Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Relato
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Relato
Categoría: Maduras

La culona tía de mi novia

Cuando estaba de novio con Claudia, entable una relación muy especial con una de sus tías, la tía Sonia.



 



La tía Sonia era solterona, madre soltera, con dos hijos ya casados. Por lo que supe, ella había salido a probar suerte al extranjero, dejándole a cargo a mi suegra sus dos hijos. Como no le resulto, volvió a Chile luego de un año y nuevamente se hizo cargo de sus hijos.



 



La tía Sonia era algo especial, no era lo que diríamos una mujer femenina, al contrario, siempre un poco ahombrada en su forma de comportarse, su forma de hablar, sus gestos su forma de ser, mujer emprendedora, pero con mala suerte, en fin. Según mi novia en su juventud fue muy buena moza, pero para mí, una mujer normal. A sus 51 años, de pelo castaño, corto, obviamente teñido, con algo de vientre, un gran trasero, brazos sueltos, y un par de tetas muy deseables.



 



Por lo general los dos nos fumábamos un cigarro juntos y conversábamos de muchas cosas, en los asados o fiestas de la familia de mi novia. Yo notaba que a ella le gustaba conversar conmigo y me estimaba mucho. A mi también me gustaba conversar con ella, ya que ambos pensábamos de la misma manera, no se como decirlo, pero no complicábamos las cosas mientras que la familia, tan solo para hacer un asado o salir de paseo se le daban 100 vueltas a una cosa muy simple.



 



Me encantaba su forma de ser, mujer sencilla, que no tenía ningún problema, por ejemplo en tomar una carretilla con tierra, o tomar un martillo o arreglar algún enchufe de la casa, o compartir con nosotros que éramos más jóvenes un buen trago, etc.



 



Fue a si, como una tarde, me llama mi novia y me dice que su tía había tratado de arreglar el calefón de su casa y no había sido capaz de montarlo, a si que me pedía a mi, que también era bastante habiloso con las herramientas, si podía pasar por su casa a echarle una ayudita.



 



Fui a ver a mi novia y me recordó que le fuese a echar una mano a su tía. Le dije que después de estar un rato con ella, pasaría por su casa, que me había acordado. Estuve una hora con mi novia, y antes que se hiciera muy tarde, partí solo a la casa de su tía.



 



Al llegar ella me recibió muy contenta de haberme presentado ahí prestándole ayuda. Me di cuenta que el calefón estaba ya abierto. Saque de su caja de herramientas un desatornillador y me coloque a repararlo. Me di cuenta que solo estaba sucio a si que lo abrí y lo limpie.



 



Mientras lo hacía, ella me dijo que tenía unas ganas locas de tomarse un combinado y la verdad que la idea no me pareció tan mala. A si que mientras yo arreglaba el calefón ella salió a comprar una bebida, y me preparó uno para mi, y otro para ella. Mientras lo arreglaba nos tomamos cada uno dos, a veces parando para fumarnos un cigarro. Ya casi lo tenía listo y ella me ayudó a colocar las últimas piezas. Lo probamos y quedó perfecto.



 



Me dirigí al baño a lavarme las manos y a orinar, cuando me fijé que en el canasto de la ropa sucia, había unos calzones de ella. Solo de curiosidad los tomé y me comencé a imaginar como se vería su cuerpo dentro de esos calzones y la idea me anduvo calentando un poco. Sin pensarlo, me los llevé a la cara y los olorosé. Se notaba su olor a concha, incluso tenía algunas manchas que aumentaban mas el olor.



 



Salí del baño y ella me esperaba con un tercer vaso y ella también se había servido su tercer vaso. Nos sentamos en el living de su casa y comenzamos a hablar de mi relación con mi novia, presentándole algunas quejas de ella, que en la mayoría me encontraba la razón.



 



En medio de la conversación, me pidió disculpas por ser tan directa, pero que quería hacerme una pregunta, un tanto indiscreta. Yo le dije que teníamos suficiente confianza entre los dos, así que no veía por que le daba tantos rodeos a la pregunta.



 



En un aire medio misterioso, me pregunto si yo, alguna vez le había sido infiel a Claudia, su sobrina. La verdad que aun siendo Claudia muy hermosa y normal para la cama, más de alguna vez, por no decir muchas veces, le había sido infiel.



 



Me daba un poco de cosa confesarle a ella mi infidelidad, ya que era familiar directo de ella, pero luego que ella me dijo que nuestras conversaciones solo quedarían entre nosotros, y con la confianza que en ella tenía, al ser tan parecida a mi, le terminé por confesar que la fidelidad, no era mi fuerte.



 



A ambos ya los vasos de combinado se nos había subido a la cabeza, y nuestras palabras sonaban un poco traposas. No era la primera vez que nuestras conversaciones habían terminado así, pero era la primera vez que estábamos completamente solos.



 



Ella me entendió y me confesó que cuando joven ella había sido muy activa, sexualmente hablando, cosa que yo ya sabía por los comentarios que me había echo mi esposa. Incluso mi esposa me contó que una vez, cuando ella tenía 13 años, había llegado con su prima a la casa de esta, y la habían sorprendido encamada con un hombre.



 



La conversación siguió ese rumbo, hablando de sexo, de la monotonía del matrimonio, y que la vida era una sola, que había que disfrutarla, etc etc, hasta que a las finales la conversación me puso muy caliente y me empecé a fijar mas en la tía Sonia.



 



Sabes Sonia, mejor me voy, ya es un poco tarde, se me están pasando las copas y la conversación me ha subido un poco la temperatura. Ja ja ja



Bueno, en realidad es un poco tarde ... y además la conversación a mi también me esta haciendo mal



Por que lo dices



Por que, bueno, ya con la confianza que te tengo, y con todo lo que conversamos ... también me anduvo calentando un poco.



A mi también



Con la diferencia que tu te vas y tienes con quien desquitarte … mientras yo me quedo acá sola ... triste y abandonada



Pobrecita .... Ahora si quieres , llamo a Claudia y le digo que te voy arreglar a ti ahora ... ja ja



Ja ja ja … ¡¡¡ te imaginas !!! ja ja …



Ja ja



Imagínate yo después llamando … "Claudita, podrías decirle a tu novio que se de vuelta por aca y me pase a follar un ratito… ja ja ja " .. dile a Alex que me preste su herramienta … ja ja ja



Bueno , todo quedaría en familia



En todo caso



Ya niño ,,, mejor ándate que me están pasando pensamientos impuros contigo



Ah … entonces me quedo un rato mas .. por si acaso .. ja ja



Que eres bromista…. Como si te fuera a interesar una vieja como yo



Oye que te valoras poco



No me valoro poco, pero comparada con mi sobrina, hermosa y joven , yo soy una harapo al lado de ella



Pero tienes la experiencia ja ja



Eso si … ya bastante experiencia



Mucha?



Ufff ... ni te cuento mejor ...



Suena interesante



Oye … otra pregunta indiscreta … supongamos que yo no fuera la tía de mi sobrina, y comentara a insinuarme contigo, ¿que harías?



La pregunta bastante directa… ¡acepto inmediatamente! .. ja ja



Y si te dijera que… si tu quieres… podríamos pasar un rato agradable entre los dos



Me estas tomando el pelo



No ... de verdad me gustaría



Mmmm a mi también ..



Mi sobrina no tiene por que saber obviamente ...



Me acerque a ella y le acaricie su cabello. Sabía perfectamente que la tía Sonia estaba hablando en serio, y no dejaría pasar la oportunidad.



La tía Sonia comenzó a acariciarme la verga por sobre el pantalón, y yo mirándola a los ojos y sonriendo me los baje dejándosela completamente a su disposición. Ella no lo dudó y enseguida la tomo en su mano y comenzó a chupármela. Solo la soltó cuando le saque su polera por sobre su cabeza. Tras unos sostenes blancos, la tía Sonia guardaba un tremendo par de tetas que quedaron completamente al descubierto cuando ella misma se sacó esa prenda.



Yo aproveché ese momento para terminar de desnudarme. La tía Sonia no perdió ni un segundo y nuevamente volvió hacer suya mi verga, chupándomela con mas ganas aun. Le pedí que se desvistiera y sin demora lo hizo. Su viejo cuerpo, pero apetitoso, quedó ante mis ojos, completamente desnuda



No sabes las ganas que tengo de sentirte dentro mío



Me tienes muy caliente Sonia



Y a mi igual .... siéntate acá



Intercambiamos posiciones y dándome la espalda se comenzó 



a enterrar en mi verga poco a poco, gimiendo de placer. Mi vista estaba clavada en su enorme trasero. Como me exilaba tenerla así, sentada sobre mi, moviéndose de arriba abajo, viendo como mi verga se perdía entre esas grandes carnes.



Mmm estas delicioso .. que rica tranca se come mi sobrina



¿Te gusta? .. es toda tuya Sonia ..



Siiii te la voy a dejar sin ganas ....



Me encanta tu culo ...



¿si?



¡Lo tienes tremendo! .. me fascinan las mujeres culonas



¿Si? ... entonces es todo tuyo corazón ...



¿Lo prefieres asi?



Ohhhhh que rico .....



Todo tuyo..... ahhhh que rico se siente como entra .....



Ohhh que estas rica tía ....



Ahhhhhhhh te siento entero dentro mio .... ahhhhh



El culo de la tía Sonia estaba exquisito, y no pare de darle por ahí una y otra vez, sacándole grandes quejidos, haciéndole mover sus nalgas con cada envestida que yo le daba.



Ahhh Sonia .... me tienes loco



Mmmmm .. me gusta tenerte así .... ¡dame mas! ... ¡quiero mas! ....



Que tanto mas quieres



¡Dale! ..... se lo que quieres! ... dame por el culo!



Mmmmm leíste mis pensamientos .....



Me pidió que se la metiera despacio. Apunté mi verga a la entrada de su culo que al principio oponía algo de resistencia, pero poco a poco la tía Sonia lo fue dilatando, y lentamente le fue entrando.



El placer de estar comiéndome semejante culo, era delicioso. Poco a poco mi verga iba avanzando, abriéndose paso a través de esas grandes carnes, por un terreno que se notaba ya había sido utilizado mas de alguna vez.



Ahhhhhhh asi!!!! .. dame mas ... ¡cógeme por el culo ...



Ahhhh



Ahhhhhhhhg mas! ... ¡mas! ..... ¡mas! .. ¡la quiero toda dentro! .. ahhh



¡Toma Sonia! ... ¡comete todo!



Ahhhhhhhggggg asi ... que deliciosos .. no aguanto mas ... me vas hacer acabar!



Quieres que acabe acá ... eso quieres ....



No.. aguántate .. déjame acabar a mi ..ahhhh ... y te dejo acabar en mi boca ..... ahhhh



¡Dale! .. ¡corretete!....



Ahhhhhhhhh me vengo .. ahhhhh ¡me vengo! .... ahhhhhhhg



¡Vamos dámelo! ... acaba .....



Yaaaaaaaaaaaaaaaaaa . ahhhhhhhhhhhhh .... ohhhhhhhhhh . aghhhhhhhhhh



La tía Sonia gritaba como una loca, acabando monstruosamente. Sentía como sus jugos corrían por mis piernas y aun así, seguía moviéndose como una loca, echando el culo hacia atrás para sentirme mas y más.



Tal como me lo había prometido, cuando le dije que yo no aguantaría mucho mas, se sentó en el piso, apoyando sus manos a los lados y me la chupó fuertemente.



 



La situación era exquisita y cuando mi semen estaba a punto de salir, se la saque y me comencé a masturbar frente a su cara sintiendo como su lengua me rozaba la punta de la verga. Entre gemidos le avise que ya acababa y ella abriendo la boca al máximo me dijo que me vaciara ahí.



 



Como una erupción mi semen comenzó a salir, cayendo no solo en la boca de la tía Sonia, manchando toda su cara. Ella disfrutaba el sabor de mi semen y lo tragaba sin ningún asco, para luego tomar mi verga nuevamente y chupármela hasta dejármela completamente sin ningún rastro de semen.



 



Luego nos vestimos, muy contentos de haber pasado ese momento tan agradable y que quedamos en repetir, apenas se nos presentara la oportunidad, que no demoró mucho en llegar ....



 



Comentarios



 


Datos del Relato
  • Categoría: Maduras
  • Media: 0
  • Votos: 0
  • Envios: 0
  • Lecturas: 3096
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.147.46.174

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Relatos: 38.526
»Autores Activos: 2.283
»Total Comentarios: 11.907
»Total Votos: 512.108
»Total Envios 21.927
»Total Lecturas 106.417.698