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Categoría: Confesiones

Deliciosa Julia

Nos conocimos siendo niños, ella 6 y yo 7 años. Doña Letty, la mamá, era enfermera del área de ginecología, y mi Madre doctora en jefe de esa sección en el hospital regional de Quetzaltenango, en Guatemala. La última vez que nos habíamos visto fué para su fiesta de 15 años. En esa oportunidad al despedirnos nos dimos un beso cortito, la verdad es que siempre nos gustamos el uno al otro,pero no tuvimos la oportunidad de vernos muy seguido, ya wue ellos vivian en un municipio de Quetzaltenango, junto a su padrastro y sus hermanos. Doña Letty de casó con el señor cuando ella tenía 3 años, siendo madre soltera.

Una tarde en casa, ví llegar muy apurada a doña Letty acompañada de Julia, luego se fueron al consultorio de su madre, y oí la siguiente conversación:
_
Estaba durmiendo, y desperté al sentir el peso de mi padrastro, ya me habíaa quitado la ropa interior, y tenía su pene en mi vagina, traté de zafarme pero no pude, luego sentí un dolor grande, y al gritar, el salió de mi habitación, tenía plpor a licor. al verme estaba sangrando, no sé si penetró o no, porque todo fué muy rápido.

Mi madre dijo que examinaría, luego de unos minutos dijo que el himen estaba rasgado, y a que eso se debía la sangre, que posiblemente no había penetrado en la vagina, y que nohabpia rastro de semen.

Luego de una charla, alcanzé a oir que Julia estaría unos días en esa casa, explicandole mi madre a doña Letty que ella estaba por allí pór las tardes después del hospital, atendiendo el consultorio, y que a veces el que dormía allí era yo, cuando no daba tiempo de irme a Santa María, menos ahora que estaba de vacaciones de estudio, y que le daría una habitación a Julia, mientras se arreglaban las cosas, por la denuncia presentada y el traslado de Julia a la cpital con una tía.

Yo iba a Quetzaltenengo todos los días, recibía clases pre-universitarias, y por tres días, casi ni la veía ya que no salía para nada de su habitación, se encerraba a ver televisión, no cabe duda que le daba pena por lo sucedido. Ella tenía 17 años, y estaba más linda que nunca, ya que tenía un bonito cuerpo y muy bién esculpido. Ya a la semana siguiente hablabamos más, yo haciendo laboratorios de mis clases, ella leyendo una revista o viendo TV. Vartias veces la pillé viendome detenidamente, y ella me pillaba viendole las piernas o los pechos duros, o simplemente apreciando su rostro moreno claro, cabello liso hasta media espalda, ojos grmades color marrón, nariz pequeñita chatía, que le daba un toque fde gracia a su rostro, labios carnosos, y cintira finas, tenía unas nalguitas redondas duras y paraditas, no digamos sus piernas delgadas, largas y torneadas. Mi pensamiento estaba fija en que la cogería, la última vez que tenía tenido sexo, hacía ya mes y medio. Era un viernes muy temprano y mi madre acompañó a mi padre a una reunión a la capital y regresarían hasta el martes por la noche, y ,e recomendó estar pendiente de Julia. ese viernes me fuí a la ciudad, serían como las 8 de la mañana, al enmtrar a la casa busqué a Julia y estaba bañandose, yo fuí a la habitación que a veces ocupaba y decidí meterme a la ducha, no cabe duda que ella oyó cuando llegué y añ terminarse de duchar fué a buscarme, pro en ese momento yo estab como dije bañandome, pero ví su silueta a través del espejo, y se quedó por unos instantes espiando ya que al enjabonar mi pene se habia parado, Al dejar de oir el agua tocó la uerta fingiendo la duda su era yo o no, me pregunto si habpia desaayunado le dije que no y dijo que prepararía algo para los dos. Ya en el comedor, ambos en bata, empezamos a desayunar, al estirarse para tomar la azucarera,su bata se abrió un poquito y se le veía un seno, mediano durito y parado, vi su aureola cafecita, y un pequeño pezónmas oscurito, seguíamos hablando y yo seguía viendo du deliciosa chiche, en eso se dió cuenta y se puso nerviosa, y me dijo que era un descarado al verle su pecho, y yo le contesté que yo no le decía nada y me había visto desnudo.

Ella se puso a aspirar la alfonbra de la sala, yo veía la TV, ambos aún en bata, la bata de ella le quedaba arribita de la rodilla,por lo que al agacharse de espaldas a mi, podía ver sus muslos preciosos, torneados y lisos, pero al agacharse más de la cuenta, me dí cuent que tampoco tenpia calzón s dejsr a mi vista sus orecisas nalgas, voltea a ver y me dice: Granuja me estás viendo las piernas, impulsado no se porqué, llego hasta ella, la tomo por la cintura busco cu boca y le besé, ella me correspomdió y fuéu beso apasionada, ustras lenguas jugueteaban, chupanb asus labios y ella mos ñíos, su bata cayó y mi boca empezó a recorrer todo su hernoso cuerpo, desde los dedos de los pies hasta sdu cabeza, aparté su suaves y finos vellos púbicos y ni egua hico contacto con su vagina, pequeñita, abukltada de labios grandes,y su clítoris erecto y gruesesito, ella gemía de placer y contorneana su cuerpo, recorría todo su raja, y tragaba sus líquidos deliciosos que ya eran abundantes, y de un aabor muy especial, miemntrfa chupaba su almeja ,mis m,amos jugaban con sus redondas y durísimas nalgas, acariciaba sus muslos firmes y torneados, ella buscaba con su manos mi verga erecta, la tomó y empezó a frotarla, y me dudurruba que era grandita y gruesa, se la metí en la boca y con dificultad la lamía, le dije como mamarla, y empezó a trabajar con su boca, mientras nos colocamos en un 69. Por el tiempo de no coger, más la excitación que me provocaba Julia, estaba a punto de venirme, se lo dije y empezé a vaciarme en su boca, ella no Sabia que hacer, le dije que tragara y no muy convencida tragó un poco, quiso quitarse, pero emopujé más mi pija dentro de su boca tomamdola de la cabeza y siguió tragando hasta dejar limpia la pija ahora a lenguetazos, yo seguí chupandola, y sentí como se retorció con grititos y gemidos de placer. De sentirla gozar y ver como se transformaba en su orgasmo la pija la tenía durísima, abrí sus piernas para entrar, pero me dijo que mejor en la cama, ya que era practicamente su primera penetrada, a pesar de tener roto el himen. Me apliqué bastante lubricante, abrí sus labios eran rojitos y apenas un hoyito, puse el glande en su entradita, y empujé despacio sentí calientito y super mojado, poco a poco entró la cabeza, salí y entré de nuevo, ahora un poquito de tronco y sentí aspero donde estuvo su himen, al pasar, ella dió un sobresalto, y dijo que le dolía, salí y llené se lubricante su hoyito, entré d nuevo y me fupi has ta la mitad, talvéz unos 8 cms. ella apretó su canal vaginal, sentí como lo aprisionó con sus musculos vaginales, como que si lo hubiera hecho con su mano, era delicioso, ella sudaba y estaba pálida, la ví directamente a los ojos y le pedí que aflojara su cuerpo que no tuviera temor, la besé de nuevo y ella correspomdi´sentpi que laporesión bajó y despacito entré todo, lentamente empezé a entrar y salir, me decía que sentía ardor, que al frote sentía una sensacipon de sentir como arena, chupaba sus tetas y acariciaba sus oiernas, metí las manos bajo sus nalgas y sentí la cantidad de lubricación, con uno de mis dedos acariciaba en circulos el orificio del culo, ella gozaba con la sensación, seguía bombeandola, ella ya tenpia sus piernas aprisionando mi cintura, y se novía a mi ritmo, ya un dedo de mi manoi estaba dentro de su culo, cuando ella empezó a moverse como loca y me pedía que entrara todo y le diera rápido, sentí cuando se vino, su cuerpo se sacudió, los gritos aumentaron, y se quedó quieta, sudando y respirando aceleradamente, a todo esto yo le tenía dos dedos metidos a tope en el culo, estaba apunto de venirme, la puse de perrito y entré en su culo, la entrada fué fácil, ella se quejó pero estaba ya empezando a eyacular, me fuí al fondo y la llené, ella pensó que se había cagado y corrió al baño, entre risas nos empezamos a duchar. Ella aún sangró, pero el mal recuerdo o la mala experiencia le afectó mucho, pero el haber cogido conmigo le ayudó mucho. Por la tarde volvimos a coger y mientras cogíamos le vino su regla, al menos salió del temor de la violación. Cada día está más linda, en ese lapso cogímos casi a diario, yo me cabié al primer horarios¿ de clase para poder estar con ella dos horas, cusndo mi mdre llegaba al consultorio yo ya estaba en la casa de Stam María, nadie sospechó que durante 45 días volamos huevo a diestra y siniestra. Ahora ella de 25 y yo de 26, ambos con pareja, nos comunicamos por email, y dos veces al año estamos juntos por unos 5 días.
Datos del Relato
  • Autor: Guicho
  • Código: 25117
  • Fecha: 12-01-2012
  • Categoría: Confesiones
  • Media: 3.88
  • Votos: 24
  • Envios: 0
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1 comentarios. Página 1 de 1
luis
invitado-luis 08-04-2016 18:39:24

no tan crible pero enfin

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