Uno de los recuerdos que tengo de nuestra vida en La Chorrera, en el Amazonas fue de las indígenas que buscábamos todo el tiempo. Pero en un tiempo llegó cerca a nuestra base militar una doctora o pasante, no recuerdo si era odontóloga o doctora médica. El cuento es que ya sabíamos que era bastante caliente porque uno de los tenientes de la base ya nos había contado que ella de lo había estado mamando un dia de borrachera y sabíamos que también se la había dejado meter de un indígena. Mi teniente zambrano la invito una noche a la base y alla nos tomamos unos tragos. Hacía calor y ella comenso a tomárselos todos. Recuerdo que se fue sola y sabia que eramos 6 con ella. Entre mas tomaba, mas se le notaban las ganas que tenia de macho. Bailo con todos y en la bailada estaba muy caliente y nos apretaba a todos bailando muy pegado. Ya era muy tarde cuando mi teniente zambrano dijo que la llevaría al puesto de salud de la chorrera en la lancha. Sabíamos que iba apasar pero nosotros también queríamos participar y nos fuimos con zambrano y la odontóloga. Uno necesita divertirse porque la vida en el ejercito es muy dura y en cualquier momento la muerte llega. Asi que cruzamos el rio esa noche. Estabamos con Roberto, juanca, Rodrigo e, el teniente sambrano y yo. La llevamos al puesto y allí no había luz. Ella se metio a su cuarto llevándose a sambrano de la mano. Los demás nos quedamos fuera. Mas tardecito los alcanzamos. Cuando entramos ya la doctora estaba arrodillada, borracha mamandoselo con peresa a sambrano que tenia la verga afuera y los pantalones de campaña abajo. Entonces cuando nos vio entrar ella no dijo nada. Solo se recostó. Ya se había quitado la camiseta y estaba con brasier blanco. Sonreía en su borrachera. Pero no le importaba que estuviéramos alla. Sambrano dijo que le quitaramos la ropa. Tenia unos bluyines y se los quitamos. Ella ayudo un poco moviendo las piernas. Cuando le quitamos el brasier vi que tenia unas tetas preciosas de tamaño medio, blancas, con pezones rojos y un lunar en el pecho. Luego ella misma se bajo los calzones. Estaba peluda y tenia un coño grande con labios grandes. Estaba muy humeda. Le alcance a tocar la vagina mojada. Yo Ricardo se arrimo a la cama y ella empezó a mamarselo también mientras juanca se iba acomodando entre las piernas. Ella no dijo nada. Yo me masturaba y le rozaba las tetas que fue lo que mas me gusto con la verga. Ella siguo hasta que Ricardo se vino, se limpio la boca y siguió con sambrano mientras Ricardo la seguía clavando. Me parece que le gustaba mas mamarlo. De repente nos dimos cuenta que se había quedado dormida y ya no respondia, pero nosotros estábamos comenzando. Entoces la voltiamos de lado y yo le empece a dar por detrás. Ella se quejo un poco mientras sambrano seguía sobándole la verga en la cara. Yo me vine dentro del culo y con eso tuve. Le chupe un rato las tetas, pero seguía muy dormida. Sambrano todavía no se lo había metido y por eso la acomodamos para que se la comiera también. Pero como ella no se movia, parecía que no era divertido. Entonces le separamos las piernas y con una linterna alumbramos el coño. Tenia los labios bastante largos y se le salían. Le estuvimos lamiendo el coño y ahí no protesto. Yo le seguía sobando las tetas. Al final nos aburrimos y nos fuimos. Teniamos que madrugar con la diana. La dejamos vestida y nos largamos. No se si sambrano se la volvió a comer después, pero fue la primera vez que estuve con otros comiéndome a una mujer. De esta, que el nombre no me acuerdo, si me acuerdo muy bien de sus tetas y de su coño, además de como se emborracho y se fue a la base prácticamente a entregarse para que nos la comiéramos.