Nota:

Hola a todos, este es mi primer relato. Nací en España, pero llevo toda una vida en Francia.

Por lo que, para mi escribir en español aunque me encanta, me resulta bastante complejo y por eso quiero de disculparme de ante mano por calidad de este primer ensayo.

Por favor, mándenme sus críticas, consejos o sugerencias. Para que mi próximo relato sea de vuestro agrado.

Gracias por leerme y hasta pronto.

elGuardian

 

Capítulo 1: El Inicio

Mi nombre es José, tengo 35 años, estoy casado con María un mujer encantadora de 28. Juntos tenemos la suerte de tener

2 hijos Raúl de 9 y Roció de 6. Vivimos en las afueras de Madrid. Yo en el paro desde hace más de un año, tuve la suerte de contractar un empleo.

Una alegría para nuestra casa. Único inconveniente tendría un periodo de formación de 2 meses en Valencia. Dos meses pasando la semana con los che y los fines de semana en la capital. Dos meses que cambiarían mi vida para siempre.

Por suerte, mi suegra Carmen vive en Valencia, una mujer encantadora de 47 años. Es viuda desde los 42, cuando mi suegro encontró la muerte en la carretera. Vive sola en una grande casa por lo que no le costó nada a María pedirle que aceptara mi presencia durante ese periodo.

Carmen tiene 3 hijas, María es la más mayor, Roció tiene 26 y Lucia 22. Las dos hermanas de mi mujer están en sus vidas, con sus respectivas parejas y viven Lucia en Barcelona y Roció en Madrid.

Desde la desaparición de su marido, Carmen tiene una depresión crónica y mi presencia le puede muy ser benéfica. Desde el primer día nos organizamos muy bien. Mi relación con mi suegra siempre fue muy cordial con la distancia por el respeto. Por el día yo tenía mis ocupaciones laborales y solo cenaba y dormía en casa de mi suegra. Por lo tanto, su vida no se veía muy transformada por mi presencia. Seguía con sus ocupaciones de mujer afortunada, la muerte de su marido la dejo con un buenísimo retiro y una renta del seguro descomunal, ya que era director comercial de un gran banco.

No necesitaba trabajar, la casa pagada y sus hijas en sus vidas. Por lo que se dedicaba a ayudar en todo lo que podía en la iglesia de su parroquia.

Las noches solían ser los momentos en que su depresión mas se manifiesta por la soledad que sentía. Para olvidar su malestar, empezó a dejarse llevar por el alcohol. María estaba, bastante, preocupada y me pidió que intentara ayudarle, como pudiera y se lo prometí.

La primer noche la invite a cenar fuera, nos buscamos un restaurante en las afueras de Valencia. Estaba encantada, a la hora de pedir la bebida, pidió un agua sin gas, yo un botellín de vino (yo no tengo el mismo problema). Nos reímos mucho por la gracia que nos hacia el camarero y realmente fue un buen momento para los dos.

El regreso a casa también fue lleno de carcajadas recordando al camarero. Una vez en la casa, me dijo que estaba cansada y que se iba dormir.

Yo le pregunte:

- Le estorba si me y echo un whisky y miro un poco la tele, antes de acostarme?

- Para nada, haz como si estuvieras en tu casa

Cogí mi móvil y llame a casa.

- Hola cariño? Que tal con mi madre?

- Hola mi amor... bien... muy bien. La lleva a cenar al Pavo, le gustó mucho. Y no tomo nada, creo que se distrajo bastante, se acaba de ir a acostar.

- Gracias mi amor, creo que necesita estar acompañada. Ahora, es cuando más le echa en falta.

- Si tienes razón, debería intentar ligar para ocupar el espacio.

- Pero que dices ?...

- Quiero decir que lo mejor para ella, en este momento, seria intentar tener una relación, que le haga salir y olvidar un poco el pasado.

- Pero como va a olvidar? es imposible?

- Ya... Está claro que nunca le olvidara, nadie olvidara a tu padre. Pero tu madre, tiene que seguir riendo, seguir emocionándose, seguir sintiéndose mujer otra vez.

- Si en ese sentido tienes toda la razón, le queda mucha vida, para solo echarle de menos. Bueno te dejo voy a acostar a los niños. Hasta mañana.

- Hasta mañana mi Amor.

Al colgar, salí a fuera a fumarme un cigarrillo.

Me paseaba por el jardín, cuando vi la luz de la habitación de Carmen. Me acerque en silencio hasta ella, y llego en el momento más oportuno.

Pude admirar el esplendor del cuerpo de mi suegra, que se ponía un camisón de seda, para dormir. Le quedaba fatalmente bien. Las curvas de su cuerpo se modelaban perfectamente con la ligereza de la seda. Una maciza mujer de pies a cabeza. No es muy grande medirá sobre los 1,65m, pero tiene une cuerpo muy bien proporcionado, un culo redondito y bien parado. Unos pechos en forma de peras que empiezan a marcar los años, una cara de niña quizás aún más guapa que mi mujer a pesar de los años. No pude impedir que mi mano frotara mi sexo por encima del pantalón.

"Que buena esta la suegra" pensé. Y segundo pensamiento "Pero qué coño estas imaginando, si es la madre de tu querida mujer!”

Un combate ente mi angelito y mi diablito personales empezó, pero yo le puse fin, al volverme a la casa. Sobre todo, no quería me se diera cuenta que la miraba. Apagué la télévision y me fui a dormir.

La habitación que me propuso mi suegra era la que perteneció a Roció, claro de color rosa, estaba justo al lado, de la de matrimonio donde Carmen dormía.

A la media noche, me desperté con ganas de ir al baño pero al salir de mi habitación escuché unos ruidos venir de la habitación de mi suegra, me acerque.

Cuál fue mi sorpresa al darme cuenta que los ruidos eran ligeros gemidos. Se estaba tocando.

"como todo el mundo calmando sus necesidades" pensé y me fui al baño.

Al salir, los ruidos se transformaron en sollozos. "Se estará culpabilizando, pero de qué?" mañana tenía un largo día de trabajo así que no quise darle más bola al asunto.

Por la mañana, "Riiiinng, Riiiinng!" mi despertador me grito "levántate!"

Yo con el radar puesto y solo con el bóxer me fui hasta el baño. La ducha acabo de despertarme y después de la paja matutina, claro ese día pensando en el culo de mi suegra (sin ningún tipo de remordimiento), me volví a mi cuarto. Ya eran las 8h30, la demora en la ducha me estaba retrasando. Me cambie, rápidamente tirando en bóxer en una esquina de la habitación como cuando era adolescente. Salí, para el comedor, la mesa para el desayuno esta puesta, me tome un vaso de zumo y mirando hacia la cocina, vi a mi suegra con una bata de casa de lo más formal preparando el café.

Entré, en la cocina, ella no se percató de mi presencia.

- Buenos días, Carmen

Elle se sorprendió un poco y se dio la vuelta.

- Buenos días, José que tal has dormido?

- Muy bien, todo estupendo, pero tengo que marcharme porque no quiero llegar tarde los primeros días al trabajo.

- No quieres tomarte un café?

- No, lo tomaré en la cafetería de la empresa, muchas gracias.

- Vale, pues nos vemos luego.

- Si vale

Le di un beso en la mejilla y ella me lo devolvió. Me marche y pase unos de esos días aburridos donde te llenan la cabeza de explicaciones sor lo que esperan de ti.

Al volver a casa de mi suegra, estaba exhausto. Esa noche, mi suegra preparo la cena y la mesa estaba puesta para dos. Nada más entrar la salud.

- Hola Carmen, aquí de vuelta

Ella que estaba otra vez en la cocina, pero  vestida con una falta, que me pareció un poco corta y una blusa ligeramente transparente a través de la que se adivinaba su ropa interior.

- Hola José que tal el trabajo ?

- Muy bien, pero bastante cansado. Si me permites que voy a cambiar.

Quería ponerme cómodo y quitar el disfraz de hombre muy ocupado. Me fui a mi cuarto, y me sorprendió que la habitación estaba recogida, la cama echa y para mi sorpresa encontraba el bóxer que tenía ayer. Me puso un vaquero y un nique de U2 y volví al comedor.

- Mi ropa usada, no necesita que me la lave, tenemos planeado con María, que se la llevo los fines de semana cuando vuelvo a Madrid.

- No pasa nada José, quien lava es la máquina, no te preocupes por eso. Quieres tomar algo, un whisky u otra cosa? me pregunto

- Un whisky me parece oportuno.

Me lo sirvió y elle cogió su botella de agua. Empezamos una charla sin mucho interés sobre mi trabajo. Toda la cena bebió agua y yo vino de cosecha.

Al acabar de cenar, me propuso

- Nos tomamos el café en el jardín, así podrás echarte une cigarrillo?

- Por mi estupendo y con la noche que hace.

Los dos estábamos sentados alrededor de la mesa de jardín.

- Voy a llamar a María, le quiere hablar?

- Si pásamela después.

Yo sin moverme de la mesa.

- Hola cariño! Que tal te fue?

- Pues como un día de formación en el trabajo, y los niños que tal me echan un poco de menos?

- Pues no... ja ja ja. Claro imbécil como podría ser de otra manera.

Estuve charlando unos minutos y

- Bueno te paso a tu madre que te quiere hablar.

- Pero si ya hable con ella por la tarde.

- Ah no lo sabía, pero te la pasó, tendrá algo más que contarte.

Carmen: - Como estas mi amor?

- Bien, querías algo?

- Darte las gracias por prestarme tu marido es un encanto.

- Oye si esta ahi delante no digas eso que se lo va a creer... ja ja ja

- No seas tonta, tienes mucha suerte.

- Ya lo se mama, y mirame bien de el que no se escape por la noche.

- Este tranquila. Dale besitos a mis angelitos y otro para ti mi amor.

- Gracias mama, besos. Me puedes pasar a José?

Yo estaba fumando un cigarrillo, alejado un poco de la mesa.

- José?

Apagué el cigarro y volví para la mesa. Cogiendo mi teléfono me alejé otra vez para tener un poco de intimida y charlamos un poco.

- ... Vale yo también te quiero.

Volviendo a sentarme.

- Ah José podrías decirme porque mi móvil no tiene internet?

- Por supuesto, deme su móvil que le miro ahora.

Me dio su móvil pero estaba bloqueado.

- Me lo puede desbloquear?

- La clave es 6966, es mi fecha de nacimiento.

Entre la clave, fui a parámetros y les active los datos de internet. Al volver a su página de inicio me percate que tenía une App de un sitio de citas.

- Tenga, ya está podrá utilizar todas las aplicaciones que necesitan internet.

- Hay gracias. Y me dio un beso en la mejilla. - así podre utilizar el buscador.

"Buscador de pollas" pensé en mi interior. Todo siguió, normalmente, buenos contando cosas agradables acompañadas de buenas risas. Hasta que.

- Bueno, será mejor que te vayas a acostar, si no mañana tampoco tendrás tiempo de desayunar conmigo.

- Si, porque me levantare más temprano. Pero tiene razón, necesito irme a descansar. Buenas noches Carmen y gracias por la cena me encanto.

- Gracias a ti José, contigo las noches ya no me sienten tan fatal.

Le di un beso en la mejilla al que me respondió. Una vez en mi cuarto, me dije "hoy no voy a poder ver el cuerpazo de mi suegra". Unos 15 minutos más tarde oí que entraba en su habitación. Yo aún no dormía, y como si mi mano tuviera vida se fue directamente a mi miembro. Empecé a pajearme suavemente pensando que estaría despojándose y metiendo el camisón de seda sobre su cuerpo. Mi suegra me estaba perturbando, quien lo hubiera pensado, yo no.

Pasado unos minutos, me levanté y fui hasta la puerta de su habitación. Tenía une luz tenue encendida, y volví a oír los gemidos como la noche anterior.

Pero esta vez le oia decir:

- Si... hmmm, mas... hmmm, comeme... hmmm

duro como unos 5 miutos hasta que me quede asombrado

- hmmm Si... hmmm Sigue ... hmmm Si José...hmmm

"Estaba pensando en mi?" Me volvi para mi cuarto no podia mas y masturbando con fuerza descargue todo en mi boxer. Agotado me tire en la cama pensando.

"Mi suegra se toca pensando en su yerno"

Los dias siguentes pasaron igual, todas las noches nos pajeabamos pensando el uno al otro, solo una puerta nos separaba. Mi suegra debio de darse cuenta  porque me recojia mi ropa sucia para lavarla. La cosa fue aumentando, por su parte buscaba el roze en toda ocasion y yo intentando controlarme.

Llego el viernes por la mañana,

- Bueno mi suegra preferida, hoy tengo el AVE a las 19h, no tendre tiempo para volver a casa, me llevo el equipaje para el trabajo, volvere domingo.

Bueno, si no se canso de mi presencia?

Pregunta idiota, no tendria donde ir y por supuesto no estaba para gastos de hotel.

- Cansarme? ja ja ja. Lo que estoy pensando es como voy a ocupar tu ausencia estos 2 dias

- Vengase a Madrid comigo. Maria estaria encantada y los niños ni le digo.

- No necesitais vuestro tiempo, seguro que los echas mucho de menos.

- Si la verdad que si. Pero le voy a decir menos mal que tengo una suegra que me permite aguantar todo esto.

- Gracias querido José, ábraseles de mi parte y nos vemos Domingo? Echándome un guiño. Yo se lo devolví

Un besito y en ruta.

Pase mi fin de semana a follar con mi mujer pensando todo el tiempo en mi suegra. Imaginandome, dormir todas las noches en su cama de matrimonio.

Pensando lo rico que debia ser comerle el coño toda la noche. Y darle mi leche todos los dias. Creo que Maria se dio cuenta del cambio al preguntarme.

- Que tal con mi madre?

- Pues... muy bien. Creo que mi presencia le hace bien no la vi tomar alcohol ni una sola vez.

- Ves, ya te lo dije y mejor con mi madre que tirado en un hotel. Yo tambien prefiero.

- Bueno, tambien hay que pensar que a lo mejor tendre que ir para el hotel.

- Ah y porque?

- Porque pienso que tu madre, esta buscando un hombre, le vi una app de para concretar citas y seguro que un dia de estos deseara tener su casa para ella y no tener que compartirla con su yerno.

- Ah quizas, tengas razon, en ese case ya veremos, pero no me dijo nada estas seguro? y que sitio de citas es?

- xxxxxx

- Pues echare un vistazo?

- De qué!!!? No vaya a ser que te guste. Ten mucho cuidadin

- No seas bobo, si yo ya tengo lo que necesito, y sobre todo este fin de semana te encontre en muy buena forma se nota que echas en falta.

Me pego un cachete.

- Bueno me llevas a la estacion de tren?

- Venga niños, que nos vamos llevar a a papi al tren.

Los 4 en la estacion, yo subido en el AVE y mi familia en el anden, tanto el viaje hacia Madrid fue como ir de vacaciones ahora tenia la sensacion de ir a la guerra. La emocion me abrumo.

Al llegar a Valencia, mi nostalgia habia desaparecido. Al ver a mi suegra esperandome en la estacion, ya no pensaba en mi familia en Madrid. Nos dimos un abrazo pero como nunca lo habiamos echo, como dos enamorados. Senti como todo su cuerpo se pego a mi con necesidad.

Esa noche, decidimos comprarnos unas pizzas y comerlas en casa delante una peli. Nos abrimos una botella de vino y esa noche tampoco quiso compartilo conmigo.

Estabamos sentados en el sillon del la salita frente a la television. Era un romance, ella se fue acurrucando a mi. Yo le puse mi brazo sobre en hombro.

A los pocos minutos, ya estaba con su cabeza sobre pis piernas, una mano sobre mi muslo. Tuve que utilizar toda mi energia mental para impedir que mi pene se empalmara mas, justo bajo la boca de mi suegra pero me fue imposible. Seguro que ella se percato. Era como una tortura. Mi mente debordaba de sentimientos lujuriosos. Mi brazo lentamente fue bajando hasta de sus caderas. Al principio no me di cuenta, pero se emociono y se puso a llorar en silencio. Senti sus lagrimas mojarme ligeramente el muslo donde se apoyaba.

- Estas mal? por la primera vez la tutee.

No contesto, y a los pocos minutos se quedo dormida. Yo tenia mi mano muy cerca de su fantastico culo. Tenia muchas ganas de acariciarle esa nalga que me invitaba a hacerlo. Pero el angelito me recordo "No te pases, Es tu suegra". Decidi apagar la tele. No sabia que hacer, si la despertar para que se fuera a dormir o si dejarla en en sillon con una manta. Decidi cojerla en mis brazos y llevarla a su cama. Claro se desperto, y se sujeto poniendo sus brazos alrededor de mi cuello. Una vez en la habitacion la puse en su cama y la recubri con una manta. Me iba a marcharme a mi cuarto.

- Por favor, quedate un poco.

Sin decir nada me acoste a su lado, yo encima de la manta elle por dejabo. Su cuerpo se recogio contra en mio dandome la espalda. Su culo vino apretarse a mi pene. Lo inevitable, me empalme como un burro. Todo siguio igual sin una palabra, nos quedamos dormidos. Cuando me desperte, eran las 4 de la mañana, ella siguia durmiendo. Yo tenia mi brazo por encima de ella y mi mano sujetaba una de sus tetas. De repente la quite. Me levante, y me fui a fumar un cigarrillo, esto estaba cogiendo un rumbo que deseaba interiormente pero que me prohibía la conciencia.

Habia que pararlo o...

Me fui acostar a mi cuarto. 3 horas mas tarde, el despertador me volvio a la realidad. Me prepare para ir al trabajo, ella siguia durmiendo o no queria enfrentarse a mi. Le escribi un mensaje:

"Hola Carmen, No me espere esta noche, no cenare en casa. Voy de cena con unos colegas. Besos, José"

Esa noche cuando volvi a casa de mi suegra, la encontre en el salon frente a la tele. Estaba vestida para ir a la cama, con un mini short de algodon y una camiseta. No llevaba sujetador, por lo cual de adivinaban sus tetas por debajo de la fina tela. Sobre la mesita frente al sillon, una botella de vino vacia con su vaso vacio tambien al lado.

- Que tal te fue con tus colegas?

- Bien... Son momentos necesarios para crear un buen ambiente en el trabajo.

- Si, asi no te aburres tanto conmigo.

- No! no me aburro... contigo

- Por fin... me tuteas.

- bueno perdoneme.

- Jo... por favor Jose, no tengo ningun reparo a que lo hagas al contrario.

- Le iba a preguntar...

- Si preguntame

- Porque no sale con sus amigas o amigos para animarse y no quedarse aquí todas las noches. Le haria mucho bien.

- Si te diste cuenta de lo aburrida que soy.

- No! No es eso. Pero, relacionarse y porque no encontrar alguien con quien puede a volver hacer su vida, seria lo mejor.

- Ya no estoy para eso Jose, ese tiempo ya paso.

- No diga eso, es joven y tiene otra vida por delante que le esta esperando.

Se levanto del sillon

- Me voy abrir otra botella de vino, me acompañas?

- Cree que es lo adecuado?

- No pero lo necesito. Te pongo un vaso?

- No, creo que me voy ir a dormir porque ya es tarde.

- Si vale, deja a la vieja con su botella.

Cogiéndola con mis manos sobre sus hombros.

- No digas eso! Crees que me gusta verte asi? Eres una mujer encantadora, pero te quieres destruir. Tu no tienes la culpa de tu viudez! Para de lamentarte y aprovecha de la vida. Tienes la suerte de poder hacer lo que te da la gana. Hazlo!

- Lo que me da la gana?

- Si!

Se lanzo, sin pensarlo mas ni darme la minima posibilidad de evitarlo. Me dio un beso, solo mi cuerpo respondio, y mi lengua se unio a la suya.

Nos empezamos a manosear por todo el cuerpo sin parar de besarnos. Nos dejamos caer en el sillon, mis manos convida propia empezaron a acariciarla sin piedad.

Mi mano derecha magreaba su pecho presionando su teton por debajo de su camiseta. La izquierda alcanzo su sexo, por debajo de su minishort, jugando con su botoncito. Ella tampoco se quedo corta, masajeando mi culo con su una mano por debajo de mi boxer, con la otra acariciaba mi pecho por debajo de mi camisa.

Le subi su camiseta hasta dejar expuesto su pecho, que maravilla con su aureola fina y oscura. Baje mi cabeza para empezar a mamar su teta, pasando mis labios todo el rededor buscando todos sus rincones, haciendolo salir de mi boca para volver a engullirlo. Sentia su reacción por lo majada que estaba y por dureza de boton de su pecho.

Ella paso su mano derecha por delante a la busqueda de mi miembro durisimo et de un tamaño nunca alcanzado.

Tenia la sensacion que la piel de mi pene iba a ceder. Cuando su mano entro en contacto con mi falo, tuve que resistirme para no descargar toda la tension que sentia en mi extremidad.

Ella intento bajar su cabeza, peo se lo impedi. La levante en brazos y dandole un morreo la lleve a su cama de matrimonio. Allí, me quito la camisa blanca que llevaba, yo hice lo mismo quitandole su teeshirt deja al aire su dos hermosos pechos. Los dos de rodillas en la cama, mi suegra succionando mis aureolas, pasando de una a otra, su lengua navegaba por todo mi pecho aventurandose tambien en mis axilas. No podia mas, cogí su cabeza la bese y recoste sobre la cama. Le quite el boxer, le aparte la rodillas y vi aparecer su sexo, cuidado y brillante por el jugo abundante que salia de su cueva. Acerqué mi boca, y sin el mínimo contacto mi suegra gemia sin parar. Como si solo fuera cerebral.

Mis manos posadas en el interior de sus muslos, mis dedos abriendo ligeramente sus labios, con mi boca a proximidad enviando mi aliento al mas profundo de su ser, la hacian enloquecer. Se conmovia sin parar, como si quisiera liberarse. Hasta que mi lengua entro en contacto con su botoncito.

Lanzo un grito estremecedor. Me pare un instante, por la sorpresa. Pero ella brutalmente con sus dos manos me apoyo la cabeza contra su sexo, como si quisiera meterme dentro. Mi lengua se apodero de la presa y comenzo a comerla, beberla, chuparla hasta la sofocación.

Carmen convulsionaba y temblaba por los ataques a la que le sometian, mis labios, mi lengua y ahora tambien mis dedos entrando y saliendo de su concha.

Al acabo dela ultima descarga, Carmen con sus dos manos atrajo mi cabeza hasta la suya  y dandome un profundo beso probaba su sabor recien salido.

Sin una palabra sus manos desabrocharon mi cinturon, me puse de pie en la camc y con su ayuda me quite el pantalon. Ella bajo mi boxer manchado por mi flujo preseminal. Ella sentada en la cama se encontro con mi pene a la altura de su cara. Sin mas esperar se metio mi glande en su boca, primero saboreandolo en el interior con su lengua. Despues, sacandolo, se paso su lengua sobre todo el pene hasta llegar a mis testiculos, intentó meterlos enteros en su boca. Cosa que difícilmente consiguió. Paso su lengua por debajo de mis huevos hasta casi llegar a mi raja. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Volviendo hacia mi glande, se metio otra vez mi pene en su boca, intentando tragarla lo mas profundo posible.

En ese momento tuve que sujetarle la cabeza y quitarme mi falo de su golosa boca para no descargar dentro.

Ahora fui yo, quien con mis dos manos atraje su boca hasta la mia y volvimos a comer mutuamente. Estaba al borde de descargar, sabia que no duraria mucho pero tenia que probar su coño.

Con mi pene en mano acerque mi glande de su entrada, nos miramos a los ojos, una mirada de sin retorno, de un antes y un después...

Continuará...