Hola me llamo Alvaro y mi compañera se llama Carmen, voy a compartir con ustedes nuestra primera experiencia en un club de “swingers” donde parejas intercambian compañeros.

Estaba Yo de viaje de negocios, Carmen me iba a recojer al aeropuerto. El Dia anterior le habia llamado para invitarla a salir, puesto que ella habia estado sola por 7 dias, le sugeri ir a conocer a un club de parejas (Ya meses antes habiamos fantaseado y platicado acerca de ir a un club asi), ella dudosamente estuvo de acuerdo pero con curiosidad.

En el club uno podia flirtear, desnudarse y tener sexo enfrente de u observar a los presentes. Entrando al club habia ya parejas y grupos de personas tomando bebidas alcoholicas sentadas a las mesa, habia una mesa de billar en el centro donde dos mujeres jugaban casi desnudas, al fondo en una esquina habia un Jacuzzi donde dos parejas se relajaban desnudas. Algunas mujeres ya estaban sin top exponiendo sus senos. Fue una sensacion de sorpresa y de fuerte emocion de encontrarnos en un lugar de este tipo.

Cuando nos ambientamos (nos pusimos cachondos-calientes) empece a acariciar la entrepierna de Carmen, quitandole el vestido y su sujetador dejandola solamente en tanga. Fuimos a ver las otras habitaciones, alli vimos a una mujer recargada en el regazo de su compañero y ella con sus piernas abiertas mientras otra mujer le chupaba sus labios vaginales. Otra pareja estaba teniendo sexo en la puerta, la mujer montada gozando el pene de su hombre dentro de ella, en cuanto nos paramos a escasos pasos de ellos el tipo se arqueo llegando a su orgazmo dentro de su rubia compañera, cuando ella desmonto aquel pene le escurria leche de su vagina.

En otra habitacion habia aparatos para jugar, Carmen y yo nos sentamos desnudos en una banca y comenzamos a masturbarnos mutuamente, mientras dos tipos desnudos nos veian con deleite. Ella me tumbo en la banca y me empezo a chupar y mamar mi pene erecto.
De ahi nos transladamos a otro aparato, habia unos grilletes que colgaban con cadenas de la pared. Empuje a Carmen bruscamente contra la pared le agarre las manos sobre su cabeza, mientras la besaba muy candidamente su cuello y le mordizqueaba sus pezones bien erectos. Le tome sus manos y las aprisione en los grilletes, quedando ella con sus brazos extendidos sobre su cabeza, mi boca recorrio su cuerpo desnudo desde donde chupaba sus pezones hasta llegar a detenerme entre sus piernas, saboreandome cada centimetro de su piel. Le chupe y le lami su clitoris mi lengua jugaba avidamente con sus erectos labios vaginales y se deslizaba dentro de su jugosa vagina, un tipo se acerco a ver como me comia el manjar de mi mujer, el estaba a escasos centimetros de ella, esta cercania y la emocion de ser admirada y masturbada por una fogosa lengua le causaron a Carmen un orgasmo explosivo, senti que mi boca se inundaba con brotes de sus jugos calientes. Cuando me incorpore para besar a mi prisionera, el tipo noto que a Carmen le escurrian sus jugos vaginales ya cerca de ambas rodillas, El le pregunto si podia encargarse de lamerselos para que no se desperdiciaran, ella me miro de reojo y asintio, el tipo se arodillo y le lamio los jugos escurridos de ambas piernas recorriendo lentamente desde sus rodillas hacia su jugosa vagina, apenas El rozo con su lengua el clitoris erecto de Carmen, ella se convulciono y culmino en otro orgasmo espectacular, tuve que soltarle las manos porque A Carmen le cedieron sus rodillas.

Cuando Carmen hubo recuperado su aliento la recargue en un pasamanos y por detras le deslize mi erecto pene dentro de ella, al estar embistiendola, de la otra habitacion salio la rubia aquella que cabalgaba a su hombre, ella se nos quedo viendo cuando me percate de su presencia yo estaba a punto de venirme dentro de Carmen, aquella rubia me miro a los ojos y me sonrio, al ver esa sonrisa de satisfaccion me corri instantaneamente llenando los interiores de Carmen con chorros de leche.
Fue una sensacion indescriptible ser observado cojiendome a Carmen, la sonrisa de aquella rubia me dejo una impresion y una mezcla de emociones que Carmen y Yo no olvidaremos por que fue la primera vez que nos exponiamos a este nuevo estilo de placeres.

Agradecere sus comentarios, tambien pueden escribrme y les seguire contando otras experiencias personales.