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Recordad que tras prostituirse por primera vez Mamen, en casa de Marisa y dar trabajo en su finca a su primer cliente, el moro Adham, manda a Matías que lleve a este a su casa y así aprenda el camino para recogerle el lunes cuando marchen a Ciudad Real. Luego ya en la sala de control delante de su hijo Javier, me da las gracias por haberla convencido para que hiciera por primera vez de puta. Luego su hijo me dice que los lleve a su casa y yo marche a la mía, pues debe de estar mi marido a llegar y él está deseando de follar con su madre, pues verla hacer de puta le ha puesto muy caliente.
Yo hago lo que me indica y tras dejarles en casa de Javier, llamo a Matías y quedo con él para el día siguiente a las 9,00 en su hotel. Luego me dirijo a mi pueblo a mi casa, cuando llegue a casa mi marido aún no había llegado, entonces me puse a prepararle su equipaje y cuando acabe, me senté a esperarle, y hasta aquí mi relato anterior. Esperando que hayan cogido el hilo ahora continuo con el relato.
Cuando llegó mi marido, le saque la conversación del tema de querer ser cornudo, entonces le pregunté:
“¿De verdad sigues queriendo que te ponga los cuernos?, ¿te das cuenta que si consiento, van a disfrutar de mi cuerpo otros hombres y que corremos el peligro que me guste y no pare? Bueno ahora en mi estado no creo que a muchos les apetezca estar conmigo en la cama, pero cuando de a luz….”
Él no me deja acabar mi frase y me contesta:
“Sabes de sobra que si lo deseo y que me gustaría ver como otros te poseen, si es posible en mi presencia, sino tú sola con él y después me cuentas como lo habéis hecho. Sabes que me excita mucho el pensar que otros te poseen y te follan, es una sensación que no sé explicarte pues a la vez que me excita pensarlo me cabrea el que te entregues a otro, no sé, no sé, pero es tan fuerte las ganas de verte o saber que estas con otros que gana a la parte de mi ser que se enfada de que te puedas entregar a otros. “
Yo le digo:
“¿Y tú vas a consentir si mi amante me pide que este fuera de casa con él una semana o quince días o una temporada, que yo lo haga?”
Él viendo que podía tener oportunidad de conseguir lo que tanto deseaba, me dice:
“Si eso supone el que te entregues a otro y me pongas los cuernos, no dude que si lo consentiría”
Le digo:
“Y si eso ocurriera ¿Qué haríamos con la criatura que viene, porque por el mayor no es problema porque esta fuera estudiando, pero este será pequeño y estará con nosotros? ¿Te quedarías ese tiempo cuidándole tú? ¿Consentirías que se lo dejáramos a Inés o a Marisa?”
Él se queda un rato pensativo y me contesta:
“Si se pueden quedar alguna de las dos con la criatura y cuidarla esos días, sería fantástico, caso contrario yo buscaría una persona que la cuidara mientras yo trabajo y luego me encargaría yo. Ya ves que no tienes problema, que lo podemos hacer si tú quisieras. Me gustaría tanto”
Yo le contesto:
“Bueno, no es ningún sí, pero te prometo que lo pensaré. Y caso de decidirme no lo haremos hasta después de dar a luz, conforme, ¿estás contento?”
Él se acerca a mí y dándome un fuerte abrazo me coge mi cara y acercando su boca a la mía me da un morreo de campeonato. Yo le correspondo y cuando acaba de besarme, me dice:
“Gracias, mi amor, por pensarlo, si es posible que sea que sí, no me importa esperar para hacerlo a después de que hayas parido. ¿Si quieres puedo ir mirando y buscando candidatos?”
Yo entonces le digo:
“Aún no he dicho que sí, pero mira caso que al final ceda y decida ponerte los cuernos, no serás tú el que me busques amantes, a él que o los que se acuesten conmigo los elegiré yo, que para eso voy a ser yo la que esté con ellos, ¿no crees?”
Dice:
“Sí, si mi amor, lo elegirás tú y serán los que tú quieras y cuando quieras”
Yo entonces le digo:
“Venga vamos a cenar que ya va siendo hora”
Cenamos y tras cenar estuvimos viendo un rato la televisión, para luego acostarnos. Al estar juntos en la cama, le notaba muy excitado (seguramente porque pensaba que podía ceder a su capricho de ser cornudo y seguro que ya me imaginaba en los brazos de alguno) no hacía más que acariciarme y sobar mis pechos, llevaba también su mano a mi entrepierna y trataba de acariciar mi sexo y clítoris con el afán de ponerme caliente, yo le dejaba hacer, aunque no tenía intención ninguna de joder esa noche con él, quería reservarme para estos días que venían dar todo lo que pudiera a mi querido Matías. Por eso al cabo de un rato cogí con mis manos su polla y comencé a acariciársela comenzando luego a meneársela y al final le masturbe hasta que conseguí que se corriera y se quedara más tranquilo, entonces le dije:
“Mi amor, hoy no estoy muy bien para hacer el amor, por eso te he hecho esta paja hasta que te has corrido, no sé qué me pasa que me encuentro muy pesada algo mareada y con dolores en la tripa (era mentira, pero sabía que diciéndole esto no insistiría). Cuando vengas de tú viaje te prometo que si quieres y me encuentro bien, lo haremos hasta que te canses. Además mañana tienes un largo viaje y tienes que descansar”
A la mañana siguiente mi marido se levantó a las 6,00 de la mañana para ir al aeropuerto y coger el avión. Una vez que se duchó y preparó se acerco a la cama donde yo me encontraba y acercando su cara a la mía me dio un beso en mi mejilla (yo me hice la dormida). Luego cogió el equipaje y salió hacía el aeropuerto. Yo aún me quedé en la cama y a eso de las 7,45 me levanté, me duche, desayune tranquila, hice la cama y tras recoger la loza en el lavavajilla. Luego me senté un rato en uno de los sillones del salón y estuve pensando en la conversación que la noche anterior había mantenido con mi marido, creo que yo había sido suficientemente hábil para llevarlo a mi terreno y por su sitio para ir allanando el camino , con el fin de proponerle lo que Matías me dijo que quería es decir: tenerme con él al menos 15 días al mes, lo único que tenía que hacer es seguir haciéndole creer que me costaba dar el paso y luego ir convenciéndole que lo de irme con su corneador durante unos días no se sería esporádico sino que sería continuo en espacio de cada 15 días. Después me levanté y preparé un bolso de viaje con la ropa que me llevaría para estar los próximos días con Matías. A las 8,15 comencé a prepararme, quería estar guapa para mi amante, el me esperaba a las 9,00. Busque la ropa interior más sexi que tenía dado mi estado y luego me puse un vestido lo más sexi y atrevido que pude (dado mi avanzado estado de embarazo) que provocara e insinuara pero que a la vez no enseñara y que fuera fácil de quitar. Una vez vestida y arreglada a eso de las 8,40 horas, cogí el bolso lo metí en mi coche y me dirigí hacia Alcobendas al hotel donde se hospedaba Matías.
Cuando llegue aparqué en el garaje del hotel y como el día anterior ya había estado en la habitación y sabía el número de ella cogí el ascenso y marque directamente el piso donde se encontraba la habitación, al llegar ante la puerta de la habitación llame y del otro lado oí una voz que decía:
“Quién es?
Yo contesté:
“Soy Esperanza, Matías abre por favor”
Él a oír que era yo abrió la puerta y me hizo pasar, estaba solamente con el calzoncillo puesto y pude ver el gran bulto que se marcaba en el mismo, él se sentó en el sillón del escritorio y yo me senté encima de la cama, procurando abrir mis piernas para que él pudiera ver mi entrepierna y mis bragas.
Él comenzó a contarme con todo lujo de detalles como lo había pasado con Inés, y el cambio que había dado desde que le dejo. Me dijo que se había convertido en una verdadera puta, que sabia follar como antes no lo hacía y que desde luego sabía conseguir hacer que un hombre se corriera cuando ella quisiera. Alabó su cuerpo y como se le había puesto y lo bien que la sentaba su embarazo y como la habían crecido las tetas, y eso.-que ya las tenía grande- (me dijo). Comentó también que Inés le dijo que le perdonaba como la había tratado mientras estuvieron casados, pero que no volvería a vivir con él, pero que si quería podían de vez en cuando estar juntos, bien visitándola en la casa de Marisa y pagando o bien si mi dueña (lo decía por mi) quiere lo podíamos hacer gratis, pues me ha gustado hacerlo de nuevo contigo y he podido observar que has mejorado mucho en cómo tratar a una mujer. Yo abriendo y cerrando mis piernas, le escuchaba atentamente y procuraba ir calentándole cada vez más, procurando ir enseñándole como si no quisiera la cosa más partes de mi cuerpo, tras dejarle hablar durante unos 15 minutos le dije:
“Ya veo Matías que has disfrutado el rato que pasaste con Inés, yo estuve viéndote todo el tiempo y no se me escapo ni un detalle de tu placer, me alegré mucho de verte disfrutar y ser feliz. ¿Por qué no has venido antes a vernos? En la finca me dijiste que vendrías a vernos y a follar conmigo y que te beberías toda la leche que dieran mis cantaros, y hasta hoy no has vuelto cerca de tres meses después “
Él me contesta:
“No me atrevía a venir a verte, dado que te fuiste tan enfadada conmigo por el tema de Inés. Si no te hubieras ido así me hubieras tenido aquí prácticamente si no todas las semanas sí cada quince o veinte días, pero pensé que no querrías verme después de aquello.”
Yo le contesto:
“La verdad es que sí salí enfada de allí contigo, por como tratabas a Inés y si te la compré y adquirí todos los derechos sobre ella, fue para librarla de ti. Pero eso ya ha pasado, y ahora que de nuevo he estado contigo y he comprobado lo mucho que has cambiado en la forma de tratar a una mujer y de saber dominarla y llevarla a tu terreno, no quiero perderte y deseo estar el mayor tiempo que pueda contigo y para comenzar quiero cumplir mí promesa de que cuando vinieras a verme a Madrid beberías toda la leche de mis cantaros, ven acércate “
Él haciéndome caso, se levanta del sillón se acerca a la cama y dándome la mano tira de mí hacía él y hace que me ponga de pie delante de él. Lleva una de sus manos a mi teta derecha y comienza a tocármela durante unos segundos por encima de mi vestido, luego me bajo un tirante y tiro bruscamente del escote hacia abajo, sacándome el pecho derecho por encima del mismo. La teta hizo un movimiento de vaivén arriba-abajo y se quedo fuera. Nos quedamos los dos mirando cómo se movía la teta unos segundos hasta que se paro. Matías alargo de nuevo la mano y me saco la teta izquierda del mismo modo. Y de nuevo los dos miramos el movimiento de la teta y nos echamos a reír. Me quede con las dos tetas al aire por encima del vestido y seguimos hablando, él entonces me dijo:
“Esperanza, sigues pensando como ayer respecto a tu proposición de querer seguir siendo mi puta, mi esclava, ¿quieres de verdad pertenecerme en todo lo sexual? ¿Me harás caso en todo y te dejarás hacer todo lo que yo quiera? ¿Serás capaz de aguantar mis castigos, mis azotes, mis latigazos, etc.? ¿Serás capaz?, si es así y sigues dispuesta a ello dímelo y pídemelo de nuevo, aunque hasta el domingo por la noche no tienes que darme la respuesta verdadera y en serio. Esta pregunta te la haré todos los días, no quiero que vengas forzada a mí , quiero que vengas porque tú quieras y porque sientas la necesidad de estar conmigo y a mi merced, quiero que seas mi esclava sumisa por placer y porque tú y solo tú y tu voluntad quieran”
Diciendo esto me agarró uno de mis pezones y tiró con fuerza de él haciéndome daño , cuando iba a emitir un grito de dolor él acercó su boca a la mía (callando de esta forma mi grito) y metiéndome toda su lengua dentro me dio un fuerte beso depositando gran cantidad de su saliva dentro de mi boca que al acabar el beso me dijo que la tragara, cosa que yo hice. Entonces le dije:
“Si Matías, quiero ser tuya, pertenecerte en todo, que hagas conmigo y con mi cuerpo lo que tú quieras, si me quieres castigar podrás hacerlo, si me quieres azotar, podrás hacerlo, si quieres prostituirme podrás hacerlo, si quieres entregarme a otros, podrás hacerlo, te necesito y solo quiero está contigo cuando no estoy contigo deseo que el tiempo pase rápido para de nuevo estar contigo, te lo digo hoy y mi respuesta será la misma el domingo por la noche , QUIERO SER TUYA, QUIERO QUE SEAS MI AMO, QUIERO SER TUYA LO DESEO CON TODAS MIS ANSIAS. Ayer estuve hablando con mi marido y ya le voy preparando para que acceda a dejarme estar contigo y a que me vaya a vivir contigo por lo menos de una semana a quince días todos los meses y que tú los otros quince días del mes puedas venir aquí a verme cuando puedas y quieras”
Yo el estar así expuesta a él y declararle mi total sumisión me excitaba mucho, estar así expuesta en una habitación de un hotel, hablando como si fuera lo más normal del mundo mostrar mis pechos y que él me los sobaras, estrujara o hiciera con ellos lo que quisiera, me excitaba y me ponía calienta, esto hacía que comenzara a tener ganas de él, de ser poseída por él, darme y ofrecerme toda a él para que hiciera conmigo en ese momento lo que le apeteciera.
Después, volvió a coger la parte superior de mi vestido donde la había dejado al dejar mis pechos al aire y tirando hacía abajo de él me le fue deslizando por mi cuerpo hasta mis rodillas, yo entonces alce primero una pierna y luego la otra sacándomele y dejándole tirado en el suelo de la habitación. Luego él cogiéndome de la cintura y llevando una de sus manos a una e mis tetas y sin dejar de tocar y sobar esta nos acercamos a la cama donde nos sentamos. Él entonces comenzó a tocarme con una mano una pierna y con la otra siguió en la teta que no había dejado de sobarme, bajo su boca al pezón de esta y comenzó a succionar a la vez que con la mano me la apretaba, comenzó a ordeñarme como a una vaca esta ubre mía que era (por mi deseo) totalmente suya, tratando de sacar la leche que el pecho contenía. Con la otra mano acariciaba la parte interna de mis piernas, cada vez subiendo más, yo cerré los ojos y abrí más las piernas en la cama. Comencé a gemir suavemente. El coño me estaba chorreando, noté como su mano se aproximaba a mi coño, así estuvimos un rato, el mamando y bebiendo mi leche que mi pecho le proporcionaba y yo disfrutando del placer que su mamada en mi ubre y su caricia en mi coño me proporcionaba, no pude por menos que comenzar a emitir sonidos de placer:
“Aaaahhhh, siiiii que bien, sigueeee mi amoooor, como me gustaaaaa….aaahhhhh que placeeeeerrr me estas dandoooooo….siiiii….mi amooooorrrr…”
Entonces Matías se incorporó un poco y me beso, sin dejar de manosearme la teta, al hacerlo me pasó parte de la leche que había conseguido extraer de mi cántaro y yo me la trague con sumo gusto. Él bajo las dos manos a mi coño. Intente rodearlos con mis brazos, y acercarle a mí, pero era difícil en la postura en la que estaba, y porque me temblaba todo el cuerpo. Con una de las manos tiraba de mis bragas con fuerza, como si quisiera hacerme daño, hasta conseguir meter la prenda en toda mi raja tanto de mi sexo como de mi culo y con la otra no dejaba de acariciar y masturbar mi clítoris. Yo muy excitado cogí con mis manos, la otra teta que él no había chupado y se la lleve a su boca y con la ayuda de mis manos comencé a manoseármela, a apretarla, estrujarla en definitiva a ordeñarme para darle a mi amante la leche que en ella pudiera haber. Esta iniciativa mía le debió de gustar porque con cara de alegría se puso a chupar y succionar de mi pezón y al poco rato comenzó a tragar la leche que mi cuerpo le proporcionaba. Así estuvimos un buen rato, yo en todo este tiempo no dejaba de emitir suspiros y lamentos de placer y a él de vez en cuando también se le escapaban algunas expresiones como estas:
“Oooohhhh, que rica, que ricaaaa esta tu lecheee, sigueee sigueee apretándotelas que salga más, quiero bebeer maaassss, asiiii, asiiiiii putaaaaa…. No pares no dejes de ordeñarteeee, me encanta tu lecheeee……”
Luego dejo de mamar mi pecho y acercando de nuevo su boca a la mía me traspasó parte de mi leche, tragándomela unida a su saliva con gran placer, el continuo besándome como un loco, el morreo de Matías era cada vez más bestia, me mordía los labios, y me recorría las encías con su lengua, metiéndome bastante de su saliva en mi boca. Dejo la mano que tiraba de mis bragas y las subió hasta mis pechos comenzando a estrujármelos con fuerza y me retorcía los pezones, haciéndome daño, pero me gustaba. A veces bajaba la cabeza y me mordía las tetas y los pezones, también en plan salvaje, para sacar más leche de ellos para luego volver a subir a mi boca y depositarla en ella para que yo me la tragara. Él estaba muy excitado, notaba su erección al rozarlo con mis brazos.
Yo había abierto todo lo que podía mis piernas, Matías comenzó a meterme primero un dedo, luego dos, comenzó a meter y sacarlos lentamente de mi coño y con el dedo pulgar (que sustituyo a los otros en su labor) siguió acariciando el clítoris a la vez que me decía:
“Eres una zorra, estas tan caliente que tienes el coño hecho unas natillas, que dedazo de puta esta echaaaaa…..aaahhhhh …que caliente estaaassss……quieres que te folle…..quieres que te folleeeeee…..quieres mi rabo….heeeee guarraaaa …quieres que te folllleeeee di, diiiiii quieres que te folleeeeee……”
Yo le contestaba:
“Siiiii…..mi amoooor siiiii soyyyy tu guarraaaaa , tu putaaaaaa …. Me estoyyyy coriendooooooo……ahhhhhhh….meeee vieeeneeeee otroooooo orgasmooooooo…..me coroooooooo, me corroooooo……siiiii , siiiii jodemeeeee….siiiii quieroooo que mejodaaaassss ….. quiero que me folleeeesssss…”
Estuvimos unos minutos así, hasta que me corrí como una cerda, soltando jugo por el coño y babas por la boca. Entonces él se separó de mí, sentándose en la silla, y me dejo unos segundos hasta que recobre el aliento, y me dijo:
“Sé que estas muy caliente y yo también lo estoy, pero me voy a aguantar y tú harás lo mismo y no te voy a follar ahora, pero te prometo que esta tarde noche y toda la noche follaremos hasta que no podamos más te lo voy a dejar de sobra. Y además como premio probarás algunas cositas que compararemos hoy en el sex-shop, si logras convencer a Javier para quedarse unas horas solo con su madre y nosotros poder ir a comprar estas cositas “
Yo le contesté:
“Matías, me has puesto muy caliente, y aunque me he corrido como una perra y me ha encantado la masturbación que me has hecho, tengo muchas ganas de que me poseas y me folles, pero si tú deseo es que me aguante hasta la tarde, muy a mi pesar así lo haré”
El entonces se baja él calzoncillo y se le saca tirándolo junto mi vestido y sosteniéndose su polla tiesa y dura como una barra de hierro me dice:
"Yo ya he cumplido contigo, ahora te toca a ti".
Comprendí perfectamente a que se refería, y me arrodillé delante de él entre sus piernas, que seguía sentado en la silla. Le miré a los ojos, mientras muy suavemente le cogía entre mis manos su deseada y bella polla. Me sujeto de la nuca y empujo violentamente mi cara contra su paquete. Comprendí lo que quería y yo misma comencé a frotar mi cara contra su erecto miembro, acariciándolo, pasando mi lengua a lo largo de todo su tallo para acabar en sus gordos cojones , que también chupaba y lamía. Estuvimos así unos 4 ó 5 minutos. Después en una de sus pasadas por su miembro al llegar a su prepucio , jugué en él con mi lengua y abriendo mi boca me metí dentro todo su capullo, llenándome toda mi boca, él entonces apretó con su mano en mi nuca haciendo que su herramienta me entrara completamente en mi boca y me llegara hasta mi garganta, donde la mantuvo durante un rato hasta que vio que me ponía roja al no poder respirar, entonces me dejo de apretar la nuca y yo retrocedí sacando un poco su polla y así poder coger aire y respirar, la operación la estuvimos realizando durante unos diez minutos. Mientras duró esto, ambos gemíamos de placer, de vez en cuando me daba una pequeña bofetada, a la vez que me insultaba, para luego comenzar un acelerado mete y saca como si me follara la boca hasta que conseguí que él se viniera dentro de mi boca, tragándome todo su semen, en ese momento el comenzó a darme bofetadas en mi cara y espalda, a medida que se corría y llegaba a la cima de su orgasmo me daba más fuerte a la vez que me decía:
“Toma so puta, topa por guarra, asquerosa…zorraaaaa rameraaaaa, toma todo mi semen, tomaaaaaa…..no era eso lo que queriaaaassss, ¡eh!!eh no querías mi lecheeeeee…..! toma trágatela ….tomaaaaa perraaaaaa…..ahhhhhhhh toma toda mi lefaaaaaa…me ..corrooooooo……tragatelaaaaa……todaaaaa….”
Él se deja caer para atrás en la silla y yo quedo en el suelo de rodilla, agotada del esfuerzo realizado en la mamada y saliéndome parte de su corredura por la comisura de mis labios. Luego él me da su mano y me dice:
“Gracias, mi amor, ven siéntate en mis piernas”
Yo hago lo que me dice y me siento en sus piernas siento como su polla aún erecta roza mis muslos, manchándolos de los restos de su corrida, luego acerca su boca a la mía y metiendo su lengua dentro recorre toda mi capacidad bucal rebañando los restos de su semen con ella y tragándose estos con la saliva que tengo yo en mi boca y él en la suya. Luego acariciando con mucha delicadeza mi cuerpo, me pregunta:
“¿Te ha gustado? ¿Te he hecho daño cuando te he pegado?, quiero que me conozcas en todas mis facetas y que pruebes en estos días todo tipo de trato que te daré, para que sepas lo que puedo hacerte y haré si sigues queriendo estar conmigo y pertenecerme, quiero que estés segura y luego no me censures como te trato”
Yo le digo:
“Si me ha gustado me ha encantado como me has tratado, soy tuya y podías hacer lo que quisieras con mi cuerpo, aunque algunos de los azotes me han dolido, no me importa, he disfrutado y he sido feliz, te pertenezco, te quiero, quiero estar contigo, si para ello tengo que sufrir castigos como este o mayores los soportaré yo solamente quiero pertenecerte y ser tuya”
Él entonces mira el reloj, son las 10,35 h. y me dice:
“Es tarde, tenemos que arreglarnos, las 11,00 llegan en seguida y a esa hora hemos quedado en casa de Javier, yo aún tengo que ducharme y prepararme. Tu enjuágate la boca y lávate tu panocha en el bidel, te vistes y te vas para allí, es conveniente que llegues bastante antes que yo, para que Javier no sospeche que nos vemos antes de ir a su casa, pero antes quiero que lleves metida hoy hasta que yo te diga que te lo puedes quitar estas dos toallas de bidel, una en tu coño y la otra en tu culo. Si Javier se da cuenta y te dice que porque las llevas, ya te inventarás alguna respuesta para que él se quede a gusto. Y también quiero que lleves puesta estas gomas en tus pezones, para que se te marquen y estén todo el día duros”
Entonces él se me acerca y cogiendo dos gomas las da varias vueltas reduciendo su tamaño (diámetro) y me las coloca cada una en cada uno de mis pezones, haciéndome bastante daño la presión que ejercen sobre mis aureolas y pezones, quedando estos completamente erectos. Yo entonces me dirijo al cuarto de baño y hago lo que me dice, al acabar de lavarme cojo las toallas las enrollo como si fueran dos rulos y me meto uno en mi sexo y el otro con un poco más de dificultad en mi culo, me siento extraña con ellas ahí metidas, pero es lo que quiere Matías y así lo hago y soporto. Luego me entro mis pechos dentro de las cazoletas del sujetador, me entro mi vestido y una vez vestida me miro al espejo y veo que mis pezones se hacen notar bajo la tela del vestido. Él al verme se acerca y dándome dos golpecitos , no muy fuerte en mis pezones, me produce un fuerte dolor en los mismos, emito un grito de dolor, el entonces se acerca a mí y con una sonrisa en su cara me da un beso y se despide de mí. Yo bajo al garaje y cogiendo el coche me dirijo a la casa de Javier.
Cuando llegue a casa de Javier, llame a la puerta dos veces y no me contesto nadie, entonces cogí la llave que tenía yo del piso y entré, al pasar la puerta pude oír ruido y gemidos en la habitación de Javier, entonces me dirigí hacía ella, estaba la puerta medio abierta, miré hacia dentro y pude ver a Javier desnudo tumbado en la cama y sobre él sentada y ensartada por su polla a Mamen (también desnuda ), saltando sobre él cabalgándose y metiéndose una y otra vez su polla hasta lo más hondo quela cabía, Mamen se agachaba y le ponía sus tetas en la boca de javier, se la veía que disfrutaba , ella le decía:
“Mmmmmmm, muerde cabrón, muérdeme los pezones, que estoy caliente, muerde hijo, aprieta fuerte mientras me follas, ahhhhh, siiiiiiii, así, siiiiii, muerde a tu madre, mmmmm, siiii, así, ahhhhh, ahhhhhh”.
Javier haciéndola caso la mordía sus grandes y maduros pezones mientras se la seguía follando y comenzó a decirla:
“Si madre, sigue así puta, ofréceme las tetas mientras te follo puta, siiiiii, mmmmm, eres mi puta mamá, mi putaaaa, muévete ramera, muévete así, mmmmm.”
Mamen estaba como loca con las cosas e insultos que su hijo le decía y cabalgaba sobre él como poseída, las palabras fuertes y obscenas que Javier la decía la excitaban demasiado y comenzó a balbucear y decir:
“Me corro hijo mío, tu madre se corre como una puta, no voy a poder evitarlo mucho tiempo más, me has puesto a mil con tus palabras, siiiiiii, hijo, me corrooooooooo, fóllate a la puta de tu madre,siiiiiiii,mmmmm, sigue hijo, dame, dame, me siento una putaaaaa, siiiiiiii, dame, sigue, mmmmmm, ahhhhhhhh, macho mío, ahhhhhhh, me tienes en tus manooooosssss…..aaaaahhhhhh … que gustoooooo me estas dandooooo, correteee tu tambiénnnnnn….. sigueeee, sigueeee no pareeees haré siempreeeee lo que tú quieraaaas…..ahhhhhhh…….me corrooooo……”.
Mamen empezó a temblar y sus ojos se cerraron, su cara se estremeció y su cuerpo temblaba precioso sobre su hijo, este la decía:
“Sí mamá, aquí lo tienes, tómalo puta, siéntete así como mi putaaaaa, lo que eres mamá, mi putaaaaaaa”
Él coge del cuello y la acerca a su cara y la sigue diciendo:
“Sigue mamá, córrete como una guarra encima de mí , di que serás mía y harás siempre lo que yo te diga, di que eres mi putaaaaa, mi puta para siempreeeee…..”
Javier comienza por la excitación a darla fuerte azotes con su mano abierta, y ella le contesta:
Siiii hijooooo, siiiii, soy tu putaaaaa, siempre seréeee tu putaaaaa…… tu zorrraaaa……..tu golfaaaa…..y siempre haré lo que tu quieraaaassss……..”
Entonces, el se tensa, la aprieta fuerte agarrándola de su culo y sin poder aguantar más comienza a decir:
“ Siiiiiiii, me corro, me corrooooooo, ahhhhhhhhh, tómalo perra, tómalo de tu hijooooooo, siiiiiiii, siiiiiiiiiiiii, eres una puta madre. Mmmmmm que placeeeerrrrr………”
Se corrieron los dos juntos a la vez debió de ser un orgasmo fuertísimo que duró unos minutos, ella se había excitado muchísimo en esa follada y cayo agotada, rendida sobre él. Javier en mientras jadeando de placer la abrazó con fuerza mientras su polla terminaba de eyacular chorros de semen en el interior de su vagina y que la salía por su entrepierna, a él también se le veía fatigado. Yo entonces me aleje un poco de la puerta pero sin dejar de ver la escena (de tal forma que yo les pudiera ver y ellos a mí no.
Ella se levantó y al hacerlo se saco lo polla de Javier de su coño y este comenzó a chorrear líquidos, era el semen de él mezclado con los jugos de ella y se fue al baño a asearse, él cogió su calzoncillo y la camiseta del pijama y se incorporó. Yo entonces corriendo me fui hacía la puerta y haciendo con que llegaba dije alzando un poco la voz:
“Hay alguien en casa, ya estoy aquí, despertad dormilones”
Javier entonces sale de la habitación y respondiéndome me dice:
“Si ahora salimos, mamá está en el baño duchándose, ya voy”
No tardó, salió y se dirigió a mí, me dio un beso rápido en la boca, me supo raro, noté el olor en su cuerpo de su amante, aunque era su madre, opero no dejaba de ser una mujer, se le notaba sudoroso. Luego se dirigió hacía el sofá del salón, se puso cómodo y me dijo:
“¿Quieres tomar algo?, ahora cuando salga mi mamá me ducharé yo y después comemos algo y cuando venga Matías nos vamos. ¡Uf! si son las 11,10 y Matías aún no ha llegado, que raro”
Mamen no tardó mucho en salí, envuelta en una toalla, tapándose desde un poco por encima de las aureolas de sus pechos hasta bastante más arriba medio muslo, prácticamente donde empezaba su entrepierna, al entrar dijo:
“Buenos días Esperanza, todo bien, Javier ya puedes pasar a ducharte”
Diciendo esto se sentó también en el sofá y encendiendo un pitillo, me ofreció otro, que yo rechace y me invitó a sentarme a su lado y me dijo:
“Esperanza, ha sido una noche movidita, para decirte verdad apenas hemos dormido. Mira ayer Javier llego tan excitado de haberme visto hacer de puta con el moro, que apenas nos dejaste en casa fue subir, me quitó toda la ropa, el se desnudo y comenzó a follarme como loco, hemos estado toda la noche dale que te pego seguido hasta las 5 de la mañana en que paramos para dormir un rato, y esta mañana al despertarnos ahora hace un rato a las 9,30 de nuevo hemos vuelto hasta prácticamente ahora hace menos de cinco minutos que hemos acabado de echarnos el último polvo, ha sido fantástico, me ha dejado molida, menos mal que la ducha me ha relajado y me ha vuelto a poner en forma. Date cuenta lo excitado que vendría Javier anoche que ha habido veces que mientras me follaba cuando me nombraba me confundía el nombre y en varias ocasiones me llamó Inés, sería que como también la vio follar con Matías, se confundiría, pero bueno a mi no me ha importado pues me ha subido a la cima del placer, ojala lo hubiéramos comenzado hacer antes. Me excita mucho sus comentarios obscenos sobre mí cuando me jode, eso me de que me insulte, me llame puta y otras lindezas me pone a cien….”
Yo como si no hubiera entendido y como si no tuviera importancia la digo:
“Entonces Javier anoche en medio de la batalla campal de sexo que os trajiste en varias ocasiones te llamo Inés, para hacer eso debía de estar muy excitado o estar pensando que se estaba follando a vuestra antigua sirvienta en vez de a ti”
Ella dándose cuenta que no me había gustado que Javier pensara mientras follaba que lo hacía con Inés me dijo:
“Bueno no sé si era Inés o es que me decía algo cariñoso y a mí me sonó como Inés, al haberla visto esta tarde en casa de Marisa y hacer tanto tiempo que no la veía , es probable que la que pensará en ella fuera yo y lo que me decía Javier me sonara por su nombre”
Desde luego, no sabía cómo arreglar la metedura de pata que había cometido, yo hice como que la explicación me convencía, pero ya lo hablaría yo con Javier en otro momento, y la dije:
“Seguramente Mamen habrá sido eso que tú dices”
Al poco rato salió Javier ya vestido y su madre le preguntó:
“Javier aunque este tu novia delante, quiero preguntarte una cosa: “¿Te gusta llamarme puta hijo?” ¿”Quieres que tu madre lo sea?, pues cuando me has estado follando hace un rato me lo has dicho unas cuantas de veces, no te preocupes no me importa es más me excita oírtelo decir”
Él la mira sonriente y la contesta:
“Ya lo eres madre, sigues casada con papá y follas conmigo, te follas a tu hijo y eso estando casada te convierte en eso, en puta y si fuera poco has ejercido de ello en una casa de putas”
Ella calló y al momento asintió con la cabeza y dijo:
“Lo sé, pero me gusta hacerlo contigo y vender mi cuerpo que alguien pague por tenerle y si eso me convierte en una puta pues lo soy, además hijo me pone muy excitada oírtelo y decirme que lo soy.”
Entonces Javier la dice:
“Lo eres madre de aquí en adelante actuarás como tal, como mi puta, lo que eres y venderás tu cuerpo al que solicite tus servicios, bien en una casa o en la carretera o en cualquier esquina, te prostituirás como Esperanza e Inés y además tendrás todos los amantes que quieras”.
Ella con una sonrisa y muy sumisa le contesta mirándole fijamente a los ojos:
“Sí hijo, como desees”.
Entonces él la dice:
“Venga mamá, pasa al cuarto y ponte la ropa que he dejado encima de la cama hoy irás vestida con esa ropa. Y date prisa que tenemos que desayunar y todo y es ya bastante tarde”
Ella haciéndole caso se levanta y se va al cuarto para vestirse. No hace más que entrar en el cuarto y llaman a la puerta, era Matías que llegaba. Eran las 11,20. Cuando entra en el piso dice excusándose:
“Perdone D. Javier, que me presente a esta hora, es que ha habido un accidente en el camino y nos han tenido parado un buen rato y como yo no conozco Alcobendas no he podido coger ningún otro camino alternativo”
Javier le contesta:
“Ya nos tenias preocupado, por si te había pasado algo. Por la tardanza no te preocupe mi madre aún no está preparada y encima aún tenemos que desayunar”
No habían pasado ni cinco minutos cuando salió Mamen vestida con la ropa que le había elegido Javier, parecía una puta callejera, de esas baratas de carretera. Llevaba puesto unos tacones altos negros, unas medias de rejillas de agujeros grandes, una minifalda negra (más que falda parecía un cinturón ancho), que no la tapaba ni siquiera los molletes del culo y por delante se la veía toda la entrepierna, el cuerpo llevaba una camisa blanca semi transparente que más que tapar dejaba a la vista todo lo que llevaba debajo de ella. A través de la camisa se podía ver un sujetador de cintas e cuero, cuya función era solamente sujetarla sus pechos y mantenérselos erguidos. Luego Javier se acercó a ella y la desabrocho tres botones de la blusa dejándosela prácticamente abierta, solo la dejó abrochado el que la quedaba a la altura del ombligo. Luego subiéndola la faldita nos enseño las braguitas que la había puesto, eran también de cintas de cuero y no la tapaba ni su sexo ni su culo, simplemente eran unas cintas haciendo la parte laterales de las bragas, para que simulara que llevaba esta prenda. Acaba la indumentaria con una torera negra que la llegaba un poquito por debajo de sus pechos y que de ancho no la tapaba ni siquiera la zona de los pezones. Yo no me pude callar y dije:
“Javier, no te da vergüenza vestir a tú madre como una verdadera puta callejera, una puta de carretera o de esquina”
Javier me contesto:
“No, no me da vergüenza, porque tú misma lo has dicho, porque hoy va a trabajar de puta de carretera, ahora cuando acabemos de desayunar cogeremos los coches y la furgoneta que he alquilado y nos iremos a la N-1 a la altura del cruce de Algete, entre la entrada de la fábrica de cervezas y una gasolinera que hay allí y ahí es donde se va a poner a trabajar hoy. Ayer hizo de puta en una casa de putas cobrando una cantidad decente por sus servicios, pero hoy hará de puta barata y no cobrará más de 20€ por servicio normal (de media hora), 5 € por mamarla, 10€ más a los que quieran hacerlo sin preservativo ( y si hay alguno que quiera no se opondrá) y 10€ más al que quiera darte por el culo. Si acaso se presentan algunos que quieran hacer un trió o quieran follarte entre varios, cobrarás 5 € más por persona y les harás una rebaja cobrándoles también solo 5€ más por chupársela, por dejarte dar por el culo, por dejarte penetrar a la vez por tu coño y culo y si quieren follarte por el coño dos a la vez les cobrarás 10€ más, es decir una tarifa de puta barata. Ahora vamos a desayunar, luego os enseño la furgoneta como la he preparado, bueno os adelanto lo que he hecho en ella: he puesto el suelo con un colchón de 150x 190 y he puesto una sabana, he instalado cámaras con un circuito de televisión cerrado que me enviará la señal y las imágenes al coche donde estaremos por si nos necesitas, y e instalado también unas luces para que no esté a oscura y el cliente o clientes puedan ver bien a la puta barata de Mamen. Te he colocado en un rincón un barreño sobre un banco bajo (para que te puedas poner como si estuvieras en un bidel) y un tonel de 10 litros con agua y un botecito de jabón liquido, para que te asees y laves también al cliente. En un lateral de ella he colocado un cronometro, que marcarás el tiempo que te contraten, para cuando llegue al tiempo contratado suene un pitido y des por terminado tu trabajo con ese cliente”
Nos quedamos todos callados, yo dije que no quería desayuna que ya lo había hecho y Matías dijo lo mismo, entonces ellos dos se dirigieron a la cocina y desayunaron.
Tras desayunar, bajamos donde teníamos los coches, Javier nos dio la salida de la autovía por donde teníamos que salir y el sitio donde teníamos que parar. Él y su madre montaron en la furgoneta, Matías fue detrás con el coche de la señora y yo tras ellos con el mío.
Al llegar, Javier me indico que mi coche y el de Matías que los estacionáramos en la gasolinera, el aparcó la furgoneta en la cuneta de la vía de servicio. Luego hizo bajar a Mamen y la puso a pasear desde la esquina de la entrada a la gasolinera hasta donde había colocado la furgoneta, de tal forma que la pudiéramos ver desde donde teníamos aparcado los coches. La hizo que se quitara la torera (la verdad es que ese día no hacía mucho frio y se podía estar sin chaqueta) y la abrió todo lo que pudo la camisa, prácticamente se la veía todo, lo único que Javier no hizo fue pintarla los labios rojos como suelen llevar estas putas, quería que aunque pareciera puta no fuera muy maquillada para parecer como más inocente.
Nosotros pasamos todos (Javier, con el ordenador, Matías y yo) al coche de la señora, dejando yo el mío aparcado y cerrado. Podíamos ver como los coches y camiones que pasaban la pitaban, la silbaban y algún que otro la decía piropos y barbaridades. A los 20 minutos paró un camión cuyo conductor era un hombre como de unos 40 años y acercándose a ella la preguntó la tarifa y estuvieron hablando un ratito con Mamen, luego de nuevo puso el camión en marcha y torció hacía la gasolinera aparcando en el aparcamiento de camiones, luego se bajo del camión y se dirigió andando hacía donde se encontraba Mamen, volvieron hablar y ella se dirigió hacía la furgoneta y él la siguió, y entraron los dos en ella. Entonces Javier puso el ordenador en marcha y apareció en la pantalla Mamen y el camionero.
Ella le dijo:
“Que servicio quieres cariño”
Contestando él:
“El normal, ¿Cuánto tiempo es?”
Ella le contesta:
“Son 20 minutos”
Él la dice:
“Ese, ese me conviene, la verdad es que no tengo mucho más tiempo, pues a las dos y media debo de estar en Burgos, pues he quedado allí con una persona y no puedo faltar.”
Entonces Mamen muy hábil le dijo:
“No te animas a que te la chupe, solo son 5 € y si me quieres dar por el culo son 10€ mas “
Entonces él la dijo:
“Bueno venga toma los 20€ del servicio normal, más 5€ por mamármela y diez más por darte por el culo “
Ella recogió el dinero y le dijo:
“Es una pena que después de haber pagado lo que me has dado, no lo hagas a pelo, si tú quieres por solo 10€ más me dejo follar sin condón, hace ¿quieres?
Ella parecía que se hubiera dedicado a esto toda la vida. Él se quedó un rato pensativo y al final la dijo:
“Tengo miedo a que me puedas pegar algo, vosotras lo hacéis con tanto y aquí en la carretera tampoco es que tengáis mucha higiene se, pues no tenéis ni donde lavaros”
Entonces Mamen le dijo:
“Mira eres mi primer cliente de hoy, puedo asegurarte que estoy sana, cosa que no se de ti y sin embargo me arriesgo y tengo aquí este barreño con este tonel de agua para lavarnos nuestro sexo los dos antes de empezar y para cuando acabemos, por lo menos yo. Anímate, lo que vas a disfrutar al hacerlo a pelo no lo vas a disfrutar si lo hacemos con condón”
Él se queda pensando y dice al final:
“De acuerdo, tu ganas toma otros 10€, me arriesgaré y lo haremos a pelo”
Mamen lo cogió y lo guardo con los otros en su bolso, luego se acercó donde estaba el barreño y echón un poco de agua en él, se echó un poquito de jabón en su mano y le dijo:
“Porque no te quitas la ropa y te acercas para que te lave tu polla cariño, ¿o te la quieres lavar tu?”
Él haciéndola caso se comienza a quitar sus ropas y se queda completamente desnudo, y acercándose donde Mamen esta la dice:
“No mejor me la lavas tú”
Se le veía un buen aparato, no era tan grande como la de los dos hombres que estaban conmigo, pero si podía medir entre los 18 y 20 centímetros de larga y se la veía de buen calibre, seguro que cuando se le pusiera tiesa llegaría a los 21 0 22 centímetros por unos 4 ó 5 de diámetro.
Mamen se la cogió con su mano y comenzó a aplicarle el jabón que tenía en su mano, embadurnándosela toda completa e incluso sus cojones, luego cogió un poco de agua con su mano en forma cóncava y le fue enjuagando su instrumento del jabón que le había aplicado, cogió una toalla que Javier había colocado al lado del barreño y le seco todo su miembro y sus huevos. Luego ella se puso de pie y se comenzó a quitar la poca ropa que llevaba, se desabrochó los dos botones que tenía abrochado de la camisa, quitándosela luego y la lanzó junto con la ropa de su cliente, luego se desabrocho la cortita falda que llevaba y se la quitó sacándosela por los pies y lanzándola también al montón que formaba la ropa de ambos. El la observo y parece que le gusto el cuerpo que ella le mostraba, pues su polla comenzó a crecer, cuando ella se disponía a quitarse las bragas (por llamar a las cintas de alguna forma) para lavarse, él la detuvo y la dijo:
“No, no te lo quites, quiero follarte tal como estas, me excita mucho ese conjunto de cuero que llevas, por favor no te quites más ropa”
Entonces ella le hizo caso y se coloco en cuclillas sobre el barreño con agua, volvió a coger un poco de jabón liquido en su mano se lo pasó por su rajita y pelambrera de su sexo, luego metió la mano en el agua y echando con ella un poco de agua sobre su sexo se lo enjuago y quito el jabón. Después cogió la misma toalla con que le había limpiado a él la polla y se seco toda su zona púbica incluida su rajita.
Entonces ella poniéndose de pie se acercó a él y este comenzó a tocarla por su espalda, se la acercó y comenzó a besarla en la cara, ella rehusaba la boca, él volvía a intentar hasta que consiguió besarla, luego va bajando al cuello ella comienza a excitarse pero permanece quieta, solamente lleva sus brazos a la espalda de él y comienza a acariciársela. El hombre sigue bajando con su boca hasta que llega a sus tetas donde se entretiene un rato mientras que a su vez acerca una de sus manos a su entrepierna y hurga con sus dedos en su rajita hasta que consigue meterla un dedo, luego dos en su vagina y comienza hacerla una caricia con ellos como si la estuviera follando, y la dice:
“Ummmm, que coñito tienes pedazo de puta, está muy apretadito para ser una puta, es como si le hubieran usado poco”
Dice eso pero ella no le puede responder porque él no ha dejado de meterle y sacarle sus dedos nota y ve satisfecho como ella no puede aguantarse el placer que él la proporciona manualmente y emite unos gemidos de placer:
“Mmmmm, mmmmm, mmmm….aaaahhhh….oooohhhh”.
Él vuelve a decirla lo estrecho que tiene su coñito, y la pregunta:
“¿Qué es lo que haces para tenerle tan estrecho, siendo puta?”
Ella entonces le contesta:
“Hace poco que me prostituyo, ayer fue mi primer día y lo hice solo con un cliente y hoy tú eres mi primer cliente del día y el segundo de mi carrera de puta.”
Él entonces la dice:
“Je, je, je, como me gustáis las primerizas, no os hace falta simular que lo pasáis bien, je, je,je como se te nota tu calentura, mi caricia te ha hecho efecto ¡he putilla!”
Él camionero entonces la deja de masturbar y la dice:
“Ponte de rodilla, ¡Chúpamela… puta…!
Mamen hace lo que le dice, se pone de rodillas entre sus piernas y cogiendo el pene de él, (que ya esta tieso como un palo), se le empieza a recorrer con su lengua todo lo largo de la superficie del mismo hasta llegar a su capullo y muy despacio se lo va introduciendo poco a poco en su boca, y comienza a mamársela con pasión, al poco tiempo él comienza a respirar fuerte a la vez que cogiéndola de su nuca la empuja a ella hacía él acompañando con ello el ritmo la mamada, el entonces comienza a decirla:
“Siii, siiii zorra, que bien lo hace, asiiii, asiiii siiii, siii, sigue no pares puta, sigue puta asquerosa no pares hasta que me corraaa, siiii….”
A ella se la ve aplicada en la mamada, y se nota que la está disfrutando también como él, continúan así un rato hasta que él las ice:
“Vale, vale, para deja de mamarla, no quiero correrme ahora, lo quiero hacer en tu coño o en tu culo y si sigues chupándomela con lo bien que lo estás haciendo vas a conseguir que me corra en esa boca de puta mamona que tienes, que es una maravilla como la chupas, zorra”
Diciendo esto hace que pare y la señala que se tumbe en el colchón. Mamen hace lo que la dice y entonces él colocándose de rodilla a su lado, la coge por un costado y la hace girar hacía él quedándose de frente al colchón y con su espalda y su trasero a disposición de él, que comienza a pasar su mano por encima del culo de ella, entonces se inclina hacía esa parte deseada de ella y ayudándose de sus dos manos le abre sus cachetes, quedando el agujero del culo de ella expuesto a sus miradas. Él acerca su boca al mismo y sacando su lengua comienza a darle lengüetazos, para luego meter lo que puede de la lengua dentro de su ano. Después abre aún más los cachetes del culo de Mamen, de tal forma que quede abierto un poco el agujero del ano donde deposita una serie de escupitajos llenándolo todo con su saliva, después mete un dedo, luego otro, luego otro hasta conseguir introducirla tres de ellos y comienza a moverlos de forma circular en principio y después a entrarlos y sacarlos con mucho cuidado, ella no aguanta y da un grito de dolor. Entonces él sin sacar los tres dedos la da un fuerte cachete en uno de los cachetes de su trasero, después riéndose le saca los dedos y la dice:
“Ahora ya estas preparada y a mí se me ha bajado un poco las ganas de eyacular, ponte a cuatro patas como la perra que eres”
Ella le hace caso y se pone en la posición que él la ha dicho. El camionero se coloca tras ella, la coge por los tobillos y la abre todo lo que puede las piernas, luego se moja con su saliva la polla y acercándola al orificio anal de Mamen, apoya sus manos en la cintura de ella y lentamente se la va introduciendo poco a poco su miembro hasta que consigue meter entero su capullo para luego da un gran golpe de cadera y meterla bruscamente el resto de su instrumento en el interior de su recto abrasando sus entrañas, volviéndola a rajar y romper el culo como el día anterior hiciera el morito, entonces ella da un grito de dolor y continua gritando a medida que es perforada, pero de nada la sirve y llorando le dice:
“Ahiiiii, que doloroooorrrr, me dueeleeeeee, muchooooooo, aaahhhyyyyy, me partes en dos …..brutooo…..”
Él entonces lleva una de sus manos al como de Mamen y comienza a acariciarla su clítoris y comienza una masturbación, sin dejar de follar su culo, esto hace que ella comience a medida que la masturbación avanza a sentí placer con la follada de su culo, el placer en ella es cada vez mayor y comienza a mover ella también su culo adelante y atrás al ritmo que el camionero la está marcando, entonces él la dice:
“Ya no te duele, ya no te duele zorrita…., mueve tu culo, muévelo rápido quiero entrar y salir de tu culo de puta más deprisa, quiero sentí como mi cipote se desliza por dentro de ese culo de zorra que tienes, dale, dale zorra muévete,…muévete como tú sabes, así, asiiiii, siii….”
Ella cada vez se mueve más deprisa la está viniendo un orgasmo , él no deja de masturbarla a la vez que perfora su culito, la viene otro orgasmo, esta enlazando uno tras otro , ella no puede más y comienza a correrse como una posesa y a gritar:
“así, así mi macho taladra mi culo, taladra este culo de puta barata que tengo….no pareeeees de follarmele….sigueeee….sigueeee cabróóónnnnn, ooooohhhh como me gustaaaaa que me partas el culoooooo…..siiiiii…..siiiiii , sigueeeeee….no pareeeesss ahoraaaa sigueeeeee….me corrrooooo, me corrrooooo….aaaahhhh….oooohhhhh….que placeeeeer….no puede más ……que gustoooooo.”
Él no la hizo caso y siguió trabajándola el ano durante varios minutos más. Ella se sentía morir, de placer, en cada apretón y la vista se la nublaba. Estaba a punto de perder el conocimiento por el placer que la enculada le estaba produciendo. En ese momento él de un golpe se lo saca, sonando al sacarla como un corcho de una botella de champan, la coge y sin darla tiempo a reaccionar la da la agarra de una pierna y de una de sus axilas, dándola la vuelta la deposita de espalda sobre el colcho, se pone entre las piernas de Mamen y se las abre al máximo, coge con una mano su polla y consigue apuntarla en su rajita y no se está por mucha dilaciones, empuja su cintura y se la mete del tirón.
Ella grita cuando siente como es perforada por el pene erecto del cliente y se abraza a sus anchas espaldas:
“ Ooohhh, siiii, siiiii mueveteee, mueveteeee , quiero sentirte dentrooooo……”
El hombre la deja que se acostumbre un instante a la recia penetración y cuando cree que ya está preparada reemprende su cabalgadura comenzando a moverse como un poseso entrando y sacando a gran velocidad su polla en la vagina de ella, tiene un ritmo bestial, ella también está muy caliente porque culea con su cuerpo al ritmo que él marca para que se la pueda entrar lo más honde que pueda, no creo que a ese ritmo duren mucho sin correrse, es un ritmo muy duro sin delicadeza ninguna. Él se él se deja caer sobre ella y con sus manos la agarra su pechos que aprieta y aplasta , acerca su boca a uno de ellos y comienza a chupárselo a comérselo, amóldeselos, esta como fuera de sí, ella comienza a gritar de placer y clavándole las uñas en su espalda grita:
“Dale, dale , dale más deprisa, más deprisa correte, correte dentroooo, no lo alargues no lo alargues….sigueeee…follameeeeee, correteeeee dentro de miiiii….siisiiiiiii ….siiiiiiii lo necesitooooooo……me corrrroooo….me corrroooooo. De nuevoooooo….siiiiiii me estoy corriendooooooo. Quiero que tú lo hagas tambiénnnnnn oooooohhhhh……”
Este hombre la folla a su placer personal, como cliente solo piensa en su placer, pero eso para Mamen con lo que está gozando con esa follada no tiene mucha importancia, porque aún así está gozando mucho con la despreocupada actitud del camionero. La sigue follando en esta posición un rato sin hacer caso de los gritos de ella y la sigue cogiendo como una perra, entonces se tensa y no pudiendo más empieza a correrse en el interior de ella gritando:
“Siiiii, siiiiii, putaaaaa……me estoy corriendo dentro de tiiiiii…..no es eso lo que queriaaasss…..no es eso lo que me pedíaaaassss……tomaaaaa…..tomaaaaa.zorra asquerosaaaaa……aaaaahhhhhhh…..siiiiiiiiiii…..aaaaaaahhhhhhhhh…….”
El derrotado por el esfuerzo se deja cae sobre el cuerpo de Mamen sin sacársela aún de su cuerpo, ella le abraza y le aprieta contra ella y le besa en su cabeza que tiene recostada sobre su pecho. Ella mira el cronometro y ve que se han pasado 10 minutos sobre la medía hora que el camionero la había contratado, pero está feliz y ha valido la pena, la follada ha sido espectacular. Entonces ella, dándole unas palmaditas en la espalda le dice:
“Cariño, ha terminado el tiempo, me ha gustado mucho como me has follado y por eso aunque del tiempo pasan ya 10 minutos quiero agradecértelo con una propina, saca tu polla de mi chocho y déjame que te la limpie, eso será mi regalo, gracias.”
El camionero se incorpora saliéndose de ella y se pone de pie, ella también se incorpora y de rodillas coge de nuevo su polla, ya un poco blanda y comienza a pasar su lengua por ella todo lo largo de la misma para al llegar al frenillo jugar con él haciéndole a él sentir un placer que nadie antes le había dado, luego vuelve a pasársela de nuevo por toda la superficie hasta que consigue dejársela completamente limpia.
Él se acerca a ella y dándola un beso la dice:
“Ha sido fantástico y si es verdad que yo soy tu segundo cliente en toda tu vida yo te auguro que vas a tener un gran futuro como puta, pues cuantas de tu oficio llevan años y no te llegan a ti ni a los tobillos, cada vez que pase por aquí si estas pararé y volveremos a estar juntos, te lo prometo”
Entonces ella le dice:
“Solo estaré aquí en Madrid hasta el domingo, el lunes marcho para mi tierra Ciudad Real, si vas alguna vez por allí llámame, este es mi número 650…….., yo también he disfrutado mucho contigo, si me llamas a lo mejor lo hacemos gratis…..”
Él entonces va hacía el montón de ropa, coge la suya y de la camisa saca una libreta y un bolígrafo y la dice a Mamen”
“Dime otra vez tú número de teléfono y tú nombre, toma este es el mío y mi nombre es Paco, estate segura que cuando este por Ciudad Real te llamaré. Ya no llego a la hora, pero bueno ha valido la pena, llamaré con quién había quedado y l diré que me ha surgido un imprevisto y que llegaré una hora más tarde”
Mamen le vuelve a dar el número de teléfono y su nombre. Él coge la ropa se viste y se va, ella entonces se acerca al barreño y se lava todo su chumino que en esos momentos no deja de chorreo jugos y esperma de su cliente. Luego se viste, acomoda un poco el colchón y las sabanas, para el cronometro, apaga la luz de la furgoneta, coge el bolso y sale de su lugar de trabajo y de nuevo se pone a pasear en la carretera desde la furgoneta hasta la esquina de entrada a la gasolinera. Cuando llega a la esquina mira hacía nosotros y ríe.
Son ya las 13,30, y Matías sin que Javier se dé cuenta me da de seña para que le diga Javier que tengo que marchar hacer unas compras, entonces le digo:
“Javier, tengo que marchar, pues mi marido me ha encargado unas cosas antes de marchar y tengo que ir a por ellas. ¿Vosotros vais a seguir aquí más tiempo?”
Javier me contesta:
“Sí esperaremos medía hora a ver si mamá tiene otro cliente y si no iremos a comer, pero luego volveremos, pues tengo pensado que esté aquí trabajando hasta que anochezca”
Yo le contesto guiñándole un ojo:
“¿Te importaría que Matías me acompañe?, me da cosa ir sola, tú te quedas con el coche y a eso de las 17,00 ó 17,30 volvemos para poder llevar cada uno un vehículo, como hemos traído”
Él sonriéndome me contesta:
“No, no me importa, puede acompañarte. Cuando vayáis a venir me llamas, por si ha surgido algo y nos hemos tenido que ir. Venga que os divirtáis”
Entonces cogemos Matías y yo nos bajamos del coche, decimos con la mano adiós a Mamen y montándonos en el mío, nos marchamos. Al arrancar le digo a Matías donde vamos y él dándome una dirección nos dirigimos hacía allí. Por el camino siento molestias en mi culo y coño, debido a los rollos de las toallas de bidel que llevo metido en ellos y le digo:
“¿Me puedo quitar los rulos de mi sexo y culo? Me están molestando”
Y él no me deja contestándome:
“Aún no es el tiempo ni él lugar, no te preocupes ya queda poco. ¿Y las gomas de los pezones no te molestan?”
Yo le digo:
“Si pero lo llevo mejor”
El me dice:
“No tardarás mucho en librarte de todo ello, ya verás”
Llegamos por la zona centro y me dice que busque un parking. Encuentro uno aparcamos y agarrándonos de la cintura salimos a la calle, él entonces coge dirección a donde vamos y cuando pasamos por delante de una tienda antigua de ropa interior, que en el escaparate tienen corséeles de varillas, bragas y sujetadores grandes y anticuados, me dice:
“Es aquí, entra”
Al entrar me fijo en la tienda, es una tienda con estanterías de maderas antiguas y mostrador también de madera con cajones, el techo tiene un artesonado de cuadritos de madera tallada sostenido por dos columnas de hierro fundido colocadas a cada lado del mostrador , tras este está la estantería que tiene una pequeña puerta, (que está cerrada). Cuando nos ven entrar sale un señor de unos 58 ó 60 años y saluda muy amablemente a Matías, diciéndole:
“O que alegría amigo Matías, ya hacía tiempo que no nos visitabas”
Matías le contesta:
“Si Claudio, el trabajo no me ha dejado tiempo para haceros antes una visita, quisiéramos ver algo de ese género que guardas en la trastienda. Mira esta en Esperanza, la cual va a ser la que va a usar lo que nos enseñes y te compremos”
Claudio, entonces se acerca a la puerta de la calle y echa un cerrojo que tiene está por debajo de los cristales y voltea el letrero de abierto quedando esta leyenda para dentro y de cara a la calle la de cerrado. Luego coge una llave de uno de los cajones del mostrador y abre la puerta que está en la estantería, da la llave de la luz que hay en el marco de la puerta y se ilumina la otra parte de la puerta, entonces nos dice:
“Adelante pasad”
Matías me deja pasar y al llegar al marco veo que hay una escalera, le miro a Matías y este me hace un gesto con la cabeza para que baje. Hago lo que me dice y llegamos a un sótano, donde hay una serie de vitrina con todo tipo de juguetes y cacharros sexuales (bastante más que en cualquier sex-shop), látigos, fustas, pinzas, cadenas, esposas…etc. Luego en las paredes tiene varias argollas y cadenas, en el centro una mesa con grilletes, luego a otro lado una especie de potro como los que usan los ginecólogos, entonces cuando estamos los tres abajo me dice Matías:
“Esperanza, túmbate en ese potro y pon tus piernas como si te fueran hacer una revisión ginecológica”
Hago lo que me dice, y al hacerlo me doy cuenta que mi culo queda fuera del potro a disposición de lo que quieran hacer con él. Entonces se acerca Matías y cogiendo el vestido por la vastilla me lo levanta hasta donde mi culo y espalda le impide seguir, entonces hace que baje de nuevo las piernas de los soportes del potro y me siente tocando con mis bragas la superficie del potro. Luego de nuevo vuelve a coger el vestido por la cintura y me lo saca por la cabeza, dejándome solamente en bragas, (dado que el sujetador al ponerme las gomas en mis pezones no me dejo ponérmele, si recuerdan) y todo mi torso desnudo con mis grandes pechos y mis pezones con las gomas liadas a ellos ante la vista de Claudio. Luego me dice de nuevo Matías:
“Vuelve a colocarte en la misma posición que estabas, ahora Claudio va a estudiarte y él te quitará los rulos que llevas en tu sexo y culo y las gomas de tus pezones”
Hago lo que me dice y Claudio se acerca donde yo estoy y comienza a tocarme mis pechos y a dármelos golpecitos con la palma de su mano, provocándome unos fuertes dolores, debido a la presión de las gomas de mis pezones, que hace que grite de dolor. Luego con toda naturalidad y sin cuidado ninguno me va quitando las gomas, produciéndome al hacerlo gran dolor por no hacerlo con delicadeza. Después se pone entre mis piernas y tirando de mis bragas las rajas y me las quita, quedando ante su vista los dos rollos (realizados con las toallas de bidel del hotel) que tengo metido en mi almejita y en el agujero de mi culito. Él con la misma delicadeza que ha tenido con las gomas tira bruscamente a la vez con las dos manos (uno con cada una) de ambos rollos sacándomelos de golpe de sus orificios. Luego coge primero el del culo y luego el de mi coño, haciéndome abrir la boca me los mete en ella y me dice:
“Toma puta, esclava prueba tu propia mierda, te quedarás con ellos ahí metido hasta que acabemos con lo que tenemos que hacerte en el potro. Matías sujeta con los grilletes las muñecas y los tobillos de esta guarra preñada”
Matías hace lo que Claudio le dice y mientras lo hace Claudio le dice:
“De modo que esta es la zorra y puta que se te ha ofrecido a ser tu esclava sexual, la verdad es que tienes unos pechos divinos, si después de par consigues que recobre la figura vas a tener para tu uso una de las mejores hembras que he visto en mi larga vida profesional. Dime qué quieres comprar para ella.”
Matías le dice:
“Primero vamos a empezar por lo fácil, quiero que nos suministres todo tipo de dildos, consoladores, y vibradores, etc, de todos los tamaños hasta que ya de lo gordo que sea no le pueda entrar y él último que la entre forzado. También quiero extractores de leche para sus pechos, uno eléctrico y automático y dos o tres de pera o ventosas. Dos ventosas para colocárselas en su culo y coño para hacerle el vacio y se la hinchen al máximo, Pesas, pinzas, para sus pezones y labios vaginales, velas, Picas eléctricas, bolas chinas tanto para el coño como para el culo y rosario de bolas anales. Esposas y cuerdas para ataduras por todo su cuerpo. Ropa interior sexi, tanto de látex, cuero como de algodón y nailon y estas últimas que sean transparentes y que se la queden pequeñas para que la acentúen más sus pechos y la pelambrera de su panocha la salga por los lados. Pon también 4 conjuntos de sujetadores y bragas de cintas de cuero (2) y de tejidos (2) que solamente valgan para sujetar los pechos y que las bragas no le cubran ni su culo (que se le meta una cinta por su raja) y que por la parte de adelante tenga libre su rajita. También otros cuatro conjuntos que tengan abertura tanto en los pechos como en sus dos rajas, para que este accesible a cualquiera cuando yo quiera. & Batitas o saltos de cama (camisones) cortitos y totalmente transparente de varios colores. Y algo importante un buen surtido de cremas para aliviar y cura rápida de quemaduras, heridas y latigazos. Y a parte de todo esto los látigos, fustas y otros elementos de castigo que sean los idóneos y apropiados para ella, y que tú irás probando ahora en ella para que me digas cuales son los ideales para castigar ese cuerpo. Las tallas de la ropa interior, que sea para después de parir, ella te dirá las tallas que usaba antes de quedar embarazada, la pones por lo menos una o dos más pequeñas. Esperanza dile a Claudio tus tallas”
Yo le contesto:
“De bragas uso la grande XXL, pero si quieres que me quede como has dicho que te gusta que nos de la g o la XL, la G me quedara muy apretada, y de sujetador ahora mismo tengo la 130 aunque con el embarazo creo que estoy cerca de la 140 o 150, no sé tras parí cuanto me bajarán los pechos, yo creo que podía poner de la 130 y 120 aunque sé que prácticamente me van a quedar todas las aureolas y pezones casi fuera de las cacerolas de los mismos.”
Dicho esto Claudio había estado apuntando y llamando a una tal Adela (que luego me dijo Matías que era una esclava de él) la mandó preparar el pedido mientras él me probaba los látigos y fustas de castigo.
Cogiendo un látigo de varias colas, comenzó a darme golpecitos sobre mis pechos y coño, sin dar fuerte, solamente para ir viendo hasta donde llegaban las puntas y que abarcaban de mi cuerpo, fue cambiando de látigo hasta que dio con el idóneo para que de un solo golpe me cubriera parte de mi espalda y las puntas dieran la vuelta hasta llegar a donde acababan mis costillas flotantes.
Luego hizo lo mismo con las fustas, aquí probo finas y gordas, eligiendo el tamaño de ambas que consideró más idóneo para mi cuerpo. Luego cogió una especie de mano aplastada de cuero flexible con un mango, con la que castigo mi culo y mi coño. Después una especie de suela de zapatos que hizo lo mismo y término probando látigos de terciopelo cortos con los que martirizó mis pechos y pezones. Luego dio paso a probarme los dildos , consoladores y vibradores que fue metiendo en mi coño y culo hasta forzar el máximo y llegar ya a un tamaño que era imposible entrármele, esto me dolió bastante, el tío era un bestia, incluso eché varias lagrimas. Matías mirándome apretaba los dientes y puños, se que sentía que el bruto de Claudio me estuviera haciendo daño. Cuando acabo con esto al terminar me dijo:
“No he querido azotarte como te mereces, es decir con contundencia, dado tu e
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