Una abogada visita a un importante mafioso en sus oficinas centrales viste un conjunto de falda entallada con camisa con botas hasta la rodilla, la contrate para que me maneje mis asuntos legales como personales igualmente para que actue como mi asesora en asuntos plenamente negociadores como de adquisiciones coorparativas y afines ganando al mes una suma millonaria por cuidarme mis espaldas. Le sonrie y le estrecha de inmediato su mano derecha hablandole no lo defraudare y sobretodo tiene para siempre una amiga en mí en todos los sentidos de la palabra, al escuchar el mafioso se sintio engalanado como confiado y afortunado por contratarla y tenerla de su lado para todo lo que se le ofrezca a su voluntad exclusiva y personalmente.

Enseñandole su oficina que esta en el mismo piso del edificio que alberga completamente la coorporación mafiosa, camina a su lado el mafioso agarrandola de sus múslos sin decirle ni reclamarle por lo que le falta a su pudor como respeto a su fiel colaboradora como asesora de asuntos coorporativas, legales y personales deslumbrada por los lujos como excentricidades en las decoraciones interiores de las mismas, le confiesa la abogada que estoy asombrada y sin palabra por el excelente gusto como elegancia a que estoy codiandome y ambientandome al trabajar con usted.

La invito acompañarme a almorzar en mi pengaus que esta arriba de nosotros exactamente a cuatro pisos, bueno la abogada le contesta accepto con todo el placer y con todo la libertad que no tengo ninguna cita ni planes programados por el resto de la tarde y incluyendo la noche de este día, subien por su ascensor privado hacia su pengaus recibidos por su mayordomo que los dirige a su mesa que presenta mangares como platillos culinarios exquisitos, almorzando con fineza y a la luz exterior que entra por las ventanas corredisas de la terraza cerrada del pengaus del mafioso.

Terminan pasando a la sala de estar para descansar y seguir platicando de los planes que tiene proyectada para su abogada, se sientan en el sofa pegaditos de múslo a múslo al tocarla en su piernas disfrutando sus contornos femeninos, lo mira sonriente quiere explorarme y degustar mis partes prohíbidas como enigmaticas; se desabotona la camisa se baja el sostén mostrandole sus senos voluminosos al hablarle manos a la obra señor mafioso, le besa sus senos al mamarselos divina como gustosamente por los labios dulces del mismo mafioso, le toca su estomago que esta suave como una hoja de papel de seda recorriendo con un movimiento excitante calentandola cada vez mas a la incontrolable la voluntad de cumplirle como satisfacerle en todas las formas de hacerle el sexo.

Le corre la falda entallada sacandole en un chistear de dedos su panti de su medias individuales manoceandole sus ingles y su clitoris rasurado como le gusta y representa como una mujer indecente como provocativa y coqueta que busca obtener algún beneficio carnal y sexual a toda costa y al precio que sea, dominandola a sus bajos instintos por el mismo mafioso la recuesta abriendole sus entrepiernas y le besa tremendamente sus ingles hasta su clitoris rasuradito le sujeta su cabeza con mucho pasión por parte de la abogada encantadísima por las destreza demostrativa con tanto talento por parte del mafioso. La masturba varias veces alcanzando diez orgasmos simultaneos por su presión al bombearla con su semen caliente gimiendo que coronación me has dado mi querido mafioso sexual.

La sienta adelante de el penetrandola con tal emoción y apretandole sus múslos con tal fuerza culeandola feroz como salvajemente logrando una corrida por diez veces en líquidos vaginales desbordantes por la calentona de la abogada que no aguanta las ganas de hecharse un caluroso como excitante polvo cargado de mucho erótismo como pornográfico, le acaricia sudorosa sus rodillas recorriendo sus piernas hasta terminar en las proximidades de sus glúteos engrosados por naturalidad, al moverla como una maraca músical las caderas de la abogada empotrada como una verdadera jinete que cabalga a su corcel varonil como victorioso sobre su feminidad como sexualidad humana. Turnandose se baja al abrirle sus piernas del mafioso lamiendo como chupando como fuera un caramelo el pene bañado en semen con su propia boca saboreando toda la verga expulsada por el climax vivido entre ambos, tragandosela con tanta afinidad como encantada por devoción, le besa todas sus ingles masculinas hasta llegar a su rodilla le mantiene la cabeza abajo con sus manos para excitarse cada vez al punto de quedar infartado con tanta maravilla femenina a sus pies que lo atrae y lo enloquece cada vez más por su adquisición legal, consejera personal, consorte sexual y amiga en todos los aspectos sobresalientes a su vida coorporativa como legal...