Les voy a contar la vez en que hice realidad la fantasía de mi esposo. Muchas veces me dijo que deseaba que otro hombre me diera una buena cogida y me llenara de leche la concha porque el quería seguirme cogiendo después que se fuera el afortunado de esa noche. Un viernes como a las 6 pm andaba haciendo ejercicio con mi esposo cuando entro una llamada de un compañero de trabajo a mi celular para preguntarme si estaba de turno porque necesitaba que le hiciera un favor. Le dije que no, que estaba en casa sola ( a mi compañero siempre le había gustado decirme cositas sobre mi delicioso culo ) y me pregunto que si necesitaba compañía, sabiendo lo que eso significaba sentí un fuego entre mis piernas ( mi esposo escuchaba todo lo que decíamos pues lo tenia en alta voz ) y sin pensarlo le dije que si que a que hora salía de su turno. Me dijo que a las 8 pm. Ya me sentía super caliente y le propuse que llegara a las 8.30, a lo que el respondió inmediatamente que allí estaría puntual. Le dije que me iría a bañar para esperarlo, me dijo que me bañara muy bien porque el me llenaría de besos todo mi delicioso culo y vagina. Mi esposo estaba sin palabras, me miro y me dijo emocionado que me rasuraría bien mi montañita para que me la pudiera gozar mejor mi afortunado compañero. Nos bañamos juntos y mi esposo me la depilo completa que linda y apetecible se veía mi conchita, me eligió la ropa interior conjunto de tanga y brasier muy lindo que tenía. Luego me vestí con una licra muy pequeña y un top deportivo. Acordamos con mi esposo que el estaría en la habitación contigua para poder escuchar todo y si podía poder echar un vistazo. Llego la hora y mi amante llego puntual y con una excitación que se le notaba en su pantalón perfectamente. Le invite a pasar y a tomarnos un par de tragos ( yo estaba caliente pero igualmente muy nerviosa). Charlamos y después de 2 tragos se acercó a mi por detrás y me arrimo todo su paquete, bien apretado hacia mi culo, me tocaba todo cuanto podía, yo estaba mojadisima porque sabía que siempre había querido hacerme eso. Me deje llevar y empecé a toca su abultado pantalón y la tenia paradisima. Me moje mas, y sentí como me había metido la mano por delante acariciando mi deliciosa vagina. Sintió mis jugos y me metio un dedo para acariciarme el clítoris, que delicia, me estrujaba toda. Le dije que pasaramos a la habitación e inmediatamente me bajo la licra observando mi delicioso culo con la tanga bien metidita. Me tiro en la cama y empezó a chuparme las nalgas y mi oyito ( me vine con tremendo orgasmo ). Luego me dio vuelta y empezó a chuparme el clítoris con gran fuerza y a la vez suavidad, tenia serrados los ojos y ni me di cuenta que ya estaba desnudo, con un palo negro y venoso ( mi compañero es de raza morena ) que me derritió. Me abrió bien las piernas y me la metio poco a poco ( sentía el palpitar de esa tremenda verga ) que delicia me hizo venir nuevamente con las primeras arremetidas. Estabamos gozando y me hacia gemir y gritar porque me cogia y al rato estaba lamiéndome todo. Teniamos super mojadas las sabanas, me tenia toda la verga dentro cuando sentí como saltaba esa cabeza deliciosa hasta mis entrañas descargando un delicioso y espeso semen. Como que no hubiera pasado nada seguía con la verga erecta y me dio vuelta en la cama para abrirme las nalgas y con lo mojado que tenia el pene solamente me lo puso en la entrada de mi oyito para dejarmela ir. Yo estaba tan caliente que me empece a mover para que me la dejara ir más y más. Me dio una culeada fantástica, me besaba toda la espalda cuando sentí que se recostaba en mi y de inmediato otros chorros fantásticos de su semen me llenaban el hoyo del culo, no paraba de echar y echar leche. Fue una cogida fantástica, me disfruto como el quizo en todo momento y yo muy feliz de que lo hiciera. En otro relato les contare lo que sucedió con mi esposo….