Todo un macho que pone a vivir también a disfrutar además de atraer hasta provocar especialmente calentar sobre todo derretir igualmente deleitar como apasionar, pues a vibrar finalmente arrecha a una mujer como es Wilda en la grata y queridísima compañía de su amigo de registro; detrás del mueble de archivos hurgándola plena como fascinante hasta agraciadamente en su vagina al agarrarse fuerte y férreamente de un anaquel en que la tiene jadeando como gimiendo con la boca abierta y los ojos tranquillos apuntados hacia la mano del amigo en que no se queda para nada atrás la misma Wilda al seguirle como dándole con el mismo jueguito en que le abre el pantalón y el zipper al extraerle del calzón el pene en que se lo masajea, jala y frota con mucha delicadeza y delicia hasta deleitada, como enajenada hasta endemoniada al ritmo que le propina el amigo las hurgadas en su vagina que se van dilatando y dejándose metérselo más a profundidad en el mismo conducto vaginal en que también tiene súper dilatados mucho más de lo normal los ojos de Wilda, comenzando a mojarse y él ha bombear internamente la leche desde sus ganglios al hincharse como inflamarse mucho más la vena central que estimula el cuello del pene al calentársele los testículos comienza también a retorcerse el amigo de registro al paso que Wilda le dice mira como me tienes de mojadita por estas buenísimas como sabrosísimas y riquísimas finalmente apasionadas hurgadas que soy víctima tuya sonriendo y desatada ella entonces, el amigo saca rápidamente el dedo de la vagina de Wilda y Wilda aparta la mano al ver por sus propios ojos que bota y dispara choros de tiros espesos blancos de polvo al piso y ella con su clímax desbordante se viene todita al paso que el amigo abanicándose con un folder su vagina enrojecida por la acción y el impulso de la hurgada y el amigo echado y estirado todo sudado como agotado pero relajado echado y recostado de la silla feliz, Wilda coge unas toallitas humectantes para limpiarse igual que el amigo y limpiando el piso la huella de lo que hicieron juntos ocultos en los archivos de la oficina de contabilidad.