Viernes en la noche son las 7:30, llueve a cantaros y estoy aburrida en casa, mi familia se fue a visitar a mi abuelita.  Como estoy sola hago lo que me venga en gana, ordené una pizza, veo una película que tiene escenas muy calientes y me estoy poniendo cachonda.

Soy una chica bastante atractiva ojos claros, cabello largo y negro, senos redondos y responsables, mis piernas son torneadas y mi culo relleno y parado.

Tocan el timbre, con el hambre que tenia no pensé y corrí a abrir la puerta sin recordar que solo tenia puesto un top blanco bien apretado que mostraba mis pechos en su esplendor y un jeans cortado bien arriba que dejaba ver mucho de mi trasero, con el ziper abierto, que permitía  ver mi tanga verde bastante bien.

Buenas!! Su pizza dijo el chico sin despegar la vista de mis pechos. Son $9.50. – sin pensarlo dos veces lo tomé de la mano y le dije que pasara que iría por el dinero.  Me voltee y sentí su mirada clavarse en mi culo, yo tan cándida lo movía a mi discreción aumentando el morbo del chico.  En eso un fuerte rayo cayó cerca y se fue la electricidad dejando todo a oscuras, di un grito del susto y con la excusa que tenia miedo le pedí al chico que se quedara conmigo hasta que la electricidad regresara.  Mauricio me dijo que se llamaba al preguntarle, - soy Susan le conteste mientras encendía algunas velas, por que no te quitas el capote estas mojándolo todo.

Al quitarse el capote pude observar que debajo de esa tolda amarilla había un cuerpo muy interesante, chico alto bastante apuesto, cejas gruesas y labios deseables, traía un jeans que mostraba un paquete bastante grande, no se si era lo normal o por lo que yo ya estaba enseñando.- y una camisa de cuadros. Pensé:

Yo sola con este hombre, llueve a cantaros, no hay electricidad, mmmmm que delicia, este no se me escapa.

Mauricio siéntate comamos pizza voy por unas cervezas, al llegar a la cocina tome una cerveza  la agite fuertemente, regrese a la sala sentándome junto a el en el sofá le ofrecí la bebida, claro, al abrirla esta se disparó mojándonos a ambos, empapando mi top y dejando mis pechos prácticamente desnudos, mis pezones despuntaban en todo su esplendor de la excitación que ya tenia, sus ojos no se apartaban de mis pechos...  

Ups!! Disculpa le dije, y tomando una servilleta con la excusa de secarlo empecé a acariciarle el pecho, el no dejaba de verme y torpemente tomando una servilleta intento secarme la cara, como soy de armas tomar rápidamente me le acerque lo más que pude ofreciéndole mis pechos para que los secara. El mensaje fue comprendido por Mauricio que comenzó a acariciarme mientras mis manos ya estaban camino a su entrepierna.

Era tal la excitación que tenia que tomé la iniciativa, y para terminar de encenderlo más que las velas que nos alumbraban me quite el top mojado, dejando mis tetas al aire  a la contemplación de mi amigo.  Tardo en reaccionar, cerrando la boca de la impresión  sus labios fueron a parar a unos de mis pezones totalmente excitados.

-         Sussy estas como quieres –me decía mientras entre cortas respiraciones, mordiscos y lamidas. Me tropecé con algo duro y grande debajo de su cintura y apretando su pene le saque los primeros suspiros – no sabes donde te has metido – le dije mientras mordisqueaba su oreja y metía la lengua en ella.

Empujándolo para que me soltara me levante y le deje ver todo mi cuerpo haciéndole un rápido steptress quitándome el jeans y quedándome solo con la tanga, mientras el se quitaba la ropa.

-         vamos nene te vas a quedar hay sentado o me vas a coger como te de le gana – te voy a dar hasta por el culo me dijo con unas ganas que se le veía reflejada un su larga y gruesa verga parada a punto de reventar.

Rodeándome con sus brazos nos besamos, todo mi cuerpo fue tocado y acariciado dando énfasis  en mis muslos, cintura y nalgas, yo mientras tanto acariciaba sus nalgas y clavaba mis uñas en su espalda señalando mi territorio, dándonos lengua hasta lo más profundo de nuestras bocas, tome su verga en mis manos y empecé a frotarla, manosearla, gozarla con todas mis fuerzas, hacía mucho tiempo que no tenia semejante trozo en mis manos .

-         pedazo de zorra, vas a lograr que me venga,

-         eso quiero para secarte y lamérmelo toda

-         te voy a amarrar para que sepas lo que es bueno

Mauricio tomo una soga de saltar que había cerca y amarrando mis manos contra el cabezal del sofá evitó que lograra mi objetivo, estaba muy caliente, abriendo mis piernas le mostré el manjar totalmente depilado y húmedo que solo mi tanga cubría acariciándome suavemente aumentando la velocidad le faltaban manos para gozar, separó la poca tela que había, comenzó a lamerme la concha chupando y mordisqueando dándose gusto a placer, aprovechándose de mis manos atadas no podía “defenderme”, su lengua, se movía de una manera bárbara, castigando mi clítoris con latigazos de placer y su aliento caliente aumentaba el ritmo de mi corazón, haciendo que mi espalda se arquease por la brutal acometida.

-         Sssiiiiii!!! A si mi amor, no pares, dame lengua y muérdeme,

Su lengua me penetraba y lubricaba mi huequito y sus labios mordian y arrancaban mi conchita enrojecida y mojada.

No aguanté y comencé a correrme, esto le convino a mauricio y sin pensarlo metió un dedo en mi concha, dos dedos, tres dedos!!!!! Ya no aguantaba y gritando a gusto nuevamente me corrí, la tormenta que estaba cayendo me permitía gritar a placer.

Siguió bombeando con su mano entera adentro y yo amarrada disfrutaba el momento, su otra mano no se apartaba de mis tetas, rojas del roce, mis muslos rodearon su cabeza apretándola, no quería que esa máquina de placer se me fuera y con las piernas lo presionaba contra mi vulva, el desgraciado estaba acabando conmigo. No pares mi vida le gritaba con el poco aire que me dejaba tomar, no pares que serás premiado le gritaba, y otra acometida mas fuerte recibía de parte de el, su puño dentro de mi me estaba matando de placer, su otra mano había dejado de “atormentar” mis pechos y se dedicaba a explorar mi culo con yo se que intención, agrandándolo cada vez más, preparando el camino para algo salvaje.

-         Ven a recibir tu premio le dije con la poca voz que me salió.

Pero él con la iniciativa ya tomada, me desató, mis muñecas estaban rojas del roce y la excitación, rodeo mi cuello con la soga y le hizo un nudo, no me quejé la calentura no me dejó, ahora era su esclava, utilizando mis pechos como silla posó sus nalgas sobre ellos, dejando al agrado de mi vista su jugoso pene frente a mi boca, tomo la soga con una mano apretando mi cuello sin llegar a lastimarme, su otra mano fue a parar a mi concha, ¡! El infeliz me estaba cabalgando.!!

Y sin hacerse de rogar su verga enorme y potente penetró mis labios hundiéndose hasta mi garganta, comencé a chupar todos sus jugos que de la excitación que ya tenía emanaba a raudales, apretaba mi boca haciendole difícil el entrar y salir, lo que le daba mas calentura, los constantes resplandores de los rayos me permitían ver su cara de lujuria, me imagino que daba gracias a la gran suerte que tenía por estar cogiendome. Brincaba sobre mi como aquel que monta un caballo, azotaba mi vulva y apretaba mi cuello al mismo tiempo, era una sensación increíble, yo totalmente sometida debajo de este macho.

Vamos puta, sigue chupando, no vas a desear otro hombre después de esto, me gritaba, esto me encantaba, sentí que me volcaba nuevamente en un orgasmo incontrolable, ambas manos apretaron con tanta fuerza sus huevos, que del dolor que le cause me dio un tirón con la soga, se estaba viniendo en mi boca, las contracciones de su pene laceraban mi garganta yo no dejaba de apretarle los cojones con todas mis fuerzas, gran cantidad de leche comenzó a salir por las comisuras de mis labios, terminando ambos al mismo tiempo y desfalleciéndonos en el piso....

... Continuaba la lluvia y continuará esto...