Soy una morena estatura media, pero con muy buenos pechos y mejor aún mi culito. Hace un par de años con 21años con mi novio en pleno apogeo de fogosidad en la sexualidad nos gustaba la diversidad en la forma y los lugares para dar riendas sueltas a nuestros deseos. Una tarde nos fuimos a un parque muy grande y cerrado de la ciudad, mientras anochecía se fue vaciando, ya entre la oscuridad y la protección visual de los árboles empezó a subir nuestro lívido nos besábamos y acariciábamos. Era el ambiente quizás está recostados en el pasto la brisa y la oscuridad un exquisito momento que llamaba al sexo. Como un imán bajé hasta el miembro de mi novio al sacarlo de su escondite duró como una estaca luego de masajearlo un rato lo introduje en mi boca creo que la mitad logro entrar. Al saborear ese rico pedazo de carne me daba la. Labor de chupar entrando y sacándolo sin cesar...
Todo era perfecto hasta un momento que mi novio me detiene de mi acción para decirme "no te asustes por lo que te voy a decir. Pero frente a nosotros tras un árbol hay un hombre mirándonos". Yo con su miembro en mis manos me asusté no reaccionaba aun a la noticia cuando por el costado izquierdo se escucha un ruido, era otro hombre ubicándose igual tras un árbol mi corazón palpitaba a mil. Mi novio me dijo "tranquila". No alcanzo a decir nada más y se escuchó un ruido por el costado derecho. Y si... era otro hombre ubicándose igual tras un árbol mi corazón parecía que se me escaparía del pecho. No niego que el pánico casi me descontrola, pero en vez que pararnos he irnos del lugar nos quedamos sin hablar ni hacer ni un ruido. Era un silencio raro y algo me producía como un escalofrío que recorría todo mi cuerpo y en mi vagina empezaba una electricidad que me hacía apretar las piernas para calmar un nuevo y extraño deseo que nacía en mí. Por otro lado, mi novio igualmente sentía el llamado de la lujuria yo lo notaba en su miembro que le crecía palpitante cada vez más.
Estábamos en medio de un triángulo rodeados por esos tres hombres que solo se divisaban la figura como una sombra oscura y solo los delataban sus movimientos mi imaginación volaba y en mi mente los veía a los tres con sus penes al aire frotándoselos eso me calentó al máximo. Sin decir nada empecé a chupar frenéticamente el pene que tenía en mis manos. Mi novio se desató, me tomaba la cabeza y lo hundía entero en mi boca hasta la garganta, primera vez que sentía como se habría paso en mi garganta. Intercalaba varias estocadas con unas subidas a respirar botando grandes cantidades de saliva que ahogaban luego de nuevo el proceso mientras los tres hombres no perdían detalles de espectáculo que les brindábamos, quizás cuánto se masturbaron viéndonos.
No podía más con la excitación y sin medir riesgos que quedaba expuesta a qué esos hombres me violaran, me saque mi falda y luego mis calzones quedando mis partes a la vista de todos los integrantes de esta escena. Mi novio se estira completamente en el pasto con su miembro apuntando hacia el cielo yo mientras me arrimo y tomándolo como una mano le refriego la cabeza palpitante en mi vagina hasta apuntarle al medio he introducirlo completamente por la excitación que me desbordada.
Me movía como si estuviera danzando en su miembro mientras trataba de divisar entre los árboles a nuestros espectadores y cuando lograba ver a alguno, me movía con más énfasis sin apartar la mirada de él, eso fue increíble nunca había experimentado algo como esto. No pude aguantar más y me estremecí y solté un profundo gemido por el gran orgasmo que recorría todo mi cuerpo. Mientras mi novio a la misma vez suelta chorros calientes en mi interior inundándome con esperma yo cayendo sin fuerzas en su pecho traspirado.
Nos tomó un par de minutos recobrar el aliento y la cordura, llegaba el desagrado o incomodidad de tener aún a los tres espectadores. Cómo novata en ese tipo de situaciones me inundó la desesperación de salir de ahí y apenas una limpieza parcial me repuse mi ropa y salimos raudos del lugar y mientras avanzamos miraba hacia tras por si nos seguían y alcancé a ver salir de las sombras a uno de los tres hombres que nos miraba mientras nos alejábamos.
En casa nos acordamos de lo sucedido y consideramos el riesgo que corrimos, pero no sé porque solo con recordar me excito tanto. Cuando estoy sola he llegado a imaginar que estoy en ese lugar de nuevo y mientras estoy encima de mi novio ensartada llegan los tres hombres con sus penes erectos al aire y me rodean y uno me lo pone en la boca mientras uno en cada mano los masturbo. Que creen uds me he vuelto un sucia o solo descubrí placeres a otro nivel.
Con mi novio lo hemos conversado varias veces y nos excita mucho la idea de volver allá y quizás pasen muchas cosas más. Pero si pasa será para otra historia.
Todo lo expresado es real es mi experiencia vivida por eso no nombró lugares ni nombre o muchos sabrían quién soy... Hasta la próxima.