La verdad esos días antes de viajar pensé en todo lo que estaba pasando y lo que hablábamos con Alberto, primero hablar con él y dejarlo que indagara en mi vida sexual cada vez me gustaba más, saber que gracias a él le había mandado un video erótico a mi esposo y me había tomado fotos con lencería que me quedaba más que bien, muy erótica o como decía mi esposo deliciosa, pero también pensaba en las cosas que mi esposo Gabriel me había empezado a insinuar, Que no tienen nada que ver con Alberto pues si soy honesta conmigo, mi esposo ha venido incitándome a hacer cosas entre los dos sensuales y eróticas; Lo del bar donde me levanto la falda, lo de dejar que un extraño viera como él me masturbaba dentro del carro, lo de hacer el amor diciéndome que le gustaba verme excitada y que otros lo vean, también recordé que la última vez me amenazó con llevarme a un bar sw, de esos de los que mencionó Alberto solo que en ese momento no sabía que eran y ahora si lo sabía pero no podría decirle quien me contó y porque. En fin, tenía mi cabeza confundida, deseaba pensar que solo era parte de la excitación que mi esposo quería que sintiéramos. Pero también me retumbaba pensar que Alberto tuviera razón y lo que está haciendo mi esposo es inducirme a relaciones sexuales abiertas; O que pretenda acostarse con otra mujer y convencerme o justificarme lo que haga cuando yo no esté con él, o lo peor en mi presencia, tenía claro que no lo iba a dejar salirse con la suya y me prometía a mí misma controlar lo que pase, no dejarme llevar por la excitación.

Al fin se llegó el día de mi viaje, llegue al aeropuerto como a las 700 A:M, llevaba una maleta grande pues estaríamos en Cancún una semana, empaque varios vestidos de baño y la lencería que Gabriel me había regalado, empaque un sin número de ropa así como somos las mujeres podría cambiarme por lo menos tres veces por día, lo importante era verme hermosa todos esos días para Gabriel; Al llegar mi esposo estaba esperándome con una pancarta y unas flores divinas me sentí como la más amada y deseada, me llevo a desayunar supremamente delicioso, hablamos de todo como si no nos habláramos todos los días antes de dormir, cuando termine mi desayuno Gabriel me miro diferente, sentí que algo pasaba pues lo notaba ansioso, como nervioso sin embargo decidí que no le preguntaría que pasaba y me dejaría sorprender, después de media hora donde me sentí incomoda por no saber que sucedía Gabriel empezó a adelantarme algo de sus planes, –amor quiero que estos días sean muy especiales para ambos, quiero disfrutar de tu compañía y aceptes todo lo que te proponga que vivamos juntos bebe, solo que te entregues a mí y yo a ti incondicionalmente estos días, estas dispuesta a seguirme el juego bebe? – me quede mirándolo pues sabía que se traía algo entre manos, pues por un lado sentía que debía dejarle claro que no haría nada que perjudicara nuestra relación o donde me comprometiera con cosas que yo nunca haría, y por otro lado tenía ansiedad de saber que había planeado o hasta donde pensaba llegar, –tú sabes amor que yo para ti siempre soy incondicional y todo lo que quieras de mi lo hare bebe siempre que no me pidas cosas que para mí no son negociables, ahora bebe si algo no me gusta tú sabes que yo digo de inmediato no, pero y si lo que me propones lo puedo mejorar para ti lo hare, aceptas mis sugerencias? Se rio de mi comentario mientras se le reflejo en la cara una sonrisa de pícaro que me gustó mucho, no dijimos nada más salimos y vi que había alquilado un carro convertible color amarillo limón me pareció súper lindo, lo abrase y bese mientras subimos mis maletas al baúl, ahí fue el único momento donde le vi hacer una mueca, – no te estreses bebe que cuando me veas con mi ropa para estos días olvidaras lo que pesa, y me reí.

Fuimos a un Hotel que se encuentra cerca de Puerto Morelos muy lindo llamado Desire Resort and Spa, muy elegante y bonito, en la recepción había una niña muy hermosa que de inmediato nos preguntó por la reservación y si ya habíamos venido o era nuestra primera vez, mi esposo Gabriel se quedó mirándome y con esa mirada la niña supo todo, bien veo que es su primera vez el botones los llevara a su habitación y por el tipo de reserva podrán acceder a todas las áreas y eventos del hotel esperamos disfruten de su estancia en pareja o como lo deseen, “cómo lo deseen…” solo di las gracias y comenzamos a caminar detrás del botones un muchacho muy musculoso y agradable no parecia los típicos mexicanos feítos que uno ve jajaja, el botón empezó a hablar y nos dijo el hotel tiene un ambiente de erotismo, pero con privacidad – Es un hotel solo para adultos de amplio criterio y usar ropa es opcional., “! opcional…¡” me acaba de decir este tipo?, me dio un escalofrió muy helado por todos lados sin importar que estábamos a 37º a esa hora, –Se permite la desnudez total, -Si buscas una experiencia en la que cada momento se convierta en toda una erótica aventura este hotel es para ti y tu pareja.., Gabriel no me miraba, solo miraba para todos lados, pero yo no podía me encontraba en un trance como intentando asimilar lo que decía el chico, –El hotel ofrece espectáculos para adultos, es frecuentado por parejas swingers espero disfruten su estancia y lo que se les ofrezca estamos para servirles…, cuando termino de decirlo ya estábamos en la habitación y no fui capaz de mirarlo a la cara yo no salía de mi shock ¡…Mi esposo me había traído no a un bar sw sino a un hotel sw por Dios…¡ .

No me dio tiempo de emprender mi escandalo pues espere unos instantes a que el botones fuera más lejos, cuando Gabriel empezó a hablar se le notaba muy asustado de mi reacción y sus manos no solo temblaban también sudaban, -¡antes de que empiece a gritar o insultarme te voy a explicar¡, este es un Hotel para parejas adultas, donde podemos si queremos andar con ropa o sin ropa y no pasa nada; Puedes tomar el sol en la playa o en la piscina en tu vestido de baño o sin el, cómo veras varias mujeres, no es obligatorio y tampoco pretendo que hagas algo que no quieras. El Hotel está pensado en que las parejas se diviertan como adultos, podemos solo actuar como si fuera un Hotel normal, tomar el sol, comer e ir a las discotecas, con la diferencia que veremos parejas por allí con ropa muy sexy y sensual como la tuya o sin ropa, o teniendo sexo sin importarles que los miremos; ¡Entenderé si quieres que nos vayamos y busquemos otro Hotel normal¡ o podemos solo ver como es el ambiente y disfrutar un poco del Hotel que ya pagamos y costo muchísimo; Si me das una oportunidad veras que puede ser muy agradable y divertido, y te prometo que no te pienso obligar a hacer nada, solo lo que los dos querramos, si te animas podrás salir por allí en toples o si te sueltas un poco podríamos en una de las discotecas tener sexo delante de otros o miramos a los demás, ¡solo te pido que pasemos 24 horas aquí y si no es lo que esperamos nos vamos a otro lado mañana a esta hora¡; me quede helada por lo que había hecho sin consultarme, una parte de mi pensaba que era un desgraciado, pero otra parte me hormigueaba de saber cómo era este ambiente, tenía claro que no andaría desnuda por allí para que me miren me daba pena solo pensarlo, pero sería muy rico hacer toples una vez en la vida o ir a la discoteca sw a ver como es el ambiente.

Bueno la verdad me siento molesta le dije porque no me avisaste primero que quieres hacer o que pretender que pase, ¡es cierto que la última vez pasaron cosas que se dieron espontáneamente¡ pero es diferente que hayas planeado todo y no cuentes con mi opinión, ¡olvídate que voy a dejar que otra persona me toque o pretendas tener sexo con otras personas delante mío¡, si solo se te ocurre algo así saldré del lugar, cogeré mis cosas y nunca más me volverás a ver, y no pienso andar desnuda para que todo el mundo me mire y me morbosee, ¡te queda claro¡, Gabriel dibujaba una sonrisa socarrona, me abrazo y me beso, organizamos la ropa en el armario y me entre a duchar porque el calor era infernal debíamos estar como 45º o más o era por la ansiedad que tenía, cuando salí en la cama había un vestido de baño de dos piezas top y panty muy pequeños color azul agua marino con estampado tropical la verdad era muy lindo y una salida de baño muy bonita, ese vestido no era mío o yo no lo había empacado, así que una vez más él tenía todo perfectamente cuadrado, lo mire pero la verdad ya me daba era risa, me lo puse con la salida, bueno miremos en que me has metido, cogí unas gafas, un sobrero de playa y una toalla de mano, Gabriel tenía una pantaloneta de baño las gafas y un canguro a la cintura.

Apenas salimos de la habitación nos cruzamos con una pareja de ancianos lo mire recriminándole con la mirada si ese era el estilo de personas que veríamos pero no nos dijimos nada, solo continuamos caminando cerca había una piscina con zona de bar, ahí si era muy diferente, habían personas de diferentes edades pero no estaba lleno calculo unas 25 aproximadamente, lo primero que observe fue que había una mujer desnuda en la piscina muy hermosa la verdad de unos 27 o 30 blanca y pelirroja con pecas y como si nada pasara otras mujeres estaban en las sillas de playa en topless con sus parejas al lado riendo, la verdad al principio me sentí muy incómoda sentía que todo el mundo me miraba, pero era más mi impresión que de verdad fuera así; Visualice una silla con parasol alejada del centro del movimiento, me senté y me dedique resguardada por mis gafas a mirar todo a mi alrededor, Gabriel no hacía sino mirarme y mirar a todos lados, debió pasar como una hora hasta que Gabriel me menciono como se veía de hermosa la pelirroja que se paseaba por todos lados desnuda, y tenía razón si a alguien miraban era a ella pero me importaba más a mí su desnudez que a ella la verdad, todos hablaban se saludaban como si se conocieran de mucho tiempo, había una mujer morena con su esposo, un mono blanco charlando entre ellos dándose besos y tocándose muy sutilmente; En ese momento mientras los miraba la morena me saludo a la distancia al percatarse que los estaba mirando, debí ponerme muy colorada y desencajada pues no supe que hacer y voltee mi mirada a otro lado, Gabriel comenzó a decirme que el ambiente era muy chévere muy relajado, no se veía a nadie morboseando a nadie, solo cada uno estaba en su cuento charlaban se preguntaban cosas o se reían, era verdad por más que quisiera la única incomoda parecía ser yo, las mujeres todas estaban en topless menos yo, y los hombres si miraban pero una vez apreciaban lo que se veía seguían en su cuento.

Como 15 minutos después me sorprendió la pareja de la morena y su compañero cuando se sentaron al lado de nosotros y ahora si me saludo la chica presentándose, –hola vemos que es su primera vez mi nombre Melisa y mi amigo Antonio, estiro su mano no tuve más remedio que saludar, Gabriel igual los saludo, pero no podía quitarles el ojo a las tetas de Melisa que sin ser muy grandes si eran muy redondas con un pezón chocolate muy parejo, Gabriel nos presentó y comenzaron el intercambio de preguntas – hola, mi esposa Donna y el suscrito Gabriel somos casados y si es nuestra primera vez, vinimos a conocer como es este mundo nudista, ¡inicialmente estaremos hoy¡ y si nos gusta o le gusta a mi esposa nos quedaremos una semana o de lo contrario nos iremos a un Hotel más tranquilo, -¡vale bien por ustedes¡, ¡ojala a Donna le guste y se queden¡, esto es muy tranquilo es un ambiente nudista y swinguer pero aquí nadie te obliga a nada, tu solo haces lo que te guste, si quieres estar con ropa está bien, pero te vas a perder la única oportunidad de broncear ¡esos senos que se te ven deliciosos¡… sin que te morboseen como en una playa normal, se rio y me guiño un ojo, además aquí en la noche los bares son muy geniales, la rumba es especial y no tienes porque preocuparte por quien se te acerque, solo lo miras amablemente y le dices no gracias, de inmediato se retiran y te miran de lejos; ¡Aunque no lo creas hay más respeto aquí en cualquier otro lugar¡, si no les molesta podríamos acompañarlos en la noche así no se sentirán incomodos y podrás preguntarnos lo que deseen, agradecí cortésmente pero les dije que no era necesario pues no pasaría nada, solo estábamos allí para mirar y pasar unos días en pareja, melisa me rio y guiño un ojo como haciéndome pensar que entendía perfecto; Siguieron a nuestro lado entre ellos hablaban en inglés, seguro pensando que no entenderíamos y la verdad no entendíamos jajaja.

Se podía ver de todo las parejas andaban por ahí tranquilas las mujeres en topless como normal, nada era diferente la verdad muy común, de hecho me sentía ya muy tranquila, mire al lado y me percate que Melisa y Antonio se estaban acariciando más de la cuenta, Antonio tenía su mano metida entre la tanga de Melisa, claramente frotándole su vagina comenzando ella a gemir y a pellizcarse sus pezones como si no estuviera nadie alrededor de ellos, la verdad me puse muy nerviosa e intentaba hacerme la que no los miraba, pero con las gafas podía disimular, inclusive Gabriel si los miraba de frente y la verdad me comencé a sentir muy excitada al ver como Melisa disfrutaba de esa masturbación delante de todos, pues cuando empezó a gemir todos en la piscina comenzamos a mirarlos y algunas parejas comenzaban a acariciarse también; Era como si ese acto fuera el permiso para que cada uno pudiera hacerlo delante de los demás, Antonio cada vez frotaba y se notaba que metía los dedos lo más que podía y de vez en cuando los sacaba para dárselos a chupar a Melisa o chuparlos él, cuando termino tuvo un orgasmos tan fuerte que sus piernas temblaban y se agitaban, Melisa sin importarle nada le saco su miembro a Antonio y comenzó a mamárselo ahí delante de todos y se fue quitando la tanga que traía aun puesta pero muy húmeda, nunca había presenciado una mamada en vivo y sinceramente para ese momento me encontraba muy excitada, ya no disimulaba mi mirada veía como la boca de Melisa subía y bajaba o se introducía ese miembro casi hasta los testículos y con sus manos o frotabas los testículos estimulándolos o se frotaba su clítoris; ¡ufff no podía dar crédito¡ mire alrededor y vi otras dos parejas teniendo relaciones, una tenía en cuatro a su pareja y la penetraba con fuerza mientras la otra le hacía sexo oral a la chica, pero mi mente solo quería seguir mirando como Melisa se lo mamaba a su marido, cuando Antonio comenzó a gemir supe que estaba por eyacularle en la boca a Melisa, quien solo atino a mirarme fijamente mientras claramente observaba como se tragaba toda su corrida, era lo más erótico y sexual que había presenciado hasta ese momento y la verdad tenía ganas de hacer lo mismo con Gabriel, pero aún me daba pena que él supiera que me había excitado, aunque si solo miraba mi entrepierna se daría cuenta como estaba de mojada.

Debo confesar que haber visto por primera vez a otra pareja teniendo sexo me encanto, no puedo describir lo que sentí aparte de decir que me excite muchísimo, Gabriel no hacía sino mirar y su miembro era evidente que estaba super excitado, mire alrededor y varias parejas tenían sexo, una chica estaba lamiéndole la vagina a otra mientras sus parejas las miraban ahora entendí porque los hombres siempre dicen que ver a dos chicas es muy erótico, el verla humedeció más de la cuenta mi vagina la verdad no aguante y hale de la mano a Gabriel para decirle al oido, – ¡quiero que me hagas el amor ya o no respondo¡, Gabriel me miro muy morboso me beso y metió su mano entre mis tetas, ahí me asuste le cogí la mano y volví a decirle – ¡pero aquí no llévame a la habitación ¡, era tanta la excitación de mi esposo que cogió nuestras cosas y emprendimos camino, cuando llegamos a la habitación solo fue abrir la puerta y me arranco mi sostén y mis tangas tirándome sobre un sofá comenzando a comerme mi vagina que pulsaba a cada lametazo que me daba, no dure ni cinco minutos cuando me vine en su cara gimiendo como pocesa, Gabriel se subió y como un salvaje me penetro haciéndome gritar pues no esperaba que fuera así, mientras me bombardeaba mi vagina también lo hizo con mis oídos con frases que más que molestarme me calentaban mucho, – ¿te gusta ver a otras parejas? Yo asentía con la cabeza, ¿te gusto ver a Melisa como lo mamaba? Apenas gemí fuerte, ¿te diste cuenta que el espectaculo melisa lo hizo para ti? Su frase me hizo llegar estremeciendo mis piernas alrededor de él, te gustaría esta noche que lo hiciéramos delante de ellos como lo hicieron ellos con nosotros? Apenas asentí un audible …!SI…¡, mientras Gabriel de la emisión me comenzó a embestir más duro, me apretaba mis senos y a veces me apretaba el cuello haciendo que me sintiera asfixiada mientras intentaba gemir. Por algún motivo me sentía poseída, deseaba que me diera duro y me tratara fuerte en ese momento y era muy excitante, un tiempo después que no sé cuánto fue me la saco y me la metió en boca viniéndose, era tanta su excitación que sentí que me ahogaba con su corrida; Era la segunda vez que se venía en mi boca y esta vez a pesar lo abundante de su corrida lo disfruté muchísimo.

Mientras nos arrunchamos Gabriel me mijo que esa noche iríamos al bar pero que él quería que lo hiciéramos delante de las otras parejas, yo la verdad me quedé callada y sé que me puse muy colorada, me dijo que quería que me pusiera la lencería que me había puesto para él, el que tenía etiqueta denominado Singapur negro de borde rojo y la tanga en hilo dental rojo, yo le dije que ¡como se le ocurría que iba a ir al bar vestida así que me daba muchísima vergüenza hacer eso¡, entonces Gabriel me dijo que mientras íbamos hacia la piscina vio un letrero que decía que hoy la fiesta era de lencería en el bar, yo me quede helada sabía que, si lo hacía ya no había marcha atrás, Gabriel volvió a arremetir mira póntelo y encima te pones un Chantal o alguno de esos vestidos árabes que tienes cortos y si ninguna esta vestida en lencería pues no te lo quitas, pero si todas se visten con lencería tú decides si te dejas o quitas el vestido, piénsalo amor, pero esa es la oportunidad, no dijimos nada más descansamos un rato para recobrar fuerzas cerca de los 8:00 nos arreglamos, le hice caso sobre la ropa y salimos para el restaurante a comer algo antes, cuando llegamos vi los letreros que decían lo de la fiesta y en el restaurante habían mujeres en solo tanga, otras con salidas de baño y se notaba que debajo no llevaban nada más y otras efectivamente con lencería, el animador paso invitándonos rodeado de varias chicas del hotel una de ellas era la nena de la recepción en una lencería negra muy linda y diminuta, se quedó mirándonos y diciéndome que nos esperaban alli.

Terminamos de cenar dimos una vuelta por la playa, muy hermosa la noche, vimos un par de parejas teniendo sexo allí en la playa, eso hacía que el ambiente fuera muy sexual muy morboso, mientras caminaba me sentía muy excitada y expectante de que pasaría esa noche, todo el ambiente era de erotismo, cerca de las 10:00 nos fuimos para el bar del hotel; Cuando llegamos el lugar estaba casi lleno habían parejas de todo tipo, mayores, muy jóvenes y de nuestra edad, mujeres con chicos y viejos con niñas que podían ser sus nietas, era incomodo pero a la vez la curiosidad me ganaba, la nena de la recepción una vez ingresamos salió a nuestro paso cogiéndome de la mano casi me arrastro a una silla dentro del bar y sin pedirme mi permiso me fue despojando de mi vestido el cual se llevó para guardarlo y traernos unas bebidas, no puede ni reaccionar ni decir nada me sentía avergonzada, Gabriel me dijo al oído que me veía muy hermosa y zorra a la vez eso me produzco un corrientazo desde mis pies pasando por mis vagina y terminando en mis senos, cuando mire alrededor todas estaban en lencería de todo tipo y forma, algunas solo llevaban tiritas con los senos al aire y sus vaginas descubiertas, unas mujeres muy hermosas y otras muy normales pero todas arregladas para su mejor noche, como si fuera un coctel solo que sin ropa; Esto era la locura, pero todos se miraban y al final cada quien en su cuento en su rumba, no sabría explicar pues en el ambiente había muchísimo morbo y erotismo pero al mismo tiempo con respeto y decoro irónicamente.

Los dos mirábamos hacia todos los lados ni siquiera era un tema solo de Gabriel yo no podía evitar también mirar, era como si me sintiera drogada por el erotismo del lugar, las personas, sus cuerpos, la nena me trajo un coctel y a Gabriel un vaso de whisky se acercó a mi oído diciendo, lo que necesites pídemelo hoy estoy para servirte lo de desees, le agradecí su atención para volverme a decir al oído, – ¡de verdad lo que necesites¡ y sentí como lamia el lóbulo de mi oreja haciéndome sentir un escalofrió pasar por todo mi cuerpo, Gabriel se quedó mirándome por lo que tuve que disimular lo que había pasado y decirle que solo me había ofrecido servirme en lo que deseara esa noche, obviamente se rio socarronamente de mi pues mi cara reflejaba que algo más había pasado; Después de un rato más tranquila pero igual de excitada por todo lo que veíamos, nos animamos a bailar siendo increíble cómo me sentía de verme semi desnuda en medio de varias parejas con las que me rosaba mientras bailábamos, entre las parejas pude reconocer a Melisa y Antonio ella se veía muy hermosa estaba en una lencería te tiritas color rojo, me explico era solo tiras de lencería cruzadas o entre lazadas hasta una tanga brasilera igual roja e hilo en su cola y en el busto las tiras rodeaban los senos pero no los cubrían y los pezones tapados con un par de corazones rojos y en la punta unos flecos, pero con el cuerpo de ella y su color de piel se veía increíble.

Estando en la pista se acercaron a nosotros y nos saludaron Melisa me dio un beso en los labios tomándome por sorpresa, mientras lo asimilaba Antonio más respetuoso me dio dos besos al estilo español, nos quedamos allí bailando los cuatro y cada vez que sonaba una canción de bachata Melisa me cogía como su pareja para bailar, intente resistirme pero su sensualidad para moverse me seducía, no sabía que me pasaba Antonio y Gabriel miraban deleitándose del baile de las dos y de cómo Melisa me acariciaba muy sensualmente mientras yo miraba alrededor como los demás nos miraban, en una de las vueltas me dejo de espaldas a ella comenzando una erótica caricia en mi cuerpo, sentía que me pellizcaba mis pezones cada vez que pasaba cerca de ellos que podía que rígidos parecían piedras con sensores directos a mi vagina. Tenía demasiada excitación y mi vagina parecía una fuente pero con el calor del lugar, las luces bajas y a la vez brillantes de discoteca no se podía divisar mucho, adicional todo el mundo estaba ya muy animados, algunos se veían en las sillas teniendo sexo y otros bailaban como nosotros, a nuestro alrededor habían muchas personas mirando mientras bailaban y más que sentir pena me excitaba saber que nos miraban, en especial la cara de Gabriel era un poema de morbo, Melisa sabia como consentir y que partes de mi humanidad consentir, cuando pensé que ahí seria el momento donde una mujer me usaría, cuando mi voluntad estaba completamente minada y sumisa pararon la música para el show de stripers de media noche, me salvo la campana sin embargo nos sentamos todos juntos y Melisa se hizo a mi lado.

Mientras se presentaba la pareja que daría el show volvió la chica de la recepción y me llevo un nuevo coctel y tragos a los otros Melisa le pidió uno igual, la pareja comenzó su show de erotismo, el tipo un adonis musculoso y muy alto vestido de marinero y la nena vestida de policía con un busto increíble y una cola redonda con un color de piel muy parecido al mío, cabello castaño liso hasta la cintura que era muy pequeña, comenzaron a pasar por todas las mesas permitiendo que los tocaran o ellos tocando a las parejas, con algunos dejaban que les quitaran una prenda, las chicas eran más lanzadas con el tipo lo manoseaban por todos lados y unas más osadas lo nalgueaban el show tenía prendido el bar.

Cuando llegaron a nuestra mesa la nena tenía su sostén y su tanga hilo el tipo solo su tanga, nos bailaron al frente y luego el tipo se subió sobre Melisa que sin pensarlo le saco su miembro y comenzó a frotárselo mientras se reía y nos mirábamos todos, era un miembro muy largo la verdad y estaba depilado completo, con una mano Melisa recorría toda su base y con la otra frotaba sus testículos mientras el tipo le movía las caderas como si le estuviera follando la cara, era increíble pues yo estaba a su lado viendo todo en primera fila, la nena se sentó sobre Gabriel de espaldas y le pidió que le quitara el sostén cogiéndole las manos y haciendo que le frotara sus senos mientras movía su cadera restregándosele a mi esposo, la verdad sentí celos pero al mismo tiempo sentía un deseo de que él bajara su mano y le frotara su vagina delante mío, ¡que me pasaba me gustaba más mirar a mi esposo y como la nena lo hacía manosearla ¡ que al tipo de al lado con su miembro descomunal siendo manoseado por Melisa, Antonio si fue más osado que mi esposo y metió su mano entre la tanga de la nena quien de inmediato comenzó a gemir, no podía creer que me excitara tanto ver a Gabriel tocando a otra mujer, a mi lado Melisa había empezado a darle una mamada al striper, ¡no lo podía creer que Melisa se lo estaba mamando como si se le fuera la vida ¡ casi se lo introducía hasta la mitad sin dejar de frotarle sus testículos, el tipo parecía que le follaba la boca, no podía dejar de mirarla y ella también me miraba y miraba al tipo quien estiro su mano apretándome mis senos, me sentía paralizada no fui capaz de quitarle la mano ni me moví, solo mire a Gabriel que seguía disfrutando de los movimientos pélvicos de la nena que ya no tenía su tanga, Antonio no paraba de masturbarla y lamerle un seno todo el mundo aplaudía y gritaban eufóricos sin quitar la mirada de nuestra mesa, Antonio se paró quitándose su bañador y sacando un miembro también alargado, se subió en la silla y dándoselo a la nena quien la comenzó a mamar mientras le cogió la mano a Gabriel para que siguiera masturbando.

Mi cuerpo parecía que me iba a quemar yo no sabía que mirar, si a Gabriel frotándole la vagina o como se lo mamaban a Antonio o a Melisa que ya se tragaba ese miembro hasta la base, al ver el miembro de Antonio entendía cómo podía tragárselo si eran muy parecidos con el stripers, Melisa me miro y me pregunto ¡si me gustaba su verga¡ lo cual no pude responder pues ya no era consciente de mí, empezó a lamérselo, pero lo acercaba a mi cara, yo solo atiné a decirle que _¡por favor no!, pero ella siguió lamiéndolo y ya me lo ponía en mi rostro frotándomelo contra mis labios, por un momento perdí la vista de lo que sucedía al frente mío, el olor a miembro de otro hombre me tenía muy excitada, Melisa me pedía que lo mamara pero no era capaz, ella si seguía chupándole los testículos y lamia el tronco hasta llegar a mi rostro, por un instante cerré mis ojos y sentí como me introducía su glande entre mis labios recibiendo por primera vez un miembro diferente al de mi esposo, este tipo ahora me estaba follando mi boca mientras Melisa comenzaba a lamerme mis senos y metía su mano entre mi vagina obligándome a abrir más mi boca por las ganas de gemir, no aguanto mucho nuestro amante y se vino apenas sacándomelo de mi boca y recibiendo una parte en mi boca, otra en mis labios, pero Melisa subió a continuar mamándosela y tragándose el resto de su corrida como una posesa se la succionaba con fuerza, cuando termino me miro y beso mis labios para limpiar lo que había caído en ellos, nunca había imaginado hacer algo así, pero tampoco podía desconocer que me sentía muy excitada.

Al fin pude ver la imagen de la silla al frente y lo que vi me dejo aturdida, la nena estaba arrodillada sobre la silla mamándosela a Gabriel y bajeándosela a Antonio estaba intercalándoselas, le mamaba a Antonio y pajeaba a Gabriel, sentía mi rostro hervir pero no podía decir nada pues un perfecto desconocido me acababa de llenar la boca de semen y otra mujer me estaba chupando mis senos y frotándome el clítoris mientras sacaba sus dedos y los chupaba, espera, … ¡Melisa me estaba masturbando y hasta ahora caía en la cuenta ¡cuando me quede mirándola en medio de un par de gemidos que me producía Melisa me levanto las piernas haciéndome recostar sobre la silla y sin mediar palabra comenzó a lamerme mi vagina, solo fue sentir su lengua en mi clítoris y estalle en un orgasmos que me hacía mover mis piernas, me tomo unos minutos poderme recuperar para ver como el strippers penetraba a la nena por detrás mientras ella seguía con la felación, vi perfectamente cuando Antonio se le vino en la boca y Gabriel al verlo se le vino en la mano, ese fue el momento donde el stripper levanto a su chica hasta el centro del escenario y comenzó a cogérsela en cuatro y fue como si esa fuera la señal pues todos comenzaron a tener sexo allí, un tipo se acercó a nosotras pero Melisa muy cortésmente le indico que no compartiríamos con nadie mas, en la misma forma se retiró, Antonio se acercó a Melisa y la penetro por detrás mientras me chupaba mi vagina como nadie lo había hecho, Gabriel también se acercó y me puso su miembro en mi boca lo cual no dude de empezar a lamer sintiendo el sabor de una boca ajena a la mía, pero también me sabia a vagina ajena ¿seria por lo que se la restregó la nena?, lo miraba a los ojos mientras sabía que ya habíamos cruzado el límite que había colocado; Melisa dejo mi vagina muy sensible mientras subió a besarme aprovechando para chupar un poco el miembro de mi esposo en mi propia cara como si ya no importara mi opinión, Antonio la halo más por ganas de metérsela que por celos comenzando a metérsela al lado de nosotros acción que Gabriel imito colocándome al lado de Melisa y penetrándome de manera violenta arrancándome un par de gemidos que parecían más gritos debido a la sensibilidad de mi vagina, ambas gemíamos y nos apretábamos las manos mientras nuestras parejas nos daban una cogida por lo menos para mí increíble, cuando estaba llegando Melisa me beso tan delicioso que no me importo que fuera una mujer con la que me besaba, Gabriel no aguanto la escena y me la saco viniéndose en mi pecho y salpicándonos a las dos, pero fue Melisa la que se la limpio con su boca una vez más delante mío para volver y besarme con el sabor de mi hombre en sus labios, Antonio aviso que llegaba bajándose Melisa a mamársela también, ellos esperaban que yo también bajara a chupársela pero no pude, me quede ahí mirando como ella recibía toda su corrida en los labios, cuando termino me beso una vez más e intente evitarlo pero su beso fue lo que mis labios querían, sentí el sabor de semen que acababa de recibir y lejos de molestarme no entendía porque sentí que debí haberlo recibido en mis labios, pensamiento que me hizo sentir sucia y muy puta por primera vez.

Ya eran más de las tres de la mañana cogimos nuestras cosas y salimos del lugar la verdad no me importo salir a caminar desnuda por la playa con Gabriel, vimos más parejas desnudas en la playa dándose placer atrás de nosotros estaban Melisa y Antonio también caminando los esperamos y nos fuimos hablando de la que había pasado, no sabía que decir pues aún me sentía en shock, pero igual sabía que por mucho era mi mejor experiencia, Gabriel decía que había sido lo mejor pero que le habría gustado ver a Antonio cogiéndome, me quede helada mirándolo no daba crédito a lo que acababa de decir, me quede mirándolo y le pregunte – ¿de verdad te hubiera gustado verme con otro?, Gabriel afirmo sus palabras como si fuera lo más normal y adiciono que también le hubiera gustado verme lamiéndole la vagina a Melisa o a otra nena, no dije nada solo seguimos caminando hasta regresar al hotel, en la entrada a la habitación Melisa nos besó a los dos y Antonio esta vez me beso en los labios, Melisa nos dijo – sí para pasado mañana siguen aquí nosotros alquilamos un barco para navegar por la rivera si desean pueden ir con nosotros, no se preocupen que ya alquilamos el bote, así que si van con nosotros no tendrá ningún costo solo nosotros o con ustedes es igual, pero más divertido jajaja, si les parece los esperaremos hasta las 9:30 el miércoles en puerto el barco se llama infinity, nos miramos y le dije déjanos pensarlo pues aún no hablamos de lo que paso hoy, Melisa y Antonio siguieron caminando hacia las habitaciones de arriba nosotros entramos y cerramos.

Mientras nos aseábamos para dormir, mis emociones me invadían por una parte me sentía mal y no quería mirar a Gabriel, pero por otra sentía una satisfacción de haber dejado a otra mujer darme placer, me sentía confundida pues al ver como se lo mamaron a Gabriel no me disgusto por el contrario sentí que también me habría gustado verlo metiéndosela a Melisa pero no podría reconocérselo, él se quedó dormido de una yo no podía dormir solo cerré mis ojos por momentos y luego cuando amaneció me puse un vestido de baño con pareo y salí a caminar para despejar mi mente, el hotel estaba muy solo al parecer todos habían estado en el bar y ahora se encontraban dormidos, solo veía a los empleados del hotel quienes me sonreían, tome jugo de naranja pero no desayune para hacerlo luego con Gabriel, fui a la playa para despejarme pues mi sueño no llegaba, estando allí recostada en una silla playera paso la nena de la recepción la que me había atendido esa misma noche, al parecer tampoco había podido dormir, de inmediato me vio y se acercó a saludarme dándome un beso en la mejilla se sentó al lado, – ¿que tal fue tu primera noche en el paraíso?, – la verdad me siento confundida, nunca le había sido infiel a mi pareja y verlo dejársela mamar por otra ¡no me molesto creo que me gusto¡; – pero tu estuviste con otra pareja? O no y tu esposo se lo metió a la stripers? Ustedes están en la misma posición, ambos hicieron lo mismo así que no tienen porque reprocharse nada; Además tu esposo fue el que te trajo aquí, el quería que otro se acostara contigo y su idea era que tu estuvieras con otras personas inclusive con una mujer…, sus palabras me generaron más confusión pues tuve que preguntar, – ¿como así que Gabriel se la metió a la striper? ¡eso nunca lo vi!, ¡además yo no estuve con otra pareja¡ solo la chica me hizo sexo oral a mi yo no a ella y su esposo nunca me toco, – ¡eso no me pareció ¡ mientras tú se lo mamaste al stripers, la nena le saco el pene a tu esposo y se lo metió sentada, mientras se lo mamaba al otro tipo que estaba de pie; Tu solo viste cuando ella se los mamaba al tiempo a ambos, su versión me dejo mustia no sabía si era verdad, pero tenía algo de sentido, – pero pensé que te habías acostado con el esposo de esa nena, pues yo me fui antes, mi turno acabo cuando empezó en show, pero me quedé un poco a verlo porque la verdad me pareces muy linda y quería ver hasta donde habías llegado y cuando te vi lamiéndosela pensé que te habías dejado coger por el tipo, – ¡no solo paso eso nada más!, – pero lo de tu esposo si paso eso lo vi y creo que debías saberlo.

No sabía que sentía, si estaba molesta o si era consciente que si estábamos allí era para eso, pensaba que algo más había pasado y esto lo confirmaba, pues cuando todo ocurrió hubo un momento donde mi mente me decía que debía mirar, no sentía que me debiera una explicación pero si me sentía incomoda, sabía que en ese momento desee que pasara pero ahora sabía que paso y no lo vi, tenía claro que eso iba a pasar pues yo misma no fui capaz de detenerme y también deje que otro me lo metiera en la boca, ¿a cuenta de que buscaría una explicación? ambos estábamos allí y ninguno hizo nada por evitarlo, así me engañe ambos queríamos ver hasta donde llegaríamos; –no te aflijas tu viniste aquí o aceptaste quedarte, sabias que algo así pasaría tanto para él como para ti, además eres muy hermosa y no pasas desapercibida o no vez como te miraban anoche hasta los del show quisieron quedarse en la mesa de ustedes eso no pasa, ellos hacen su show en el centro de la pista, por eso lo de anoche fue algo muy especial, tú lo que necesitas es un buen masaje vamos al spa que a esta hora no hay nadie y podrás descansar un poco que veo que no puedes; Tenía razón con preocuparme no podía cambiar lo que había pasado ya habíamos dado el primer paso ahora debía entender hasta donde Gabriel quería llegar y no dejar que afecte nuestra relación.

Fuimos al spa y de verdad estaba vacío Grace se llamaba la nena, entramos a una habitación en bambú todo olía delicioso a esencias florales me dijo que me quitara mi ropa y me acostara boca abajo en la camilla mientras conseguía quien viniera a hacerme un masaje, me recosté y unos minutos después sentí como me aplicaban aceite en mi espalda y comenzaba un delicioso masaje que en verdad lo necesitaba, escuche la voz de Grace que decía –perdona lo estoy haciendo yo porque el encargado no ha llegado así que espero te guste mi masaje especial, la verdad sentía mi espalda tan bien que no importaba, sus manos acariciaban y apretaban mi espalda hasta mi cintura y luego bajo a mis piernas, me estaba quedando dormida, sentí su caricia en mis muslos, en mi ingle muy suave, sentí rosar sus dedos con mis labios haciéndome erizar la piel, se apodero de mis glúteos mientras me decía, – ¡tu cola es tan redonda y suave¡, me gustaba como me consentía y mi respiración se agitaba estaba sintiéndome excitada cuando me pidió voltearme en la camilla, al girarme nos miramos Grace tenía una mirada picara y erótica mientras comenzaba a frotarme mis piernas, yo instintivamente cerré mis ojos, sus manos pasaron de mis pies a mi dorso y cuello bajando a abrazar mis senos por sus lados hasta terminar rozando mis pezones, ya me tenía muy excitada con la forma en que acariciaba mi piel, Grace tenía unas manos increíbles como fue increíble sentir sus dedos por primera vez frotando mi clítoris, no pude evitar que se me escaparan los gemidos y mis piernas instintivamente se abrieron era increíble como exploraba mi vagina esta mujer, cuando estaba a punto de llegar a mi clímax reviví la sensación húmeda de hace unas horas cuando Melisa lamia mi vagina pero ahora era Grace la que lamia con proeza mi cuca, metía sus dedos arrancándome un placer increíble, abrí mis ojos para verla hacerlo encontrando a Grace que se había quitado su ropa, era una nena muy hermosa su piel dorada por el sol unos senos de pezón pequeño y una vagina con apenas un hilo de vello púbico muy sensual, mientras me deleitaba con su figura mi orgasmo llego haciéndome convulsionar, apenas me recuperaba cuando Grace se subió a la camilla colocándome su vagina a la altura de mi boca en forma de 69 y comenzando nuevamente a lamerme mi cuca acompasando un movimiento de cadera rasando con mi boca su vagina, me invadió un deseo de lamerla arrancándole los primeros gemidos, su sabor era acido y dulce era mi primera cuca, desee meter mi lengua en ella sin reprimirme saboreando su humedad para empezar a meterle mis dedos, no solo por su vagina sino también en su ano, al principio lo sentía muy seco por lo que comencé a lamérselo para facilitar el ingreso de mis dedos, sentí su orgasmo en mis labios como ella sintió el mío, nos abrazamos y le agradecí por ser mi primera mujer.

Entramos al jacuzzi preguntándome si ya había decidido quedarme o prefería irme, le Conte que Melisa y su esposo nos habían invitado para un paseo en barco para mañana y ya había tomado la decisión de ir, sí Gabriel deseaba que estuviera con otro hombre debía ser alguien que me hiciera sentir muy puta, soltamos la risa ambas.

 Duramos una hora y después fui a nuestra habitación, Gabriel no se había levantado me recosté a su lado quedándome dormida, al rato me desperté al sentir en mi vagina una presión y que mi cuerpo se zarandeaba en la cama, al abrir los ojos vi a Gabriel penetrándome una y otra vez, mi cuerpo se sacudía y mis gemidos se presentaban inundando la habitación, al ver que estaba despierta me pellizcaba mis pezones y me besaba el cuello agradeciéndome por quedarnos en ese lugar maravilloso, de mi boca salieron las palabras más sucias que hasta ahora decía, – ¿te gusta tu puta?… ¿Te gusta que mame la verga de otros hombres?… ¿Quieres verme lamerle la cuca a Melisa?… ¡Yo quiero que me folle Antonio y me meta su verga por mi culo¡, ¿quieres ver eso? Gabriel comenzó a follarme como animal sacudiéndome violentamente mientras me decía, – ¡quiero que seas mi zorra y mi puta y que te tragues su corrida quiero ver como ambos te penetramos al tiempo¡…, casi al terminar su frase se vino en mi cara dejándome su verga en la entrada de mi boca la cual limpie sin que me lo tuviera que pedir como antes pasaba, un minuto después afirme mis palabras de zorra, – ¡si eso es lo que quieres consigue que Melisa invite a la nena de la recepción al paseo creo que se llama Grace y te dejare ver lo que deseas, pero no podrás reprocharme nunca lo que pase¡.

Recordé las palabras de Alberto, Gabriel había dejado que saliera la puta que vive dentro de cada mujer y que sentimos miedo de aflorar, tenía que contarle todo lo que había pasado y merecía que le diera las fotos de su regalo, pues si no fuera por él mi vida no abría mejorado en placer y sin pensar en lo que hacía tome mi celular y le envié las fotos que me había tomado en lencería y una frase que decía, – ¡si te gusta lo que vez demuéstramelo por lo menos una vez..¡.