Hola me llamo Joaquín, tengo 41 años – a punto de cumplir 42 - y mi vida sexual ha sido muy buena pero siempre trato de hacerla mas interesante. Mi esposa se llama Amanda, la cual tiene un culo y unas nalgas grandes y muy ricas, mis amigos opinan lo mismo, ya que les envié por mail unas fotos que le saque a Amanda en cuatro mostrando el culo, y otras mostrando su panocha y sus tetas pero sin que se le viera el rostro, ellos están encantadísimos al grado que quieren mas fotos de ella, le comenté a Amanda lo que hice y se excitó demasiado, déjenme decirles que ella fue educada con una moral muy alta que hasta la fecha hay cosas que no puede hacer por pena o por moral, pero poco a poco se ha ido abriendo, al grado de que me pidió que después le sacara unas fotos un poco mas atrevidas y las envíe, yo accedí encantado, muy excitado y mojado, últimamente nuestras mejores relaciones sexuales han sido en hoteles de paso. Nos gusta fantasear en que somos otras personas que engañan a sus parejas, no siempre nos sale bien, pero cada ves es mejor, déjenme decirles que ella ya se atreve un poco mas y lo disfruta mejor, les voy a platicar lo que me pasó en la última salida que tuvimos.
La idea era ir a la Zona Rosa a una Sex Shop pero que cada quién entrara por su lado, primero ella y después de un rato yo encontrándonos adentro y saludándonos como si fuéramos compañeros de trabajo y que ella estaba ahí buscando algo para la despedida de soltera de una amiga también de la oficina, ella preguntaba y agarraba los vibradores y consoladores en forma de verga de todos tamaños y colores, veía las películas, en fin, haciéndose la indecisa hasta que optó por comprar una verga la cual decía ella que se veía muy rica porque estaba un poco grande y gorda y que a su amiga le gustaría mucho por que ella era muy caliente, nos salimos los dos muy excitados y fuimos a otra tienda e hicimos lo mismo, pero esta ves la tienda era un poco mas pequeña y discreta, ella me sorprendió por que aprovechando que no había gente pidió una cabina por 15 minutos para ver una película porno, lo cual me puso muy caliente, ya adentro de la cabina y después que nos salimos de la tienda Amanda me comentó que sacó la verga que compró y se comenzó a masturbar (llevaba falda pero sin calzones), ella se dio cuenta que la estaban viendo del otro lado porque oía ruidos y distinguía siluetas por algunas pequeñas fisuras dentro de la cabina, cosa que no le importó y se acomodó para que la vieran como se metía totalmente la verga en su ya caliente y jugosa panocha, y ella tenía razón, sí la estaban viendo porque el encargado nos llamó a las tres personas (hombres) que estábamos ahí y nos dijo que si queríamos ver lo que pasaba dentro de una de las cabinas los tres dijimos que sí, lo que yo no sabía, es que la cabina era la de Amanda, en donde yo también pude observar como se metía y sacaba el pene de hule, y que estaba gozándolo mucho, se le notaba en la cara, hacía muchos gestos muy cachondos, también pude ver sus hermosas y torneadas piernas cuando en momentos las levantaba estando ella sentada, en fin, ella estaba muy caliente, no se si por que sabía que la estaban viendo ó porque era la primera ves que entraba a una cabina. Cuando salió de la cabina todos se le quedaron viendo con ganas de cojersela, dio las gracias y camino hacia la salida del local moviendo un poco de mas sus ricas y sabrosas nalgas y mientras salía miró a todos y les sonrió coquetamente, ya en la puerta se paró, volteó a verme y me dijo muy sugestivamente; me invitas un café?, yo inmediatamente le dije que sí, y nos salimos ante la mirada lujuriosa de los demás hombres que se asomaron hasta la calle para ver como nos retirábamos.
Ella estaba muy caliente y con la panocha tan mojada que sus fluidos casi le escurría por entre las piernas, nos metimos a un bar a tomar unos tragos porque ella necesitaba bajarse un poco el calor, ella no toma, por lo que se le subieron un poco las copas y el alcohol provocó que se desinhibiera y pusiera aún mas caliente, ya que cada que cruzaba las piernas las abría de mas para que los de enfrente le vieran sus piernas, su panocha húmeda y parte de sus nalgas, lo hacía como si no se diera cuenta, a ella no le gusta exhibirse, pero ésta ves pensaba diferente, lo que ella quería era que la vieran, después de un rato y ya muy calientes decidimos irnos al hotel.
En el trayecto ella iba acariciándome la verga hasta que no aguantó mas y me la sacó dándome unas mamadas deliciosas y yo como podía le acariciaba su panocha ya muy mojada y sus pechos, de repente ella sacó la verga que compró y comenzó a metérsela suavemente sin importarle que en un momento nos paramos al lado de un camión de pasajeros, ella lo que quería era que la vieran, todo el camino hacia el hotel fue acariciarnos, me la mamaba mientras se metía la otra verga así fue todo el camino hacia el hotel, el hotel tenía servicio de bar a los cuartos y pedimos unas bebidas, ella se recostó un rato y me dijo que mientras traían las bebidas iba a descansar, yo le dije en son de broma, si te duermes al primero que pase le voy a decir que te meta la verga, se empezó a reír y me dijo; no te atreves, yo le dije, ahí tu sabes, no me hizo caso y se quedó recostada, como a los 10 minutos tocó el muchacho con las bebidas, abrí la puerta, tomé las bebidas y mientras le pagaba me di cuenta que no dejaba de mirar para adentro, por lo que voltee y ví que por el espejo estaba viendo a Amanda, la cual estaba acostada con una pierna abierta dejando ver parte de su jugosa panocha, me excitó que la viera y se me ocurrió hacerle una jugada a Amanda, le pregunte al muchacho en voz baja que si quería que mi amiga se la mamara y que si ella le gustaba, inmediatamente me dijo que sí que estaba muy buena pero que a lo mejor ella no quería mamársela, le dije tu pásate, te bajas los pantalones y le pones la verga junto a la boca mientras yo apago la luz, ella te la va a empezar a mamar y cuando se de cuenta que no era yo, ella ya te dio unas buenas mamadas, le entras?, dijo órale, así lo hicimos, apagué la luz, el puso su verga en la boca de ella y Amanda inmediatamente comenzó a mamársela y yo me escondí a un lado de la cama, después de un ratito ella únicamente decía, que rica verga!!, que rica verga!!, de repente ella lo tiró en la cama y se le montó de espaldas a él y meneando las nalgas de una manera muy cachonda, en esa posición el muchacho le acariciaba y le apretaba los pechos y las nalgas a placer y de repente que le empieza a meter el dedo en el culo y Amanda tuvo varios orgasmos así, de repente se puso en cuatro patas y le dijo culeame!! Culeame!! Métemelo hasta adentro, ella gritaba y jadeaba como nunca lo había hecho y tuvo varios orgasmos más al tiempo que el muchacho le vació toda su leche adentro, la verdad nunca había visto a Amanda tan caliente, ella se volteó y empezó a mamársela nuevamente, no le importó que su culo estuviera escurriendo, y se la siguió mamando hasta que se vino nuevamente en su cara y en sus pechos, ella únicamente le dijo, que rica la tenías hoy y se dejó caer de espaldas en la cama con un suspiro de satisfacción, momento que aprovechó el muchacho para salirse, mientras el se cogía a Amanda yo entre sorprendido por lo que ella estaba haciendo y caliente, no me quedó otra mas que masturbarme hasta venirme, cuando se salió el muchacho me recosté con Amanda y empezamos a coger como nunca lo habíamos hecho, ella estaba mojada del culo, de las nalgas, en fin, todo su cuerpo estaba mojado con el semen de aquel muchacho, yo pienso que ella fue la que me engañó a mí, no creen?, pero no importa, fue algo muy excitante y delicioso que los dos disfrutamos, tal ves se repita nuevamente, pero esa próxima ves si voy a participar.
Saludos
Joaquín Alejandro