Eran como las doce del mediodía, llegó una señorita como de 23 años, ella era estudiante de la facultad de Ciencias Químicas de una de las universidades de Guatemala, quería permiso para tomar unas muestras de grasa vegetal que le serviría para un trabajo de investigación, Nos encaminamos a una de las bodegas, pero entre esta y el patio hay un pasillo pequeño como de 2 x 2 mts. entre este pasillo está la puerta de entrada a la bodega y un puerta que da al patio, tomó la muestra, salimos y se cerré la puerta de la bodega, pero hubo una corriente de aire, y se cerró la puerta del pasillo hacia el patio, yo no teníe llave de ninguna de las dos puertas, y por la hora, el personal regresaba hasta las dos de la tarde. o sea íbamos a estar encedrrados casí por dos horas. Pasaba el tiempo y la chica estaba pálida, y cruzaba sus piernas, y empezó a sudar, yo le pregunté que si sentía bién, y me dijo que ya se orinaba, y fué tanto la necesidad, que frente a mí se bajo su pantalón vaquero hasta las rodillas y de espaldas a mí, empezó a orinar, salió un chorro fuerte de orines, y veía su panochita, a través de sus nalgas, su labios rojitos, y sus bellos neegritos gotiando orines, le extendí mi pañuelo y se secó su humedad. Yo estaba super excitado de verla orinar, ella se dió cuenta y me pidió mil disculpas toda roja de pena, le dije que no se prescupara, que yo también sentía ganas de orinar, y efectivamente tenía deseos, pero tenía el pene erecto, no tuvemás alternativa que sacarmelo y empezé a orinar, ella se corrió un poco para poder verme, yo me puse frente a ella, y me dice: es un pene enorme y grueso, como aún tenía el pantalón a las rodillas, la incliné hacia la pared de espaldas a mí, saqué una manga del pantalón con todo y su tanguita, abrí sus piernas, ella se agachó un poco más, y sosteniendose con las palmas de sus manos en la pared, coloqué la cabeza en la entrada ded su vagina, y empezé a penetrarla lentamente, estaba estrechita, pero bién húmeda le fuí al fondo y la bombié despacio, ella estaba super caliente, al cabo de unos minutos se fué, le saqué la polla, y se la puse en la boca, me chupó delicioso y me corrí, ella tragaba con deleite mi leche. A las dos de la tarde llegó el bodeguero, nos fuimos a mi oficina, nos duchamos, y la llevé a la recámara que tengo en la fabrica y follamos de lo lindo el resto de la tarde.