Yo no quería ir. Ni siquiera conocía a la pareja que se iba a casar. Bueno, en realidad conocía a la novia, que era la hermana de mi amigo, pero solo había tratado con ella un par de veces, así que no esperaba ser invitado a su boda.

Fui con otro amigo común. La ceremonia fue muy bonita. Nada tradicional, pero respetuosa con las convenciones sociales.

Después lo típico. Arroz volando por los aires, canapés, y de ahí al banquete. Todo un banquete, por cierto. La comida fue copiosa, y en consecuencia los ojos se me caían. Mi amigo fue a bailar con una conocida, y yo me quedé solo en la mesa, con una copa de champán, viendo a todos bailar.

De entre el bullicio, veo a Mónica, la madre de la novia, que viene a mi encuentro.

¿Te aburres?- me pregunta

No, no, solo estoy descansando un poco.

Hay que ver, como crecéis. Ayer estaba dándole el pecho a Marta, y hoy ya se está casando. ¡Jesús, como pasa el tiempo!

Sí- respondí- cada vez pasa más rápido.

¿De verdad no te aburres?-insistió ella.

Bueno, un poco sí, la verdad

Ven

Me tomó de la mano y me llevó afuera, a un jardín

-¿Dónde vamos?-interrogué

-Tú ven y calla

Abandonamos el jardín y nos dirigimos a su coche

-Entra en el coche

Obedezco

-Ponte el cinturón –me dice-

La hago caso

-¿Pero a donde vamos?

-Necesito hablar contigo y necesito hacerlo en privado.

Yo alucinaba. ¿Qué quería decirme la madre de mi amigo que fuera tan importante como para irnos del local en el que se celebraba el convite el día de la boda de su hija? Además, tampoco tenía mucha relación con la madre

Condujo rápidamente el coche, y en una explanada paró y empezó a hablar:

Telmo: no te extrañes por todo lo que te voy a contar. No puedo hablar de esto con nadie más y te pido que no se lo cuentes a nadie. Se que no es el mejor momento para hablar de esto, pero te he visto ahí, tan solo, que he visto una oportunidad perfecta para contarte mi problema.

Bueno, yo…

Shhhh, calla, déjame hablar, por favor. Esto ya me da bastante vergüenza y quiero decirlo de un tirón.

Vale, vale.

Hoy se casa mi hija. Sabes que yo estoy separada. Al pensar en mi boda, he recordado todos los momentos eehhhh, íntimos, que tuve con mi exmarido y en cuanto hace que no experimento tales placeres. Ya no soy una jovencita, y quiero… necesito, mejor dicho, sexo. Con mi exmarido siempre hacía lo mismo, y ahora que veo a mi hija casada y entregada a su marido en cuerpo y alma, me muero de envidia, de sana envidia, pero envidia al fin y al cabo.

Muy bien, Mónica, pero qué quieres que haga yo… yo no sé …

Calla y contéstame sinceramente. ¿Me ves atractiva? ¿Te acostarías conmigo?

Ehhh, pero tía, que eres la madre de mi amigo!!!!!

¿Y qué? Es mi vida y la tuya, no la de mi hijo.

Joder, pero que es muy fuerte lo que me pides

Te pagaré bien

-¿Qué? Oye, oye, que no es cuestión de pasta, eh

¿No te parezco atractiva? Claro, a los jóvenes os gustan ahora las mujeres con grandes pechos, y un buen culo. Y mis pechos son más bien pequeños

Oye, oye, que no es que no seas atractiva, es que eres la madre de mi amigo, si, si, si, podrías ser mi madre!!!!

Y dale. ¿Pero qué problema hay? Yo lo deseo. No me importa tu edad. Eres mayor de 18, tienes 27 por Dios. Y si te preocupa mi hijo, el no tiene porque enterarse. Anda, siempre me pareciste un buen chico. Te lo pido por favor. Quiero probar cosas nuevas ahora que aun estoy a tiempo

Dicho esto se bajo el traje y me enseño los pechos. Estaban muy bien para su edad (45). Me cogió las manos y las llevó junto a sus pechos haciéndome masajéaselos.

-¿Te gustan mis pechos?

-Mucho

-¿De verdad?

-Si-entre los nervios y lo excitado que estaba casi ni podía hablar-

-Lamémelos

Lo hice. Pasé mi lengua por sus pechos, con sus rosados pezones. Los mordí, los chupé, los estire con mis labios, la besé en la boca.

Ya lo creo que era atractiva. La de pajas que me hice pensando en ella cuando era un chaval

Después de un rato así me bajo la bragueta y me cogió el pene, friccionándolo y mirándolo atentamente. Se lo llevó a la boca y me llevó al éxtasis. Tuve que controlarme mucho para no correrme en su boca.

-¿Lo hago bien?-preguntó- Nunca había chupado un pene

-De mmm a ra vi lla

Siguió un rato así, y después me pidió que le acariciara el clítoris. Nada más tocárselo, le dio un espasmo, un escalofrió por todo el cuerpo.

-Ahhhh, que gusto por Dios, méteme la mano, por favor,

Así lo hice. Introduje cuatro dedos en su vagina y noté como se corrió. Verdaderamente hacia mucho tiempo que Mónica no experimentaba un orgasmo.

Después, me pidió que me corriera en su cara y en su boca, y yo cumplí como un buen soldado. Daba gusto ver mi semen en su cara, y como lo recogía con sus manos para llevárselo a su boca. Esa imagen la tengo grabada a fuego en mi cerebro.

-Ahhhh.. Nunca lo pasé tan bien con el sexo como contigo-me dijo- ¿Puedes creerlo? Mi ex me hacia el amor y se vaciaba dentro de mi. Cuando acababa, se quedaba dormido y se olvidaba de mí,. Me ha gustado mucho, y ¿a ti?

- Muchísimo.

-Me alegro , por que esto es el principio. Por favor, pásate mañana por mi casa. No te preocupes por mi hijo, no estará.

-Mónica, esto es un error. No puedo volver a hacerlo

-Por favor. No empecemos otra vez. Ya te lo he explicado. Por favor, ven mañana. Si no quieres, pues solo hablamos, pero ven, por favor. Estoy tan sola.

Al día siguiente, fui a su casa.