a ti". Me sente con mucho cuidado para no dejar al descubierto mi intimidad. Mis senos flotaban y el distraido comenzo a lanzar las cartas. Para su mala fortuna yo gane. Se levanto, me miro a los ojos y sonrio. Deslizo suavemente su pantalon, debajo de la truza una verga bien parada hacia los honores. Me dijo "Seguro que no me habias conocido asi, verdad mama" y comenzo a deslizarse el calzon. No es porque sea mi hijo, pero tiene una hermosa verga. Supongo que herencia paterna. Al verlo completamente desnudo, con una ereccion descomunal, me senti confundida, primero alegre al saber que no era gay, y en segundo termino muy caliente, estaba hirviendo. Las copas, la verga de mi hijo, yo practicamente desnuda, todo esto se estaba saliendo de control.
Le dije que ya estaba cansada, que era hora de dormir y me dijo que no, que todavia no terminaba el juego, que faltaba la ultima partida.
Le dije que ya no tengia nada que apostar, que estaba desnudo, exitado y que esto ya habia llegado muy lejos. Me miro retadoramente y me dijo que si tenia miedo de perder. Le dije que no, pero que esto ya habia terminado.
Me lanzo las cartas, yo no las levante, el empezo el juego. Por un momento estuve a punto de levantarme, habia logrado mi proposito, pero en este instante sabia que las cosas se me saldrian de control. Respire ondo y levante mis cartas. Sorpresa, en toda la noche no habia tendio peor juego. Armando sonrio. Me levante con la intencion de quitarme las medias y los zapatos, pero Armando me dijo que no, que asi me quedara, que el castigo seria otro. Lo mire confundida y... mi concha comenzo a derramar liquidos. Mi respiracion subio vertiginosamente. Estaba a mercer de mi hijo. Me vendo los ojos. Le dije " que vas a hacer". "Nada, solo cobrar la deuda". Con los ojos cerrados y sin saber que pasaria note que Armando tomaba mis manos y las envolvia con algo. Luego me hizo poner boca abajo. Yo estaba paralizada. Queria huir, pero al mismo tiempo mi calentura me controlaba. Mi concha estaba completamente inundada.
Senti sus manos al acariciarme la espalda, al llegar a mis nalgas y levantarme la falda. Tranquilamente comenzo a separarme la carne y senti que mi ano quedaba completamente expuesto. La lengua de Armandito comenzo a recorrer mi agujero. Un estremecimiento me llevo a la luna. Ni siquiera su padre habia tenido el honor de mamarle el culo a su esposa, y ahora este galancito me lo estaba desflorando con la lengua.
Me deje hacer. Armando me lamio a placer el culo y luego se deslizo hasta mi humeda entrada. Sorbio, lamio, mordio, y jugo como todo un maestro. No pude mas, me viene. Los espasmos fueron eternos. Mi cuerpo se contorciono del inmenso placer que estaba sintiendo. Armando me volteo y senti como levantaba mis piernas hasta depositarlas en sus hombros. Sabia lo que pasaria, estaba conciente de todo. Sabia que cuando acabara estaria muy arrepentida, pero no dije nada. Lo deje hacer. Sin miramientos puso su verga en mi entrada. Jugeteo un momento con al punta de su miembro, cosa que me enloquecio. "Ya, metela, metela, por favor, metela, no aguanto mas, metela por favor..." Suavemente deslizo su miembro en mi interior. La sensacion fue tremenda, hacia tanto tiempo que no sentia algo asi que de inmediato me comence a mover y me corri. El no dejo de moverse, me condujo hasta que termine. Entonces me susurro al oido "Ahora biene el castigo..." "Lo que tu quieras" apenas atine a decir. Me puso en cuatro y volvio a lamerme el culo, parecia un posedio por esta practica, y yo muerta de placer. De repente puso su miembro en mi entrada y empujo. Senti que mi mente daba vueltas. El dolor fue intenso. Era la primera vez y todo giro sobre mi mism eje. Aguante, e hice como si fuera a defecar. Empuje con fuerza mis nalgas hacia el y procure abrir lo mas posible mi culo para que entrara. De repente senti mucha calma y un ardor tremendo. Armandito se comenzo a mover como loco poseido, y yo me transforme en una esclava de su deseo, empuje, me movi, me ofreci de par en par. Ahora no pensaba en nada, ahora solo tenia en mente que Armando se corriera dentro de mi. Ese era mi mayor placer ahora... mi objetivo.
Datos del Relato
  • Autor: anonimo
  • Código: 16284
  • Fecha: 24-03-2006
  • Categoría: Incestos
  • Media: 6.12
  • Votos: 51
  • Envios: 4
  • Lecturas: 4220
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 18.219.176.215

3 comentarios. Página 1 de 1
argenis
invitado-argenis 04-04-2012 00:00:00

Empezaste muy bien, cuidando los detalles sin caer en lo aburrido, pienso que te faltó ser más minuciosa al final, y claro queremos saber si continua y cuales fueron las emociones y sentimientos de ambos, estuvo bueno pero el final lo descuidaste un poco...Esperamos la continuidad del relato...

Alvaro
invitado-Alvaro 28-03-2006 00:00:00

Mujer hermosa, me parece una saga espectacular y, con seguridad, tu muchacho lo gozo tanto o mas que tu. Ello es parte de la belleza de ser humano y tener emociones como esas. Espero aun lo esteis disfrutando, aunque sea en tu pensar. felicidades y cuentanos mas, vale!

Cuchuflais
invitado-Cuchuflais 27-03-2006 00:00:00

Tal vez desde un inicio tu hijo ha estado admirándote y tu ni en cuenta, que bueno que le diste esa oportunidad, ya no se quedará con las ganas como yo. Y por lo de depravada, no me parece, los dos lo desearon y lo disfrutaron.

Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Relatos: 38.461
»Autores Activos: 2.273
»Total Comentarios: 11.905
»Total Votos: 512.062
»Total Envios 21.926
»Total Lecturas 105.323.149
Últimas Búsquedas