Tengo una pareja con la cual ya llevo algunos años juntos y con una vida sexual formidable, el es un amante perfecto. Inventamos unos juegos sexuales que a mas de uno pudieran sonrojar pero que a nosotros nos encanta a morir.
En una ocasiòn mi pareja al que llamare Humberto me aviso que vendria a la casa a comer con un amigo al que nombrare Mario; cuando llegaron me di cuenta que venian algo borrachos pues habian celebrado el aniversario de su empresa. Quiero recordarles que hable de juegos sexuales y uno de ellos es que en casa no uso ropa interior pues nos gusta sentirnos libres para el manoseo, claro que cuando llegaron Humberto no se si a propòsito o por olvido entra me abraza,me da un beso y mete las manos bajo mi falta para apretarme las nalgas, Mario se diò cuenta de mi desnudez y solo se sonriò. Yo me hice a la que no pasò nada les ofreci una cerveza y se sentaron en la sala a jugar poker y regresè a la cocina para terminar la comida. Me pidieron mas cerveza y cuando fui a llevarselas Humberto dijo-¡ya estoy quedando borracho por no tomar mi remedio!ven cariño y dame un poco, y pues resulta que el remedio es leche pero materna ya que por alguna razon los anticonceptivos me habian causado esa reaccion. Me acerque, me sentè en su pierna lo abrace y me saquè un seno del top que llevaba y el comenzò a chuparme el pezon sacando leche; Mario solamente se quedò mirando como mi marido me chupaba y chupaba.A los pocos minutos Humberto dijo que era suficiente y le dijo a Mario con toda naturalidad ¿quieres probar un poco? este contestò medio sorprendido que SI; tuve una pequeña duda pero al final hice lo mismo que con Humberto y le ofreci el otro seno, el comenzò a chupar creo muy emocionado, me tomo el seno entre sus manos y sentia que mas que beber mi leche su lengua jugaba con mi pezòn. Cuando terminò nos dimos cuenta que Humberto se estaba durmiendo asi que me levante y dije que iba a ver la comida y siguieron jugando poker. Al ratito volvieron a llamarme y Humberto me dijo- Recuerdas que hace un mes èl me prestò 5 mil pesos para acompletar el enganche del carro? pues este compa dice que si te dejas lamer el culo se olvida la deuda; obvio que me quede como estatua porque aunque no somos puritanos pues tampoco imagine que me sugiriera algo asi, sin embargo yo ya me sentia algo caliente por la chupada de tetas que me dieron y pues no era la gran cosa unas lamidas y en el culo! eso no me lo podìa perder; para no parecer muy animada le preguntè como en broma ¿ y sabes hacerlo? Mario solo contestò - Prueba. Me puse frente a el, luego me di la vuelta me levantè la falda y me inclinè pero en ese momento Humberto dijo -espera, yo te ayudo, y se acercò, me abriò las nalgas y le dijo- ahora si chupale!. Mario comenzò a olerme y comentò que hacia falta el olor de culo para que se le parara la verga, yo estaba que explotaba de excitaciòn en eso sentì como me untaba la nariz en el hoyo y empezo a lamer alrededor hasta que me chupo ahi, y lamia y lamia y chupaba, era tanto el calor que habia en esa habitacion que no sabia si era calentura o ganas de ir al baño. En eso bajò un poco la lengua y Humberto le dijo -pèrate,dijimos culo no panocha!
Mario vino a sugerir algo que pensè terminaria en pleito pues ofreciò 2 mil pesos si me dejaba mamar la vagina, yo me quedè callada y mi marido contestò -solo si ella quiere, y ya estando con el culo al aire y caliente dije que SI.
Mario dijo- pero ahora te quiero acostada y con las piernas abiertas, me acostè en el sofà y me abrì, el vino y con toda maestria comenzò a meterme la lengua y a pegarme tremendas chupadas y lamidas frente a Humberto que miraba hipnotizado como su amigo me estaba comiendo la panocha. Y cuando ya faltaba poco para tener un orgasmo se detuvo y me pidiò le dejara meterme un dedo pero yo contestè que no y Humberto dijo- si supieras que ni a mi me ha dejado meterle un dedito en el culo, lo tiene nuevecito!. Mario se puso màs caliente y me ofreciò 2 mil pesos mas si le dejaba romperme el culo, yo mirè a mi marido y le dije que solo lo haria si el me lo rompia primero luego podria meterme el dedo Mario; mi marido pareciò despertar de su letargo y se acercò yo me puse de rodillas sobre el sofà, èl se mojò el dedo y me frotò el hoyo luego metiò la puntita y su amigo le decia que despacito que fuera girando el dedo para dilatar el culo y asi lo hizo y metiò todo el dedo siguiò con el mete y saca hasta que logrò meterme dos dedos, emocionado me dijo que ya podia caber su verga. Luego vino el turno de Mario que resulto un estupendo culeador, pues me recetò tal cojida con el dedo que solo de recordalo me arde el hueco. Mario estaba muy excitado, Humberto se acercò y le dijo- te voy a ayudar compa, te la voy a pelar, le abriò el cierre le sacò tremendo animalòn largo y gordo y lo comenzò a pelar, al sentir que se la estaban puñeteando aumentò el calor y me metiò dos dedos, me chupô el culo, me lamiò y rechupò la vagina hasta que no pude mas y tuve un maravilloso orgasmo, el al sentir que terminaba y mi jugos salian y escurrian comenzò a chupar y a beberselos lo que me hizo sentir como nunca antes. Despues de eso Mario fue al baño yo estaba acostada y exhausta se acercò mi marido y me dijo- Al rato te voy a dar una cojida de esas para que no te acuerdes de nadie solo de mi y por lo pronto te la voy a mamar un poquito para que tengas en el culo mi saliva, metiò su cara entre mis piernas y a los pocos minutos volvi a ver estrellas. Su amigo saliò poco despues del baño y supongo que entrò a puñetearsela y sacar la leche que ya le rebozaba; nos sentamos a la mesa, comimos, platicamos de lo mas animados de cosas sin importancia y ya cuando se despedia dijo- Muchas gracias, hoy comì delicioso y al decirlo me mirò la vagina, y nos vemos la proxima semana pero esta vez comeremos en mi casa, Humberto dijo que era una buena idea y nos encantaria ir. Por la noche ya acostados en la cama no podia dejar de pensar en que comerìa en la casa de Mario, pero despuès les contarè que fue lo que pasò, ya me urge que llegue ese dia.