Con Esthercita teníamos la misma edad, 18 años, la conocí desde que teníamos 3 o 4 años de edad, doña Esther la madre, trabajó desde siempre con la tía Carolina, esa señora era quién mandaba en casa, incluso mi tía acataba lo que ella decidía en los que haceres de la casa patronal de la finca. Desde niño jugabamos juntos con Esthercita, cuando teníamos 14 años tuvimos el primer juego sexual, nos tocamos y besamos, fué la primera vez que me chupo la pija, y yo le mamé la conchita, pero no pasamos a más pero si los dos tuvimos orgasmo. A raíz de ese encuentro ella fué más distante conmigo, pués presentía que la próxima vez que nos encontraramos de esa forma perdería la virginidad. Para unas vacaciones llegué a la finca, hacía dos meses que su mamá había fallecido, y como no tenía padre mi tía Carolina la tenía en casa como ama de llaves, y por las tardes estudiaba. Cuando llegué a la finca había una pequeña reunión celebraban precisamente su cumpleaños número 18, yo le llevaba dos meses. En una oportunidad que tuve me acerqué a ella y le dije que no sabía de su cumpleaños, pero quería hacerle un obsequio pero no sabía que le gustaría, ella sonriendo me dijo voy a pensar en algo que me guste y te lo digo más tarde. La observé por largo rato, estaba alta talvéz
i.75 mts. delgada, de piernas delgadas pero rollizas y torneaditas, su culito redondito paradito y con unos pechos que si biém no eran grandes, con la blusa que tenìa puesta se le veían redonditos y parados, su cabello liso, negro y le llegaba un poquito arriba de la cintura, su rostro hermoso moreno, de cejas espesas y boca de labios carnosos, sus ojos grandes color miel y su sonrisa expontaneas, dejando ver unos dientes blancos y perfectos, caramba que linda está Esthercita pensé, y vino a mi mente la tarde que tuvimos sexo oral, recordé su vaginita cubierta de vellos ralos y de un enorme clítoris, y empezé a excitarme, pero no podía pensar en eso, recordé sus últimas palabras cuando intenté estar con ella nuevamente; "pipo yo te amo, lo que más deseo es ser tuya, pero no puede ser, espero me entiendas. De eso habían pasado ya cuatro años. Las palabraa de mi tía me sacaron de mis pensamientos, y me dijo: ves que hermosa está Esthercita, es toda una mujer, lo que me preocupa es que me vaya a dejar sola, el maestro de la escuelita la pretende, y por cualquier pretexto viene a casa para estar cerca de ella, pero sabes ella no le hace caso, yo creo que ella está enamorada de otro hombre, pero por más que investigo no puedo acertar, me imagino que debe ser alguien del pueblo cercano, en eso estábamos cuando se acercó Esthercita a ofrecernos un pedazo de pastel. Por más que intenté estar a solas con Esthercita no pude, siempre estaba hablando con x o y persona. Valentín un amigo de infancia llegó a la casa y nos fuimos a dar un vuelta al pueblo, estando allá recordé las palabras de mi tía y le pregunté de golpe a Valentín: Mi tía dice que el profesor de la escuelita pretende a tu prima Esthercita, pero la´tía dice que ella parece estar enamorada de otro hombre, y que sospecha de que sea alguien de este pueblo, tu sabes algo?, Valentín sonrió y me dice ella está enamorada de otro hombre pero no es ninguno de este pueblo, vaya si nolo sé yo, el hombre que ella quiere eres tú, te ama desde niña, yo esquivando ya la plática le digo déjate de hablar tonterías, y vamos a tomar un refresco, dejando ya por un lado ese tema. Regresé como a las diez de la noche, Mi tía estaba por irse a dormir, guardé el Jeep y me fuí a acostar, cuando entré a la habitación, oí una voz que me dijo, no enciendas la luz, te he estado esperando, y vengo por mi regalo de cumpleaños, y es una noche contigo.

Sentí su perfume suave con olor a hierbas, percibía aún el olor a jabon en sus hombros, nos besamos, fué un besolargo y dulce, besé sus pechos duros y paraditos, bajé a su vientre y luego a su vagina, de vellos ralos y de enorme clítoris, le chupé por largo rato hasta hacerla gemir de gozo y sentí sus líquidos acidos y saladirtos cuando la hice venirse, ella bajó a mi pene y empezó a chuparlo con ternura, y me dijo que estaba enorme, mucho más grande de cuando la besó hacía cuatro años, boca arriba estaba dispuesta recibirme, coloqué mi verga en su entrada, tenía una como posita creada por sus jugos vaginales, lentamente se fué deslizando la cabeza en su vagina, hasta llegar a sus himen, empujé, ella gimió y me dijo que despacito por favor, empujé de nuevo y el himen resistió el embate, ella se empujó con sus caderas hacia arriba y empujé de nuevo, sentí el crujido de su himen al romperse, y me fuí al fondo, ella jaló aire, y luego lo soltó, y empezó a moverse hacia arriba buscando que el pene terminara de entrar, lentamente empezé a entrar y a salir, le besé el rostro sentí lo saladito de sus lagrimas que corrían por sus mejillas, la besé con pasión nuestras lenguas se fundieron, y luego me dijo que había soñado muchas noches por largo tiempo con ese momento, ser mía aunque fuera por una noche.el dolor y ardor poco a poco se volvió placer, se movía a mi ritmo, sentía su estrechéz y lo caliente de su vagina, con un placer exquisito, no pude más y me corrí adentro de ella, al sentir lo caliente de mi leche llenandola la excito más y la seguí bombeando hasta sentir sus muslos apretar mi cintura, se estaba viniendo como loca, ahogando sus gritos en mi boca y cuello, había tenido su primer orgasmo bién clavada por 8 pulgadas a fondo, y así conla pija metida nos dormimos de lado frente a frente. Por la mañama casi a las cinco, me dijo que la penetrara nuevamente ya que tenía que levantarse, dificultosamente entré su ardor era grande, pero su deseo era mayor, no tardó mucho en venirse, estaba super caliente, la puse a gatas y le entré al fondo para depositarle nuevamente mi leche, mientra quitaba la sábana manchada de sangre y semen, susurrando me preguntó que cuando regresaba, le dije 8 días, ella me contestó vengo a la noche, y así llegó a mi cuarto los días restantes y amanecíamos juntos, un año después se casó con el maestro de la escuelita, pero siempre que llego se escapa para estar conmigo.