Tengo un caballo llamado "Grandote". Siempre que voy al campo lo monto y cabalgo durante horas, es la mejor forma de aliviar mi dolor y deseperación luego de perder al amor de mi vida. Una vez pensé en el suicidio, pero el bueno de "Grandote" evitó que lo consumara; así ocurrieron las cosas... Muy atormentada por haber perdido a mi novio, el hombre con quien me iba a casar y que me había pedido muchísimas veces hacer el amor, pero yo ¡estúpida! quería llegar virgen al matrimonio y entregarle mi pureza luego del "si" ante el altar; lo que mas le dí fue a probar de mi chocha la que lamía con gran gusto y placer, pero al llevar mis manos a su dura y caliente polla, me ponía a llorar gimiendo y pidiendole que no me la metiera pues faltaría a mis votos y la promesa que le había hecho a mi madre. Pues el muy cachondo no se aguantó, se buscó a una putica que trabajaba con él y mientras a mi solo me lamía el culo, a ella se la follaba casi todos los días después de visitar mi casa... y así las cosas la putica me lo levantó y el muy zángano me dejó con el vestido de novia, los anillos y las invitaciones frias. Bueno, vistos los antecedentes, volvamos a mis largas cabalgatas sobre "Grandote"; como dijera antes, mis escapadas al campo eran un verdadero alivio, sin embargo una y otra vez llegaban a mi memoria los gratos recuerdos de mi novio y sus ardientes ojos cuando se ponía caliente y queria "enterrarmela" y yo había desperdiciado tan hermoso ejemplar solo por dármelas de santa. Una tarde lluviosa, salí como otras veces a pasear por la finca montada en mi soberbio caballo, cuando me detuve a orillas de un arroyuelo; tumbada sobre el cesped no hacía mas que pensar en lo tonta que había sido y como había perdido a mi hombre, entonces casi sin darme cuenta comencé a acariciarme los pezones y fui desnudandome poco a poco, pasando mis manos por mi cuerpo, tocandome suavemente toda mi piel, arañando con mis uñas mi clítoris, mi culo, metía mi dedo en lo profundo de mi chocha y luego lo lamía, evocando los momentos mas cachondos junto a mi novio ¡y pensé en terminar con mi triste existencia! y lo hubiese hecho, de no ser por "Grandote"... estaba totalmente absorta y abstraida de todo lo que me rodeaba, cuando de pronto "Grandote" relinchó con fuerza intentando zafarse de las amarras que le sujetaban a las ramas de un árbol cercano, al advertir la inquietud de mi caballo no pude evitar fijarme en su enorme polla, morada e hinchada, y en sus ojos desorbitados, el pobre olfateaba el aire buscando el olor de mi chocha que en esos momentos chorreaba los jugos sexuales excitada por mis caricias, e impulsada por una inusitada idea, corrí hasta él y tomando su enorme miembro entre mis manos comencé a chupárselo y mamárselo desesperadamente, era tanto mi frenesí que "Grandote" se estremecía de dolor, creo que la tremenda succión que le estaba propinando le hacía daño. Así permanecí durante un tiempo que no puedo definir, hasta que loca de pasión y furor, me coloqué delante de él, en cuatro patas ofreciendole mi orificio, con mis labios hinchados y morados expuestos a su polla, "Grandote" me embistió como si fuere una potra en celo, y con acometidas brutales y bestiales me "emburró" toda su dura y ardiente polla de más de cuarenta centímetros, obligándome a abrir caricaturezcamente mis piernas y aferrandome al tallo del árbol para aguantar a semejante animal ¡y perdí para siempre mi virginidad!... Al instante tuvo una corrida gigantezca dentro de mí y yo a la vez exploté de puro cachondeo, y pude sentir como toda su leche de semental corría entre mis muslos. Agotada caí de bruces al suelo, llenándome la cara de tierra, creo que me desmayé permaneciendo más de dos horas inconsciente. Al despertar encontré al bueno de "Grandote" pastando placidamente al lado de mi cuerpo desnudo y ensangrentado, como pude me levanté y lavé mi adolorida chocha en el arroyo cercano, me vestí y volví a la finca donde, encerrada en mi habitación, me propuse la firme idea de volver al arroyo al día siguiente para tener nuevos encuentros con el bueno de grandote!!! Desde entonces he experimentado con muchos animales y pudo asegurar que los mejores son los perros, los burros y los hombres, pero nadie como "Grandote" para darme la mejor follada de mi vida!!!!