La noche siguiente mi hermanito al acostarse en su cama solo me miraba esperando mi invitación, cuando todos se durmieron le señale que se pasara a mi cama, el ni bien se acostó fue directo a mi pija y comenzó a chupármela, luego de un rato lo traje a mi cara a cara, y le di un beso en la boca y luego otro un poco mas largo al cual respondió pasando su lengua a mi boca,,continuamos besándonos y acariciándonos, mientras coloque su pijita contra mi abdomen y comenzó a pajearse contra mi abdomen, mi pija se endureció como estaca, separe un poquito sus piernas y puse mi pija entre ellas, él se calentó mucho mas y aumento su ritmo, su tibia y delicada piel me calentaban mas y más, podía sentir la cabeza de mi pija tocando la entrada de su culito, me tente pero no podía perder el control, además el solo se entregaba, acaricié sus muslos ,su espalda y el respondía con sus besos y tímidas caricias, su delgada pijita mojaba mi abdomen cada vez mas hasta que un chorro caliente de leche empapo mi cuerpo y el suyo, yo no podía dejarlo así de sucio y me agache y con mi lengua chupe su lechita dejándolo limpito. Durante muchas noches realizamos casi con rutina estos juegos, una noche decidí que se acostara dándome la espalda en forma de cucharita, puse mi pija entre sus piernas y comencé a pajearlo mientras lo cogía entre sus piernas, rato después puse mi pija en la raya de su culito y continué pajeándolo, aunque me tentaba en penetrarlo me la aguante hasta que el eyaculó, en mi mano, bajé mi pija y la coloque en la puerta de su culito y se lo moje con mi leche. Al día siguiente me dijo:
-¡Me gusto lo de anoche, se sentía calentito ja!
Y yo me dije para adentro.
-¡Lo que te espera hermanito, lo que te espera!
Derecho chato falta la primera parte, pero no importa; yo experimente lo mismo pero con un primo de la misma edad, iba de vacaciones a su casa y porque no habia mucho espacio me tocaba dormir con ?l; as? fue como la primera noche jugamos a ver quien la tenia m?s grande y gruesa, y teniamos un metro para medirla, el que la tuviera m?s peque?a tenia que hacer una penitencia, pasaron muchas penitencias, una palmadita, una patadita, un pellizcon, hasta que fuimos llegando a las mordidas, besos y chupetones, nadie se podia rehusar, pasamos largas horas en dicho juego, pero ambos nos excitabamos y asi nos dormiamos; una de esas noches/madrugadas, desperte y senti la verga parada y que alguien me la jugaba, era mi primo quien se se habia despertado y me estaba dando una mamada de verga deliciosa, como lo estaba disfrutando lo deje, de repente se puso de lado y me empezo a jalar de la verga para que se la acercara al ano, me estaba masturbando con sus nalgas pegadas a mi verga, antes que pasara otra cosa me acomode y empece a empujarsela para metersela por el ano, el se abria las nalgas y me jalaba para que yo se la empujara, hasta que logro entrarle la cabeza, se movia y me decia que le diera fuerte para que se le fuera toda, le sentia el ano apretado y como se le rasgaba, pero le gustaba; empezamos a movernos juntos, yo le agarre la verga que ya le tenia parada, mientras yo lo embestia por atras, lo masturbaba y nos seguiamos moviendo al mismo ritmo, hasta que yo le eyaculaba adentro del ano y lo hacia eyacular a ?l masturbandolo. as? pasamo nuestras vacaciones noche a noche y asi amaneciamos.