Soy recibido en la puerta de la habitación del prostíbulo nada menos en vivo y a todo color por mí chica colombiana conocida hasta que se llama Melisa. Le pago por una hora en que le entrega en sus propias manos ante mí los tiquetes nada menos por el encargado, entro al cerrar la puerta de inmediato en que voy directito y derechito abriendo el guardarropa en que rápidamente busco de ahí agarro igualmente saco tanto las botas negras junto con la falda cuerina que hace juego con un top brasier negro finalmente combinada con la blusa de manga larga lila claro dejando todo de inmediato al pie del sillón donde está sentadita Melisa; en que al instante la desnudo al ponerle caballerosamente las mismas botas en que le cierro la cremallera misma, de ahí el top brasier al cerrárselo por detrás en que le acomodo y subo los tirantes del mismo al momento le pongo la blusa abotonándole los puños de las mangas en que le abotono unos cuantos botones al dejar abierto a la altura del mis top brasier negro de cuerina finalmente metiendo ambas botas al ponerse de pie le subo pareja y continuamente la misma falda de cuerina negra con mis manos en que llegando a la propia cintura metiéndole dentro la blusa en que se la acomodo por todas partes al subirle la misma cremallera de la falda y ajustándole el gancho invisible siendo una falda de cuerina lápiz.

Llevo a Melisa al cuarto de baño para que orine como siempre que le insisto para que orine un poco en que me dice eso es todo papi pero me obedece al tener la completa razón que le salió un poquito más de orine en que se lava de inmediato su micha a ponerse de pie al bajarse la falda cuerina negra en que se lava las manos salimos del baño; en que le siento nuevamente en el sillón en que le pongo dos cojines debajo para que se siente al cruzarle las piernas que las levanta un poco en que yo me pongo de rodilla arriba de ella para que empiece a desnudarme que al cabo de un segundito estoy sin nada en que me pone el condón en que me lo mama pegada a su cara en persona en que me apoyo a la pared le digo sigue y métetelo al fondo de tu boca en que Melisa me obedece al aumentarme la intensidad en que poquito a poquito siento que se me pone más duro como más parado, más gigantesco, más erecto, más grueso y sobre todo más hinchado la cabeza de mi pinga en donde Melisa me golosea, goza, disfruta como cautiva, seduce, provoca, deleita, desea, incitada, zacea, devora, domina, coquetea, conquista, fascina, entretiene, complace, apasiona, consiente, aventura, enajena, endemonia, hasta prepara, finalmente tenemos obviamente me pone más caliente como atraído de lo que estoy ante ella desde que entre a su habitación en el prostíbulo.

Sujetando y llevando hasta jalando mi pinga al restregárselo en todo el centro de sus senos con todo y el top brasier puesto en que adicionalmente se soba la cabeza en cada uno de sus senos buenísimos, sabrosísimos, riquísimos, apetitosos, suculentos, exquisitos, fabulosos y portentosos de talla 38 de copa sonriéndose al mirarme con los ojos apuntándomelos hacia arriba en que yo también fijamente con mis ojazos apuntados hacia abajo en que estoy degustado en medio y enterrado en los mismos senos de talla 38 de Melisa en persona.

Listo la acuesto en el mismo sillón donde estamos ella y yo en que le corro la falda cuerina negra entrándole a follarla profundamente hecho todo un bólido de competición de formula 1 en que una entrepierna apoyada en todo el respaldo del sillón y la otra puesta en el mismo piso encima le entro a besuqueármela en sus senos y cuello hasta boca en que le doy continuamente mucha verga que la tengo excitada al soltarme en vivo y a todo color en mi propia cara bastantes y sonados asimismo merecidos y por supuesto soberanos jadeos como gemidos fuertemente en que la tengo culeadisima también chorreadisima además dominad sima inclusive inundad sima, sobre todo húmedisima, obviamente cargadísima y para rematar entre nosotros venidisima a tutiplén en bastantes jugos vaginales la propia Melisa.

Me la volteo con todo y su cara hacia abajo en el mismo sillón al cogérmela en que le hablo insistente, repetidas veces, incontenible, incontrolable, inolvidable, inevitable, irresistible, flexible, aventurable, etcétera las entrepiernas para entrarle como enterrarle mucho más mi pinga cañonera dentro de su rabo en que sigo cogiéndola dándole varias veces que nuevamente la propia Melisa soltándome bastantes y continuos jadeos igualmente gemidos eufórica, fabulosa, arrecha, enajenada, ardiente, colmada, provocada, seducida, cautivada, dominada, deleitada, deseada, delicia, fascinada, zaceada, consentida, fantaseada, protagonista y escenifica dora siempre en persona de mí ejecutiva universitaria recreándome a mis amigas y ex compañeras administrativas de la sede universitaria en que labore por más de 7 años consecutivos por mí.

Melisa se escapa de mi al sentarme en los cojines al montarme con las piernas dobladas y apoyadas en el asiento del sillón pegada y erguida en que se pasa follándose al mismo tiempo atrapándome como apresándome mi rostro entre sus senos con todo y top brasier negro de cuerina puesto de arriba hacia abajo sin dejarme de  follarme en que le rodeo hasta tengo firmemente agarrándole acariciándole y manoseándole hasta sobándole pareja y continuamente sus glúteos como muslos y entrepiernas adicionalmente las pantorrillas y mucho más en que soltando nuevamente Melisa sus jadeos como gemidos fuertes con muchas ganas además ánimos y mucho aliento de ahí ímpetu que me habla uyyyyyyyy que rico siento esto por parte tuya papi la tengo loquita como encapricha ditá especialmente emocionadita por el sexo erótico que estoy ligándomela, tirándomela, levantándomela como buscándomela de ahí ofreciéndola finalmente les cuento fascinándola en que se reclina hacia atrás doblada de la propia cintura hacia atrás en que la sostengo caballerosamente con mis dos manos agarradas de su dorso en que no se detiene al seguir follándome en que abre más las entrepiernas para penetrarla y enterrarle más profundamente mi verga que al tengo muy agitada como sudada `parejamente a mí queridísima y hermosísima como bravísima chica colombiana conocida y llamándose hoy día Melisa y mucho más.

Sujetándose, aferrándose, agarrándose, apretándose y sobre todo estirándose constantemente a mis ante brazos en que sigue follándose interminablemente jadeándose como gimiéndose súper sudada, emocionada, atraída, gozada, endemoniada, desatada, suculenta, excitada, entusiasmada, fascinada, ardiente, coqueta, conquistada, deleitada, deseada, calentada, incitada, intensa, seducida, provocada, aventurada, derretida, sucumbida, contagiada, cautivada, cargada, primorosa, excitada, etcétera Melisa en que se viene al sentirle levemente por mi olfato de su secreciones vaginales de sus jugos y venidas por mi de mi polvos y pajas. Quitándome el condón en que Melisa terminando con broche de oro nuestra fantasía de ejecutiva universitaria me masturba que disparo a granel a tutiplén por doquier a más no poder bastantes y espesos tiros de paja y polvo en que la dejo embarrada al quedarme exhausto igualmente sudado como rendido refrescándome de lo sudado que me puse al tener sexo con Melisa.

Se pone de pie al irse a orinar y lavarse vaginalmente su micha en que se lava las manos al bajarse la falda entre tanto yo voy a orinar y que me lo lave al secármelo me visto en que Melisa se seca un poco el sudor al quedarse vestida en que salimos juntos de la habitación en que salimos al salón al meterse directamente en la oficina de la gerencia del prostíbulo a recibir su quincena en que la acompaño a fuera del prostíbulo a cambiar el cheque en que la abrazo al ponerle y agarrarle su culo mientras caminamos y nos dirigimos al banco más cercano en que me sonríe te aprovechas todavía de mí a pesar de que nuestro tiempo termino hace rato pero te dejo y me gusta cuándo te comportas y actúas así conmigo tanto por dentro como fuera del mismo prostíbulo donde me visitas acostumbrada y habitualmente donde te entregas a mí para tener tus habituales y famosas fantasías de ejecutiva universitaria conmigo y solo conmigo al mirarme sonriéndome y besándonos en que entramos al banco en que el seguridad nos pide decencia, compostura, educación y decoro finalmente nos detenemos en que forma la fila para cambiar el cheque yo la espero sentada para acompañarla al mismo prostíbulo al seguir ahí mismo mi camino esa tarde de semana y mucho más entre Melisa y yo y viceversa.