Está Melisa Graham Williams lavandose las manos y retocandose el maquillaje frente al propio espejo del baño, se abre la puerta de uno de los sanitarios que sale al acomodarse la msima falda de cuero Gloria Isabela Andrew Carnegie. Bueno Melisa Graham Williams le dice: Oye, escuche como carcana qué orinabas cargada e intensa pero afluente también incontenida con mucha afluencia, estas bien organicamente n otienes problemas de incontencción urinaria. Gloria Isabela Andrew Carnegie se echa a reír al manotearse en toda sus cartucheras, disculpame de un tiempo para acá soy otra exterior e interiormente no te lo imaginabas tú Melisa Graham Williams; sabes la chorreteadas de novios que no me duran la eternidad hasta me marchitan y sobre todo insatisfacen a mí, ya encontre el santo remedio a esto sí tienes tiempo para que te lo cuente personalmente aquí en el baño querida Melisa Graham Williams.

Conocernos y enoviarnos hasta el son del día de hoy no para de cogerme todo el tiempo donde estemos igualmente a cualquier momento sobre todo enajenado conmigo siempre; entre nosotroas para mís 30 y tantos soy hermosa, cautivada, calentada, provocada, dominada, atraida, excitada, fsscinada, deseada, deleitada, deleitosa finalmente conquistada a diferencia con mis otros novios nada me complacia pero este último me ama y quiere de ahí soy su ejecutiva universitaria original; eso fue lo que le atrajo hasta se enamoro absolutamente de mí persona en vivo y a todo color cómo te lo cuento querida Melisa Graham Williams con está sinceridad qué me caracteriza a mí, y te cuento me conservo jovencita cómo toda una adolescente por él vigoroso también colosal además espectacular sexo por parte genialmente de mí hombre e nescala de magnitud maxima lo habla Gloria Isabela Andrew Carnegie arrogadoramente por las diversas posiciones eróticas conocidas, practicadas hasta protagonizadas en mís propias carnes siempre con él. Me ha transofrmado física, corporal y organicamente en otra mujer por lo que puedes apreciarme, entenderme, conocerme y finalmente mirarme en vivo y a todo color asimismo constatartelo de viva voz, presencia hablar y escuchar frente a frente por ti misma Melisa Graham Williams.

Gloria Isabela Andrew Carnegie que se pasa la mano alisando desde su cuello hasta abajo de su vientre, le dice a Melisa Graham Williams artifice de mí modernismo de mí vestuario a su vez excelente pero exquisito qué notas propiamente querida Melisa Graham Williams que tengo una figura divina adelgazada obviamente más esculpida además moldeada con más realce que tengo más levantado mí culo como más ajustada, entallada, ceñida y perfilada por ropa de cuero con liguero y ligas y por supuesto plataformas tanto botas, sandalias y zapatos por mí perdicción de hombre y novio que me hace muy feliz y diva