Una madre de familia acude al tocarle la puerta del salón donde estudia la secundaria su hijo; quién es recibida directamente por el consejero de su hijo, que le invita a pasar al cerrar la puerta del salón se sienta en el pupitre de su hijo, el consejero comienza su reunión con ella le habla de las excelentes notas que ha tenido su hijo y felicitarla por el ejemplo que le da a su hijo al estudiar con el, entonces la madre le contesta muchas gracias por su amabilidad y cordialidad consejero; veo que es una mujer bella y espectacular con unas curvas de caderas y un cuerpazo de la mil maravilla parece que he muerto y estoy en el cielo con un ángel hermoso se sonroja la madre, le habla seriamente me cito para una reunión o está coqueteándome como levantándome hasta adulándome incluso me imagino que quiere hacerme el sexo como el amor aquí en el colegio donde estudia la secundaria mi querido hijo con su mano en su senos y doblada sentada en el pupitre de su hijo está madre.

Sabe consejero que soy una mujer decente también seria además honesta en mis sentimiento y le digo algo entre nosotros los hombres no me fió me han decepcionado mucho el padre de mi hijo al saber que estaba embarazada y esperándolo me abandono no quiso hacerse cargo ni reconocerlo no me venga con cosas y yo no quiero atarme ni andarle debiendo favores sexuales a los hombres por mi misma me valgo y mantengo a mi único hijo que es su alumno de secundaria quedo claro lo que le acabo de decir consejero.

Pero no amerita que tengas sexo ahorita, se pone de pie la madre de su alumno al levantarse la falda cuerina que carga un diminuto como pequeñito hasta sexy hilo dental cachetero en que se pasa manoseándose como rozándose de arriba hacia abajo y viceversa toda la palma de la mano por su clítoris está madre, que se jadea asimismo gime con suma locura, fuerza, ganas, ánimos, deleite, deseos, deliciosa, apasionada, fascinada, excitada asimismo ardiente a más no poder; en que se abalanza con el consejero sentado en el escritorio al dejarse follar como cogerse hasta cabalgarse incluso dándole de probar sus senotes buenísimos como sabrosísimos hasta riquísimos y apasionadísimos a tutiplé por doquier en que trascurre unos minutos quedándose satisfechos se visten al arreglarse el peinado los dos y desapareciendo todas las evidencias que tuvieron amores como sexo en el salón de clase secundaria dizque la cito para una reunión de madre de familia.