Soy Fernando, tengo 25 años de un cuerpo más bien atlético mido 1,70 mi historia comienza por el deseo de calmar mis ansias de sexo, y buscando nuevas experiencias en una página de anuncios encontré a un hombre que tenía un departamento en el centro de la ciudad y ofrecía hacer mamadas a hombres hetero-curiosos como yo...era lo que estaba buscando. Me puse en contacto con él, y su respuesta fue de inmediata, comenzó nuestra conversación y le explique lo que quería, solo quería ser mamado y terminar en su boca, a lo que él me dijo que era lo que buscaba, le solicite una foto de él y tenía un físico similar al mío y me pareció agradable, por lo que acepte y le solicite que nos reuniéramos, el me envió su dirección y partí.

Mentalizado a lo que iba, antes de salir me di una dicha y depilé bien mi pene y mis testículos hasta el inicio de mi anito, emprendí el viaje con cierto nerviosismo y ansias de ser mamado por un hombre. Llegue al lugar era un edificio al cual, entre autorizado por el conserje, llegue fuera del apartamento y toque el timbre, se abre la puerta y aparece Javier, un hombre de 30 años tal como aparentaba en su foto y con una cara muy cordial estrecho mi mano y me hizo pasar. El departamento súper acogedor, de un ambiente, me siento en un sofá a los pies de la cama y el me ofrece un trago para amenizar el momento, el noto mi nerviosismo, comenzamos a hablar de la vida, de sexo, de nuestras experiencias, él puso una película porno mientras tomábamos nuestros tragos.

Luego de unos minutos de conversar él se acerca y con su mano comienza a tomar mi muslo, y comienza a acariciar desde mi rodilla hasta mi cintura, hizo eso unas 4 veces y puso su mano en mi herramienta sobre el pantalón y comenzó a besar mi cuello, yo en ese momento le pedí que no me besara en la boca, a lo que asistió positivamente con la cabeza... Continuo y me saco la polera y empezó a besar mi pecho, mientras con su mano seguía tocando mi verga la cual ya estaba bien erecta, siguió besándome y comenzó a bajar por mi abdomen hasta llegar a mi verga besándola sobre el pantalón. Con sus manos comenzó a sacar mi cinturón, bajo mis pantalones mientras yo me ponía cómodo en el sillón y de a poco empezó a sacar mi verga de mi bóxer a lo que se impresiono por el tamaño, aunque yo no lo considero tan grande a Javier le pareció muy bien.

Javier: Mmmm que rica verguita tienes, creo que me la comeré todita, quiero todasana su leche 

Yo: es toda tuya Javier, y tiene mucha leche.

Ya el ambiente estaba muy caliente, Javier me retiro el bóxer dejando mi verga bien erecta a su merced, Javier se para y se desnuda, lo cual me sorprendió ya que no estaba en mis planes. Quedamos completamente desnudos y el con su verga también a mi merced erecta y depilada. Javier continuo y me abrió de piernas, se arrodillo frente a mí, tomando con una mano mi verguita y con su lengua empezó a mojar mis testículos y los chupaba muy bien, los introducía en su boca una y otra vez... Luego con su lengua recorrió mi verguita hasta llegar a la cabeza y abriendo bien la boca se tragó mi pene durísimo y con la boca bien mojada lo hacia una y otra vez y yo lo estaba disfrutando mucho, me gustaba lo que hacía, con mis manos agarraba su cabeza para que se la comiera toda y él lo hacía. El siguió jugando con mi verga y mis coquitos, con sus manos y su boca, y mientras lo hacía note que el también lo disfrutaba y estaba muy caliente y lo note ya que su verga estaba bien erecta también, y no podía dejar de mirarla, me tenía intrigado. Por lo que me tire hacia el lado y con mi mano la tome y estaba durísima, por lo que comencé a masturbarlo, Javier lo disfrutaba con su mirada y unos gemidos que comenzó a hacer chupaba más enérgicamente mi verga. En eso Javier con sus manos toma cada una de mis rodillas y las sube poniendo mis muslos sobre mi pecho lo cual me excito más, y comenzó a lamer mis testículos y comenzó a bajar hasta mi ano virgen y apretadito, con la punta de su lengua rodeaba mi anito, haciendo un circulo para terminar en el centro tratando de meter su lengua en mi anito, esto me estaba volviendo loco, era una excitación que jamás había sentido y me encantaba, siguió lamiendo mi anito, y con sus manos acariciaba mis nalgas, cuando noto que escupe saliva en la entrada de mi anito, lo cual me asusto por yo le había hecho eso a un par de chicas y sabia a lo que iba, y lo pare.. A lo que me dijo tranquilo cuando no te guste paro. Y lo deje, claramente me gustaba, el continuo y saco una de sus manos de mi nalga y con su dedo empezó a masajear mi anito cuando siento que introduce uno de ellos despacio no lo pude evitar soltar un gemido más bien de dolor, pero me excitaba a la vez y lo comenzó a sacar y meter mientras que con su boca comenzó a lamer mi verga nuevamente. Javier sabía lo que hacía y yo estaba  en la luna, derrápense se para frente a mi yo continuaba con las rodillas al pecho y toma su verga y sabia a lo que iba y me quede congelado, pero excitadísimo por la aventura de su dedo en mi ano y su boca en mi verga, cuando posiciona la cabeza de su pene en mi anito, arrojando saliva unas tres veces la esparce por la entrada de mi anito y su verga y comienza a empujar, y comenzó a sentir un gran dolor pero aguantaba, lo quería dentro de mí...siguió empujando y llego a la mitad de su verga y me dijo.

Javier: ¿que rico anito tienes amigo, veo que soy el primero y tan que te encanta... Mmm quieres que sigua??

Yo: si sigue despacito, me duele, pero quiero que lo hagas.

Javier: ¡te daré toda mi verja!!

Javier continúo empujando hasta introducirla toda y ahí se quedó un rato con su verga adentro, la podía sentir, él se meneaba para amoldar mi anito cuando la comenzó a sacar yo gemía del dolor y del placer... La metía despacito y la sacaba una y otra vez, y ya el dolor desaparecía y era puro placer.

YO: dame más fuerte Javier Ahhhh que recodo

Javier acelero el ritmo me estaban designando el ano y lo estaba disfrutando, en eso para me dice sígueme y me lleva a su mano.

Javier: Ponte boca abajo.

A lo que obedecí sin titubear... Él se pone detrás mío y me toma de las caderas y hace que mi culito suba dejando mi vientre lo más cerca de la cama, y vuelve a colocar su verga en la entrada de mi ano y lo introduce bien durito, en esa posición lo sentía mas y estaba tan excitado, estaba siendo su perra, cuando Javier comienza a acelerar su ritmo y comienza a gemir, me lo imaginaba, su verga explotaba en mi año, su leche caliente recurría mis entrañas y me excitaba mucho él se dejó caer sobre mí. Saco su verga de mi no me dio vuelta y comenzó a mamar mi pene mientras con su mano me masturbaba a la vez, estaba en la gloria, acelero y mamaba muy rico cuando siento que viene mi leche le aviso y no saco mi verga de su boca, y explota en su interior, yo me retorcía del orgasmo que estaba teniendo, mientras el limpiaba mi verga con su lengua y se tragaba toda la leche.

Me presto la ducha para lavarme y me retire de su apartamento y seguimos siendo amigos sexuales hasta el día de hoy y de vez en cuando nos reunimos a liberar nuestro deseo sexual.