Dubis  era una  adolescente dulce, inocente he  inquieta llena de  ímpetu de ilusiones y fantasías, con un cuerpo bello, cabellos largos negros   lacios  ojos negros  piel de color canela  suave   tersa con unos  bellos negros  y finos, pechos  nacientes  apuntando hacia el cielo, caderas anchas  y redondas un trasero  redondito, paradito y firme, cintura delgada piernas torneadas  y candentes muslos  gruesos y firmes, con un par de labios carnudos y dulces. ella  en su interior tenía muchas preguntas, dudas y curiosidades, con muchas ganas de  experimentar pero  alavés con muchos temores  miedos   e inseguridades. Ella ya se daba cuenta  que todos los hombres  la miraban con insistencia, lo cual la  sonrojaba y apenaba  al sentirse observada y admirada  por todos esos hombres  que la desnudaban  con sus miradas, en esos momento ella se preguntaba en su inocencia del porque   eso  pasaba.

En su interior ella ya  sentía   muchos cambios impulsos  y atracciones que nunca avía experimentado,  en ocasiones sentía calentar su cuerpo sintiendo un desosiego interminable llenos de impulsos que nunca avía experimentado en el pasado, comenzó a perderle interés a los  juegos con sus compañeras  y a las muñecas y  ya miraba con otros ojos el hecho que la  desearan y se les acercaran.

Una noche  ya muy tarde en la soledad e intimidad de su aviación ella se sentía algo acalorada y se  inquietaba con todas esas sensaciones que la abrumaban, su cuerpo estaba inquieto deseoso  de algo que ella  no savia y así  intuitivamente ella comenzó a auto explorarse con sus manos por todo su joven y deseoso cuerpo, tocándose desde sus pechos hasta su entrepiernas dándose caricias interminables que la extasiaban y así tocándose poco apoco fue pasando su mano en su chocha como ella nombraba a su parte intima, allí ella acariciaba he  iba penetrándose con su dedo una  y otra vez dándose  placer y entre más  se tocaba su cuerpo más  necesitaba y de esa manera  fue tocándose más y más  seguido y rápido rotando su dedo  ya muy adentro  su respiración se  entrecortaba, ella la inocente dubys no se pertenecía era su cuerpo el que la dominaba y de un momento a otro sentía como una explosión en su interior la enverga, venia  y salía  con fuerza desde su interior  un estallido como  el de un volcán en erupción al cual  le salía grandes cantidades  de   ardiente lava, su corazón palpitaba a gran velocidad el cual sentía explotar dentro de su joven alma, vio miles de estrellas  que la rodeaban en un cumulo de placer y sensaciones que la embargaban ese fue el primer orgasmo que ella la inocente dubys  experimentaba.

Al día siguiente se levantó con muchas dudas  y temores por que ella no sabía  si lo ocurrido era  bueno o malo o si era  pecado, lo único  que  sabía era que lo ocurrido había sido  sabroso pero aun permanecía la duda que la atormentaba y así ella busco ayuda  donde un adulto amigo para que  le ayudara a aclarar  todas esas dudas que la atormentaban pero primero ella le hizo jurar que nadie se enterara y al dar su palabra  el amigo,  ella procedió a contar esa acalorada experiencia que había sucedido la noche pasada. El amigo al  enterarse  le explico que eso era natural  y que no se preocupara porque  eso es natural y no es malo  ni pecado para su alma, ella más tranquila siguió explorando su cuerpo pero en un momento  ella ya necesitaba pasar a tener  otras nuevas experiencias que la deleitaran y así comenzó a aceptar las  invitaciones que le hacían los hombres para sacarla y con la curiosidad típica de una inocente joven  ella se entregaba a sentir como esas manos masculinas la acariciaban  en búsqueda del mas esquicito tesoro que en su interior ella  llevaba, en su primera vez  ella estaba nerviosa y temblaba, cada vez que sentía que para adentro  iba ya a ser  penetrada  le causaban brinquitos  de  miedo, temor  y ansias, hasta  ya al ser  total mente penetrada ella sentía como una y otra vez repetidamente entraba el miembro viril del hombre que  le disfrutaba   sus entrañas y así gemidos de placer  y gritos le salían del alma al ser poseída una y otra vez  de los hombres que la sacaban para disfrutar de la inocencia ternura y bello cuerpo de tan  linda joven dama, manos masculinas  la llenaban de caricias banas explorando sus muslos  y piernas tornadas que enamoraban a cuanto hombre se le acercaba.

Con  besos apasionados ella enloquecía con sus labios carnudos y dulces que ella usaba para devorar a los hombres como  una  fiera gata, sus entrañas se  humedecían cada vez más en esos  momentos de lujuria que en ella brotaban con los hombres  uno a uno a los que ella se les entregaba hasta  una vez que se enamoró  y tuvo una decepción con uno de sus amantes que a ella traicionaba, allí exclamo  con sus propias palabras  en esta chocha no entra más pene como  ella llamaba a su parte intima la cual ella usaba con pasión y locura cada vez que  se excitaba.

Basada en hecho reales