Teniamos 17 años las dos, mi mejor amiga y yo. Nos conociamos desde que eramos unas crías y no teniamos pudores la una con la otra. Sucedió en las vacaciones de verano, en la casa de la playa. Ella se había ido a pasar, como todos los años, un mes con nosotros y ese día habíamos estado en la playa hasta temprano, volvimos a la casa y decidimos ducharnos. Primero tengo que explicar que soy hija unica y la casa de la playa de mis padres tiene dos piezas, cada una con baño y cama matrimonial, por lo que mi amiga y yo compartiamos la cama. Bueno, como dije, volvimos de la playa llenas de arena y la sal del mar y decidimos ducharnos. Me duche yo primero y cuando sali me puse una bata y me fui a la habitacion mientras ella se duchaba. Cuando ella salio, con la toalla, yo tenía la bata abierta y me ponía crema. Se quedo mirando mi imagen en el espejo y me dijo "te han crecido las tetas". Acto seguido se quito la toalla y nos pusimos las dos de lado para comparar quien tenía los pechos mas grandes. Nos reimos y luego me quite la bata y nos pusimos a comparar las nalgas. Ella me dio un apreton en la nalga y nos pusimos a darnos apretones entre risas, a perseguirnos por la habitación apretandonos las nalgas y riendo muy fuerte, ya que estabamos solas en la casa. Al final las dos nos echamos en la cama exhaustas y cuando nos recuperabamos me di cuenta de que me echaba unas miradas muy extrañas "¿que?" le dije y ella me dijo "nada ¿sigues virgen?" casi me ofendi "tu sabe que si, si, como tu". Y ella se sonrio y se inclino y me dio un beso sobre los labios. Me sorprend "¿por que hiciste eso?" le pregunte "porque quise" me respondió "y quiero hacer muchas cosas mas" me hize la tonta y le pregunte "¿como que?" "como esto" me respondió y puso una de sus manos en uno de mis pechos. Y comenzo a acariciarmelo, lentamente y luego tomo el otro. Y luego me beso y yo, para mi propia sorpresa, le correspondi el beso. Ella siguió tocandome los pechos mientras me besaba y luego comenzo a lamermelos, primero uno y luego el otro. Y yo me deje hacer. Comence a exitarme y a sentir que mi respiración se alteraba. Ella me mordia suavemente los pezones y me acariciaba el cuerpo con las manos, luego comenzo a besarme el vientre, el ombligo, el cuello, los brazos. Luego comenzo a pasar su lengua por todos lados hasta que llego a mi concha. Yo instintivamente separe las piernas, entre gemidos. Ella primero me las abrió y toco con los dedos, luego paso su lengua, como probandome y luego empezo a succionar mientras me apretaba las nalgas y me atraia mas hacia su boca. Y me vine en ella. Cuando logre recuperarme le devolvi la mano, pero la hize pararse. Le lami los pechos, se los aprete, se los masajee suavemente, bese sus nalgas, lami su ano y cuando me sentía explotar la hize sentarse en la cama y me arrodille en el suelo, ella apoyo sus piernas en mis hombros y practicamente me hundi en ella. Así estuvimos largo rato. Poco a poco fuimos incursionando en mas cosas, como introducir nuestros dedos en nuestros labios interiores y en nuestro ano. No podiamos dejarnos en paz, cada vez que nos encontrabamos a solas lo haciamos. Eramos y aun somos, osadas y temerarias. Ya les contare de otras ocasiones y otras incursiones