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Categoría: Confesiones

Edna y su prima Sonia

Doña Arminda era la señora encargada de llegar a limpiar la antigua casita que mis padres habían comprado frente al canal, y lo siguió siendo ya con la construcción de la nueva casa. Incluso cuando viajábamos los fines de semana y días festivos ella nos cocinaba. Talvéz la memoria me falle pero yo tengo idea de conocerla desde que tenía los tres años de edad, Al pasar el canal se llega a la playa y allí hay una ranchería donde ella vive con su familia. Como desde niño la conocía, conocí también a su hijas y nietas, Esther que aún trabaja en empaque en la fábrica y doña Cristy que es la que actualmente cuida y limpia la casa, ambas tienen sus hijos Edna y dos hermanos más, en el caso de Esther, Sonia y cuatro hermanos hijos de Cristy. Yo acostumbraba desde niño irme a la playa con ellos, me gustaba pasar el canal en cayucos o lancha de motor y luego ir a pescar a la boca barra que formaba la desembocadura de un río o simplemente ir a jugar con las olas o recoger caparazones de conchitas y caracoles. Normalmente las edades oscilaban entre los 4 años a los 12 ó 13 en los hombres, en mi caso 4 años al igual que Sonia y Edna que ya era una quinceañera, y era quien nos vigilaba por las tardes en la playa ya que no nos metíamos al mar, sólo caminábamos con los pies en el agua buscando como dije recuerditos, y yo al igual que los otros niños, desnudo completamente, me ponían calzoneta pero de ver a los otros no me duraba ni 5 minutos puesta, y eso duró hasta tener ya unos 7 ú 8 años. Con el tiempo y con otros compromisos, los viajes de fin de semana se fueron diluyendo y por lo tanto el contacto con esta gente se fue haciendo de una vez al año o cada dos años y perdí todo contacto con ellos. A Sonia volví a verla cuando yo tenia entre 15 y 16 años, ella entre 26 y 27 y de casada menos de un año ya que se dedicó a cuidar durante una larga enfermedad a su abuelita. Cuando la volví a ver yo andaba bastante encaprichado con una chica a la que había dejado de ver, y casualmente ella estaba en esos días a cargo de la casa, ya que el esposo era policía y estaba destacado en otro departamento de la república. Por cierto yo ni me había dado cuenta que era ella, pues con el tiempo se pierden ciertos detalles, esa tarde había quedado de llegar una amiga de la chica que a mi me gustaba, y a quién quería pedirle información de donde buscarla, pero me aviso que no llegaría porque ese día le había llegado el período,la verdad es que no me imaginaba que llegaría por sexo, y la verdad es que me quejé de mi mala suerte pues la chica era muy hermosa y de un cuerpo delicioso. Al llegar a almorzar me recibió Sonia ya con una deliciosa sopa de mariscos, y me dijo que recordaba que de niño me encantaba esa comida, y luego me pregunta: O ya no se recuerda que le pedía a mi abuelita allá en la playa que le hiciera esta comida cuando regresaban mis tíos de pescar? La vi detenidamente alta, delgada, de piernas hermosas y busto pequeño, sus rasgos finos, y sus ojos, ojos inconfundibles color verde claro, muy pero muy claros, y su sonrisa dulce, perplejo de verla tan linda, sólo atiné a decirle, Sonia disculpe, no le había reconocido, pero es que está tan linda tan hermosa, antes lo era pero ahora se pasó de la medida.ella es morena, pero se le oscureció mas su color de pena o por sentirse alagada no sé, luego nos sentamos a comer y a recordar cosas de mi infancia, de mis travesuras, de que no quería venirme de su casa, me gustaba dormir en hamacas, de ir a pescar con sus hermanos, y se nos fue el tiempo,ya eran casi las 5 de la tarde la gente que estaba trabajando en la remodelación de la casa se había retirado, la encaminé hasta el embarcaderoi de canal, y le pregunté si aún pescaban sus hermanos y tíos,(ellos son pescadores artesanales y de eso viven). casualmente uno de sus tíos estaba en el embarcadero y me fui a la playa, y esa misma noche me hice con ellos al mar. Al día siguiente por la tarde fuimos a entregar el producto de la pesca a la empresa pesquera y yo a la casa, me dormí como tres horas, y al despertar me fui a la cocina a comer algo, Sonia ese día se había demorado en el que hacer, y ya no podía irse por falta de transporte y cuando así sucedía pues siempre había una habitación disponible para ellas. Ella me dijo que no me preocupara que me iba a preparar algo, y que estaría listo en unos 15 minutos, el calor era insoportable, había despertado bañado en sudor y le dije que me daría un chapuzón en la piscina, al salir me coloqué una toalla al rededor de la cintura y por bajo saqué la calzoneta, quedándome sin nada abajo. Cuando estaba comiendo Sonia me dijo que estaba muy quemado, ya que mi espalda parecía tomate, y que al terminar de comer me aplicaría una crema, y que recordaba cuando lo hacía siendo un niño,porque usted me dijo siempre ha sido tan blanquito, y yo le ponía bloqueador y cremas. Mientras yo comía la observaba cuando iba de un lado otro terminando de ordenar la cocina, aún tenía su cabello algo húmedo y de plano al bañarse por comodidad de puso de una vez su camisón, no era transparente, era un camisón de algodón que le llegaba abajo se sus rodillas, blanco con estampados rosa, se notaba que no tenia sostén y se marcaban unos pezoncitos duros, sus senos se veían firmes, sus caderitas marcadas y sus pantorrilas torneadas, culito parado y cintura fina, estaba descalza lo que daba un toque muy sexy, me fui a la habitación y me puse a ver la TV, ella tocó la puerta y entró con un pomo de crema nivea líquida, me puse boca abajo, y sentí sus manos suaves aplicando la crema en mi cuello, hombros y espalda, pero a través de el espejo veía de su cintura hacia abajo, tenía las piernas abierta y veía sus muslos lisos y lustrosos y parte de su ropa interior, la pija empezó a levantarse, me pidió que diera vuelta, pero no podía darme ya que la verga estaba parada e iba a ser notorio el bulto bajo la toalla, ella se lo imaginó y decidió proseguir frotando mis pies, al darme vuelta empezó a aplicar crema en mi pecho, y vientre, me hizo el comentario de que era delgado pero mis pectorales estaban trabajados al igual que los músculos abdominales, al estar inclinada sobre mi podía ver casi la mitad de sus pechos, duros y morenos, nuestras miradas se encontraban y ella esquivaba, sabía que algo le estaba pasando al estar frotando mi cuerpo, sentía su respiración más agitada y sus manos temblaban, quiso retirarse, pero la tompe de una mano y la atraje hacia mi, estaba casi recostada sobre mi pecho, nuestras bocas casi juntas y ella me dijo: por favor joven no, recuerde como no podemos,tengo marido y además no es correcto que pase algo entre nosotros, yo lo quiero mucho pero esto no puede.no terminó lo que quería decir, mi boca estaba en la de ella, y mis labios chupaban los de ella y los de ella los mios, nuestras lenguas se entrelazaban, nos besábamos los ojos, le chupaba sus mejías, ella estaba sobre mi, sus pechos sobre mis pecho y mis manos en sus nalgas, subí su camisón, y empecé a bajar su ropa interior hasta la rodilla, con uno de mis pies termine de bajárselo, y ella movió primero una pierna y luego la otra para liberarse de su calzón, ahora estaba acostada sobre mi con una pierna a cada lado mío, mi mano subió por sus muslos hasta llegar a sus nalgas me fui por su hendidura, hasta llegar a su vagina, mis dedos empezaron a explorar su raja, sus vellos eran suaves y ralitos, ya estaba mojados al rededor de su hoyito, al frotar su clítoris gimió de placer, solté mi toalla y sus labios quedaron abiertos sobre el tronco de mi verga, empujaba de sus nalgas de arriba hacia abajo, el tronco de mi verga empezó a humedecerse de sus líquidos, y resbalaba a toso lo largo de mi verga su vagina, ella gemía y suspiraba, bajó una de sus manos y tomó mi verga del tronco y lo encaminó a su entrada, poco a poco se fue acomodando y empezó a empujarse tratando de meterse mi verga, entró el glande, su hoyito húmedo y caliente empezó a dilatarse conforme se iba metiendo la verga, cuando ya se había metido más de la mitad, empezó con un mete y saca, estaba ya bien lubricada y mi verga ya deslizaba con facilidad, me dijo nuy quedó que sentía muy abierta su concha, porque mi pija era muy gruesa, tocó para medir cuanto le faltaba por meterse, y se sorprendió que aún le quedaban entre 3 y 4 pulgadas fuera. La saqué la pija y saqué su camisón, al quedar desnuda completamente, pude observar su hermoso cuerpo, y empecé a besarla de pies a cabeza, le chupé sus chiches duras y su vagina, me deleité con su clítoris y ella empezó a mamarme la verga, tenía los ojos como platos de ver aquella verga de 8 pulgadas y gruesa, me dijo que desde que yo era niño se imaginaba que iba a ser vergudo porque a pesar de tener 3 o 4 años mi pija era mucho más grande que los niños de 7 y 8 años y por eso le gustaba llenármela de crema y hacerme cosquillas para verla paradita. En si la pija se la metía con dificultad en la boca y me lamía deliciosamente, de lado y de espaldas a mi se colocó, yo acariciaba sus pechos y pezones, su vientre, con una perna arriba se acercó y empecé a penetrarla despacio, se la metí todita y empezamos a movernos rítmicamente, cambiábamos de posición, hasta que estando ella boca arriba, aprisionó mi cintura con sus piernas ¿, levantó sus cadera, buscó mi boca y se movía frenéticamente y luego se quedó inmóvil y con una sonrisa de satisfacción dibujada en sus labios, yo seguí bombeando porque sentía que ya me corría, ella lo notó y me dijo que adentro no, se la metí en la boca y empezó a chupármela mientras me chupaba le pregunté que si se iba a tragar mi semen, me dijo que nunca lo había probado, ya que cuando estaban evitando hijos con el marido le acababa en el culo, y como era un culito delicioso, durito y redondito, no podía dejar pasar la oportunidad,le di vuelta y gatas empecé a bombiar despacio su vagina, pero mis dedos empezaron a dilatar su ano, y despacito la empecé a meter, no duré mucho, estaba de su dolorcito y empujé todo y la llené, retiré mi verga, y pude apreciar el hoyo que le quedó, y por donde venía de regreso la leche. Estábamos sudando a chorros, nos fuimos a la piscina refrescar, la noche era de luna llena y sobre unos colchones inflables no tendimos en el corredor techado, allí amanecimos abrazados y cansados, de tres polvos más que nos echamos, aparte de un segundo que fue dentro de la piscina, la noche siguiente habíamos quedado de dormir juntos, porque yo salía hacia la capital muy temprano, y habían cosas aún pendientes de lavar y planchar, además era la única vez que estaríamos juntos porque era muy difícil volver a tener otra oportunidad, pero ya no fue posible porque momentos después mientras ella se duchaba sonó el teléfono de la casa, ella allí recibía mensajes urgentes, y era su marido, yo contesté,preguntó por ella, haciendo todo acoplo de de buen actor, me identifiqué y le dije que estaba llegando en ese momento, que creía que había alguien en casa, porque estaba encendido un radio, y que me esperara un momento, iba saliendo del baño Sonia y le hice señas, luego en el auricular: Fíjese que n o hay nadie por el momento, pero si quiere dejar un mensaje, lo anoto y dejo la nota en el teléfono, porque lamentablemente voy de salida ya que sólo pasé por unos papeles, Aonuia estaba frente a mi desnuda riendo de mi descaro, luego dijo espere un momento creo que ahorita viene alguien, y empezaron a hablar. Luego me fijo que el llegaba por la tarde, tenia descanso y que ya había conseguido casa donde estaba trabajando y venía por ella, que ella se había comprometido a cuidar la casa mientras se arreglaba lo de su ida que se iría luego y que su prima Edna llegaría por la tarde a terminar y que le diría que se quedara esa noche allí para que le diera tiempo por mi partida, y que luego hablarían con mi madre
para que ella prosiguiera en la casa ya que necesitaba del trabajo. Ambos nos sentíamos culpables de lo sucedido, pero ambos lo deseamos, ella me confesó que desde niño me paraba el chile para verlo grandecito, que al estarme aplicando crema deseaba besarme,morderme y su vagina estaba empapada de imaginar mi verga adentro, que me había espiado cuando estaba en la piscina, y cuando me saqué la calzoneta había visto mi verga colgando. Empezamos a besarnos y terminamos en la cama, esta vez la hice venirse en mi boca y yo llené de semen le de ella, volví a penetrarla y esta vez ella me pidió que quería sentir mi semen dentro de su vagina, que al fin al cabo si quedaba preñada, su marido era blanquito y de ojos claritos. Cuando fuí a dejarla al canal le dije que la iba a extrañar esa noche, y que,qué iba a hacer si me excitaba de recordar lo vivido con ella, sonriendo me dice: Edna es la niña que jugaba contigo es de tu edad, y cuando eran niños decían que eran novios, ella está separada del marido, ya que de 14 se unió a él pero el año pasado se fue a EEUU y no se sabe nada de él, esta noche no creo que la pases mal.

Por la tarde llegó Edna, su cabello algo ondulado, delgada, bajita, chiches grandecitas,culo parado, de mirada triste, pero muy dulce y cariñosa, me abrazó efusivamente, a ella la reconocí de inmediato ya que la última vez que la vi teníamos 13 años, y fue para un convivió navideño de la empresa que ella asistió con su tía Cristy. Mientras veíamos televisión
le pregunté la razón de haber tenido marido tan pequeña, me dijo que era novia del muchacho cuando estaban en la escuela, y que una tarde la forzó a tener sexo, la violó y había quedado embarazada, se unieron pero él no quería al niño y la llevó a un aborto, todo salió mal, e incluso por la mala práctica ella no podía volver a quedar embarazada. Esa noche la invité a salir al puerto allí comimos y regresamos pasadas las diez de la noche, el calor seguía fuerte a pesar de la brisa del mar que nos llegaba. le pregunté que si quería nadar un poco. me dijo que no tenía traje, y le dije que cuando éramos niños nos bañábamos desnudos, se quedó pensativa unos minutos, con la vista al cielo, y luego se paró se desvistió y se tiró al agua, a la luz de la luna vi su cuerpo que a diferencia de su prima era blanca, era delgadita y cahaparrita, pero su cuerpecito bien formadito y de chiches grandes y deliciosas, de pezones grandecitos y rosaditos, le dije que iría por unas toallas,pero cuando regresé yo traía unas bermuda, y ssí me iba a meter al agua porque lo del desnudo era broma, ella me dijo que así no se valía y que debería meterme desnudo, me desnudé enfrente de ella, y nade hacia su orilla, y estuvimos largo rato nadando sin comentarios, tomamos nuestras toallas y no tiramos desnudos sonre las mismas, veía sus pechos grandes y firmes, su vagina cubierta de vellos, y ella veía como mi verga empezó levantarse, luego me dijo: y yo que creía que era incapaz de excitar a un hombre, y mira como se ha puesto ese monstruo que tienes.,agregó, hay señoras que hablan que sus maridos la tienen grandes, y hacen señales con las manos para dar a entender el tamaño, pero la tuya por lo visto es enorme y gruesa, te la puedo tocar? empezó a acariciarla bajando la piel de mi verga, se endureció más y empezó a salir líquido y con su dedo pulgar lo regaba a lo largo de mi pija, así estuvo por unos instantes, luego se lo lleva a la boca y empezó a lamerlo todo, se metía un poquito para chuparlo y seguia lamiendo,la jalé para un 69 y empecé a chupar su cosita, era chiquita, hinchadita, de labios delgados y largos, asemejaba su vulva una rosa cuando empieza a abrir, me dijo que no aguantaba más y se sentó sobre mi verga y la empezó a deslizar dentro se ella, se dificultaba la entrada, ya que resbalaba hacia los lados, y eres demasiada estrecha, yo tomé mi verga por la mitad y ella se acomodó abriéndose con los dedos el hoyito, y mi pija empezó a entrar despacio, era demasiado estrecho, logré entrar un poco mas del glande y ella se subía y se bajaba, poco a poco se fue ensanchando su vagina y ya estaba a la mitad, así estuvimos un rato hasta que me corrí yo, ella aún no se había corrido, aún saliendo semen a chorros lo llevó a la boca y se termino de tragar la leche pero no soltaba mi verga y seguía chupando y mamando, la veras seguía dura, la puse boca arriba, y me subí ahora las penetré a la mitad de un solo se quejó y me pidió despacito, empujé de nuevo y logre meter más hasta toparla, casi no sacaba nada sólo lo necesario para fricción, y ella se la ingeniaba para frotar su clítoris que era grande a mi tronco, se vino en orgasmos continuos, y así estuvimos por largo rato, volvió a correrse y fue precisamente cuando estaba llenándola de leche, cuando saqué mi pija de su vagina solo oí un plock, y atrás venia saliendo leche. Ni yo me vine al día siguiente ni ella se fue a la playa, ella estuvo 2 años más en la casa y cada vez que viajaba, cogíamos, en cualquier sitio de la casa, en el canal, en la playa, en su casa, y como lo que le cayó bien mi verga, porque desarrollo un cuerpo bonito y hermosas caderas, y me decía un pescador, cogerlas por el culo las pone buenas.
Datos del Relato
  • Categoría: Confesiones
  • Media: 5.45
  • Votos: 22
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