Yessenia modelando como luciendo también llevando además vistiendo finalmente exhibiendo un ajuar de falda de licra azul oscura muy ajustada, apretada, entallada y ceñida a la forma de su muslos, vientre, culo y piernas con pantimedias de tonalidad coffe con una camisa verde selva con hojas marchitas de manga corta. Qué camina por la acera de la universidad que la lleva a la tienda del chinito en el área de la universidad al cruzarse y pasar a su lado un hombre que le dice tremendo pan cuidado que se te hecha a perder igualmente a quemarse mamacita buenísima y sabrosona en carne propia; no se para ni le presta interés ni atención entonces sacando un jugo de la nevera doblada al notarse lo gigantesco como voluminoso de su culo en la tienda del chinito le dice otro hombre qué pan tan exquisito tienes cuidado que se lo roban y te lo comen mi reina fogosa y ardiente a los cuatro vientos, paga en la caja al salir no le presta atención ni interés entendiendo prácticamente que es una coqueta que tiene levante y lujuria con todos los hombres atrevidos como lisos en fin todas las vainas que la encienden a voz populi que no los tomo como irrespeto a su honra y dignidad de mujer casada, hecha y derecha.

Más tarde sentada en el despacho de la decana de derecho y ciencias políticas en la computadora entra su amante que le pide una asesoría y ayuda con el sistema no puede controlarse al pasarle la mano derecha por todo el lado izquierdo desde su muslo por su glúteo bajando por su pierna dejándola apoyada y agarrándola como acariciándole su rodilla que le sonríe hasta lo mira y le dice soy toda una sexy con esta falda me han dicho unas cosas en la acera y en la tienda del chinito que se estuvieras en ese momento conmigo te pondrías celoso como furiosa hasta aguerrido que te hubieras metido en broncas al darle puñetazos limpios y directo a estos infractores. Tenemos trancada ambas puertas la decana estará fuera este día podemos disfrutar un poco del calor de nuestros cuerpos y almas desabotóname la camisa y bájame al estomago mi brasier y mámame mis tetas que están ansiosas y sabrosas como en su punto de sazonamiento se los disfruta a manos llenas a pedir de boca en vivo a todo color dándose un festín sexual al correrse la falda a la cintura quitándole las pantimedias con el hilo dental en que de frente con las dos manos del amante desde sus nalgas recorriendo por los muslos alcanzando las piernas se los manosea al lamerle como besarle con toda la cara de este metida en el mero centro de ella.

Parado le toma con la mano izquierda el pene erecto, duro, gigantesco, caliente, sabroso, aventurado, firme como un mástil de barco, eyaculador, endemoniado en fin todas las vainas recurrentes que se les viene e inunda la mente lujuriosa, morbosa y arrecha de la mismísima Yessenia que como estuviera succionándolo al masajearle de adentro hacia fuera con todas las ganas una mamada a este que le lame también la misma punta del pene de su amante gozando y divirtiéndose hasta jugando también fascinándose que provoca que se venga directamente al saborear la leche horneada como fuera una vaca el amante que se lo traga y limpia con la lengua la masturbación anal que le da y le propina como le aplica candorosa y dulce como enardecidamente la mismísima Yessenia que con unos reojos lo mira hacia arriba viendo que esta bañado y transpirando mucho sudor de la cabeza hacia los pies al sonar el teléfono que lo contesta Yessenia al enterarse que tiene precisamente en la ventanilla de la misma facultad nada menos que la presencia de su esposo al cerrar el teléfono rápidamente le da para limpiarse el pene el amante al quitarse toda la evidencia de sexo con el amante en la boca al ponerse el hilo dental y subiéndose las pantimedias acomodándose y alisando la falda de licra colocándose nuevamente el brasier al abrocharse la camisa que se la alisa también al secarse el sudor palpan té de la frente al decirle cuando salga con mi esposo te diré adiós por la ventanilla y nos veremos dios mediante mañana. Retirándose y saliendo por el pasillo de administrativos entra a su oficina saliendo su jefa al saber que todo anda bien, al cabo de cincuenta minutos transcurridos ve al esposo y a Yessenia que lo mira sonriéndole al decirle hasta mañana cabich nos veremos dios mediante mañana.