Encontrados y topados de pie Brooke y su amigo quién es asistente estudiantil que labora cuatro horas en la oficina de registro, adelante donde están las ventanillas de atención al público. Frente a frente sin querer queriendo accidentalmente le pasa la palma de la mano por el vientre de inmediato le pide mil disculpas de ahí, Brooke le responde no hay ningún problema ni te preocupes ni te sientas que me has ofendido para nada, sentándose en su silla y me voy detrás de los anaqueles para archivar boletas de matriculas y otros documentos de estudiantes.
En eso, me imagino que estamos acariciándonos, manoseándonos, tocándonos, frotándonos, deleitándonos, deseándonos, incitándonos, calentándonos, atrayéndonos, dominándonos, idolatrándonos, fascinándonos, emocionándonos, ligándonos, lujuriándonos, coqueteándonos, tirándonos, palpándonos, compartiéndonos, zaceándonos asimismo entendiéndonos, amándonos, queriéndonos, entregándonos, apasionándonos finalmente dejándonos llevar por el momento; hurgándomela con mis dedos traviesos, sinvergüenzas, lisos, atrevido, acosándola y sobrepasándome con Brooke en persona como en vivo y a todo color. Pero en absoluto jadeándose igualmente gimiéndose por todas las fuerzas, ganas, ánimos asimismo divirtiéndose a manos llenas como a pedir de boca en que le estoy tocando la vagina como rosándole de arriba hacia abajo continuamente con la palma de la mano desde el clítoris por debajo de las entrepiernas que la tengo mojadita completamente con sus ojos relajados como flojitos hasta divinos naturalmente; vuelvo a mi realidad monótona por llamada que me hace constante Brooke al pedirme gentilmente que le saque un expediente de estudiante universitario que quiere cortejar y revisar algo en el mismo al entregárselo como llevárselo personalmente a la misma Brooke sentada en la misma ventanilla.