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Categoría: Maduras

Fantasía cumplida

Una de mis fantasías es la de estar con varias mujeres maduras a la vez. Les voy a contar de cómo pude lograr unir a tres mujeres maduras para una fiesta en una casa quinta.



Desde hace un tiempo, frecuento una madurita de 55 años ella es una mujer bella para su edad además tiene un cuerpo voluptuoso media rellenita, pero eso no importe porque folla como una diosa. Ella tiene dos amigas intimas que saben de mi relación con ella.



Ellas tenían curiosidad por conocerme, querían saber como era yo y como ella podía salir con un hombre menor en quince años.



Lo que ellas no se daban cuenta es que a mi gustan las mujeres mayores y que mi limite era hasta los 90 de años.



Un DIA mi mujer me propuso ir a la quinta de su amiga para pasar una tarde, era el mes de enero y hacia mucho calor. Yo le respondí que no había problemas en ir y que opinaría su familia al llegar nosotros.



Ella me respondió que no hay problemas porque ella estaría sola con otra amiga más y ellas sabían de lo nuestro.



Me paso a buscar en su automóvil a un par de cuadras de mi departamento, en el viaje me contó que ellas sabían de mi, y que en verdad tenían curiosidad en conocerme.



Llegamos a la quinta y al entrar las vi. A las dos, unas señoras de unos 50 y pico de edad, una de ellas tenía cabellos platinados y un cuerpo medio caído, la otra estaba teñida de rubio y era más coqueta. Me presente ante ellas una se llamaba Julia la de cabello platinado estaba en una malla escotada que permitía ver sus grandes y caídos pechos además se veían sus carne medias flácidas y la otra Lucia la coqueta era rellenita con un enorme culo y tetas grandísimos.



Charlamos un buen rato y entramos en confianza me contaron que Lucia era separada (la dueña de la quinta) y Julia era casada.



Me preguntaron que vi en mi mujer, y les respondi –Me gusta tener de pareja a mujeres maduras y que ella no fue la primer mujer-



Ellas se sorprendieron por mi respuesta, y empezaron a mirarme de diferente forma, mi mujer no decía por las miradas de sus amigas, ella inmediatamente se cambio y se puso una bikini pero con la salvedad que la parte de arriba no estaba y solo lucia la tanguita.



Sus amigas le increparon porque salía así y ella respondió – que estábamos en confianza –



Se acerco a mí y se puso en pose para tomar sol. Yo de inmediato la acaricie y la bese, Julia y Lucia no dijeron nada.



Un rato después mi mujer se puso mimosa, se acerco a mi y me beso y acaricio en forma desesperadas, sus amigas solo atinaban a mirar, ella empezó a frotar con su mano mi pene y al ponerse dura, gira y les dice a las dos.



-Tanto boquearon ahora que les traje a mi macho ¿Por qué no vienen y lo prueban?



Ahí comprendí que mi mujer quería que atendiera a sus amigas, y para eso fui allí, Lucia se acerco y se desnudo era bastante decidida y tenia ganas de tener sexo la otra dudo un poco pero al insistir mi mujer se acerco.



Yo le pedí que se desnudara para contemplarla y ella accedió, después nos dirigimos a la habitación y allí se descontrolo todo, como a mi me gusta.



Desnudos los cuatro, no sabia donde comenzar, la que tomo la iniciativa fue mi mujer, ella les dijo a las otras dos que era la hembra alfa y que mi primer lecha seria de ella, las otras dos accedieron.



Me puse boca arriba y ella me monto, se meneaba bastante, tome a Julia la calentona se agacho y me dio un buen beso de lengua mientras yo le frotaba las tetas y después acariciaba su clítoris húmedo.



Mi mujer invito a Lucia a que participara de nuestro festín, entonces con la otra mano libre le acariciaba su clítoris, así se ponía calentita.



Después de un rato y lograr su orgasmo, mi mujer invito a lucia que chupara mi pija, ella al principio e dio un poco de asco por tener los fluidos de su amiga, pero me la chupo igual, lo saboreaba con ganas Julia se quejo y después de un rato de chupada me monto su vagina estaba re mojada y al rato acabo y sus fluidos chorreaban mi cuerpo, faltaba Lucia para ser penetrada y así lo hice me monto un rato y yo para no acabar a guante y cuando estuve a punto de acabar, mi mujer la saco e hizo que yo acabara dentro de ella.



Descansamos un rato y se me puso de nuevo al palo, allí tome a mi mujer y me la folle por el culo, mientras las amigas recostadas nos observaban, como disfrute la escena, yo clavando a mi mujer mientras sus amigas nos miraban, Lucia se masturbaba mientras yo montaba a mi mujer por el culo.



Al acabar dentro de mi mujer y sentir un gemido largo y ruidoso, les dije a las otras quien se anima, y solo Lucia se atavió a ser penetrada eso era alucinante, ella gemía como una perra y me decía -soy tu perra.. soy tu puta ahora, mi mujer se deleitaba con la imagen que veía, luego de quince minutos, antes de acabar la di vuelta y acabe en su cara, estaba totalmente cubierta de leche, y lo que no me hubiera imaginado es mi mujer y julia que se apresuraron a limpiar su cara de leche con sus propias lenguas.



 



Luego ataqué a Julia ella a diferencia de las otras dos, no quería ser penetrada por el ano, pero con ayuda de Lucia y mi mujer la obligamos, mientras era sometida y la obligábamos a estar en cuatro yo la embestí y a penetre, ella quería zafar pero no pudo porque ellas la sujetaban, ósea literalmente violamos a julia. Ella al no poder defenderse se dejo follar y después de un rato acabe dentro de ella.



Ella después se tiro en la cama inmóvil, junto a nosotros, callada y sin hacer gesto.



Dormimos un rato la siesta, y Lucia con ganas todavía, empezó a chupar mi pija mi mujer y Julia descansaban, y después de un rato acabamos juntos.



Luego empecé a acariciar y besar a Julia, porque eso de violarla me gusto, ella sumisa se dejo follar y abrió sus piernas y se entrego a mi. Mi mujer observaba y empezó a besar a y a chupar las Tetas de julia, y después de un rato acabamos juntos, así pasamos toda la tarde hasta la noche.



Allí descubrí, que la fantasía de Julia era ser violada, así que continué en la noche en degradarla un poco mas, la lleve al baño y le hice una lluvia dorada de primera, ella tomaba la orina con ganas, después hice que mi mujer y Lucia la mearan, era todo un descontrol en esa quinta.



En a noche me folle a mi mujer primero le saboree su concha, sentía sus fluidos amargos y ricos después desde atrás Lucia me besaba el culo y con su lengua saboreaba mi ano, abr las piernas y Lucia me chupaba la polla, mientras Julia miraba y se masturbaba. Después fue el turno de Lucia me chupo la polla hasta que estallo en leche, y como una buena mujer obediente tomo toda la leche. Ahí fue toda la noche hasta el día siguiente que nos levantamos y nos fuimos a nuestras casas y desde allí los cuatro hacemos lindas fiestas, y mi victima favorita es Julia que se transformo en una mujer sumisa y obediente de todos mis caprichos, a pesar que ella es dueña de una empresa con nosotros es nuestra esclava.


Datos del Relato
  • Categoría: Maduras
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