Un día mi marido trajo a casa a uno de sus amigos,al que yo aun no conocía. Preparé todo,hice un rico almuerzo,sería otra visitas más,al menos eso creía;
Cuando al fin llegan,dios, me quede pasmada,era un joven espectacular,de inmediato me hechizó,su mirada de cielo,sus labios de miel,y ese cuerpo delgado,lleno de vitalidad,manos sueves,piel exquisita; Me gustó mucho,obviamente disimulé,mi marido no notó nada,pero percibí que Luis (asi llamaré al joven amigo de mi marido) si noto algo de mi encanto por él,aun así se mostro totalmente desinteresado;lo que en cierta forma me tranquilizó,porque creía que una pasión no correspondida evitaría que cometiera una infidelidad.
Que equivocada estaba,Luis comenzó a frecuentar mi casa,luego no faltaba la excusa para venir.
Un día mi marido viajó fuera de la ciudad,asi que me relajé en casa,eran como las 8.30 pero ya estaba en pijama,viendo tv,cuando de pronto sonó el timbre,guuuau,grande fue mi sorpresa,Luis en el portal de entrada con un ramo de flores;lo hice pasar,me disculpe por mi inadecuada vestimente,pero él dijo que no me preocupara solo pasaba a ver como estaba y trajo flores para que no estuviese tan sola,despues de una agradable conversa,me paro a mirar hacia afuera y de pronto siento su cuerpo pegado al mio desde atrás,no me dio tiempo a reaccionar cuando sus fuertes brazos rodearon mis caderas,me giró y sus labios ardientes se pegaron a los mios con un largo beso,
no me resistí,era lo que deseaba hace rato;sus labios comenzaron a bajar por mi cuello, sus manos
agarraon mis nalgas con intensidad,su lengua jugeteaba con mis pechos yo extasiada correspondía a su pasión dejandome llevar; Sin mencionar palabra,continuó con su lengua humeda hasta mi entrepierna,con brusquedad arranco mi tanga,su lengua tibia la sentía dentro de mí,nos tiramos sobre la alfombra, le quite el cinturón,su pene estaba duro,ardiente,lo besé y chupé como si fuese el mejor caramelo del mundo.Despues de unos minutos el me giró dejandome boca abajo,pronto siento sus dedos en mi trasero,con prisa su lengua,estaba tan exitada que todo me parecía maravilloso y quería más.
Luis a pesar de su juventud parecía un experto en dar placer,con sus labios y lengua recorrió todo mi cuerpo como marcando mi piel,estaba tan ardiente que le pedí que me penetrara,con fuerza introdujo su pene en mí,sentía arder mi bientre,él se mecía como poseido,me regaló el orgasmo más maravilloso que jamás había sentido.
Al terminar tan esperado momento de sexo y placer
Luis cogió su ropa vistiendose,mientras yo seguía tirada en la alfombra; se arrodillo a mi lado apreto mis pechos, introdujo su lengua en mi boca
dándome un largo y jugoso beso,sin pronunciar palabra desapareció por la puerta.
Despues de ese día lo sigo viendo con mi marido,pero Luis reacciona como si jamás hubiese sucedido nada entre nosotros y yo me muero por tenerlo otra vez,mientras más indiferente es más me exita.Lo que me sigue provocando Luis no es amor,es una pasión incontrolable.