Quede de contarles otras ocasiones y esta es la mas memorable. Cuando Marta y yo comenzamos nuestra relacion (Marta es el nombre de mi amiga en el cuento: dos chicas de 17) aun estabamos en la escuela. Ibamos a un escolegio exclusivo para señoritas y en una clase de filosofia Marta comenzo a mandarme notitas eroticas diciendo que me veia sexy con mi uniforme (usabamos un uniforme de polera y falda) y que quería quitarme la falda y meter su lengua. En un principio me asuste, porque el profesor podia darse cuenta de que nos pasabamos notas y quitarnos las notas, pero Marta siguió y al final comence a exitarme y pedí permiso para ir al baño, diciendo que me sentía mal. El profesor me autorizo y Marta se ofreció a acompañarme. Llegamos riendo al baño y no había nadie. Me apoye en la pared y Marta me dio uno de los besos mas apasionados que he recibido. Cuando nos separamos yo realmente estaba caliente y algo humeda y a pesar del miedo que me daba de que alguien viniera, la bese de vuelta. Cuando terminamos una ronda de besos Marta tomo mis dos pechos a traves de la polera y dijo "te quiero aquí y ahora" Me quería morir, pero yo tambien la queria en ese momento, así que nos encerramos en uno de los baños y comenzamos a besarnos, nos quitamos las poleras y los sostenes y empezamos a lamernos y acariciarnos los pechos, luego me sente sobre la taza, en la punta y me quite las bragas, Marta hundió su cabeza y me hizo venirme con su lengua y sus dedos. Grite como loca. Y luego le toco el turno a Marta, le quite la falda y las bragas, por lo que quedo desnuda, con excepcion de las calcetas y los zapatos. Y yo le meti un dedo mientras que con el pulgar le sobaba la clitoris. Marta comenzo a jadear y a gemir. Le meti otro dedo y puse a funcionar mi lengua. En eso estabamos cuando sono el timbre del recreo y se comenzaron a escuchar voces. Marta jadeaba y gemia muy fuerte y me decia "no te detengas" y yo entendia que no podía dejarla así. Me levante y ella tambien lo hizo "nos van a escuchar" le dije y ella dijo, entre jadeos y gemidos "por favor" y me arrodille, ella se apoyo la pared y paso una pierna por cada hombro, cosa de que su peso estaba entre la pared y yo. Comenze a succionarla y a meterle tres dedos con fuerza y comenzo a gemir muy fuerte, desesperada, le meti la polera en la boca y le tome las nalgas, apretandola mas contra mi boca. Ella tenía mas manos, una en la pared del lado y otra en la puerta y comenzamos a adoptar el movimiento del coito hasta que se vino. Fue una de las cosas mas osadas que hemos hecho, porque el baño se lleno de chicas y ¡nadie se dio cuenta!.Luego se eso nos vestimos y volvimos a clases