En realidad les tengo que confesar; que yo me estimo como una mujer sencilla por naturaleza que no tengo nada de invidiable, sino que admito que me he desarrollado en anatomia femenina, además que he aprendido y me gusta recibir como experimentar diversas facetas, caracteristicas del mismisisimo acto sexual. Sabiendo a ciencia ciertas, cuales son los gustos como lo que frecuentemente el hombre le provoca adicionalmente lo excita de mi y sobretodo al tocarme mis piernas, múslos, glúteos finalmente mis senos voluminosos.

Comprendo que la atracción demostrada específica como profundamente hacia los hombres por mis elegantas contoneos al caminar y al sentarme; les provoca una serie de estimulantes organicos, los cuales, funcionan al instante y es el mejor comparado, al famosisimo viagra. Recetados para aquellas personas, que ya no siente y no pueden al mismo tiempo estimularse por su pene sexualmente por avanzado en su edad de vejez.

Suena mi telefono celular. Lo contesto es un cliente habitual, quién le doy mis servicios como atención especial y personalizada; casualmente me pide una cita privada de urgencia, en su domicilio para el día de hoy, después de finalizada mi jornada de trabajo.

Salgo en mi automovil, conduciendo hacia el domicilio de mi cliente, que lo considero mi abuelo en lo espíritual como en lo sentimental y específicamente, para el caso de motivarlo igualmente darle esos estimulos orgánicos como sexuales; que los tiene todavía activos a pesar, de tener la edad cumplida de los setenta y seis años. Me recibe en su entrada abrazandome fuertemente, dandome un beso profundo en mi cachete derecho, aprovechando eso me acaricia mis alcolchonados glúteos resaltados, por las faldas entalladas azules que visto para esta ocasión; afirmandome, siempre que sabes que vestuario usas cuando me visitas y me regalas tu esencia, también al acostarte conmigo para amarte sexualmente.

Caminamos abrazados y acurrucados, por supuesto manteniendo su mano derecha en todo el relieve de mis glúteos; le comento cautivadoramente le deleíta el sujetarme con sus muñecas mi reafirmante glúteos de musa goloza y saciadora de todos sus grandiosos como majestuosos deseos carnales, apasionados y lujuriosos por mi parte. Me sonrie, e ingresamos a su recamara, le solicito por favor, el cuarto de baño para refrescarme y acondicionarme en el vestuario para mi queridisimo y dulce abuelo; les digo que no aguantaba más las tremendísimas ganas de orinar, ya que estaba desbordante al salir apuradísima de la misma universidad; me dejo puesto solamente el saco y la falda totalmente desnuda como fuera Eva del paraíso.

Salgo, al encontrarme música de ambiente y romantica viendo al abuelo como lo llamo, encuerado totalmente acostado en la cama matrimonial, con su pene erecto al descubierto le sonrio excitantemente; me acerco, me da su mano mientras me siento a su lado al recostarme voltiada hacia el, me abre el saco palpando mis ricachones como cachones senos voluminosos muy rosaditos como fuera una bebita, me los manocea con mucha fineza y suavemente, ahí, me los mama igualmente me toca mi vientre. Le corro mi faldas viendome, todo mi vientre al dejar su mano en mi propio vientre, corriendo exploratoriamente mis múslos pasando a mis piernas llegando hasta mis rodillas. Le hablo por que no hacemos la terapía de masturbación arrivando por mi entrepiernas, accepta divina como ansiosamente, empieza con mucha energía y fuertemente me agarra mis glúteos; lo noto que esta, muy motivado como escenificara un verdadero animal salvaje que esta en celos.

Bien, continuando me voltea boca abajo me cierra paulatinamente mis piernas, ejerciendo tremenda presión eyaculandose me penetra mi espectacular coño sexual con su pene erecto que presentaba temperaturas excesivamente elevadas de calentura sexual, por mí función de coquetearle y seducirlo emocionalmente como en el climaz logrado desde que llegue a su domicilio. Terminamos pegados y abrazados uno con el otro me dice con galanteria a mis oídos; que estoy sumamente agradecido, por tus dotes como obsequios desinteresados que me das con tus visitas y nuestras citas privadas para hacer el sexo, el amor puro como libre sin ataduras por ninguno de nosotros, al satisfacerme orgullosamente a seguir viviendo por tener una bellísima como juvenil, razón que me alegra y me da esperanzas de saber que te importo y me das cariño cuando lo necesito propiamente por tu compañía.