Todo comenzó cuando fuimos a la piscina mi hijo y yo, fuimos el domingo a pasar el día a la piscina, hacía un calor espantoso y la verdad es que el agua apetecía con muchas ganas. Por la tarde sobre las ocho de la tarde regresamos a casa porque la piscina estaba a punto de cerrar. Cuando llegamos, mi madre se quitó el pareo que había llevado a la piscina y se quedó en bikini por casa, lo cierto es que me estaba empezando a poner algo cachondo. Poco después, me fui a la habitación de mi madre y me tiré en la cama, a los pocos minutos, mi madre entró en la habitación y me pregunta ¿que haces en mi habitación? pero enseguida dijo que le daba igual y me preguntó otra cosa esta vez mucho mas íntima. Cual fue mi grado de asombro cuando mi madre me pregunta: cariño, ¿puedes verme el culo? creo que me he quemado con el sol, a raíz de ahí mi reacciones fueron algo lentas, no podía creer lo que mi madre me estaba pidiendo, entonces, le afirmé lo que mi madre ya esperaba, se había quemado con el sol, me pidió que le trajese el aloe vera del baño. al volver me pidió que le desatara la parte de arriba del bikini ya que ella no podía y mientras se quitaba el bikini me preparaba para aplicarle el aloe vera, no paraba de mirarle las tetas a mi madre me resultaba verdaderamente imposible. Mi madre por su parte, lo llevaba con mucha naturalidad, se tumbó en la cama boca abajo, cuando me dí cuenta que también se había quemado las nalgas. se lo señalé con el dedo y acto seguido se las bajé un poquito para ver si también se había quemado por la cintura pero no llegó a tanto. Entretanto, mi madre que se había puesto a cuatro patas en la cama, se estaba poniendo algo nerviosa y se tumbó en la cama de lado mientras me decía "venga dame el aloe vera" entonces le dije "es que no puedo parar de mirar tu culo mientras me acercaba a ella para vérselo todo lo cerca posible mientras me sonreía y me decía "tú lo que quieres es tocarme el culo". Después, mi madre se tumbó en la cama boca abajo y le pedí que se bajar las bragas, empecé a echarle el aloe vera por las nalgas, al principio por gotas y comenzando por la derecha y después por la izquierda y me puse a extenderselo lentamente primero una y después la otra subiendo por la espalda pidiéndole que se tumbara del todo. Tenía la sensación de que mi madre empezaba a sospechar porque no paraba de extenderle la crema solo por el culo mientras que yo por mi parte ya me había sacado la polla del pantalón aunque ella no se había dado cuenta aún, hasta que al final planté mi polla sobre sus nalgas y empecé a restregármela con el aceite que antes le había hechado en el culo, enseguida se dio cuenta mi madre soltando un pequeño suspiro y desplazando el brazo izquierdo hacia atrás para cogerme la polla mientras se la pasaba por la raja del culo, para que siguiera pajeándome. A continuación, mi madre decidió que se la metiera por el coño, y así fue, con su mano ella solita se la metió por el coño eso si con algo de ayuda por mi parte, y comencé a penetrarla lentamente y poco a poco subiendo de intensidad, mi madre empezaba a gemir, poco después, paramos y le quité las bragas mientras le rozaba el coño con la polla. Después, le volví a penetrar por el coño mientras ella gemía de placer hasta que sin saber porque se le sale del coño, así que mi madre por su parte, aprovechó que se le había salido del coño para frotármela un poco y hacerme una mamada mientras se la pasaba por las tetas mientras se masturbaba para terminar follándola a cuatro patas.

Finalmente y para terminar, me corrí sobre sus nalgas extendiéndole con la polla todo el semen por el culo.